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Folia Histórica del Nordeste

versión impresa ISSN 0325-8238versión On-line ISSN 2525-1627

Folia  no.29 Resistencia ago. 2017

 

DOSSIER

Las movilizaciones estudiantiles en Corrientes y Resistencia durante la “Revolución Argentina”, 1966 – 1973

The Student Mobilizations in Corrientes and Resistencia during the “Revolución Argentina”, 1966 – 1973

Mariano Millán*

* Licenciado en Sociología y Doctor en Ciencias Sociales, ambas por la Universidad de Buenos Aires (UBA). Investigador Asistente de CONICET, Instituto de Historia Argentina y Americana Dr. Emilio Ravignani, dependiente de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. marianomillan82@gmail.com

Resumen

En el presente artículo analizamos las movilizaciones estudiantiles en Corrientes y Resistencia entre 1966 y 1973, durante la dictadura autoproclamada “Revolución Argentina”. Se caracterizan las formas de la acción estudiantil, las corrientes político ideológicas que integran el movimiento estudiantil y se establecen comparaciones con otras experiencias. Para ello se presentan datos cualitativos y cuantitativos sobre las acciones de lucha estudiantil, construidos con información proveniente de los diarios El Territorio, Norte y Litoral, y de una base de datos sobre conflictos estudiantiles. Nuestra contribución consiste en demostrar la importancia de la acción del reformismo universitario y la izquierda marxista durante el período de mayor radicalidad de los movimientos estudiantiles de Argentina, con posterioridad al Cordobazo, un elemento que contribuye a pensar críticamente las hipótesis de uso común sobre la peronización estudiantil y la idea de que la politización de los alumnos dejó en las sombras los problemas netamente universitarios.

Palabras clave: Movimiento estudiantil; Universidad Nacional del Nordeste; Dictadura militar.

Abstract

In this article I analyze the student demonstrations in Corrientes and Resistencia, between 1966 and 1973, during the dictatorship self-proclaimed as “Revolución Argentina”. I will inquire on the forms of student action, the political and ideological trends that shaped the student movement, and then I will compare them with other experiences. For this purpose, I present qualitative and quantitative data on actions of student struggle, constructed with information from the newspapers El Territorio, Norte, and Litoral, as well as a database on student conflicts. The contribution consists in demonstrating the importance of the action of the university reformism and the Marxist left during the period of greater radicalism of the student movements of Argentina, after the Cordobazo. The latter is an element that contributes to rethink critically the hypotheses of common use on the students’ peronization, and the idea that the politicization of the students distracted attention from the problems related to the university.

Keywords: Student Movement; National University of the Northeast; Military dictatorship.

Recibido: 26/05/2017
Aceptado: 14/07/2017

Aquí analizamos el movimiento estudiantil de Corrientes y Resistencia durante la dictadura de la autoproclamada “Revolución Argentina”, entre julio de 1966 y mayo de 1973. Esta investigación pretende ampliar el conocimiento del campo, donde predominan trabajos sobre universidades más grandes como Buenos Aires, Córdoba o La Plata; al tiempo que habilitar un diálogo con las interpretaciones usuales sobre la radicalización estudiantil de los ‘70 mediante el examen de un movimiento con escasa herencia reformista inspirada en 1918.

Aunque durante los últimos años creció el caudal de trabajo empírico sobre movilizaciones estudiantiles, las hipótesis analíticas pertenecen a décadas anteriores: la crisis del reformismo (Sigal, 1991: 71), la peronización/radicalización de los estudiantes (Barletta, 2001: 83; Suásnabar, 2004: 82/8) y el abandono de las cuestiones académicas (Sarlo, 2003: 102/3). Compartimos la preocupación por comprender procesos de movilización que excedieron las aulas. Por ello, a diferencia de los trabajos citados, analizamos los enfrentamientos sociales con participación estudiantil en una de las regiones extrapampeanas donde se produjeron los conflictos más radicales de mayo de 1969.1 Destacamos la relativa moderación de los alumnos nordestinos (mayormente cercanos al peronismo), quienes protagonizaron numerosas disputas académico-corporativas después del Cordobazo, también poniendo en entredicho, de esta manera, el análisis de Maeder en su Historia de la Universidad Nacional del Nordeste (2007: 148/9). Nuestro análisis de los datos cuantitativos, asimismo, nos permite resaltar otros aliados y apoyos al movimiento estudiantil, de mayor participación en la acción colectiva que los siempre subrayados sectores tercermundistas del catolicismo (Román, 2011).

Una tesis de mayor alcance es la de Juan Carlos Portantiero, quien dedujo el auge de los movimientos estudiantiles latinoamericanos en los ’60 y ’70 de: “…un desajuste entre la creciente masificación de la enseñanza superior […] y las dificultades que enfrenta el sistema para dar a los estudiantes, una vez egresados, una vía de ascenso social.” (1978: 14/5). Esta variable compleja puede ser operativa en el largo plazo, pero en un análisis detallado del corto plazo, como en nuestro caso, no permite comprender con precisión las características del movimiento estudiantil en diferentes situaciones políticas e institucionales.

Para superar estos obstáculos, retomaremos las nociones de Alain Touraine: la radicalización resulta directamente proporcional con el dirigismo estatal y la rigidez institucional; a la inversa, la conducción liberal del Estado y la flexibilidad de las autoridades universitarias fomentan movimientos de protesta más moderados (1969: 127/8). Para entender las cualidades del movimiento estudiantil de esta región durante el período considerado, nos adentraremos en la historia política de este actor y sus vínculos con procesos más amplios.

Antecedentes: Universidad y movimiento estudiantil en el Nordeste (1956–1966)

La Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) fue constituida en 1956 sobre la base de las unidades académicas de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) en Corrientes y Resistencia, siendo la más antigua de mediados de 1921 (Maeder, 2007). Los primeros militantes estudiantiles fueron de la Confederación General Universitaria (CGU) peronista y, ya durante la “Revolución Libertadora”, se constata la existencia de la agrupación reformista Autonomía Universitaria (Zarrabeitía, 2007). El reformismo universitario constituyó los Centros de Estudiantes y la Federación Universitaria del Nordeste (FUNNE) encuadrada en la FUA.

Desde sus comienzos, una de las peculiaridades de la UNNE era la importancia de las agrupaciones no reformistas, en su mayoría católicas y anticomunistas. La primera organización, creada en 1958 durante la coyuntura previa a los enfrentamientos de Laica versus Libre, fue la Federación de Estudiantes Libres (FEL), desarrollada a partir de los Ateneos por facultad, que se declaraban apolíticos y centraban su militancia en las cuestiones gremiales (Buchbinder, 2005: 195). Para principios de los ‘60 el movimiento ateneísta creó algunos Centros de Estudiantes paralelos, como el de Derecho, y la Confederación Universitaria del Nordeste (CUN), mayoritaria hacia 1964 (Maeder, 2007: 134). Para fines de la década la mayoría de estos sectores constituyeron la fuerza regional del Integralismo.

En 1966 la UNNE contaba con una matrícula de 5.355 alumnos, en 1969 cerca de 7.000 y hacia 1973 poco más que 14.000 (Maeder, 2007: 149). Los estudiantes, concentrados especialmente en las zonas céntricas de Corrientes y Resistencia, representaban para 1973 alrededor del 4% de la población de estas dos ciudades. Muchos de estos jóvenes provenían de otras localidades de la región. Su alojamiento, alimentación y sociabilidad (ocio, afectos, cultura, política, etc.) se llevaban a cabo en pequeños nudos del espacio de las ciudades, sobre todo en pensiones o casas de alquiler donde, junto a la Universidad, los estudiantes desarrollaban la mayoría de sus vínculos sociales.

El reformismo que respondía al Partido Comunista contaba con un edificio en el centro de Resistencia: la “Universidad Popular–Ciclo Básico”. Allí se desarrollaban reuniones, cursos, charlas, kermeses, etc. Entre los católicos existía el “Colegio Mayor”, un pensionado, lugar de reunión y organización de actividades culturales que, bajo la conducción de Rubén Dri, formó parte del proceso posconciliar durante los ‘60, impulsando al Obispo de Resistencia a separar este establecimiento de la estructura de la Iglesia Católica (Román, 2011). Además de estas instituciones, se encontraban el comedor universitario y gran cantidad de pensiones cercanas a las facultades, donde los estudiantes vivían y constituían un tejido social juvenil. Para el caso del comedor, además de una posibilidad de alimentación muy económica, se trataba del ámbito donde se realizaban casi todas las reuniones y asambleas relevantes en estos conflictos.

Golpe de Estado, intervención, reflujo y recomposición

a) Intervención, resistencia y consolidación dictatorial en la UNNE

Cuando se produjo el golpe de Estado de la autoproclamada “Revolución Argentina” y la intervención universitaria en 1966, los alumnos socialcristianos, a diferencia de los reformistas y al igual que numerosos sectores sociales (O`Donnell, 2009; De Riz, 2000), secundaron al general Onganía. Fueron prohibidos los partidos políticos y la universidad, considerada un ámbito de infiltración comunista, fue intervenida. Se suprimieron el cogobierno y la autonomía y se proscribieron las agrupaciones, centros y federaciones, que desde ese momento actuaron al margen de la ley.

Semanas antes de la intervención, el ministro del Interior Martínez Paz viajó a Corrientes y se manifestó favorable a los cambios en la estructura universitaria. Estas declaraciones motivaron el rechazo del Consejo Directivo de la Facultad de Cien­cias Económicas de Corrientes.2 Sin embargo, esta no era la única posición en el interior de la UNNE. Concretada la intervención del 29 de julio, a diferencia de las autoridades de las universidades más grandes y antiguas como la UBA, el rector de la UNNE Jorge A. Rodríguez aceptó el decreto 16.912, transformándose en interventor del Poder Ejecutivo Nacional. La CUN apoyó al funcionario y contribuyó a lo que Ernesto Maeder denominó “un ambiente de tranquilidad” (2007: 135/6). En contrapartida, los reformistas criticaron el decreto y entendieron que aceptarlo implicaba una claudicación.3 La FUNNE organizó una asamblea interclaustros en el Comedor Universitario de Corrientes, que protestó por la represión en Buenos Aires (por “noche de los bastones largos”), desconoció las nuevas autoridades y entregó al rector una declaración.4

Por su parte, los sectores inicialmente conciliadores comenzaron la lucha en agosto, en solidaridad con los estudiantes cordobeses que venían sufriendo la represión policial. Se iniciaron huelgas de hambre y el Integralismo, como otros grupos católicos, cambió su alineamiento en la Universidad a partir del ataque policial en Córdoba, que costó la vida de Santiago Pampillón el 12 de septiembre. La lucha estudiantil tomó la forma de paros con alto acatamiento, numerosas asambleas, actos y movilizaciones callejeras compartidas con la CGT local. Como puede apreciarse en el cuadro 1, la segunda parte de 1966, especialmente los meses de septiembre y octubre, concentraron una cantidad de acciones de lucha estudiantil muy superior a los años siguientes.

Cuadro nº 1. Cantidad anual de acciones de lucha estudiantil en Corrientes y Resistencia, julio de 1966 - mayo de 1973

Año

Cantidad de acciones

1966

34

1967

3

1968

10

1969

169

1970

60

1971

122

1972

22

1973

33

Total

453

Fuente: Elaboración propia. El Territorio, Norte, Litoral y BDB.

Al igual que en el resto del país, durante 1967 los conflictos universitarios en Corrientes y Resistencia fueron acotados. En el marco del éxito inicial del plan económico de Krieger Vasena y la derrota del sindicalismo que enfrentó al nuevo Ministro (De Riz, 2000: 58/65; O’Donnell, 2009: 153/165), la dictadura impuso cierta estabilidad y “pacificación” dentro del ámbito universitario. A nivel nacional, durante abril se promulgó la Ley Orgánica de las Universidades Nacionales, nº 17.245. Según Fermín Mignone (1988), la legislación prohibía la política, excluía casi completamente a los estudiantes del gobierno de las facultades y se establecían exámenes de ingreso.

En la UNNE, durante julio asumió como nuevo rector Raúl Devoto. La CUN escribió una nota informándole que no eran “opositores sistemáticos”.5 Poco después, en septiembre, el Gobierno Nacional presentó nuevos estatutos que indicaban a los rectores las funciones de rector y Consejo Universitario. Los rectores de las universidades renunciaron, sin embargo el gobierno rechazó la del Dr. Raúl Devoto. Como puede notarse, existía gran malestar con el gobierno en todos los estamentos universitarios por el manejo discrecional del Ministerio de Educación.6

b) El 1968, un año de transición

Durante 1968 la movilización estudiantil fue recuperando vitalidad. En febrero el Dr. Devoto fue transferido a la UBA. En su reemplazo fue nombrado el Dr. Carlos Walker, quien “propició una conducción personal, escasa de diálogo, y apoyada principalmente en los funcionarios que llegaron con él” (Maeder, 2007: 139). Las nuevas autoridades impulsaron la privatización del comedor universitario, con el consiguiente incremento de los tickets y las restricciones para el espacio de sociabilidad (Balvé y Balvé, 2005: 89 y Buchbinder, 2005: 196). Esta iniciativa, junto con varios nombramientos, provocó la renuncia de funcionarios y profesores durante mayo de este año.

Un mes después, en junio, los estudiantes entraron en acción acoplándose al plan de lucha de la CGT de los Argentinos. Junto a esa entidad sindical programaron varias actividades para el 28 de junio, aniversario del golpe de 1966. Recibieron, además, el apoyo de un importante grupo de sacerdotes. Este alineamiento provocó un debate. El Arzobispo de Corrientes, Monseñor Francisco Vicentín, prohibió la participación de los religiosos en las manifestaciones. Inmediatamente, el Integralismo repudió esa medida, entendiéndola como una “maniobra consumada por los sectores reaccio­narios de Corrientes, que han presionado sobre el Arzobispo”.7 Más allá de estas circunstancias, obreros y estudiantes cortaron el tránsito con fogatas en el centro de Corrientes y marcharon hasta chocar con la policía, produciéndose enfrentamientos y treinta detenidos.

Para agosto se registraron nuevas actividades estudiantiles a nivel nacional, de importancia en nuestra región. El Humanismo de Buenos Aires, UEL de Rosario y el Integralismo (Chaco, Corrientes, Córdoba, San Luis y Rosario) asistieron a un plenario en la ciudad de Rosario donde fundaron la Unión Nacional de Estudiantes (UNE) y luego, varias de estas corrientes formaron la Mesa Nacional Provisoria del Peronismo Universitario. Aunque los propios peronistas reconocían que esta coalición no tenía la capacidad organizativa de la FUA,8 los estudiantes no guardaban sus duras críticas hacia las corrientes mayoritarias: “Fieles a la presión colonizadora de la cultura a oligárquica […], despreciaban con arrebatos estudiantiles al movimiento popular, que como dirigentes políti­cos […] contribuirían a proscribir... Reformistas e izquierdistas en la universidad, radicales, demócratas cristia­nos, socialistas y comunistas en el país, son los dirigentes que forman una universidad sin conciencia nacional...”9

El reformismo, por su parte, se concentró en las acciones para recordar a Pampillón y enfrentar a la dictadura mediante un paro de la FUA, el 12 de septiembre. En Resistencia la asamblea estudiantil de Humanidades, mayoritariamente socialcristiana, adhirió al paro. Finalizada la misma los estudiantes ocuparon la UNNE en protesta por la acción policial en Córdoba, ante lo cual fueron desalojados por la policía con una fuerte represión. Hubo 62 detenidos, entre ellos el sacerdote y académico Rubén Dri.10 Como podemos observar, pese a las claras diferencias ideológicas, hacia fines de 1968 estaba conformándose la unidad contra la dictadura dentro del movimiento estudiantil del Nordeste. Los sectores católicos, que inicialmente apoyaron al gobierno militar, a fines de 1968 se sumaban a los sectores reformistas, enemigos del gobierno desde junio de 1966.

En estos momentos de recomposición ya podía notarse, como se desprende de la lectura del cuadro nº 2, la importancia del escenario universitario por sobre la calle y los espacios públicos, o los locales de aliados del movimiento estudiantil, como los sacerdotes tercermundistas o la CGT. Ese enorme predominio de las facultades sólo será atenuado, más no revertido, durante 1969.

Cuadro nº 2. Escenarios de la acción estudiantil en Corrientes y Resistencia, julio 1966 – mayo 1973

Año

Facultad

Calles/Público

Aliados

1966

23

4

5

1967

3

0

0

1968

8

2

1

1969

83

53

33

1970

48

6

9

1971

112

6

5

1972

15

9

0

1973

30

2

1

Total

322

82

54

Fuente: Elaboración propia. El Territorio, Norte, Litoral y BDB.

La crisis de 1969: el Correntinazo

Las acciones estudiantiles de 1969 en el Nordeste comenzaron durante marzo, cuando los alumnos remitieron un petitorio al rector. Ya en abril se efectuaron varias asambleas en Corrientes en un contexto de creciente politización, como evidenciaron los incidentes para “repudiar la reunión de los representantes de las universidades del país y de Paraguay”. Como puede observarse en el cuadro nº 1, durante 1969 se produjo la mayor cantidad anual de acciones de lucha estudiantil, desde petitorios hasta enfrentamientos violentos.

Asimismo, durante 1969 el problema del comedor se convirtió en uno de los reclamos estudiantiles más reiterados, con 66 ocurrencias, sólo detrás de las denuncias contra la represión, cuyo número creció hasta los 92 casos, registrando un crecimiento exponencial después del asesinato de Juan José Cabral, el 15 de mayo.

Cuadro nº 3. Reclamos estudiantiles en Corrientes y Resistencia, julio 1966 – mayo 1973

Año

1966

1967

1968

1969

1970

1971

1972

1973

Académicas

0

0

0

10

16

54

0

0

Bienestar Estudiantil

0

0

1

66

1

4

7

0

Ingreso irrestricto

0

0

0

4

4

19

4

3

Contra funcionario/s

7

0

1

29

9

21

0

7

Política universitaria

13

1

1

29

28

34

1

6

Solidaridad

11

0

1

27

4

27

1

5

Memoria/conm.

0

1

2

11

9

4

1

7

Política Nac./Int.

3

0

5

45

17

26

6

8

Anti-represivo

12

1

1

92

7

16

9

6

Apoyo a funcionarios

3

1

0

4

0

6

1

2

Fuente: Elaboración Propia. El Territorio, Norte, Litoral y BDB.

A principios de mayo se llevó a cabo la planificada privatización y el aumento de 25 a 57 pesos por comensal (Zarrabeitia, 2003: 57). La protesta estudiantil por el desalojo del comedor de quienes no poseían el ticket originó la represión, resultando herido de bala el estudiante Pedro Monzón (Zarrabeitia, 2003: 57). A partir de este hecho, la unidad estudiantil fue creciendo y durante la primera quincena de mayo de 1969 los estudiantes de la UNNE ocuparon cinco veces el comedor, al tiempo que conseguían la solidaridad de otros sectores como los religiosos, los comerciantes o la CGT correntina (Balvé y Balvé, 2005: 48), donde acordaron instalar una olla popular.11

Se desarrollaron huelgas estudiantiles y se formaron las Juntas Coordinadoras de Lucha, integradas por: FUNNE, Integralismo, Ateneo de Derecho, MOR, Agrupación Universitaria Nacional (Abelardo Ramos), Federación de Agrupaciones Universitarias De Izquierda (FAUDI – PCR), Humanistas y Centros de Estudiantes. (Balvé y Balvé, 2005: 48). Además del efecto unificador, existen elementos para suponer que las Coordinadoras permitieron un desarrollo significativo del debate, transformando la militancia estudiantil. Hasta 1969 las redes de las agrupaciones se tejían con especial densidad en pensionados o grandes casas de alquiler, donde el estudiante militante de alguna corriente alineaba a sus compañeros. En las Coordinadoras tomaron contacto los fragmentos del movimiento y se conocieron otras posiciones, en pleno proceso de masificación de la participación.12

Desde principios de mayo también se realizaron numerosas movilizaciones callejeras, que chocaron reiteradamente con la policía. Durante el 12 de mayo se llevó adelante otro paro estudiantil. En Corrientes más de 1.000 manifestantes participaron en una movilización y en Resistencia ocuparon el comedor. Al día siguiente, una asamblea con más de 900 alumnos fue apaleada por la policía en el interior de la UNNE (Zarrabeitia, 2003: 62). Lo predominante, a mediados de mes, era la represión de cualquier manifestación estudiantil, aplicando una táctica represiva difusa y reactiva (Califa y Millán, 2016), e instalando un clima de violencia donde la militancia realizaba un costoso aprendizaje.

Esta creciente capacidad estudiantil para ejercer la violencia convivía con fuertes hábitos asamblearios. Tal cual vemos en el cuadro nº 4, durante 1969 se realizaron 39 asambleas y en todo el período 93. Es la segunda forma de acción más reiterada durante la dictadura y constituye un tipo de deliberación muy distante de las prácticas organizativas de la guerrilla, consignada por Ernesto Maeder (2007) como un rasgo distintivo de la militancia del período en la UNNE, puesto que las organizaciones armadas centralizan la toma de decisiones. Violencia y guerrilla no son sinónimos, ni mucho menos:

Cuadro nº 4. Formas de acción estudiantil en Corrientes y Resistencia entre julio de 1966 y mayo de 1973 (descompuestas en hechos simples y detallando hechos complejos)

Tipo de acción / Año

1966

1967

1968

1969

1970

1971

1972

1973

Total

Petitorio

1

0

0

6

1

1

1

1

11

Declaración/Conferencia

17

3

5

66

30

70

5

21

217

Asamblea

4

0

1

39

12

34

0

3

93

Acto

4

0

0

20

11

10

5

4

54

Huelga

8

0

1

21

4

10

1

0

45

Marcha

2

0

1

21

4

9

2

2

41

Toma

2

0

2

4

3

0

0

0

11

Barricada

0

0

0

19

3

0

0

0

22

Actos relámpago

0

0

2

6

0

0

3

0

11

Otros enfrentamientos violentos

2

0

4

24

9

4

4

3

50

Total

40

3

16

226

77

138

21

34

555

Hechos complejos s./v.

2

0

1

13

6

15

0

0

37

Hechos complejos c./v.

0

0

3

14

4

3

3

0

27

Fuente: Elaboración Propia. El Territorio, Norte, Litoral y BDB.

Asimismo, como puede verse en las cifras, este movimiento estudiantil y sus aliados participaron de numerosos hechos complejos: asambleas convertidas en manifestaciones o tomas, y luego en enfrentamientos violentos con la policía. Al respecto, 1969 también fue el único año donde existieron mayor cantidad de hechos complejos con ejercicio de la violencia aunque, según las fuentes, casi siempre se trató de una respuesta a las embestidas policiales.

Retornando al hilo diacrónico, durante el 14 de mayo sesionó una asamblea estudiantil en la Catedral de Resistencia, a la que adhirieron cientos de profesores de la UNNE. Las puertas del templo fueron cerradas para proteger a los estudiantes.13 Al otro día, los alumnos marcharon desde la CGT de Corrientes hacia el rectorado y luego por el centro de la ciudad, reiterándose los choques violentos con la policía. Por la tarde 200 activistas fueron interceptados por un camión repleto de soldados. Estos dispararon e hirieron a Juan José Cabral, estudiante de Medicina y miembro de la FUNNE, quien murió poco después. Su internación y su cadáver fueron objeto de lucha. Aunque un estudiante integralista presenció la autopsia, se concentraron 500 jóvenes en la puerta del sanatorio. Cuando dos policías intentaron retirar el cuerpo de Cabral, su acción que fue abortada por los estudiantes. Por la noche la policía allanó domicilios y golpeó a los jóvenes del Pensionado Católico.14

Según los recuerdos de Luis Ortolani, por aquel entonces cronista de Norte, en los días previos a estos hechos muchos dirigentes evaluaban que la movilización se iba agotando mientras crecía la presión de las bases para volver a clases.15 Sin embargo, el asesinato de Cabral en el contexto de un proceso de movilización social llevó a coaligar momentáneamente a la mayoría de la población contra el gobierno. El análisis de los comunicados de aquellos días muestra la amplitud y diversidad del apoyo hacia los estudiantes: sindicatos, asociaciones profesionales y/o empresariales, instituciones educativas y deportivas, partidos políticos, colectivos barriales, etc. (Zarrabeitia, 2003: 74 y 88).

Con la noticia del deceso de Cabral, la FUA y la CGT de Corrientes convocaron a un paro. El 16 el ausentismo en la UNNE fue total y comenzaron las manifestaciones estudiantiles en todo el país. Los estudiantes y los trabajadores ganaron las calles para comunicar las medidas de lucha. Durante la tarde una columna de varios miles de personas partió desde la CGT correntina, “hubo un desprendimiento de importantes sectores de la sociedad conservadora de Corrientes, que se mezcló […] con el pueblo en la calle, en el reclamo.” (Zarrabeitia, 2003: 85).

En Paso de los Libres, su localidad natal, el féretro de Cabral fue acompañado por diez cuadras de público. Paralelamente, en Resistencia, 4.000 personas concurrieron a una concentración organizada por religiosos de varios credos, encabezada por el Obispo de Resistencia, Monseñor Marozzi. Posteriormente, muchos de los presentes marcharon hacia la CGT siendo atacados por la policía, que efectuó detenciones. Luego de las escaramuzas, unos 1.000 manifestantes se dirigieron hacia la Catedral donde funcionaba una olla popular. El comercio se solidarizó con los estudiantes bajando sus persianas y apagando las luces.16

Ante la magnitud de los acontecimientos, el gobierno cerró las universidades en todo el país. Comenzaba una crisis política nacional. La rigidez institucional, en términos de Alain Touraine, practicada por la dictadura de Onganía propició la conformación de una amplia y heterogénea oposición y su expresión en canales ajenos a la institucionalidad. El Integralismo denunció el cierre como una maniobra para “desinflar la lucha” y llamó a organizar la resistencia desde cursos paralelos a los oficiales en la CGT.17 Durante los días siguientes, en Rosario, Tucumán y Córdoba las protestas estudiantiles se empalmaron con la movilización obrera (Millán, 2013: 140/61).

En la UNNE se suspendieron las clases por tiempo indefinido. La respuesta estudiantil fueron al menos 22 acciones de colectivas entre el 18 y el 25 de mayo. Asimismo, existía una intensa puja por la conciencia popular: los monolitos y los actos en memoria de Cabral se instalaban y sucedían uno tras otro, después de cada represión policial. Para los sectores movilizados, se trataba de un símbolo del antagonismo entre el régimen militar y el pueblo (Jacoby, 1978: A-19/A-20). Poco después doscientos veinte profesores de la UNNE enviaron un telegrama a Onganía reclamando la renuncia del rector y vice, el secretario Académico y de Asuntos Sociales. Los decanos de Ciencias Económicas y Humanidades también opinaron que la renuncia del rector podía “pacificar los ánimos”.18 Poco después, el asesor letrado de la UNNE, Dr. Figueredo Antequeda, renunció por “discrepancias con la conducción de la universidad”.19

El día 21 de mayo, jornada histórica por los hechos de masas en Rosario, fue la huelga nacional de FUA. En el Nordeste hubo actos relámpago durante toda la jornada. La Coordinadora de Resistencia afirmaba: “El movimiento no terminará al renunciar Walker, sino en la liberación nacional”,20 evidenciando una notoria politización en los objetivos estudiantiles. Días después la CGT decretó un paro general apoyado por el movimiento estudiantil. El día 25 de mayo, en Corrientes, el Integralismo realizó un acto por la fecha patria y en repudio a la represión. Los estudiantes resistieron los embates policiales con piedras hasta la noche, cuando encendieron varias fogatas para neutralizar los gases lacrimógenos.21 En Resistencia no se pudo oficiar el tedeum porque los sacerdotes se excusaron de presentarse en la Catedral, en repudio por lo ocurrido en Rosario y Corrientes.22

Como vemos, la revuelta estudiantil y popular llamada Correntinazo motivó manifestaciones de los alumnos en numerosas ciudades y constituyó un antecedente inmediato del primer Rosariazo y del Cordobazo (Bonavena et al., 1998; Balvé y Balvé, 2005). Numerosos analistas contemporáneos consideraron estos levantamientos como indicadores de un proceso revolucionario en curso (De Riz, 2000). Onganía buscó descomprimir la situación política renovando el gabinete e iniciando el llamado “tiempo social” de la “Revolución Argentina” (O´Donnell, 2009; De Riz, 2000). Desde entonces existió una controversia oficial sobre cómo actuar frente al movimiento estudiantil. El sector encabezado por el titular de la cartera del Interior, Francisco Imaz, planteaba endurecer la represión.23 Otros, como el ministro de Educación Dardo Pérez Ghillou, proponían un giro “dialoguista” para las demandas académico-corporativas, sin excluir el uso de la violencia.24

En Corrientes y Resistencia las movilizaciones persistieron hasta mediados de junio, cada vez menos numerosas e intensas. Cuando renunció el rector Carlos Walker se abrió un compás de espera con la designación de Ernesto Maeder. Se iniciaba una nueva etapa en la UNNE y una transformación sustancial de las movilizaciones estudiantiles, bajo las premisas sentadas desde el nuevo Ministerio.

La normalización institucional en la UNNE, junio de 1969 – abril de 1971

a) La era de Ernesto Maeder

En una de sus primeras intervenciones, el nuevo rector afirmó que las causas de la crisis fueron la conversión de lo provisorio en permanente y la aplicación de la legislación universitaria sólo en los puntos conflictivos. Aseveraba que organizaría concursos y cuerpos de gobierno; y pugnaría por restablecer el diálogo y la confianza en la UNNE.25 Fue recibido con relativa expectación por el arco estudiantil socialcristiano, AUN26 y Región, revista vinculada a Norte.27 Asistieron a su nombramiento el ministro Pérez Guilhou, autoridades militares y eclesiásticas y el Integralismo, que colgó una bandera con los rostros de Perón e Yrigoyen.28 A su vez, antes de concluir el acto explotaron dos bombas de estruendo.29

La UNNE comenzaba su institucionalización. Reabrieron los comedores con precios anteriores al conflicto.30 Fue creada una comisión de concursos para regularizar los profesores.31 El Consejo Asesor Universitario relevó los planes estudios, eliminó aranceles por aplazo y estableció fechas y procedimientos para los concursos.32 En varias facultades, como Arquitectura o Ingeniería, se formaron comisiones para modificar y controlar planes de estudios. La participación estudiantil fue objeto de controversias: mientras FAUDI, y el Movimiento de Orientación Reformista (MOR, ligado al PCA) se negaban, AUN la propiciaba y el Integralismo tenía posturas dispares.33

La reorganización universitaria fue sacudida brevemente durante junio por las violentas movilizaciones contra la visita de Rockefeller al país. Las manifestaciones contra símbolos del poder norteamericano, típicas de los sesenta a nivel global, volvieron a unificar a reformistas y socialcristianos, como durante mayo.34 Tras estos hechos se implantó el estado de sitio y fue detenido el presidente de FUNNE y militante de FAUDI Julio Gervasoni.35 El ministro del Interior Francisco Imaz denunció la existencia de un “plan subversivo continental”, donde incluyó a estudiantes, religiosos y obreros.36 Estas declaraciones generaron una extensa polémica.37

El ciclo de movilizaciones recomenzó en agosto, cuando los estudiantes de Odontología ocuparon su edificio, reclamando un inmueble adecuado para su formación y la destitución del Director, quien había apoyado a Walker durante mayo.38 Los alumnos lograron ambos objetivos. Semanas después, todo el activismo universitario realizó numerosas acciones de refuerzo de la huelga de la CGT.39 Estas prácticas epilogaban la alianza de mayo, aunque ya no era la central obrera apoyando a los estudiantes, sino éstos apuntalando al gremialismo.

Como ocurría anualmente, durante septiembre hubo actividades por el aniversario del asesinato de Pampillón. Estos eventos también permitieron la confluencia del reformismo y del socialcristianismo/peronismo. Los Integralistas convocaron a una “Semana de los mártires populares”;40 mientras que FUA realizó un paro de gran acatamiento.41 Este breve ciclo de movilización empalmó días después con el Rosariazo y la huelga nacional de la CGT, cuando estudiantes de distintas tendencias recorrieron la UNNE cantando consignas, realizando asambleas y organizando un paro solidario.42

Luego de estos hechos el movimiento ingresó en un reflujo hasta 1970, cuando se profundizaron las medidas para la “normalización” de la UNNE, comenzando por las pruebas de admisión, que despertaron grandes conflictos en otros puntos del país, como en Córdoba (Bonavena y Millán, 2010), y enfrentamientos relativamente menores en esta región.

Durante enero la Agrupación Reformista de Derecho dictaba un curso paralelo, con la colaboración de algunos docentes.43 Era una táctica usual entre las agrupaciones del PCA (Millán, 2013: 125). En febrero se sucedieron posicionamientos44 y según AUN, ya opositora a Maeder,45 a principios de marzo la resistencia se concentró en Ingeniería,46 Económicas, Odontología y Arquitectura. FUA decretó un paro estudiantil de 36 hs., llamando a la unidad con los sectores populares y a la formación de un frente docente–estudiantil.47

Semanas después, la lucha cobró intensidad cuando 250 estudiantes conducidos por FAUDI, mayormente de Medicina, ocuparon el rectorado.48 Las autoridades apelaron al diálogo. Los estudiantes reclamaban eliminar el examen de ingreso, como en Agronomía y Veterinaria, donde una manifestación desembocó en una reunión con el vicerrector, quien suprimió la prueba.49 Según AUN, crítica de la acción, “Maeder había concedido, debido a la presión estudiantil, entregar la libreta universitaria a todos los estudiantes, con lo cual el 100 por ciento de los estudiantes de Resistencia y Corrientes entraban a la Universidad”.50

Casi en simultáneo la FUA iniciaba una campaña de reuniones públicas contra los “Consejos Académicos”, los órganos directivos de la dictadura para las Facultades y Departamentos.51 El problema del gobierno de las casas de estudios, cuestión cardinal de la reorganización universitaria, no despertaba el mismo interés fuera del reformismo. No obstante, la asamblea de Ingeniería Civil, con fuerte presencia del Integralismo, rechazaba el nuevo Plan de Estudios y pugnaba por una comisión de control estudiantil reconocida por las autoridades.52 Este tipo de intervenciones se inscribían en el mencionado debate del movimiento estudiantil respecto del “participacionismo”.53

Hacia fines de abril del ‘70, cuando se cumplió un paro nacional estudiantil, las tenencias de la UNNE habían desarrollado una política unitaria.54 En mayo, para el primer aniversario del asesinato de Cabral, resultó diferente. FUA lanzó un plan de lucha desde el día 15.55 La asamblea del Integralismo, con más de 400 estudiantes en el aula magna, votó iniciar un movimiento: “Mayo: mes de reafirmación de las luchas populares”, contra el participacionismo, la represión y el homenaje del gobierno a Cabral.56 Finalizada la asamblea, una gruesa columna salió de la Universidad y chocó con la policía.57

Durante aquel día se produjeron incidentes estudiantiles en numerosas ciudades.58 En la Catedral de Resistencia se concentraron alrededor de 130 jóvenes, que se desplazaron hacia la zona comercial, donde improvisaron varios actos relámpago que fueron reprimidos con garrotes y ácido sulfúrico.59 Durante el día siguiente hubo paro, una asamblea y una nueva manifestación con violentos enfrentamientos.60 En Corrientes cerraron los comercios y las calles estaban desiertas. Al comenzar el acto de homenaje en el aula magna de Medicina, los 300 estudiantes que asistieron podían notar las diferencias entre reformistas y católicos. El Integralismo propuso dirigirse hacia la CGT, mientras que los reformistas se negaban a realizar un acto diferente del que ya estaba organizado.

FUA–FUNNE se dirigieron a la Plaza Cabral, donde se concentraron numerosos alumnos. Cerró el acto el secretario general de la FUA Juan Carlos Fuentes, quien señaló que el movimiento estudiantil había aprendido que el lenguaje de la dictadura era el de la violencia y había sabido responder, una evidencia de que el reformismo también era parte del clima de radicalización. Posteriormente, 2.000 estudiantes iniciaron una ruidosa marcha hacia la casa de Gobierno provincial. Gritaron “¡Asesinos!” a los policías y se detuvieron frente al Rectorado, donde un alumno arengó: “la represión tiene dos caras, la casa Rosada y el Rectorado”. Los jóvenes profirieron una larga silbatina y continuaron su marcha.61

En la CGT se realizó otro acto, sin dirigentes de la central. Galeano, de la UOM, señaló como una “vergüenza la ausencia de dirigentes gremiales en el acto, ya que Cabral es un mártir del pueblo”. Soto, un dirigente peronista, acusó al gobierno de la entrega del país y el integralista Hugo Garnero concluyó fustigando a la “izquierda cipaya” del reformismo.62

Como podemos ver existía una división en el movimiento estudiantil nordestino. Según Norte, el rectorado operaba sobre la escisión con su política de becas.63 Recordamos, en este sentido, que el bloque peronista decidió sus acciones en el Aula Magna de Resistencia y luego no se movilizó contra la sede del gobierno universitario.

b) El nuevo gobierno y las nuevas autoridades

Durante el invierno de 1970 Onganía fue derrocado por la junta militar y reemplazado por el general Roberto Levingston, quien ensayó una breve reorientación hacia cierto nacionalismo (O’ Donnell, 2009: 264). Pese a ello, prosiguió la “normalización” de la UNNE. La Coordinadora de Agrupaciones Reformistas (CAR), ligada al PCA, denunció el golpe de Estado como una maniobra, reclamó la “anulación de la ley universitaria; cogobierno y autonomía” y señaló que la ausencia de representación estudiantil permitía prácticas corruptas.64

Los problemas de composición del gobierno y de la participación estudiantil fueron primordiales y estos grupos cobraron importancia sobre el Integralismo, que posponía estos asuntos hasta la llegada de un gobierno popular. Se trata de una paradoja, porque la politización, la preocupación por los grandes temas nacionales, parecía restar capacidad de intervención en el terreno universitario. Como puede notarse en el cuadro nº 5, a partir de 1970 las acciones protagonizadas en exclusividad por el reformismo comenzaron a superar las llevadas adelante por los grupos socialcristianos, desequilibrando el balance de las acciones en su favor para el período de la autoproclamada “Revolución Argentina”.

Cuadro nº 5. Acciones estudiantiles según protagonista en Corrientes y Resistencia, julio 1966 – mayo 1973

Año

Cristianos

Reformistas

Ambos/s.datos

Otros

Total

1966

15

7

10

2

34

1967

1

1

1

0

3

1968

3

0

7

0

10

1969

17

10

115

27

169

1970

9

23

24

12

60

1971

6

28

73

25

122

1972

0

6

15

1

22

1973

10

10

10

3

33

Total

61

85

255

70

453

Fuente: Elaboración Propia. El Territorio, Norte, Litoral y BDB.

A su vez, durante julio las elecciones para los Consejos Académicos ratificaron a las autoridades. Sin embargo, profesores y decanos discrepaban con la ley universitaria65 y el MOR se pronunciaba contra los Consejos Académicos y convocaba a la organización conjunta de profesores y estudiantes.66 Días después se realizó un “Juicio a la ley universitaria”. Numerosos profesores criticaron la “normalización” y clamaron por reformar la ley.67

En Humanidades la lucha académico-corporativa contra los nuevos planes de estudio del decano Hand propició alianzas con los docentes y la constitución de comisiones mixtas de evaluación y elaboración de programas que consiguieron reconocimiento oficial.68 Se obtuvieron algunas demandas, pero sobre todo se re-inauguraron prácticas democráticas y de cogobierno.

Sin embargo esta experiencia era extemporánea. A comienzos de septiembre se produjo la renuncia de los decanos y los rectores de todo el país. Maeder cumplió a medias: se conformaron los Consejos Académicos y dejó el cargo casi en agosto de 1970, como sostuvo en 1969,69 pero los cambios respondieron a designaciones del Poder Ejecutivo Nacional. Hubo una fuerte reacción estudiantil.70 En el Nordeste la asamblea con centenares de alumnos repudió a las nuevas autoridades y convocó para un homenaje a Pampillón el día 12.71

La asunción del nuevo rector Gómez Vara no fue pacífica. Mientras hablaba el ministro Cantini varios jóvenes arrojaron volantes y explotó una bomba de estruendo. No obstante, el funcionario expresó su confianza en la colaboración estudiantil, más allá de algunos núcleos “que lindan con lo subversivo”.72

Para el movimiento estudiantil argentino, las postrimerías de 1970 estuvieron signadas por la división de la FUA: una fracción dirigida por el PCA realizó su congreso en La Plata (FUA La Plata) y otra, donde se encontraban el FAUDI, AUN, el Movimiento Nacional Reformista (MNR) y Franja Morada, llevó a cabo su reunión en Córdoba. En un primer momento se impuso FAUDI, al año siguiente una coalición entre el MNR y Franja Morada.

En 1971, como durante el año anterior, el gobierno implementó exámenes de admisión que despertaron una vasta resistencia.73 FUA La Plata organizó reuniones en varias ciudades y señalaba que la educación se había estancado por su entrega a los intereses oligárquicos e imperialistas, la destrucción de la autonomía y el co-cogobierno, las sanciones a los profesores y estudiantes y la nueva ley universitaria.74

En la UNNE esta pugna no cobró la radicalidad y violencia de Rosario, donde hubo repetidas acciones de luchas de calles y tomas de edificios (Millán, 2017: 152). Sin embargo, en las disputas nordestinas se observa la convergencia entre católicos y reformistas y su empalme con otros conflictos, como los reclamos del Centro de Estudiantes de Ingeniería por un turno de examen adicional.75 Los alumnos de Medicina, apoyados por la CAR, el Centro de Estudiantes y el cuerpo de delegados, tomaron la facultad76 y consiguieron que el Consejo Académico anulase las pruebas de ingreso.77 El saldo fue que “… la política de ingreso a la universidad, obligada por las circunstancias, se había tornado más laxa. La matrícula entre 1970 y 1973 se duplicó...” (Maeder, 2007: 149). Poco después, el rector Gómez Vara y los decanos solicitaron una nueva legislación elaborada por el Consejo de Rectores, un organigrama general que permitiera a cada Universidad adecuarse dentro de sus posibilidades, respetando la autonomía.

Vale la pena recordar aquí tres datos de los cuadros nº 1, nº 2 y nº 3. El año de 1971 es el único del período que puede compararse, respecto a cantidad de acciones estudiantiles, con 1969, aunque claramente no tuvieron la intensidad ni la violencia de las ocurridas en mayo. Asimismo, en 1970, y más fuertemente en 1971, las facultades fueron el escenario casi exclusivo de la acción de lucha estudiantil, y las demandas por cuestiones académicas, de ingreso irrestricto y contra la política universitaria hegemonizaron las motivaciones para el conflicto universitario.

Hacia marzo de 1971 el contexto nacional, signado por el segundo Cordobazo o “Viborazo”, era crítico. El movimiento estudiantil nordestino llevaba adelante acciones pacíficas79 y no se constituyó como protagonista principal de la conflictiva coyuntura política regional, limitándose a ofrecer apoyo para las movilizaciones docentes80 y no docentes.81 Para fines de mes el general Alejandro Lanusse asumió el gobierno por medio de un nuevo golpe de Estado. En el Nordeste continuaba la lucha docente,82 con apoyo estudiantil y de algunos profesores de Humanidades, como Rubén Dri.83 El nuevo gobierno fue recibido en la UNNE por una asamblea de 400 participantes, quienes marcharon por las facultades y quemaron un muñeco que representaba a Levingston.84

Sin embargo, las fuerzas estudiantiles y populares enfrentaban nuevos retos, como los panfletos y pintadas contra las organizaciones gremiales, políticas, estudiantiles o hacia dirigentes o militantes.85 Podemos conjeturar una intensa puja por la conducción de una alianza anti–dictatorial, una fractura como la de mayo de 1970; o la instalación de consignas contrarrevolucionarias que prepararon el terreno para ejercer la violencia sobre las fracciones movilizadas en el marco de la emergencia de las prácticas represivas de carácter ilegal, preventivas y localizadas contra los estudiantes durante el GAN (Califa y Millán, 2016: 16/9).

El movimiento estudiantil de Corrientes y Resistencia bajo el GAN

Durante su presidencia, Lanusse impulsó un Gran Acuerdo Nacional (GAN) con los principales partidos políticos, estableció la ley 19.081 de “represión al terrorismo” y pugnó por una salida electoral que aislara a los grupos insurgentes, legalizando “…a la izquierda no insurreccional […] pretendía que […], la juventud canalizara su actividad en los partidos.” (Amézola, 1999: 75) encauzando hacia ellos parte de la insatisfacción de amplias capas de la población (Bonavena, et. al., 1998: 97/8).

En la Universidad, esta política fue aplicada por el ministro de Educación Gustavo Malek. Proponía una democratización, dotar de flexibilidad institucional a las casas de estudio y desconcentrar la matrícula. (Mendonça, 2014: 177 - 182). Durante el GAN el movimiento estudiantil del Nordeste continuó abocado a los reclamos académico-corporativos, pero con una violenta novedad: la aparición en la escena universitaria de grupos para-policiales.

a) Del conflicto en las facultades a la política regional

El otoño de 1971 se caracterizó por el conflicto corporativo en las distintas facultades. A principios de abril no hubo actividad docente en Medicina. En repudio, los estudiantes ocuparon el Rectorado y se reunieron con el secretario Académico y el de Asuntos Sociales.86 En este marco se sucedían protestas por las reprobaciones masivas y los planes de estudio en Arquitectura,87 contra el ingreso en Derecho,88 paros en Humanidades89 e Ingeniería90 y la toma de Ciencias Económicas en reclamo de un turno de examen.91

En aquella Facultad los alumnos dirigidos por el Centro de Estudiantes y el Integralismo ocuparon el edificio y demandaron la renuncia del decano. Los profesores suspendieron las lecciones y denunciaron la violencia estudiantil.92 El Centro de Estudiantes responsabilizó a las autoridades y convocó al diálogo reformista entre los claustros.93 Tras las conversaciones se reanudaron las clases y renunciaron los miembros del Consejo Académico y el decano. Cientos de estudiantes formaron una asamblea, donde propusieron que la comisión estudiantil se reuniera con los docentes para designar nuevas autoridades. El Integralismo señaló que no existían condiciones para dirigir la Facultad, puesto que los problemas universitarios serían remediados cuando un gobierno popular resolviese los del pueblo.94

Al mismo tiempo, en Chaco se tensaba la situación política. Desde comienzos de mayo las organizaciones de trabajadores y pequeños productores rurales eran reprimidas violentamente.95 Los estatales realizaron una marcha y ocuparon varios edificios. El movimiento estudiantil reconstituyó su unidad apoyando estas movilizaciones y convocando, en una conferencia de prensa en la CGT, para un acto obrero estudiantil y popular en homenaje a Cabral.96

El 15 se llevó a cabo una manifestación en la plaza Cabral de Corrientes. Hablaron más de 20 voceros de FUNNE, FUA, Ligas Agrarias, 62 organizaciones, Sacerdotes del Tercer Mundo, Unión del Personal Civil Provincial (UPCP), Encuentro Nacional de los Argentinos (ENA), Movimiento de Unidad y Coordinación Sindical (MUCS), Juventud Peronista, Partido Socialista de la Izquierda Nacional (PSIN) y nueve agrupaciones de la UNNE. Todos repudiaron la dictadura, apoyaron las luchas en curso y reclamaron la libertad de los detenidos del ERP y Montoneros en Resistencia. Sin embargo, podían distinguirse los discursos que propugnaban la insurrección, enarbolados por FAUDI o la Tendencia Universitaria Popular Antiimperialista y Combativa (TUPAC), de aquellos que exigían el retorno de Perón, pronunciados por el Integralismo.97

Al día siguiente se llevó a cabo un homenaje estudiantil–popular a los guerrilleros del ERP y Montoneros.98 Días después, la CGT declaró persona no grata al gobernador Basail, al tiempo que realizaba un paro activo y un acto en el centro de Resistencia.99 Poco después fue reemplazado por el Coronel Mazza.100

Durante las semanas posteriores, los estudiantes de Humanidades reclamaron planes de estudio regionales y la renuncia del decano;101 mientras que en Económicas se llevaban a cabo elecciones del Centro de Estudiantes, en las cuales triunfó el MOR.102

b) El movimiento estudiantil frente a los ataques armados

Tras un prolongado silencio, a principios de septiembre el movimiento estudiantil tuvo que enfrentar el ataque de un grupo paramilitar de derecha. No fue un caso aislado. Meses después, en una operación similar la Concentración Nacional Universitaria (CNU) asesinó a Silvia Filler, alumna de Arquitectura en Mar del Plata (Díaz, 2010: 93). Como destacaron Califa y Millán, se trataba de una forma recurrente de represión bajo el GAN (2016: 16/9).

Hacia fines de agosto algunos estudiantes ingresaron con armas de fuego al comedor universitario y borraron consignas de los muros. La militancia reformista e izquierdista capturó a dos protagonistas de aquellas acciones y les realizó un “juicio popular” en Agronomía y Veterinaria. La querella terminó abruptamente con la llegada de dos grupos. Primero un contingente de individuos se presentó como mediador. Luego, ocho personas armadas se bajaron de dos automóviles, se apostaron en las alturas del edificio y desenfundaron armas largas y ametralladoras. En pocos minutos destrozaron las ventanas y las paredes. En medio de la confusión de las 400 personas que participaban del juicio, los supuestos mediadores tomaron de los brazos a los acusados y se fugaron. Pronto se supo de la vinculación de algunos profesionales correntinos: se autodenominaban Comando Revolucionario Anticomunista “nacionalista, peronista y heredero de Tacuara”.103 Estos hechos motivaron manifestaciones y luchas callejeras durante varios días, contándose numerosas detenciones.104 La Facultad permaneció cerrada todo el mes y a principios de octubre renunciaron sus autoridades.105

Casi como una prolongación de esta crisis, durante el décimo mes de 1971 se sucedieron otros juicios en Medicina y Derecho. En estos casos, algunos profesores fueron condenados por “limitacionistas” y “reaccionarios”.106 En Derecho los alumnos tomaron el edificio.107 En Medicina las protestas motivaron la renuncia del decano Dr. Atilio Báez Ponce.108

c) Desde el comienzo de 1972 hasta la “primavera camporista”

El año de 1972 despuntó con una importante movilización en respuesta a la duplicación del precio del comedor universitario. Los alumnos realizaron varias manifestaciones, ocuparon el local109 y lo hicieron funcionar bajo su control. El rector suspendió la entrega de víveres110 y el movimiento respondió en las calles. Durante la última semana de febrero, los alumnos se movilizaron portando utensilios de cocina y montando ollas populares.111 En Resistencia, además, los jóvenes mudaron los muebles del viejo comedor al que iba a ser el nuevo local y lo inauguraron.112

Estas luchas empalmaron con las de Agronomía y Veterinaria y Medicina, conducidas por FAUDI en pos del ingreso irrestricto.113 En el primer caso los alumnos ocuparon su Facultad, en el segundo se produjeron hechos de violencia dentro del edificio.114 El decano de Agronomía Jorge A. Rodríguez renunció, y el rector suspendió las clases durante varias semanas en toda la UNNE.115

Posteriormente el movimiento ingresó en un reflujo de varios meses, en un escenario de caracterizado por la efectividad de las tácticas represivas preventivas (Califa y Millán, 2016). En abril, ante el anuncio de una marcha la policía encarceló a toda la dirigencia estudiantil.116 Un mes después, durante el aniversario del Cordobazo, los estudiantes que tomaron la Facultad de Derecho fueron desalojados en minutos.117 En junio volvieron a ocuparla en repudio al atentado sufrido por el profesor Rubén Yunes a manos de un grupo derechista.118 Semanas después, durante el Quintazo tucumano, no hubo actividades de lucha en la vía pública debido a la fuerte presencia policial.119 Una situación similar se vivió en ocasión de la masacre de Trelew. En ambos casos, el retraimiento del movimiento estudiantil nordestino contrastaba con el de otras ciudades (Bonavena, 2011). En este contexto, las elecciones de Centros de Estudiantes arrojaron sendas victorias para el MOR, seguido de cerca por FAUDI y, ya más lejos, por Franja Morada.120A fines de 1972 la FUNNE se integró en la FUA La Plata,121 en sintonía con el crecimiento del PCA observable en Buenos Aires (Califa, 2016: 13). El Integralismo, por su parte, participaba del Congreso Nacional de Estudiantes Peronistas.122

La relativa pasividad estudiantil se extendió hasta comienzos de mayo de 1973.123 Semanas antes de la asunción de Héctor Cámpora continuaban los apremios ilegales y las acciones paramilitares de ultraderecha, como el ataque contra el Centro de Estudiantes de Agronomía y Veterinaria,124 o hacia el presidente del centro de estudiantes de Derecho, Jorge Bencherit Riera.125 En aquella facultad el Frente Estudiantil Universitario (FEU) denunciaba las acciones armadas contra militantes y docentes críticos y reclamaba que el Dr. Porta fuera separado de su cargo como educador, puesto que como magistrado validaba los abusos policiales. Tras varias jornadas de movilización, el Consejo Académico relevó al docente.126

Días después se presentó la Juventud Peronista (JP) de Resistencia y convocó a las mesas para la reconstrucción nacional.127 Este anuncio puede indicar el grado de acumulación de estos sectores y su íntima relación con el poder estatal. Los jóvenes peronistas nordestinos no conformaron una organización única (o no lo hicieron público) hasta que llegaron al gobierno. No obstante, para mediados de mayo existía un tenso clima político. Durante el cuarto aniversario del asesinato de Cabral, las autoridades de la UNNE declararon un asueto.128 En Corrientes se llevó a cabo un acto de conmemoración que concluyó con un asalto policial y varias detenciones.129

Una semana después, en la víspera de la asunción del nuevo gobierno, los no docentes declararon un paro y ocuparon la UNNE. Los estudiantes apoyaron la huelga y reclamaron el control del comedor universitario. Como los trabajadores no aceptaban esa demanda, ocurrieron varios enfrentamientos verbales.130 Días más tarde los no docentes levantaron la medida y exigieron la renuncia de las autoridades.131 La “Revolución Argentina” concluyó el 25 de mayo de 1973, con la llegada de Héctor Cámpora a la Presidencia. En la UNNE y en el país comenzaba otra etapa.

Conclusiones

El movimiento estudiantil nordestino protagonizó cientos de enfrentamientos durante la autoproclamada “Revolución Argentina”. Como hemos visto en la descripción cualitativa y en los cuadros estadísticos, después de las derrotas de 1966, siguió un retraimiento notorio durante 1967 y una tenue reactivación en 1968. Sin lugar a dudas 1969 se presenta como el año excepcional, tanto por la cantidad de acciones estudiantiles, por el escenario público, el uso de la violencia material y la participación de los principales aliados del movimiento: los católicos tercermundistas y los trabajadores. Como puede verse en el cuadro n° 6, la acción con estos grupos creció enormemente. Sin embargo, los datos ofrecen una perspectiva diferente a las presentadas por Román (2010 y 2011) o Millán (2013), porque aparece un aliado poco tenido en cuenta, que produjo gran cantidad de hechos y cobró importancia creciente durante 1970 y 1971: los profesores y otros grupos profesionales.

Cuadro n° 6. Acciones de y con aliados del movimiento estudiantil en Corrientes y Resistencia, julio 1966 – mayo 1973

Año

Religiosos

Obreros

Profesores y profesionales

Otros

Total

1966

6

1

2

5

14

1967

0

0

0

0

0

1968

2

3

0

0

5

1969

12

20

19

16

67

1970

2

2

7

6

17

1971

2

3

26

5

37

1972

1

1

1

1

4

1973

1

1

1

1

4

Total

26

31

56

34

148

Fuente: Elaboración propia. El Territorio, Norte, Litoral y BDB.

Resulta comprensible, puesto que las principales demandas estudiantiles fueron académico-corporativas, en un terreno signado por la “normalización” de la UNNE. Las prácticas generalmente fueron pacíficas y acotadas a la universidad. Los alumnos tomaron edificios y/o se manifestaron por las calles en contadas ocasiones. Como se observa en el cuadro n° 4, las acciones violentas descendieron drásticamente después de 1969.

Sin embargo, a partir del GAN la violencia política regresó al ámbito universitario gracias a los ataques parapoliciales. Consideramos un error conjugar los hechos de Agronomía con la acción directa estudiantil, como ocurre en una importante obra sobre a UNNE (Maeder, 2007: 149). En el afán de ilustrar el clima de violencia, no describir los diferentes objetivos políticos y métodos de acción contribuye a la confusión. Asimismo, como observamos con los datos estadísticos, y a despecho de los recuerdos y opiniones de los contemporáneos, el clima no era exactamente de violencia, sino de movilización universitaria. Hubo muchísimo más activismo estudiantil en 1970 que en 1968 y un abismo separa las realidades de 1967 y 1971. Existieron grupos maoístas, comunistas, peronistas revolucionarios y demás. Pero hay que ser riguroso con los datos que demuestran la gran distancia entre las declaraciones ideológicas y acción estudiantil durante este período.

Por otra parte, en nuestro análisis de las prácticas del movimiento estudiantil nordestino demostramos que ciertas tesis interpretativas, pensadas a partir de la experiencia de Buenos Aires (y sin tomar en cuenta los enfrentamientos) pueden requerir una revisión. La conjetura de Sarlo (2003: 102/3) acerca del abandono de las cuestiones específicamente universitarias, o la aproximación de Sigal respecto de una crisis del reformismo (1991: 71), son puestas en tela de juicio por las pugnas descriptas y el crecimiento de los reformistas en la UNNE durante el GAN.

En cuanto a las ideas de Portantiero (1978: 14/5), aquí demostramos la importancia de las luchas por el ingreso irrestricto. Si las titulaciones estaban devaluadas, ¿por qué tanto empeño en acceder a la Universidad? El proceso social donde el movimiento estudiantil nordestino fue perdiendo radicalidad, como el cordobés después de 1971 (Millán, 2013), no se caracterizó por una mejora sustancial en el mercado de mano de obra calificada, sino por la relajación del dirigismo estatal y la creciente flexibilidad institucional (Touraine 1969: 127/8). Por estas razones entendemos que los conceptos de Portantiero, al igual que los de Sigal o Sarlo, sugerentes para el largo plazo, no siempre tienen capacidad descriptiva de las formas que asumieron las movilizaciones estudiantiles concretas.

Finalmente, tanto la importancia de los grupos socialcristianos y peronistas en el movimiento estudiantil de la UNNE, como nuestra observación de sus posiciones y prácticas, pueden conducirnos a un diálogo con quienes sostienen una estrecha asociación entre peronización y radicalización (Barletta, 2001: 83; Suásnabar, 2004: 82/8). Los justicialistas apoyaron en 1969 la política de institucionalización. AUN promovió participar de las instituciones de la dictadura y el Integralismo osciló entre declaraciones contra el participacionismo y conductas deliberativas con las autoridades. En contrapartida, el MOR y el FAUDI presentaron perspectivas más homogéneas y sólo intervinieron en las instancias creadas por procesos de lucha, como en Humanidades y Económicas.

En resumen, el caso nordestino presenta caracteres que pueden constituir un desafío para las tesis interpretativas más extendidas acerca del movimiento estudiantil argentino de los ’70. Confiamos en que futuras síntesis generales serán más precisas si incorporan estos elementos.

Notas

1 La reconstrucción de los enfrentamientos está hecha en base a prensa local (diarios Norte, el que publicaba más información sobre nuestro tema, y El Territorio de Resistencia y Litoral de Corrientes); una base de datos de más 20 diarios del país, de probada fiabilidad, validez y representatividad, que cuenta con más de 10.000 hechos de lucha estudiantil entre 1966 y 1976 [Bonavena, Pablo (1990/2), Las luchas estudiantiles en Argentina 1966/1976, Informe de Beca de Perfeccionamiento, Buenos Aires, Secretaría de Ciencia y Técnica de la UBA; de aquí en adelante BDB]; revistas de actualidad política de circulación regional y nacional; las escasas publicaciones militantes disponibles y dos entrevistas en profundidad.

2 BDB, sección julio de 1966, p. 20/1.

3 BDB, sección julio de 1966, p. 35.

4 BDB, sección agosto de 1966, p. 14.

5 BDB, sección julio de 1967, p. 2.

6 Ernesto Maeder, por aquel entonces decano de Humanidades, explicaba que el Ministro Astigueta “…tomaba decisiones sin consultar y la mayoría de las veces equivocadas.” Entrevista realizada por el autor en agosto de 2009.

7 BDB, sección junio de 1968, p. 20.

8 Ver por ejemplo: “UNE ¿tendencia u opción?” (octubre de 1968). Patria Grande, nº 2, p. 11/2.

9 El documento era firmado por UNE, Federación Integralista de Córdoba, Integralismo de Chaco, Integralismo de Santa Fe, Integralismo de Corrientes, La Liga Humanista de Buenos Aires, UEL de Santa Fe, FEN de Córdoba, FEN Santa Fe, FEN Buenos Aires, Mesa Nacional Provisoria del Peronismo Universitario, JUP Rosario; FANDEP de Buenos Aires, FANDEP Córdoba, FANDEP La Plata, FANDEP Chaco, FANDEP Corrientes y FURN de La Plata. En BDB, sección septiembre de 1968, p. 1.

10 BDB, sección septiembre de 1968, p. 6.

11 “Universidad: el incendio y las vísperas”. (1969, 17 de junio-24 de junio), Primera Plana, p. 12.

12 Como señala Rubén Ruiz Cobo, militante de TUPAC de Derecho: “… yo no era militante, pero en la casa que alquilábamos había un muchacho del Ateneo y yo me juntaba con él y bueno, me había ganado a sus posiciones. Lo que pasaba era que no había discutido con otra gente, eso pasaba… hasta el ‘69, porque ahí en las Coordinadoras empecé a escuchar a otros y en poco tiempo me hice militante, pero de la TUPAC.” Entrevista realizada por el autor el 15 de mayo de 2009.

13 BDB, sección mayo de 1969, p. 8.

14 Ortolani, L. op. cit. y BDB, sección mayo de 1969, p. 9.

15 Ortolani, L. (1997). “El sapucai correntino”. En: Política, cultura y sociedad en los ’70, nº 2, Buenos Aires, Cinco Continentes, pp. 26 – 28.

16 BDB, sección mayo de 1969, p. 11.

17 BDB, sección mayo de 1969, p. 12.

18 Ver la solicitada en (1969, 22 de mayo). El Territorio, p. 4.

19 BDB, sección mayo de 1969, p. 65. También en: “Renuncia indeclinable del asesor letrado de la UNNE” (1969, 25 de mayo), El Territorio, p. 11.

20 Ver (1969, 22 de mayo), El Territorio, p. 12.

21 “Numerosos desórdenes estudiantiles ocurrieron en Corrientes. No se efectuó el homenaje a Cabral” (1969, 26 de mayo), El Territorio, p. 5.

22 BDB, sección mayo de 1969, p. 71.

23 “Universidad: ¿nada nuevo bajo el sol?” (1969, 29 de julio-4 de agosto), Primera Plana, p. 12.

24 “Educación: ¿Es marxista el ministro?” (1969, 24-30 de julio), Confirmado, pp. 27-28.

25 (1969, 21 de junio) “Fue designado el nuevo Rector de la UNNE”, Norte, p. 7.

26 Esta agrupación defendía una “Carta Abierta a Maeder” escrita en los días de asunción del nuevo rector (1969, 14 de julio) “Diálogos en la Universidad”, Revista Universitaria, p. 7 [CEDINCI]. No pudimos conseguir el documento al que refiere la nota, pero resulta evidente la existencia de un debate en el movimiento estudiantil respecto del diálogo con las nuevas autoridades, y la posición expectante de AUN.

27 La tapa del nº 1 de Región, aparecida en la segunda mitad de 1969, tenía un retrato del nuevo rector y el título “MAEDER: la revolución esperada”. En páginas centrales una entrevista al funcionario muestra su perfil: historiador y católico, en disidencia con el tercermundismo.

28 (1969, 25 de junio) “Pérez Ghillou prometió la expansión y democratización en la Universidad”, Norte, p. 15; (1969, 26 de junio) “Asistió numeroso público a la ceremonia en que asumió el Rector de la Universidad del Nordeste”, Norte, p. 3. La portada incluye una foto con las banderas.

29 Ibídem.

30 (1969, 6 de julio) “Se reabren mañana los comedores de la UNNE”, Norte, p. 9.

31 (1969, 25 de julio) “UNNE: se creó una comisión para estudiar el régimen de concursos”, Norte, p. 9.

32 (1969, 1 de agosto) “Sesionó el Consejo Asesor Universitario”, Norte, p. 8. El Consejo Asesor Universitario era un órgano consultivo para el rector, integrado por los decanos, el Secretario Académico y de Asuntos Sociales.

33 (1970, 16 de abril) “Ingeniería. En asamblea todos los gatos son pardos”, Revista Universitaria, p. 6; (1970, 14 de mayo) “Ingeniería: plan de estudios”, Revista Universitaria, pp. 3 – 7.

34 (1969, 28 de junio) “Violento final de una manifestación estudiantil. Apalearon a los detenidos”, Norte, p. 1; (1969, 2 de julio) “Represión violenta de una manifestación en Resistencia”, Norte, p. 1; (1969, 2 de julio) “Por la espalda fue herido de gravedad un estudiante”, Norte, p. 2.

35 (1969, 9 de junio) “Julio Rito Gervasoni: reportaje de NORTE a un detenido político”, Norte, p. 15. Sus familiares emitieron un comunicado: (1969, 4 de julio) “Hubo nuevos arrestos en Corrientes y Resistencia”, Norte, p. 14.

36 (1969, 15 de julio) “¿La Iglesia en la subversión”, Norte, p. 11.

37 Entre el 15 y el 18 de julio se publicaron al menos seis notas en Norte.

38 (1969, 8 de agosto) “Fue ocupada la Facultad de Odontología. Entrepiso deteriorado y director ocasionan ira estudiantil”, Norte, p. 5.

39 (1969, 27 de agosto) “Adhieren al paro los estudiantes de la UNNE”, Norte, p. 7.

40 (1969, 7 de septiembre) “Integralismo: conferencia de prensa sobre Pampillón”, Norte, p. 8.

41 (1969, 12 de septiembre) “En la UNNE”, Norte, p. 8.

42 (1969, 18 de septiembre) “Los estudiantes de la UNNE paran en adhesión a obreros”, Norte, p. 8.

43 (1970, 15 de febrero) “Un grupo universitario ante el limitacionismo”, Norte, p. 14.

44 Ibídem; (1970, 18 de febrero) “No al examen de ingreso”, Norte, p. 9.

45 (1970, 5 de marzo) Revista Universitaria, p. 5.

46 (1970, 2 de marzo) “Ingreso en Ingeniería”, Norte, p. 13; “Integralistas. Limitacionismo en la Universidad del Nordeste”, p. 12.

47 (1970, 19 de marzo) “FUA: jornada de lucha en el día de mañana”, Norte, p. 15.

48 (1970, 24 de marzo) “UNNE: ocupan el rectorado”, Norte, p. 1; (1970, 3 de abril) “Toma del rectorado”, Revista Universitaria, p. 3.

49 (1970, 24 de marzo) “UNNE: ocupan el rectorado”, Norte, p. 1.

50 (1970, 3 de abril) “Toma del rectorado”, Revista Universitaria, p. 3.

51 (1970, 9 de abril) “FUA: hay que enfrentar a los Consejos Académicos”, Norte, p. 12/3.

52 (1970, 13 de abril) “Asamblea de estudiantes en Ingeniería”, Norte, p. 13.

53 Al respecto la agrupación nordestina de la cual encontramos mayor cantidad de documentos, AUN, afirmaba que “La política correcta es: por una participación del estudiantado en los problemas universitarios y nacionales. Centros únicos”. (1970, 16 de abril) “Ingeniería. En asamblea todos los gatos son pardos”, Revista Universitaria, p. 6.

54 (1970, 23 de abril) “Asamblea general en la Universidad”, Norte, p. 13.

55 (1970, 5 de mayo) “División en la FUA”, Norte, p. 13.

56 (1970, 8 de mayo) “¿Otro mayo violento?”, Norte, p. 1.

57 Ibídem.

58 En la BDB pueden encontrarse acciones de lucha estudiantil en Buenos Aires, Córdoba, Corrientes, La Plata, Mendoza, Rosario, Salta, San Juan, San Luis, Santa Fe y Tucumán. Se contabilizan al menos 31 barricadas. Sección Mayo 1970, pp. 19 – 26.

59 (1970, 16 de mayo) “De nuevo la violencia. Estudiantes y policías chocaron anoche en Resistencia. Detenidos”, Norte, p. 1.

60 (1970, 17 de mayo) “Manifestación estudiantil en Resistencia. Más detenciones”, Norte, p. 12.

61 (1970, 16 de mayo) “Cabral. Comienza la lucha”, Norte, p. 12.

62 (1970, 18 de mayo) “Una profunda grieta se advierte en el movimiento universitario de Corrientes”, Norte, p. 12.

63 Ibídem.

64 (1970, 15 de junio) “Agrupaciones reformistas y la situación en la UNNE”, Norte, p. 13.

65 Los estudiantes también se oponían: (1970, 19 de julio) “No a la elección de los Consejos Académicos”, Norte, p. 9; (1970, 20 de julio) “Cómo piensan los profesores”, Norte, p. 8; (1970, 26 de julio) “Responden los profesores”, Norte, p. 9; (1970, 28 de julio) “Opina Mario Atilio Gianneschi”, Norte, p. 12; “No se realizó el anunciado debate. Los profesores van hoy a las urnas. Un pedido”, Norte, p. 12; (1970, 29 de julio) “Elecciones en la Universidad”, Norte, p. 12.

66 (1970, 28 de julio) “No se realizó el anunciado debate. Los profesores van hoy a las urnas. Un pedido”, Norte, p. 12; (1970, 18 de agosto) “Los consejos académicos nacieron muertos”, Norte, p. 12

67 (1970, 9 de agosto) “Juicio a la ley universitaria”, Norte, p. 8.

68 (1970, 22 de agosto) “¿Renace la democracia en la UNNE?”, Norte, p. 12.

69 (1969, s/d) “Maeder y la normalización universitaria. Maeder y los curas del Tercer Mundo. Maeder y los movimientos de la juventud”, Región, pp. 12-13.

70 (1970, 11 de septiembre) “Crece la tensión estudiantil”, Norte, p. 1.

71 (1970, 11 de septiembre) “UNNE: mañana acto público”, Norte, p. 1; “El MOR cuestiona en una declaración la designación del nuevo Rector de la UNNE”, Norte, p. 12/3.

72 (1970, 11 de septiembre) “UNNE: Gómez Vara asumió el rectorado”, Norte, p. 12/3.

73 (1971, 14 de febrero) “Jornada de lucha en las universidades: inquietud”, Norte, p. 1.

74 (1971, 18 de febrero) “Que nadie quede afuera de la Universidad…”, Norte, p. 12.

75 (1971, 16 de febrero) “Estudiantes de Ingeniería”, Norte, p. 14.

76 (1971, 18 de febrero) “Tomaron la facultad de Medicina”, Norte, p. 12.

77 (1971, 19 de febrero) “UNNE: se efectuó una manifestación”, Norte, p. 1; (1971, 20 de febrero) “Estudiantes: no al examen de ingreso”, Norte, p. 12; (1971, 23 de febrero) “Asamblea estudiantil contra la limitación”, Norte, p. 15; (1971, 24 de febrero) “Hoy asamblea en la UNNE”, Norte, p. 13; (1971, 25 de febrero) “Ciencias Económicas: derogan examen de ingreso. Resolución”, Norte, p. 12; (1971, 25 de febrero) “No se tomará examen de ingreso. Juicio a la ley universitaria 17.245”, Norte, p. 12

78 “UNNE: piden una nueva ley universitaria”, en Norte n° 902, 25/2/1971, Resistencia, p. 12.

79 Ver por ejemplo las protestas contra las reprobaciones arbitrarias en Contabilidad I: (1971, 12 de marzo) “Asamblea estudiantil”, Norte, p. 12; o los conflictos en Humanidades: “Los estudiantes denuncian maniobras limitacionistas”, Ibídem.

80 (1971, 16 de marzo) “Seguirá la huelga docente a pesar de la intimidación”, Norte, p. 1.

81 (1971, 2 de marzo) “No docentes universitarios en huelga”, Norte, p. 12.

82 (1971, 22 de marzo) “Palos y gases para maestros”, Norte, p. 1.

83 (1971, 16 de marzo) “Estudiantes secundarios apoyan la huelga de sus profesores. Adhiere una comisión femenina”, Norte, p. 12; (1971, 26 de marzo) “Adhesiones”, Norte, p. 13; (1971, 31 de marzo) “Paro total de estudiantes en la UNNE. Adhieren profesores. Acto público”, Norte, p. 12.

84 (1971, 23 de marzo) “Asamblea en la UNNE. Fue quemado un muñeco que representaba a Levingston”, Norte, p. 12.

85 (1971, 30 de marzo) “La guerra de los panfletos”, Norte, p. 13.

86 (1971, 4 de abril) “Fue ocupado ayer el rectorado de la UNNE”, Norte, p. 13.

87 (1971, 20 de abril) “Estudiantes de Arquitectura”, Norte, p. 12; (1971, 23 de abril) “Plantean irregularidades en la Facultad de Arquitectura local”, Norte, p. 5; (1971, 28 de abril) “Denunciar irregularidades en la Facultad de Arquitectura”, Norte, p. 2.

88 (1971, 23 de abril) “Facultad de Derecho”, Norte, p. 4.

89 (1971, 14 de abril) “Paro en la Universidad”, Norte, p. 12.

90 (1971, 22 de abril) “Serios cargo a las autoridades de la Facultad de Ingeniería de la UNNE”, Norte, p. 12.

91 (1971, 15 de abril) “Tiende a agravarse el conflicto estudiantil en la Universidad”, Norte, p. 12.

92 (1971, 6 de abril) “Ciencias Económicas”, Norte, p. 12.

93 (1971, 28 de abril) “Ciencias Económicas”, Norte, p. 2.

94 (1971, 29 de abril) “Activa movilización estudiantil universitaria. Marcha al decanato”, Norte, p. 5; Hay más notas en Norte en todas las ediciones diarias hasta el 5 de mayo inclusive.

95 (1971, 12 de mayo) “El Integralismo censura la acción de la policía”, Norte, p. 14. En el nordeste se formaron las Ligas Agrarias. Sobre el tema puede leerse: Rozé, 2011.

96 (1971, 13 de mayo) “Homenaje a Cabral”, Norte, p. 15.

97 (1971, 16 de mayo) “Homenaje popular a Cabral”, Norte, p. 1.

98 (1971, 17 de mayo) “Frente a la cárcel se rindió anoche homenaje a los guerrilleros presos”, Norte, p. 1.

99 (1971, 19 de mayo) “La CGT declaró persona no grata al gobernador Basail”, Norte, p. 1 y (1971, 21 de mayo) “Renunció Basail”, Norte, p. 1.

100 (1971, 24 de mayo) “Asume hoy el interventor federal”, Norte, p. 1.

101 (1971, 29 de mayo) “El conflicto de Humanidades”, Norte, p. 14; (1971, 31 de mayo) “Humanidades S.O.S.”, Norte, p. 14; (1971, 4 de junio) “Integralistas fijan posición”, Norte, p. 12.

102 (1971, 2 de julio) “Elecciones en el CECE”, Norte, p. 12.

103 (1971, 1 de septiembre) “Tiroteo en la Facultad de Agronomía de la UNNE”, Norte, p. 1; (1971, 3 de septiembre) “Nuevos incidentes estudiantiles en Corrientes. Intervino el ejército. Rige el toque de queda” y “Numerosas detenciones”, Norte, p. 1; (1971, 4 de septiembre) “Más de un centenar de detenidos. Allanamientos. Drásticas medidas”, Norte, p. 1.

104 (1971, 4 de septiembre) “Numerosas detenciones”, Norte, p. 1.

105 BDB, sección octubre 1971, p. 2.

106 BDB, sección octubre 1971, p. 13.

107 BDB, sección octubre 1971, p. 19.

108 (1971, 22 de octubre) “Corrientes: Conflicto en la Facultad de Medicina”, Norte, p. 15. BDB, sección octubre 1971, p. 22 y p. 31.

109 BDB, sección febrero 1972, p. 2 y 3.

110 BDB, sección febrero 1972, p. 3.

111 BDB, sección febrero 1972, p. 3.

112 BDB, sección febrero 1972, p. 4.

113 BDB, sección marzo 1972, p. 8.

114 BDB, sección marzo 1972, p. 4 y 5.

115 BDB, sección marzo 1972, p. 4.

116 BDB, sección abril 1972, p. 18/9.

117 (1972, 14 de mayo) “UNNE: el 15 suspenderá todas sus actividades”, Norte p. 12; BDB, sección mayo 1972, p. 18.

118 (1972, 6 de junio) “Corrientes: fue tomada la facultad de Derecho en repudio por los atentados”, Norte, p. 12.

119 BDB, sección junio 1972, p. 28.

120 Los números totales de votos de cada agrupación en Corrientes y Resistencia fueron: MOR 620; FAUDI 552 y Franja Morada 264. BDB, sección diciembre 1972, p. 11.

121 BDB, sección octubre 1972, p. 24.

122 (1972, octubre) “Declaración del Congreso Nacional de Estudiantes Peronistas”, Envido, pp. 78 – 80.

123 BDB, sección mayo 1973, p. 3.

124 BDB, sección mayo 1973, p. 14/5.

125 BDB, sección mayo 1973, p. 3.

126 BDB, sección mayo 1973, p. 12.

127 BDB, sección mayo 1973, p. 39.

128 (1973, 15 de mayo) “Asueto en la UNNE”, El Territorio, p. 7.

129 BDB, sección mayo 1973, p. 28.

130 BDB, sección mayo 1973, p. 45.

131 BDB, sección mayo 1973, p. 47.

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