INTRODUCCIÓN
La encefalitis por anticuerpos contra el receptor N-metil-D-aspartato (anti-rNMDA) es una enfermedad inmunomediada grave por anticuerpos contra la subunidad GluN1 del receptor N-metil-D-aspartato (NMDA) en el líquido cefalorraquídeo (LCR). Se caracteriza por una combinación de síntomas psiquiátricos, neurológicos y autonómicos de aparición aguda o subaguda.1Desde 1997 se comunicaron casos de encefalitis y teratoma de ovario en mujeres jóvenes, y en 2007 Dalmau describió los anticuerpos anti-rNMDA confirmando su fisiopatología inmunológica.2Esta asociación es menos frecuente en niños.3-5
Se describe una paciente de 13 años, previamente sana, que comenzó con síntomas compatibles con un brote psicótico agudo y su diagnóstico final fue encefalitis anti-rNMDA, que resolvió luego del tratamiento médico y la exéresis quirúrgica de un teratoma de ovario maduro. En la revisión bibliográfica realizada hasta la actualidad, no encontramos casos publicados con esta asociación y en esta edad en Argentina.
CASO CLÍNICO
Paciente de sexo femenino de 13 años, previamente sana, que comenzó bruscamente con crisis de excitación psicomotriz, alucinaciones auditivas y heteroagresividad. Consultó en un hospital zonal, realizaron tomografía computada (TAC) del sistema nervioso central (SNC), laboratorio y pesquisa toxicológica dentro de límites normales. Con diagnóstico presuntivo de brote psicótico agudo, se indicó haloperidol y seguimiento ambulatorio. A los 20 días, por empeoramiento del cuadro consultó en el hospital.
Al ingreso presentaba sensorio que alternaba somnolencia con agitación y desinhibición conductual, alteraciones sensoperceptivas, desorientación temporoespacial, bradipsiquia y amnesia anterógrada de corto plazo. Abdomen globuloso, depresible con masa palpable en hipogastrio de consistencia duro-elástica. Resto del examen físico sin particularidades.
Con diagnóstico presuntivo de brote psicótico vs. encefalitis inmunomediada, continuó tratamiento con haloperidol y lorazepam, y se realizaron electroencefalograma (EEG) y resonancia magnética nuclear (RMN) cerebral normales. Punción lumbar con citoquímico normal y cultivos negativos. Se solicitaron bandas oligoclonales (BOC) en suero y LCR, y panel de autoanticuerpos para encefalitis inmunomediadas. En la TAC de abdomen y pelvis (Figura 1), se evidenció una masa heterogénea con calcificaciones en su interior, sugestiva de teratoma (alfafetoproteína y gonadotrofina coriónica humana negativas).
Por la falta de respuesta al tratamiento farmacológico, la presencia de un tumor ovárico y la sospecha de encefalitis autoinmune secundaria a teratoma ovárico, se inició tratamiento inmunomodulador (metilprednisolona 1 g/día 3 días consecutivos, gammaglobulina 2 g/kg y meprednisona y azatioprina oral) a la espera del resultado del panel de autoanticuerpos, y previo a la resección tumoral, cuya anatomopatología confirmó un teratoma maduro de ovario izquierdo (Figura 2).
Evolucionó con mejoría parcial de los síntomas antes de la cirugía, egresó con franca mejoría 7 días después y presentó resolución completa a los 4 meses del posoperatorio, con suspensión del tratamiento farmacológico. Realizó controles ambulatorios en Clínica Pediátrica, Salud Mental y Neurología. Se reintegró a la actividad escolar sin dificultad. Resultado de los autoanticuerpos mediante técnica de ensayo basado en células (CBA): suero y LCR anti-rNMDA: positivo. Anti- AMPA1/2, anti-DPPX, anti-CASPR2, anti-LGI1, anti-GABA-B: negativos. BOC: negativas.
DISCUSIÓN
La encefalitis anti-rNMDA es la segunda causa de encefalitis inmunomediada luego de la encefalomielitis diseminada aguda.6La incidencia anual de la encefalitis paraneoplásica anti- rNMDA es de 1,5 casos por millón de habitantes.7
El teratoma de ovario es la causa tumoral más frecuentemente asociada a encefalitis inmunomediada y fue postulada por Nokura en 1997, en una paciente de 19 años con síntomas neuropsiquiátricos que mejoraron luego de la resección de un teratoma de ovario.8-10En los años siguientes, se comunicaron casos similares11 y en 2007 Josep Dalmau describió los anti-rNMDA en 12 mujeres jóvenes con encefalitis asociada a teratoma cuya media de edad fue de 24 años, confirmando su fisiopatología inmunológica.2
En Argentina, Pérez y col., describieron una serie de 11 niños con encefalitis autoinmune y no encontraron casos asociados a tumores.4 En una revisión sistemática realizada por Acién y col., en 2014, sobre 174 casos de encefalitis asociada a teratoma de ovario publicados desde 1997 hasta 2013, la media de edad fue de 24 años.5 Esta asociación es poco frecuente a la edad de la paciente aquí presentada.
Se desconoce la causa específica que desencadena la formación de estos autoanticuerpos en pacientes con teratoma. Se cree que podría estar asociado a la presencia de tejido neuroglial en el tumor con la capacidad de expresar el receptor NMDA rodeado de células inmunes (linfocitos B que forman centros germinales).12 Nolan y col., postularon que la pérdida de la tolerancia inmune podría estar relacionada no solo a la presencia de estos tejidos en el teratoma, sino a sus propiedades inmunofenotípicas alteradas (escasez de neuronas maduras y presencia de astrocitos multinucleados, entre otras).13
Los rNMDA se encuentran altamente concentrados en áreas hipocampales y en el área prefrontal; los anticuerpos anti-rNMDA producen un desbalance a expensas de los neurotransmisores excitatorios. Debido a esto es que el cuadro se manifiesta como un síndrome neuropsiquiátrico complejo, como fue el caso de la paciente, que presentó síntomas psiquiátricos y neurológicos.8
Dalmau y col., describieron las etapas clínicas de la enfermedad; la progresión de los síntomas se relaciona con la intensidad del proceso inflamatorio en el SNC (reflejado en la pleocitosis del LCR o en los hallazgos de la RMN):
Pródromo similar a un proceso viral inespecífico (aproximadamente 1 semana).
Síntomas psiquiátricos: alucinaciones, agitación, catatonía, insomnio (1 a 2 semanas).
Alteraciones neurológicas: movimientos anormales, convulsiones, disautonomía, coma (de semanas o meses).
Evolución hacia la resolución (de meses a años, y pueden mantenerse déficits en distintas áreas con disfunción ejecutiva, impulsividad, desinhibición y anormalidades en el sueño).7 Con el tratamiento médico oportuno y
la resección tumoral, la paciente evolucionó favorablemente en menos de 6 meses, con remisión de todos los síntomas, y pudo reintegrarse a sus actividades escolares con total normalidad.
La confirmación etiológica se realiza ante la presencia de anticuerpos anti-rNMDA en LCR y/o suero, aunque no siempre es posible contar con el resultado durante el período agudo de la enfermedad. Esto destaca la importancia de la sospecha diagnóstica por la signo-sintomatología clínica y psiquiátrica, y de iniciar el tratamiento aún antes de la confirmación serológica.14
Tabla 1. Criterios diagnósticos de encefalitis anti-receptor de NMDA 1
Caso probable de encefalitis anti-rNMDA
Cuando se cumplen los 3 siguientes criterios:
Inicio rápido (en menos de 3 meses) de 4 o más de los siguientes síntomas:
Comportamiento anormal o disfunción cognitiva.
Disfunción del habla (reducción verbal, mutismo).
Convulsiones.
Trastorno del movimiento (discinesias o rigidez, posturas anormales).
Disminución del nivel de conciencia.
Disfunción autónoma o hipoventilación central.
Uno o más de los siguientes resultados alterados:
EEG anormal (actividad focal o difusa lenta o desorganizada, actividad epiléptica de tipo delta brush, entre otros).
LCR (pleocitosis o bandas oligoclonales).
Exclusión de otros diagnósticos.
El diagnóstico de un caso probable también se puede realizar en presencia de 3 de los síntomas citados en el punto 1 cuando estos se acompañan de un teratoma sistémico.
Caso definido de encefalitis anti-rNMDA
El diagnóstico de un caso definido se realiza en presencia de uno o más de los síntomas citados en el punto 1 cuando estos se acompañan de anticuerpos IgG anti-GluN1 en LCR. Es necesaria exclusión de otros diagnósticos.
EEG: electroencefalograma; LCR: líquido cefalorraquídeo.
Otros métodos diagnósticos para definir un caso como sospechoso son el LCR (con BOC y/o pleocitosis), el EEG (anormal en la mayoría de los pacientes, con actividad desorganizada con ondas lentas difusas o focales, focos epilépticos o descargas de tipo delta brush) 8 y la RMN (anormal en el 50 % de los casos, con hiperintensidad en T2 y FLAIR en hipocampo, regiones frontobasal e insular, ganglios basales, tronco del encéfalo y corteza cerebelosa o cerebral).2 Los síntomas psiquiátricos o neurológicos en presencia de un teratoma también definen un caso como sospechoso.1,7 Los criterios diagnósticos se detallan en la Tabla 1.
La paciente presentó EEG, análisis citoquímico de LCR y RMN normales. A pesar de estos resultados, recibió tratamiento dirigido antes de la confirmación de los anticuerpos por la alta sospecha clínica junto al hallazgo del teratoma ovárico. Los anticuerpos específicos anti-rNMDA resultaron positivos tanto en suero como en LCR.
Los pilares del tratamiento son los inmunomoduladores (inmunoglobulina intravenosa, corticosteroides sistémicos y plasmaféresis) y la resección tumoral (se asocia a menor riesgo de recaídas, a mejoría rápida de los síntomas neurológicos y a menor tasa de ingreso a unidad de cuidados intensivos).7 Dado que la resección quirúrgica mejora los resultados a corto y largo plazo, los estudios complementarios en busca de origen tumoral (ecografía transvaginal o TAC para casos no concluyentes) no deben aplazarse y deben formar parte de los estudios iniciales en pacientes con esta sospecha diagnóstica. Se debe considerar que en algunos casos con teratomas menores a 1 cm puede no estar alterada la morfología ovárica en la ecografía y debe solicitarse TAC.13,15
El tratamiento temprano, el curso poco grave de la enfermedad y la resección tumoral son los factores que predicen mejor pronóstico que en otras encefalitis inmunomediadas.2,7
Este caso de encefalitis inmunomediada es de interés porque representa una forma atípica de presentación de una patología tumoral en una paciente pediátrica. El inicio agudo y florido de sintomatología psiquiátrica en una joven sin antecedentes psicopatológicos personales o familiares, la falta de respuesta a los fármacos antipsicóticos junto a la semiología abdominopélvica orientaron la sospecha de una causa orgánica. Por lo tanto, ante una paciente con un cuadro psiquiátrico y/o neurológico agudo, se sugiere considerar el diagnóstico de encefalitis inmunomediada, sospechar la etiología paraneoplásica e investigar la presencia de tumores, especialmente el teratoma de ovario en mujeres jóvenes.