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Revista psicodebate: psicología, cultura y sociedad.

versión On-line ISSN 2451-6600

Rev. psicodebate: psicol. cult. soc. vol.23 no.1 Ciudad de Buenos Aires jun. 2023  Epub 01-Jun-2023

http://dx.doi.org/10.18682/pd.v23i1.6044 

Artículos

Los patrones de amistad: Estructura, bienestar psicológico y soledad social y emocional

Patterns of Friendship: Structure, Psychological Well-Being and Social and Emotional Loneliness

1Universidad de Buenos Aires, Argentina; matiasbucoskyyolde@gmail.com; http://orcid.org/0000-0001- 8085-8899

2Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Universidad de Buenos Aires, Argentina; elenazubieta@hotmail.com; http://orcid.org/0000-0001-8678-7016

RESUMEN

El estudio tuvo como objetivo analizar los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina, teniendo en cuenta la estructura, la homogeneidad y ciertas características sociales e individuales, así como su relación con el bienestar psicológico y la soledad social y emocional. La investigación es cuantitativo, descriptivo, no experimental y transversal con diseño de caso múltiple holístico. La muestra estuvo compuesta por 6 grupos de amigos/as de adultos jóvenes (5 femeninos y 1 masculino) con una media de edad de 24.73 (DE = 2.44, Mín = 20, Máx = 30). Los resultados dan cuenta de diferencias estructurales de los grupos en función de la figura de autoridad o de conector y una tendencia promedio hacia la homogeneidad, que contempla diferencias entre los grupos en asociación con la cantidad de integrantes. Los niveles de bienestar psicológico han sido altos, y los de soledad, bajos; mientras que ambas variables se asocian con aspectos grupales como la homogeneidad y la cantidad de integrantes. Las formas de organización grupal se diferencian en función de características sociales e individuales como el estado civil, la ocupación familiar, la residencia y la clase social. Las sensaciones positivas se asocian a la pertenencia y no a diferencias posicionales.

Palabras clave: patrones de amistad; grupo de amigos; bienestar; soledad

ABSTRACT

The study aimed to analyze the patterns of friendship groups among Argentinian young adults in terms of structure, homogeneity and certain social and individual characteristics, and its relation with psychological well-being and social and emotional loneliness. The research is quantitative, descriptive, non-experimental and cross-sectional with a múltiple holistic case design. The sample comprises 6 friendship groups of young adults (5 female and 1 male) with a mean age of 24.73 (SD = 2.44, Min = 20, Max = 30). The results show structural differences between groups around the figure of authority position or hub, and an average tendency towards homogeneity that implies differences between the groups related to the number of members. Psychological well-being show high levels and loneliness low levels; while both variables are associate with group characteristics such as homogeneity and the number of members. The group organization forms are differentiate by social and individual characteristics such as marital status, family occupation, residence and social class. Positive feelings are associate with membership and not with positional differences.

Keywords: friendship patterns; friendship group; well-being; loneliness

El presente estudio se centró en describir los patrones de amistad de los grupos de amigos/as, enmarcado en un proyecto de investigación* que indaga el bienestar psicosocial desde distintas aristas.

La amistad en la sociedad occidental es considerada como una relación voluntaria no institucionalizada, aunque, a nivel social, existen normas que regulan las elecciones, los tratos y las expectativas ligadas con esta relación, limitando, de algún modo, la completa voluntariedad del lazo (Blieszner & Adams, 1992). La importancia de estudiar y conocer los patrones de amistad deviene de la relevancia que la presencia de un confidente tiene en tanto protector importante frente al estrés y los malestares físicos y emocionales, al aportar, a la vez, sentimientos de bienestar (Páez & Zubieta, 2002), tanto a nivel individual como comunal (Rawlins, 2017).

Blieszner y Adams (1992) proponen un modelo teórico psicosocial (Figura 1) para analizar los patrones de amistad. El concepto vincula la estructura, las fases de desarrollo y los procesos tanto de las diadas de amistad como de las redes en su totalidad. La estructura, según Krackhardt (1987), es entendida como un conjunto de estados de relación entre todos los pares de actores en un sistema. Las fases implican la formación, el mantenimiento y la disolución de las redes de amistad. Los procesos contemplan los pensamientos, sentimientos y comportamientos asociados a la amistad (Blieszner & Adams, 1992).

Figura 1 Modelo Teórico de los Patrones de Amistad (Blieszner & Adams, 1992)  

 

El modelo postula que la edad, en términos de etapas de desarrollo y de transcurso de la vida, en conjunto con ciertas características sociales e individuales, incluyendo disposiciones psicológicas y oportunidades y constreñimientos sociales, influyen sobre los patrones de amistad. En este conglomerado de factores se encuentran aspectos sociodemográficos como el nivel educativo o la clase social, entre otros. Las características sociales e individuales de todos los integrantes de los grupos pueden presentar similitudes entre sí, dando cuenta de un cierto nivel de homogeneidad entre estos. Por su parte, la edad influye también sobre las características sociales e individuales, posibilitando diferencias en estas características a medida que pasa el tiempo. El modelo en sí mismo también varía en función del contexto estructural, cultural e histórico en el que se encuentre inmerso (Blieszner & Adams, 1992).

En el modelo desarrollado se puede notar que los grupos no aparecen como tales ya que se los considera una forma de organización particular dentro de las redes sociales. Los grupos se caracterizan por la interacción frecuente entre distintos pares de actores, compartiendo lazos sentimentales entre sí (Brands, 2013). En estos grupos de amigos se proponen diferencias en los integrantes en función del poder social y el privilegio, basados en el nivel de afecto, que provienen de las medidas de autoridad y conector (hub, en inglés). La autoridad refleja el nivel de afecto recibido, mientras que el conector representa el nivel de afecto enviado a otros integrantes (Rupnik, 2014).

El afecto de los lazos de amistad contempla distintos niveles de intensidad que se desplazan desde una simple amistad a una mejor amistad, pasando por las amistades cercanas. El primer nivel de amistad permite diferenciar a los extraños y los desconocidos en función de niveles bajos de interacción, proximidad física, expresiones afectivas, comportamientos pro-sociales, similitudes en dominios superficiales, reciprocidad, intimidad y conocimiento mutuo. El pasaje al segundo y al tercer nivel de intimidad implica un aumento cuantitativo más que cualitativo de la intensidad, es decir, presentan mayor intimidad, confianza, apoyo, lealtad y conocimiento mutuo de diferentes dominios de la vida que las amistades simples (Fehr, 1996).

Wrzus et al. (2017) realizaron un análisis bibliográfico extenso en torno a la amistad en relación con la adultez joven y media en el que hallaron que las funciones de apoyo y cercanía emocional que aporta la amistad no varían demasiado con la adolescencia. También, que a medida que se crece en edad disminuye el número de amistades cercanas, aumentando el número de conocidos y amistades simples, y que ciertas características personales ligadas a la extraversión y al narcisismo predicen positivamente la formación y la calidad de la amistad.

El bienestar psicológico proviene de una tradición eudaimónica que se centra en el desarrollo personal de los individuos y en el estilo o manera en que estos afrontan los retos cotidianos, con el fin de lograr las metas propuestas (Zubieta et al., 2012). En este marco, Ryff (1989) observó y caracterizó seis dimensiones que describen el Bienestar Psicológico:

  • Autoaceptación: sensación de bienestar consigo mismo, incluso teniendo en cuenta sus propias limitaciones.

  • Relaciones positivas: la necesidad de tener relaciones confiables y amistades de confianza.

  • Autonomía: Tendencia a tener autodeterminación para sostener sentimientos de independencia y autoridad personal para mantener la individualidad en contextos sociales complejos.

  • Dominio del entorno: la sensación de control sobre el mundo y de influencia sobre el contexto inmediato.

  • Propósito en la vida: objetivos y metas que permiten otorgar sentido a la vida.

  • Crecimiento personal: interés por desarrollar potencialidades, crecer humanitariamente y lograr el máximo nivel de las capacidades individuales.

En relación con la población joven adulta, en el ámbito local, se ha encontrado que el bienestar se asocia mayormente con las sensaciones ligadas al crecimiento personal, aumentando así la autonomía y el control del entorno (Zubieta et al., 2012). La autonomía, el control del entorno y el crecimiento personal aumentan en la adultez joven en comparación con la juventud más cercana a la adolescencia, aunque el dominio del entorno y la autonomía siguen aumentando al pasar a etapas más tardías de la adultez (Fernández et al., 2013; Muratori et al., 2012). Por otro lado, la amistad se asocia positivamente con sensaciones de bienestar hedónico, y aparece como el segundo dominio más importante, luego de la familia (Baghino & Corteletti, 2021).

En lo que hace a la soledad, Perlman y Peplau (1998) la definen como una experiencia displacentera que ocurre cuando la red social de una persona es significativamente deficiente cuantitativa o cualitativamente. Weiss (1973), por su parte, distingue dos tipos de soledad. La soledad emocional, que refiere a la ausencia de relaciones íntimas de apego, y la soledad social, que consiste en la ausencia de una adecuada red social. La primera puede producir síntomas de ansiedad, sensación de completa soledad, sobrevigilancia y malinterpretación de las intenciones afectuosas u hostiles de los demás; mientras que la segunda produce sentimientos de aburrimiento, inquietud y marginalidad. Las secuelas afectivas que produce la soledad emocional generalmente son más intensas y desagradables que las producidas por la soledad social.

En población joven adulta de Argentina se ha localizado que los adultos más cercanos a la etapa de la adolescencia presentan mayor soledad emocional en comparación con los adultos jóvenes de mayor edad (Fernández et al., 2013).

Los grupos de amigos/as han sido estudiados en relación con la soledad y el bienestar en distintas poblaciones. McIntyre et al. (2018), en una muestra de estudiantes universitarios, encontraron que el contar con amistades universitarias disminuye los síntomas de ansiedad, depresión y paranoia, así como decrecen los sentimientos de soledad. Respecto del bienestar, Parker et al. (2014), en su estudio con adolescentes, dieron cuenta de que la esperanza grupal predice el aumento del bienestar subjetivo individual y el bienestar psicológico y social, en contraposición con la esperanza individual. Además, observaron correlaciones significativas positivas entre la popularidad y el bienestar psicológico y social, así como entre el nivel de centralidad de los integrantes de la red, la esperanza y el bienestar emocional.

En este marco, se realizó un estudio empírico con el objetivo general de describir los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina, considerando la estructura y las características sociales e individuales de los integrantes y su relación con el bienestar psicológico y la soledad social y emocional. Se establecieron también los siguientes objetivos específicos:

  1. Identificar la estructura de los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina.

  2. Identificar el nivel de homogeneidad entre los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina.

  3. Describir los niveles de bienestar psicológico y de soledad social emocional de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina.

  4. Relacionar las características estructurales y los niveles de homogeneidad de los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina con el bienestar psicológico y la soledad social emocional.

  5. Analizar diferencias estructurales de los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina en relación con las características sociales e individuales de sus integrantes.

MÉTODO

El estudio es cuantitativo, descriptivo, no experimental y transversal con diseño de caso múltiple holístico mixto con redes de un nodo, dirigidas y pesadas compuestas, a partir de un muestreo no probabilístico, intencional y con un enfoque realista, de 6 grupos de amigos/as; 5 de ellos con integrantes femeninos (83%) y 1 con integrantes masculinos (17%); con una media de años de amistad de 13.06 (DE = 6.01, Mín = 2, Máx = 23) y una media de cantidad de integrantes de 4.92 (DE = 1.72, Mín = 3, Máx = 7). Los participantes cuentan con una media de edad de 24.73 (DE = 2.44, Mín = 20, Máx = 30), residen en un 65.4% (n = 17) en la provincia de Buenos Aires, un 23.11% (n = 6) en Ciudad Autónoma de Buenos Aires y un 11.5% (n = 3) en otra provincia (Catamarca, Córdoba y Mendoza). Cuentan con estudios universitarios (26.9%, n = 7), secundarios (42.3%, n = 11) y terciarios (30.8%, n = 8). Se autoperciben el 61.5% (n = 16) de clase media, el 11.5% (n = 3) de clase baja y el 27% (n = 7) de clase alta. Se encuentran un 53.8% (n = 14) en pareja o casados y un 46.2% (n = 12), solteros; el 96.2% (n = 25) no tienen hijos y un 3.8% (n = 1), si tienen. El 80.8% (n = 21) trabajan y el 19.2% (n = 5), no lo hacen; y el 80.8% (n = 21) estudian y el 19.2% (n = 5), no lo hacen.

Medidas

Cuestionario ad-hoc

Se diseñó un cuestionario auto-administrado integrado por preguntas abiertas en relación con el desarrollo de la amistad (e.g.: "¿Cuántos años de amistad, aproximadamente, tiene este grupo?") y la definición que de ella hacen los distintos integrantes del grupo; preguntas cerradas relacionadas con aspectos sociodemográficos y con la clasificación de las amistades (e.g.: "Indique como define a la amistad" con tres opciones de respuesta: Amigo/a, Amigo/a cercano/a y Mejor amigo/a).

Escala de Bienestar psicológico de Ryff (Zubieta et al., 2023)

Expone criterios privados de evaluación de un buen funcionamiento psicológico. El mismo consta de 18 ítems con continuo de respuesta de 1 (totalmente en desacuerdo) a 6 (totalmente de acuerdo), mide cinco dimensiones o atributos positivos del bienestar psicológico: autoaceptación (4 ítems, dos de ellos con puntuación invertida), relaciones positivas (4 ítems, tres de ellos con puntuación invertida), autonomía (3 ítems, uno de ellos con puntuación invertida), crecimiento personal (4 ítems, uno de ellos con puntuación invertida), y propósito en la vida (3 ítems). Por ejemplo: "No tengo claro qué es lo que intento conseguir en la vida".

Escala de Soledad Emocional y Social de Wittenberg (Shaver & Brennan, 1991).

Mide la ausencia de lazos satisfactorios con conocidos y compañeros de actividades y la falta de relaciones íntimas. Consiste en 10 ítems con opciones de respuestas que van de 1 (Nunca) a 5 (Muy a menudo) en la medida en que indica como el participante sintió la calidad de sus relaciones sociales en el último año. Cinco ítems aluden a la dimensión de Soledad Social y los otros cinco restantes a la Soledad Emocional. Una puntuación mayor a 12 implica una sensación intensa de soledad. Por ejemplo, la dimensión de Soledad Social es representada por "La mayoría de las personas que me rodean me hacen sentir como si fuera un extraño".

Procedimiento

Las características sociales e individuales, como el género, la edad, la residencia, el nivel educativo, la clase social autopercibida, el estado civil y la situación laboral, familiar y estudiantil permitieron analizar la homogeneidad de los grupos, considerando las coincidencias entre las características de los distintos integrantes de los grupos. Esto se visibilizó en las tablas con porcentajes de 0% a 100%, donde 0% es nula homogeneidad y 100% completa homogeneidad. En la Figura 4 se puede observar que los nodos más grandes representan mayor homogeneidad y que los nodos más pequeños representan menor homogeneidad.

Para recabar los datos se contactó virtualmente a un integrante de los distintos grupos. Este mismo, luego, contactaba a los demás integrantes con la propuesta y, por último, si todos estaban de acuerdo en completar la encuesta, se les explicaba nuevamente, a cada uno, los objetivos de la investigación, en conjunto con el anonimato, la voluntariedad, la individualidad y la confidencialidad de los datos, para que expresen su consentimiento explícito antes de completar la encuesta.

Los análisis descriptivos y correlaciónales se realizaron a través del programa estadístico RStudio (R core team, 2020). A partir de este programa, se analizaron las características estructurales de los grupos de amistad considerando dos medidas de centralidad: autoridad y conector. Las medidas de prestigio implican diferencias posicionales en la estructura en torno al poder social y al privilegio de al menos un integrante sobre los otros. La medida de autoridad consiste en el producto total de afectos que recibe un actor y la medida de conector contiene el producto total de afecto que un actor envía a otro actor. Estas medidas se cuantifican de 0 a 1, donde 1 implica que el actor es una buena autoridad y/o conector, mientras que un coeficiente de 0 refiere que el actor es una mala autoridad y/o conector (Rupnik, 2014). En la Figura 2 se puede apreciar la diferencia de tamaño de los nodos, siendo los nodos más grandes aquellos con mayor posición de autoridad o conector.

Las medidas representadas se computan normalmente en redes dirigidas no siempre recíprocas, donde se diferencia la dirección del afecto (por ejemplo, un integrante A puede considerar como mejor amigo a otro integrante B; mientras que este integrante B, puede considerar como un amigo simple al integrante A). Las redes dirigidas de estos grupos contemplan tres niveles de afecto que aumentan la posibilidad de que estas no sean reciprocas. Las amistades simples son cuantificadas como 1, las amistades cercanas como 2 y las mejores amistades como 3, siendo esta última relación la de mayor afecto.

RESULTADOS

Resultados descriptivos

Las Figuras 2 y 3 muestran el género de los integrantes con la letra F en caso de ser femenino y M en caso de ser masculino, en conjunto con el número de integrantes, considerando el orden en el que cada uno ha completado el cuestionario. En principio se puede observar que las estructuras se conforman en su mayoría de mejores amistades (46%, n = 47) en comparación con las amistades cercanas (30%, n = 30) y simples (24%, n = 24).

En lo que hace a la centralidad, se observa que aquellos integrantes que toman posiciones de autoridad en los grupos 2 (F1), 4 (F2) y 6 (F6) (Figura 2, siguiendo el orden de presentación de izquierda a derecha) se presentan como aquellos con menor nivel de conexión entre los integrantes del grupo (Figura 3). Mientras que aquellos integrantes con menor autoridad en los grupos 1 (F6), 2 (F3), 3 (F4), 4 (F1, F3) y 6 (F1, F4) toman posiciones de conector. Se puede entonces notar que aquellos integrantes de los grupos 2, 4 y 6 que reciben mayor afecto, suelen ser los que menos afecto proveen a los demás integrantes, mientras que los integrantes de los grupos 1, 2, 3, 4 y 6 que proveen más afecto, suelen ser los que reciben menos afecto de los demás integrantes.

Figura 2 Estructura de Autoridad 

Figura 3 Estructura de Conector 

En la Tabla 1 se puede observar que los grupos presentan un nivel promedio de homogeneidad y que los grupos de menor cantidad de integrantes presentan mayor nivel de homogeneidad en relación con las características individuales y sociales de los integrantes (Figura 4).

Tabla 1 Nivel de Homogeneidad de los grupos 

Grupo Homogeneidad
1 45 %
2 73 %
3 55 %
4 64 %
5 55 %
6 36 %
Homogeneidad general 55 %

Figura 4 Nivel de Homogeneidad de los grupos 

En la Tabla 2 se observa que los participantes presentan mayor nivel de bienestar relacionado con el crecimiento personal y las relaciones positivas. La autoaceptación aparece como aquella dimensión que provee menor bienestar, aunque los niveles de bienestar psicológico a nivel general se encuentran por encima de la media teórica de tres. También se puede observar que los participantes presentan bajos niveles de soledad a nivel general, considerando que un puntaje mayor de 12 implica un nivel de soledad que genera malestar clínicamente significativo. Aun así, el nivel de soledad emocional es mayor al nivel de soledad social.

En la Tabla 3 se pueden observar correlaciones negativas entre los niveles de autoridad y los niveles de conector, así como entre los niveles de homogeneidad y la cantidad de integrantes de los grupos, y entre la homogeneidad y las relaciones positivas. Por otro lado, se aprecia también una correlación positiva entre la cantidad de integrantes y las relaciones positivas.

La Tabla 4 muestra que la soledad emocional se asocia positivamente con los niveles de homogeneidad y negativamente con la cantidad de integrantes.

Tabla 2 Puntuaciones medias de bienestar psicológico, soledad social y emocional 

  M
Bienestar psicológico  
Autoaceptación 3.99
Autonomía 4.51
Crecimiento 4.99
Propósito 4.36
Relaciones 4.87
Soledad emocional 8.77
Soledad social 8.46

Tabla 3 Correlaciones e intervalos de confianza entre estructura, homogeneidad y bienestar psicológico 

Variable 1 2 3 4 5 6 7 8
1. Autoridad        
2. Conector -.46*      
[-.72, -.09]      
3. Homogeneidad -.22 .10    
[-.56, .18] [-.30, .47]    
4. Cantidad integrantes .01 -.17 -.92**  
[-.38, .39] [-.52, .23] [-.97, -.83]  
5. Autoaceptación -.01 -.00 -.02 -.02  
[-.40, .38] [-.39, .38] [-.40, .37] [-.40, .37]  
6. Relaciones .02 .11 -.63** .60** .15  
[-.37, .41] [-.29, .47] [-.82, -.32] [.28, .80] [-.26, .50]  
7. Autonomía .08 .19 -.23 .16 .26 .09  
[-.32, .45] [-.22, .53] [-.57, .17] [-.24, .51] [-.14, .59] [-.31, .46]  
8. Crecimiento -.12 .01 -.35 .37 .57** .32 .41*  
[-.49, .28] [-.38, .39] [-.65, .05] [-.02, .66] [.24, .79] [-.08, .63] [.03, .69]  
9. Propósito -.20 -.11 .07 .02 .50** -.10 .14 .39*
[-.54, .21] [-.47, .29] [-.33, .44] [-.37, .40] [.14, .74] [-.47, .30] [-.27, .50] [.00, .68]

Tabla 4 Correlaciones e intervalos de confianza entre estructura, homogeneidad y soledad social y emocional 

Variable 1 2 3 4 5
1. Autoridad          
2. Conector -.46*        
[-.72, -.09]        
3. Homogeneidad -.22 .10      
[-.56, .18] [-.30, .47]      
4. Cantidad integrantes .01 -.17 -.92**    
[-.38, .39] [-.52, .23] [-.97, -.83]    
5. Soledad social .07 .06 .23 -.26  
[-.32, .45] [-.33, .44] [-.18, .56] [-.59, .14]  
6. Soledad emocional -.39 .04 .59** -.45* .16
[-.67, .00] [-.35, .42] [.27, .80] [-.71, -.07] [-.25, .51]

Diferencias entre grupos

Se encontró una diferencia estadísticamente significativa en los niveles de autoridad en función de la situación familiar, t(24) = 2.24, p = .035, d = 0.88. Quienes no tienen hijos asumen más roles de autoridad en los grupos en comparación con los que sí tienen hijos ( M SI = 0.33 vs M NO = 0.81). También se halló una diferencia estadísticamente significativa en las puntuaciones medias de conexión en función de la situación estudiantil, t(24) = 2.08, p = .049, d = 0.81. Los individuos que no estudian exhiben mayores niveles de conexión en comparación con quienes si estudian ( M SI = 0.78 vs M NO = 0.99). Además, se encontró una diferencia estadísticamente significativa en las puntuaciones medias de homogeneidad en función del estado civil, t(24) = -2.25, p = .034, d = -0.88. Los solteros/as pertenecen a grupos con mayor nivel de homogeneidad en comparación con quienes están casados/as o en pareja ( M EnPareja/Casado/a = 46 vs M Soltero = 56).

Adicionalmente se encontró una diferencia estadísticamente significativa en las puntuaciones medias del nivel de homogeneidad en función del lugar de residencia, F(2, 23) = 4.45, p = .023. Los residentes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires exhibieron una tendencia a integrar grupos de mayor nivel de homogeneidad en comparación con quienes residían en el interior del país o en la Provincia de Buenos Aires ( M CABA = 62, M OtraProvincia = 49, M PBA = 47). En cuanto a las puntuaciones medias de la cantidad de integrantes en función del lugar de residencia también se encontró una diferencia estadísticamente significativa, F(2, 23) = 4.45, p = .023. Quienes residen en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires muestran una mayor tendencia a integrar grupos con menor cantidad de miembros en comparación con aquellos que residen en la provincia de Buenos Aires ( M CABA = 3.33, M OtraProvincia = 5, M PBA = 5.47). Finalmente, también se encontró una diferencia estadísticamente significativa en las puntuaciones medias de la cantidad de integrantes en función de la percepción de clase social F(1, 24) = 6.89, p = .015). Quienes se autoperciben pertenecientes a la clase social baja pertenecen a grupos con menor cantidad de integrantes en comparación con quienes se auto-perciben de clase media y alta ( M alta= 5.86, M baja = 3, M media = 4.88).

DISCUSIÓN

Los resultados obtenidos en el estudio indican que los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes de Argentina analizados se estructuran, mayoritariamente, a partir de díadas de mejor amistad, aunque también la conforman amistades cercanas y simples. Estas características estructurales muestran a los patrones de amistad de los grupos de amigos/as de adultos jóvenes como relaciones no completamente recíprocas en términos de afecto.

La baja reciprocidad de la estructura da cuenta de diferencias en función del prestigio. Los grupos de tres integrantes mostraron una diferencia más marcada en relación con la figura que recibía mayor afecto, mientras que, con relación a los conectores, no se observó un único actor claramente diferenciado en torno al afecto enviado a los demás integrantes. Al menos dos integrantes cuentan con un alto nivel de posición de conector. Por otro lado, aquellos designados con mayor autoridad no despliegan mayor afecto. Esto se corrobora también en la asociación negativa significativa entre ambas variables. De esta manera, se interpreta que los grupos de amigos/as tienen al menos un amigo/a que recibe más afecto en comparación con los demás; mientras que al menos dos integrantes dirigen mayor cantidad de afecto a esta autoridad y a los demás integrantes.

En términos de disposiciones individuales y sociales, se observa que los miembros de los grupos con hijos reciben menos afecto en comparación con quienes no tienen hijos. Es esperable que los adultos jóvenes al convertirse en padres dediquen más tiempo y afecto a los hijos, disminuyendo cuantitativa y cualitativamente su relación con la red de amistad. Los hijos, a veces, suelen suplir las funciones afectivas desplegadas por algunas amistades (Wrzus et al., 2017).

En lo que hace a la homogeneidad de los grupos de amigos/as, se observa un nivel promedio, aunque los grupos con mayor cantidad de integrantes son los que presentan un menor nivel de homogeneidad. Este dato se corrobora también con el resultado obtenido en las correlaciones, donde la asociación fue negativa y significativa en relación con la cantidad de integrantes. Esta asociación es bastante probable teniendo en cuenta que, estadísticamente, la menor cantidad de integrantes facilita que ocurran similitudes entre los distintos actores. Por otro lado, los integrantes solteros del estudio residentes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires integran grupos más homogéneos en contraste con quienes están en pareja o residen en la provincia de Buenos Aires u otras provincias del interior del país. Además, se ha establecido que la cantidad de integrantes varía con relación a la residencia y la clase social, aquellos miembros que residen en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y que se perciben de clase social baja tienden a formar parte de grupos de menor cantidad de integrantes. Se desprende de los resultados la posibilidad de que los grupos de integrantes solteros tiendan a buscar grupos con integrantes más similares entre sí, mientras que las personas de clase baja presentan menores posibilidades de ampliar su grupo. Estos sucesos parecerían ocurrir más habitualmente en grandes urbes metropolitanas. Simmel (1950) menciona que las relaciones sociales en las ciudades son caracterizadas por la reserva, la distancia y la desconfianza, con lo cual se puede suponer que estas características dificultan la generación de grupos más numerosos y heterogéneos.

Respecto de los niveles de bienestar psicológico, los grupos de amigos/as de este estudio exhiben mayores niveles en las dimensiones de crecimiento personal y relaciones positivas. El nivel alto de crecimiento personal puede deberse tanto al grupo de amigos como promotor de la salida exogrupal en búsqueda del desarrollo personal de las potencialidades individuales (Baghino & Corteletti, 2021), como por la edad de los participantes, considerando que las personas jóvenes tienden a abrirse al desarrollo personal con bastante frecuencia (Fernández et al., 2013; Muratori et al., 2012; Zubieta et al., 2012). Las relaciones positivas se asocian significativamente de forma positiva con la cantidad de integrantes de los grupos, lo que refleja que los grupos con mayor cantidad de integrantes presentan más vínculos confiables que promueven las sensaciones de bienestar en comparación con los grupos de menor cantidad de integrantes. Las relaciones positivas también se asocian negativamente con la homogeneidad, con lo cual la mayor sensación de bienestar se vincula con aquellas amistades más heterogéneas en contraste con los grupos más homogéneos. La mayor apertura, en contraposición a lo endogámico, favorece la calidad de las relaciones con otros. Gutiérrez-Carmona y Urzúa (2019) reconocen la relación entre los valores ligados a la apertura al cambio y el bienestar, considerando, así, las relaciones positivas. Por último, la autoaceptación, que refleja las sensaciones de bienestar consigo mismo y de reconocimiento de las propias limitaciones, aunque alta en comparación con el promedio teórico de la escala, se destaca como la dimensión más baja y deficitaria, tal vez, por los constreñimientos sociales que estas vinculaciones traen consigo (Bliezsner & Adams, 1992).

Finalmente, se detectaron niveles bajos de soledad social y emocional, en consonancia con los niveles de bienestar, reflejando la presencia de una adecuada red social y de relaciones íntimas de apego. Estos resultados se asemejan a los obtenidos por Fernández et al. (2013), en población general con mayoría de adultos jóvenes, por lo que se establece la posibilidad de que en esta etapa vital los niveles de soledad sean habitualmente bajos. La homogeneidad grupal aumenta la sensación de soledad emocional, mientras que la mayor cantidad de integrantes diferentes la disminuye. Es decir, que la mayor cantidad de relaciones íntimas aumentan el afecto recibido, mientras que la homogeneidad entre los integrantes puede dificultar la posibilidad de encontrarse con figuras de apego a las cuales seguir en búsqueda de situaciones y conocimientos diferenciados. Por otro lado, el hecho de recibir más o menos afecto, como el de enviar más o menos afecto, no refleja una diferencia en torno a las sensaciones de soledad o bienestar percibidas, por lo que se puede pensar que la simple pertenencia al grupo trae aparejado cierto nivel positivo de bienestar y menor nivel de soledad.

Como limitaciones al estudio, el número reducido de casos de grupos masculinos y mixtos dificulta la representatividad de los resultados obtenidos y la ligazón de los patrones de amistad a un posible funcionamiento de los grupos de amigas y no a los grupos a nivel general. Además, no se ha logrado especificar los estadísticos alfas correspondientes a cada escala, dado que el poco número de participantes dificultó la obtención de resultados concisos de fiabilidad de los instrumentos en comparación con la población estudiada (Morrow & Jackson; 1993). Para futuros estudios sería interesante establecer objetivos explicativos que den cuenta de las variables que generan mayor o menor nivel de bienestar y soledad social y emocional para pensar intervenciones con mayor exactitud.

REFERENCIAS

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Received: March 09, 2022; Accepted: November 24, 2022

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