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Medicina (Buenos Aires)

Print version ISSN 0025-7680On-line version ISSN 1669-9106

Medicina (B. Aires) vol.81 no.1 Ciudad Autónoma de Buenos Aires Mar. 2021

 

EDITORIAL

Sobre los caminos del Hospital Posadas

Daniel A. Manigot* 

El 10 de diciembre del 2020 se realizó una reunión virtual en la que, desde el Hospital Posadas, se anunció el lanzamiento del libro Los caminos del Hospital Posadas1. La lectura de este libro permite conocer como la constancia de un grupo de personas consiguió llevar adelante el procesamiento y las condenas de los responsables de los trágicos sucesos desarrollados allí en 1976. Este hospital público ha continuado y fortalecido en las décadas siguientes, su rol destacado en beneficio de la salud de los habitantes de un amplio sector de la población del conurbano bonaerense, y ha demostrado, y continúa mostrando, el constante compromiso de toda su gente con la salud popular. Esto fue el motivo de las líneas que siguen.

El Posadas de ayer

Ingresé al entonces llamado Policlínico Profesor Alejandro Posadas en junio de 1973, al finalizar mi residencia de clínica médica en el Hospital de Clínicas de Buenos Aires. Durante 1972, había conocido el flamante hospital al realizar una rotación por el Servicio de Gastroenterología dirigido en esa época por el Dr. Pablo Mazure. En ese mismo tiempo, el Dr. Amadeo Barousse estaba organizando el servicio de clínica médica. Su interés era formar el equipo exclusivamente con ex residentes (en esa época el número de residentes graduados cada año era mucho menor que el actual). La perspectiva de incorporarse a un hospital nuevo, con la conducción de un médico prestigioso del instituto de Investigaciones Médicas, era realmente interesante por lo que consiguió formar un equipo de clínicos inquietos y con amor por la carrera hospitalaria. En esa época muchos de nosotros conseguíamos vivir con el único ingreso del sueldo de médico de planta de cuarenta horas (al año siguiente, la disminución del poder adquisitivo nos obligó a agregar una guardia semanal y más tarde consultorios fuera del Hospital). Recuerdo que Barousse se alarmaba por nuestra exclusividad en el Hospital Público, e insistía que debíamos tener un consultorio, que nos diera seguridad y “libertad de opinión”. Pasábamos muchas horas en el hospital, entre la asistencia ambulatoria, de internación y de guardia, el proyecto de investigación que cada uno había elegido y las actividades grupales. Además, entramos en contacto con sociedades de vecinos, e íbamos a dar charlas de prevención en el barrio. Por otra parte, en casi todas las especialidades se formaron grupos de trabajo similares al nuestro. Nos convertimos casi en una comunidad, ya que las actividades comunes incluyeron progresivamente encuentros sociales, actividades deportivas, etcétera.

En esos primeros años, la capacidad asistencial del hospital aún estaba lejos de saturarse. Por supuesto, cualquier familiar enfermo era internado y eventualmente operado en el Hospital. Allí nacieron en aquella época varios hijos de nuestros compañeros. El edificio estaba impecable, excelente calefacción, comida sumamente gustosa, y uno de nosotros siempre en la Guardia, acompañado por solícitos e interesados residentes.

Una mañana, después de haber comprado algo al pasar en el almacén de mi barrio, por supuesto sin pagarlo, mientras esperaba al Dr. Ortiz, que viniendo desde Padua me recogía en la esquina de Brandsen y Alvear, pensé: este lugar es muy agradable y tengo un trabajo excelente; debería pensar en comprar algo por aquí…”

En este contexto, el fallecimiento del presidente Perón, inició un periodo de conflictos que desembocaron en la dictadura más sangrienta de nuestra historia, y de la que el Hospital Posadas fue una víctima especialmente atacada.

Tres días después del golpe, estaba prevista la llegada del nuevo interventor militar. Ese domingo por la mañana, estaban presentes en el hospital los Jefes de Servicio para recibirlo formalmente. Cerca del mediodía, quienes estábamos en nuestras casas comenzamos a llamar a los colegas o al Hospital (antes de que existieran los celulares) la respuesta que recibimos era la misma: Todo mal, nos reunimos a las 14. El interventor había llegado con una compañía de soldados, un tanque militar y ametralladoras pesadas, que se dispusieron en el parque del Hospital rodeándolo, sin duda como consecuencia de una falsa información. Los Jefes presentes de UTI, cirugía, director asociado, imágenes, enfermería, y otros funcionarios del Hospital fueron detenidos e incomunicados.

De tal modo que, en aquella reunión dolorosamente histórica en la casa del Jefe de servicio, nuestra sorpresa se mezclaba con la incertidumbre. A la mañana siguiente, debíamos presentarnos a nuestros trabajos; la prisión de los Jefes, hacía suponer que alguno de nosotros también sería detenido. Pero basados en premisas que la historia mostró equivocadas, dado que aún no existía experiencia sobre desapariciones, pensamos “no cometimos ningún delito, ni realizamos actividades punibles”. Lo único que podían argumentar en contra nuestro, era la militancia gremial y o la participación en las asambleas. La preocupación máxima era la pérdida de nuestro trabajo.

Tanto yo, como otro grupo de personas, fuimos detenidos el lunes al llegar al Hospital. Ese primer grupo fue investigado en coordinación federal, siendo todos declarados “PRESCINDIBLES POR MOTIVOS DE SEGURIDAD” Esta calificación privaba a los afectados de cualquier indemnización.

Lo que ocurrió después es bien conocido por todos, incluyendo la desaparición forzada de 14 trabajadores del hospital, profesionales y no profesionales. Su corolario histórico puede encontrarse de forma detallada en el libro Los caminos del Hospital Posadas, que motivó la reunión1.

El Posadas hoy

Una vez más, el Hospital de pie y trabajando a pleno vuelve a mostrar lo que significa un hospital público con vocación de servicio. Algunas cifras ayudarán a evaluar el aspecto cuantitativo de la tarea realizada. Durante 2019 el hospital realizó más de 700 000 consultas programadas y 250 000 de emergencia. Se produjeron 19 000 egresos, 18 000 cirugías, y 3500 partos. Egresaron 162 residentes de especialidades básicas y segundo nivel. Funciona en el Hospital una UDH (Unidad Docente Hospitalaria), UBA. Durante la pandemia del 2020 fueron hisopadas 35 000 personas, siendo positivas 14 000 y se internaron 1500. Preventivamente, el Hospital había agregado a sus dos salas de terapia intensiva, camas con respirador en otros sectores del Hospital, de tal manera que, durante las semanas más críticas de la pandemia, por momentos se encontraban en ARM más de 45 pacientes simultáneamente.

Además, se publican desde el Hospital numerosos trabajos científicos en revistas nacionales y extranjeras.

Cabe mencionar, a modo de ejemplo de una conducta comprometida con las necesidades de la población y el hospital público, la publicación de un trabajo histórico, luego de la pandemia de gripe A de 2009, tanto por la eficiencia y el compromiso del hospital en su conjunto, como por el hecho de ser publicado sin otro autor que el propio Hospital2.

Habiendo participado en la formación de residentes en hospitales públicos y privados, aprendí que los jóvenes colegas se impregnan rápidamente de los valores que se respetan en la Institución y en los equipos que la forman.

Antes y ahora, el Hospital Posadas evidenció y evidencia una preocupación genuina por el cuidado de la salud de la población en su conjunto, y por el hospital público y gratuito como forma de ofrecerlo.

Valgan estas palabras como homenaje a todos quienes lo hacen posible.

Nota: Tres miembros del Comité de Redacción de la Revista Medicina, el Dr. Amadeo Barousse, la Dra. Isabel N. P. Miceli y el autor de este editorial, han sido médicos del Hospital Posadas

Bibliografía

1. Apezteguía C, Guarino ML, Bernardini E, et al. Los caminos del Hospital Posadas. Justicia y Derechos Humanos, 1ra. Ed., 2020. Buenos Aires, Argentina: Editorial Cooperativa La Minga, 160 p. En: En: https://www.cooplaminga.com/libros-digitales-1 ; consultado diciembre 2020. [ Links ]

2. Comisión para la Contingencia de Influenza A (H1N1), Hospital Nacional Profesor Alejandro Posadas. Epidemia de influenza A (H1N1) en la Argentina. Experiencia del Hospital Nacional Profesor Alejandro Posadas. Medicina (B Aires) 2009; 69, 4: 393-423. [ Links ]

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