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Archivos argentinos de pediatría

versión impresa ISSN 0325-0075versión On-line ISSN 1668-3501

Arch. argent. pediatr. v.108 n.3 Buenos Aires mayo/jun. 2010

 

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Anemia, problema complejo, ¿soluciones simples?

Anemia, a complex issue, simple solutions?

La deficiencia de hierro y la anemia constituyen uno de los trastornos nutricionales más prevalentes en el mundo. Dadas sus características, la multiplicidad de factores que participan en su desarrollo, y sus consecuencias, se ve justificado que sean considerados como un problema complejo. Sin embargo, es conveniente resaltar que complejo no es sinónimo de complicado o difícil.
Particularmente en el caso de la anemia, existe evidencia acerca de diferentes factores, condiciones o situaciones vinculados a su presentación, mucha de la cual ya se encontraba disponible hacia fines del siglo XIX.1 En forma similar, desde la primera mitad del siglo XX se dispone de evidencia acerca del efecto de la administración de hierro en la prevención de la anemia. Sin embargo, a pesar de contar con tales conocimientos y desde hace tanto tiempo, llama la atención el contraste entre la disponibilidad de estrategias sencillas y ampliamente conocidas, con su, muchas veces limitada, implementación y logro de resultados.
La disponibilidad de alimentos ricos en hierro, el efectivo acceso a dietas con adecuada biodisponibilidad, o bien la ausencia de condiciones biológicas que afecten el balance de hierro, constituyen factores vinculados a la presencia de anemia. En respuesta a ellas, la educación alimentaria, la fortificación de alimentos, la promoción del acceso a alimentos seleccionados, la suplementación farmacológica con hierro, constituyen todas ellas estrategias que han demostrado diferente grado de eficacia.
No obstante, en definitiva, es la efectividad de las intervenciones y el logro de resultados reales en las poblaciones, lo que permitirá la reducción de la prevalencia de anemia y, por lo tanto, la prevención de todas aquellas condiciones adversas, vinculadas y ampliamente conocidas. En este sentido, la disponibilidad y acceso a alimentos o suplementos, la adherencia a determinadas prácticas, apoyadas y acompañadas por los equipos de salud, representan los factores que constituyen muchas veces limitantes para alcanzar adecuados niveles de efectividad de las intervenciones. Factores biológicos, comunicacionales, socioeconómicos, creencias o representaciones, tanto de los niños y las personas a cargo de su cuidado, como de los equipos de salud en los diferentes niveles de planificación y gestión, se vinculan directamente al logro de resultados en las poblaciones, y contribuyen a la complejidad del proceso.
Sin omitir la complementariedad de las intervenciones que desde la gestación y hasta principalmente el segundo año de vida permiten prevenir la deficiencia de hierro durante un período de elevados requerimientos, la ligadura oportuna del cordón umbilical constituye una herramienta importante en la prevención de la anemia, acerca de la cual existe bibliografía desde hace mas de 50 años, que resulta interesante analizar.
A diferencia de otras intervenciones, la ligadura oportuna del cordón umbilical no requiere de adherencia a largo plazo, ni un sistema de distribución de insumos, recayendo principalmente en una práctica médica, sumamente simple. Sin embargo, la incorporación o modificación de una práctica profesional requiere del sustento de la evidencia científica y, al mismo tiempo, precisa vencer la inercia de una práctica ya establecida y de las creencias que hasta ese momento la sustentaban.
Acerca de su eficacia existen antecedentes en publicaciones científicas en los que se comparan los resultados según ligadura precoz o demorada, desde mediados del siglo XX.2 En algunos de estos trabajos se hace referencia a ciertos reparos muchas veces planteados en contra de la ligadura demorada, sin ningún sustento científico sólido.
Diferentes publicaciones recientes han valorado la eficacia y seguridad de la ligadura demorada en resultados maternos y neonatales, tanto en recién nacidos a término3 como en recién nacidos prematuros.4 En ambos grupos según edad gestacional, no se han identificado riesgos vinculados al momento de la ligadura del cordón umbilical. Tal conclusión es fundamental en términos de brindar claridad acerca de la seguridad del procedimiento. Pero es igualmente fundamental valorar la evidencia acerca de los efectos a mediano plazo de la ligadura demorada del cordón umbilical.
El trabajo de Ceriani Cernadas y cols., que se publica en el presente número, da cuenta de los resultados en niveles de hemoglobina y depósitos de hierro a los seis meses de edad, según el momento de ligadura del cordón umbilical. Tales resultados, obtenidos a partir de una muestra en la que se había evaluado previamente el efecto y la seguridad a corto plazo,5 permite valorar el favorable impacto de la estrategia en el mediano plazo, _mayores niveles de ferritina a los seis meses de edad_ de una práctica tan simple como es el momento de ligadura del cordón umbilical. Otro estudio aleatorizado observó similares resultados a los seis meses en niños con clampeo demorado al nacer.6
La disponibilidad de evidencia acerca de la eficacia y seguridad de la ligadura demorada del cordón umbilical existe, y ésta nos indica que se trata de una práctica sencilla, efectiva y segura, que contribuye a prevenir un problema prevalente y de relevancia por sus consecuencias. Sin embargo, como en muchos otros aspectos de la práctica profesional, es imprescindible que evidencia de calidad como la presentada sea efectivamente llevada a la práctica. Ciertamente que el cambio de creencias y prácticas puede ser muchas veces trabajoso. Pero sólo con la eficacia, sólo con la evidencia no es suficiente para cambiar la realidad, aunque es un primer paso fundamental. Comunicarla y promover su implementación es parte de la complejidad, pero también de nuestra responsabilidad.

Dr. Pablo Durán
Hospital Pedro de Elizalde

BIBLIOGRAFÍA

1. Yip R, Dallman PR. Iron. En: Ziegler EE, Filer LJ. Present knowledge in nutrition. Washington, ILSI Press; 1996; 277.         [ Links ]

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3. McDonald SJ, Middleton P. Effect of timing of umbilical cord clamping of term infants on maternal and neonatal outcomes. Cochrane Database Syst Rev 2008, Issue 2. Art. Nº: CD004074. DOI: 10.1002/14651858. CD004074. pub2.         [ Links ]

4. Rabe H, Reynolds G, Diaz-Rossello J. A systematic review and meta-analysis of a brief delay in clamping the umbilical cord of preterm infants. Neonatology 2008;93:138-144.         [ Links ]

5. Ceriani Cernadas JM, Carroli G, Pellegrini L, Otaño L, et al. The effect of timing of cord clamping on neonatal venous hematocrit values and clinical outcome at term: a randomized, controlled trial. Pediatrics 2006;117(4): e779-e786.         [ Links ]

6. Chaparro C, Neufeld LM, Alavez GT, Eguia R, et al. Effect of timing of umbilical cord clamping on iron status in Mexican infants: a randomised controlled trial. Lancet 2006;367:1997-2004.         [ Links ]

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