EDITORIAL

Archivos, un año más: sus logros y nuevas metas

Hace un año, al aludir a los requisitos que se suelen tener en cuenta para valorar una publicación científica, hacíamos mención a los múltiples desafíos que se enfrentan en la tarea editorial de una revista como Archivos. Entre otros, destacamos los siguientes aspectos: que la publicación aparezca en forma regular y en el mes que corresponde, con respeto a ultranza de su periodicidad bimestral; que todos los números se editen dentro del año calendario; que disponga de un formato electrónico con la posibilidad de acceder a texto completo; que mantenga un equilibrio entre el número de artículos originales y los que actualizan diversos aspectos del conocimiento o proveen temas prácticos que pueden resultar de utilidad en la tarea cotidiana al lado del paciente.

En cuanto a los dos primeros puntos, podemos expresar, no sin gran satisfacción, que se pudo entregar la publicación con una estricta puntualidad en cada uno de los meses correspondientes, desde el número 1, en febrero, hasta el número 6, en diciembre. El acceso electrónico es requerido cada vez por un mayor número de interesados. En el año 2006 se registró un promedio de 30 ingresos diarios; en los primeros meses de este año ascendieron a 40 y, en los últimos seis meses, esa cifra aumentó notablemente a 75 por día, que significan más de 2.000 ingresos por mes. El envío a los suscriptos de la tabla de contenidos de Archivos, se ha incrementado progresivamente y hoy supera los 1.200 lectores.

En su estructura, Archivos privilegió la publicación de artículos de Actualización y de Pediatría Práctica. Creemos que tal proceder es de suma importancia para lograr un mayor equilibrio entre los estudios originales de investigación y los artículos que se refieren en forma más directa a los diversos problemas que el pediatra enfrenta en su práctica cotidiana. En muchas de las más importantes revistas médicas del mundo se observa una mayor preocupación por este aspecto y existe una evidente tendencia hacia un mayor protagonismo de actualizaciones, temas prácticos, guías, revisiones sistemáticas, etc. Continuaremos en esta línea que entendemos es la más apropiada para una revista que pretende entregar un contenido científico realmente útil.

La incorporación, a mediados de 2006, de las secciones Correo de la SAP y Preguntas frecuentes en imágenes, se enroló dentro de una política tendiente a brindar otras herramientas al lector: recursos que por un lado faciliten el acceso a artículos destacados publicados en las más prestigiosas revistas médicas y, por el otro, aclaren los interrogantes más frecuentes en el diagnóstico por imágenes.

Asimismo, debemos destacar el ingreso de Archivos al Núcleo Básico de Revistas Científicas Argentinas del CONICET, incorporación que jerarquiza notablemente la revista y constituye un hito muy importante para la SAP. Por tal motivo, decidimos publicar, a continuación de este editorial, la carta que nos enviaran para comunicarnos la distinción obtenida.

Otro aspecto a señalar es el de la comunicación, algo imprescindible en toda actividad humana. Actualmente se han incorporado a la actividad cotidiana, los medios de comunicación por internet que nos permiten llegar en forma rápida y ágil a los lectores de Archivos.

La apertura de un diálogo fecundo seguramente va a dar excelentes frutos. Nosotros necesitamos saber cuáles son las inquietudes y las necesidades de los profesionales para darles una respuesta. Por otro lado, cada artículo de la revista puede dar lugar a una consulta, una opinión o una crítica que nos enriquezca a todos. Estimulamos incentivar ese dialogo en todo lo posible, en forma tal que nos permita comunicarnos mejor.

Otro aspecto es el de la renovación del Comité Editorial que realizamos este año. Entendimos que luego de un tiempo prudencial, los cambios pueden ser apropiados para lograr un mayor dinamismo. El Comité Editorial puede cumplir una muy importante función de apoyo y además la participación de sus miembros representa el sentir de distintas filiales de nuestro país.

Finalmente, destacamos un hecho muy auspicioso, la publicación de artículos escritos por residentes, algo realmente inusual en Archivos y en la mayoría de las revistas médicas. Desde hace años esto ha sido un tema de preocupación en muchos programas de residencias. Sin duda las condiciones laborales del médico residente son muy exigentes, pero es deseable un mayor interés por las tareas de investigación y un espíritu crítico sobre el ejercicio de la profesión que se adquiere a través de la lectura y la actualización continua. De confirmarse la tendencia que observamos este año, sin duda significará un gran progreso en la formación de los médicos jóvenes.

Ardua es la tarea que resta por hacer si nuestra meta es la de mejorar progresivamente la calidad de la revista. Sin duda, no debemos estar solos en este complejo camino; necesitamos de la colaboración generosa de muchos, en la forma que cada uno pueda. Solo así podremos garantizar la consecución de nuevos logros.

Dra. Norma Rossato
Dr. José M. Ceriani Cernadas