SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.83 issue3Primary mediastinal myelolipomaBrown tumors of the jaw: an atypical manifestation of primary hyperparathyroidism author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

  • Have no cited articlesCited by SciELO

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Medicina (Buenos Aires)

Print version ISSN 0025-7680On-line version ISSN 1669-9106

Medicina (B. Aires) vol.83 no.3 Ciudad Autónoma de Buenos Aires Aug. 2023

 

CASUÍSTICA

Cistitis enfisematosa: una causa poco frecuente de dolor abdominal

Emphysematous cystitis: An uncommon cause of ab dominal pain

Margot Babinger1 

Noel Lorenzo-Villalba2  * 

Yilmaz Gorur3 

Benoit Cardos4 

Antoine Canivet5 

Deeba Ali1 

1 Service des Urgences, CHC Clinique Mont Légia, Lieja, Bélgica

2 Service de Médecine Interne, Diabete et Maladies Métaboliques CHU Strasbourg, Strasbourg, Francia

3 Service de Radiologie, Clinique André Renard, Herstal, Bélgica

4 Service de Départements des Science et de la Santé Publique, Université de Liège, Lieja, Bélgica

5 Service de Cardiologie Interventionelle, CHC Clinique Mont Légia, Lieja, Bélgica

Resumen

Una mujer de 82 años con antecedentes de hiperten sión arterial e hipotiroidismo acudió al servicio de urgencias por dolor abdominal, diarrea, confusión y deterioro de su estado general de varios días de evolu ción. A su admisión, la paciente se encontraba febril y la analítica mostró una elevación de la proteína C reac tiva sin leucocitosis (8.9 × 10^9/L). En ese contexto se realizó exudado nasofaríngeo para SARS-CoV-2 que fue negativo. Con estos resultados, la sospecha inicial era la de un cuadro infeccioso de origen digestivo. La muestra de orina era maloliente con presencia de leucocitos y nitritos enviándose a cultivo microbiológico. Se inició tratamiento antibiótico empírico con una cefalosporina de tercera generación ante la sospecha de une posible infección urinaria. Se decidió la realización de una tomografía tóraco-abdomino-pélvica con el objetivo de evaluar la presencia de otros focos infecciosos en una paciente de edad avanzada. Este estudio mostró una cistitis enfisematosa, una enfermedad poco fre cuente en una paciente sin ninguno de los factores de riesgo clásicos para esta entidad. Los cultivos de orina y sangre fueron positivos para Escherichia coli sensible al antibiótico empírico por lo que se continuó para completar 7 días de tratamiento. La evolución clínica fue favorable.

Palabras claves: Dolor abdominal; Cistitis enfisema tosa

Abstract

An 82-year-old woman with a previous medical his tory of hypertension and hypothyroidism was admitted to the emergency department for abdominal pain, dia rrhea, confusion and changes in her overall condition over several days. At the emergency department, the patient was febrile and her blood tests showed elevated C-reactive protein without leukocytosis (8.9 × 10^9/L). In the current context, a nasopharyngeal swab for SARS was performed and was negative. With these results, the initial suspicion was that of an infectious condi tion of gastrointestinal origin. The urine sample was foul-smelling with presence of leukocytes and nitrites and was sent out for culture. In the setting of probable urinary tract infection, empirical antibiotic treatment was started with a third generation cephalosporin. It was decided to perform a total body scanner in order to evaluate the presence of other infectious foci. The study described the presence of emphysematous cystitis, a rare pathology in a patient without any of the classic risk factors for this entity. Urine and blood cultures were positive for Escherichia coli sensitive to the empiric antibiotic which was continued to complete 7 days. The clinical course was favorable.

Key words: Abdominal pain; Emphysematous cistitis

El dolor abdominal es un motivo frecuente de ingreso en los servicios de urgencias, y repre senta alrededor del 10% de los pacientes aten didos. En los ancianos, es la cuarta dolencia más frecuente1-2. El diagnóstico diferencial del dolor abdominal es amplio y en muchas ocasiones difícil, sobre todo en ancianos, dada la atipicidad de las manifestaciones. La cistitis enfisematosa es una causa inusual de dolor abdominal y es considerada una complicación de una infección urinaria. La presentación clínica va desde infec ciones asintomáticas, hematuria, disuria, fiebre y dolor abdominal hasta el shock séptico, que representa la principal causa de mortalidad3. La concurrencia de infecciones enfisematosas del tracto urinario en casos de cistitis enfisematosa es del 15.4%3. Las infecciones enfisematosas del tracto urinario son enfermedades con una tasa de mortalidad que puede alcanzar el 50%3-5. La diabetes mellitus (DM) es el factor de riesgo más común, ya que el 95% de las personas diagnosti cadas tienen DM no controlada5.

Caso clínico

Una mujer de 82 años acudió al servicio de urgencias por dolor abdominal, diarrea, confusión y deterioro de su estado general de varios días de evolución. Entre sus antecedentes médicos destacaban hipertensión arterial tratada e hipotiroidismo en tratamiento sustitutivo. No se recogieron antecedentes quirúrgicos ni hábitos tóxicos de interés.

A la exploración física, la frecuencia cardíaca era de 84 lpm, tensión arterial de 105/82 mmHg, temperatura de 38 °C y saturación de oxígeno de 95% en aire ambiente. Las mucosas estaban secas y el abdomen era difusamente doloroso a la palpación sin masas palpables ni reacción peritoneal.

La analítica realizada mostró una hemoglobina de 13.1 g/dL, proteína C reactiva a 122.9 mg/L sin leucocito sis (8.9 × 10^9/L), hiponatremia (130 mmol/L), hipopota semia (2.9 mmol/L), pruebas de función renal, hepáticas, lipasa y enzimas cardiacas normales. El frotis para SARS-CoV-2 fue negativo. La orina era maloliente con presencia de nitritos positivos, hematíes (+++) y leucocitos (+) por lo que se envió la muestra para cultivo microbiológico. Ante estos hallazgos se inició antibioticoterapia proba bilista con ceftriaxona ante la sospecha de una posible infección urinaria y se decidió realizar una tomografía tóraco-abdomino-pélvica para descartar la presencia de un foco infeccioso profundo. Este examen reveló la pre sencia de signos de broncopatía crónica y una neuma tosis vesical parietal a nivel abdominal compatible con una cistitis enfisematosa (Fig. 1). El cultivo de orina reveló la presencia de Escherichia coli (> 100 000 UFC/m) sensible a la antibioticoterapia prescrita empíricamente y los he mocultivos fueron positivos al mismo germen. Se decidió el ingreso de la paciente en servicio de medicina interna y se continuó el tratamiento antibiótico durante 7 días con una evolución favorable desde el punto de vista clínico y analítico, permitiendo el alta hospitalaria.

Figura 1 Scanner abdominal en fase portal después de la inyección de contraste en corte axial muestra la vejiga llena (B) con enfisema parietal difuso circunferencial de la pared de la vejiga (puntas de flecha) 

Discusión

La evaluación del dolor abdominal en los servicios de urgencias constituye en ocasiones un desafío diagnóstico, sobre todo en pacientes ancianos. En el caso presentado dada la clínica digestiva se sospechó inicialmente una afección digestiva (colitis, sigmoiditis) o una infección por SARS-CoV-2 en el contexto epidemiológico actual, sin embargo, los estudios de imagen y el resultado de los análisis fueron negativos. La presencia de una orina positiva nos sugirió un posible foco infeccioso urinario.

En la población general, la bacteriuria asin tomática se ha descrito en el 18% de las mujeres mayores de 65 años y en el 27% de las mayores de 80 años. A pesar de que las infecciones del tracto urinario tienen una alta prevalencia en los ancianos, sus complicaciones y las causas renales (infección, litiasis y otras) representan el 5-10% del dolor abdominal2,6-7. En este caso hallamos una cistitis enfisematosa, que es una infección urinaria poco frecuente y en el 10% de los casos puede complicarse en forma de per foración o absceso. El enfisema está relacionado con la fermentación del ácido láctico a partir de glucosa por parte de las bacterias presentes en la flora vesical. Los patógenos más comúnmente identificados son Escherichia coli como en el caso presentado y Klebsiella pneumoniae3,8. Otros patógenos descritos incluyen Proteus mirabilis, Klebsiella pneumoniae, estreptococos del grupo D, estafilococos coagulasa negativos, mi croorganismos anaerobios como Clostridium sep ticum, Candida albicans, Cryptococcus neoformans y Pneumocystis jiroveci3.

La DM es un factor de riesgo importante para estas infecciones5, comorbilidad que no estaba presente en nuestra paciente como en la ma yoría de los casos descritos, además tampoco encontrábamos otros factores de riesgo destaca bles como la presencia de vejiga neurógena, la obstrucción de la vía urinaria a nivel vesical, el consumo excesivo de alcohol, el sondaje perma nente con sondas de Foley, las infecciones uri narias recurrentes y la inmunosupresión3,4. En nuestro caso solo podríamos asociar a esta en fermedad la edad avanzada y el sexo femenino, ambos factores poco específicos para sospechar esta entidad inicialmente.

La neumatosis vesical fue un hallazgo inci dental en la tomodensitometría abdomino-pél vica. Este estudio no hubiese sido necesario en principio dada la presencia de orina purulenta que orientaba a una posible infección urinaria. La realización de una tomografía abdominal es la prueba diagnóstica de elección, ya que la sin tomatología suele ser similar a la de una infec ción urinaria, mientras que la presencia de aire en la pared de la vejiga es patognomónica de una cistitis enfisematosa. Este estudio permitió la visualización, localización, y evaluación de la extensión y gravedad de la enfermedad3,9. La identificación fortuita por imagen nos permitió el diagnóstico y de este hecho tener en cuenta un posible pronóstico desfavorable.

Bibliografía

1. Pemmerl S, Hüfner A. Epidemiologie, Initialdiag nostik und -therapie des akuten und unklaren Bauchschmerzes in der Notaufnahme. Epidemiol ogy, initial diagnosis, and therapy of unexplained abdominal pain in the emergency department. Med Klin Intensivmed Notfmed 2021; 116: 578-85. [ Links ]

2. Wilber ST, Gerson LW, Terrell KM, et al. Geriatric emergency medicine and the 2006 Institute of Medi cine reports from the Committee on the Future of Emergency Care in the U.S. health system. Acad Emerg Med 2006; 13: 1345-51. [ Links ]

3. Campos JE, Martinez PA, Rangwala US, Fazli W, Rey C. Emphysematous pyelonephritis, emphysematous cystitis, and emphysematous ureteritis: A Case Report. Cureus 2022; 14:e29651. [ Links ]

4. Godzisz M, Mitura P, Widz D, Sudoł D, Kuliniec I, Bar K. Concurrent bilateral emphysematous pyelonephritis and emphysematous cystitis: a case report of glomerulonephritis severe complication. Res Rep Urol 2021; 13: 375-9. [ Links ]

5. Ubee SS, McGlynn L, Fordham M. Emphysematous pyelonephritis. BJU Int 2011; 107: 1474-8. [ Links ]

6. Grupper M, Kravtsov A, Potasman I. Emphysematous cystitis: illustrative case report and review of the literature. Medicine (Baltimore) 2007; 86: 47-53. [ Links ]

7. Ragsdale L, Southerland L. Acute abdominal pain in the older adult. Emerg Med Clin North Am 2011; 29: 429-48. [ Links ]

8. Lu YC, Hong JH, Chiang BJ, et al. Recommended initial antimicrobial therapy for emphysematous pyelonephritis: 51 cases and 14-year-experience of a tertiary referral center. Medicine (Baltimore) 2016; 95:e3573 [ Links ]

9. Chippa V, Chenna S, Gujarathi R. Emphysematous pyelonephritis involving native kidneys and a trans planted kidney. Cureus 2022; 14: e29024. [ Links ]

Recibido: 14 de Noviembre de 2022; Aprobado: 21 de Diciembre de 2022

*Dirección postal: Noel Lorenzo-Villalba, Service de Médecine Interne, Diabète et Maladies Métaboliques, Hôpitaux Universitaires de Strasbourg, 1 place de l’Hôpital, 67000 Strasbourg, France E-mail: noellorenzo@gmail.com

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons