OBITUARIO

Dr. Pablo Pérez Goodwyn 23-XI-1971 - 8-VIII-2009

Juan A. Schnack

División Entomología Facultad de Ciencias Naturales y Museo, Universidad Nacional de La Plata, Argentina

El sábado 8 de agosto de 2009, consternados, recibimos la triste e inesperada noticia que conmovió a los consocios de la Sociedad Entomológica Argentina y a muchos miembros de nuestra comunidad científica; se nos informaba que en esa misma fecha el Dr. Pablo Pérez Goodwyn había muerto accidentalmente, mientras nadaba en la costa marina de Fujisawa, en la prefectura de Kanagawa, cercana a Tokio.
Pablo, pese a su juventud, gozaba de un amplio y merecido reconocimiento por parte de sus colegas entomólogos, tanto en la Argentina como en el extranjero, especialmente en Japón, Alemania y los Estados Unidos de Norteamérica. Se desempeñó como Auxiliar Docente en la cátedra de Zoología de Invertebrados de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) desde 1994 hasta 2001.
Se graduó como Licenciado en Biología y Ecología (1996) y como Doctor en Ciencias Naturales (2000) en la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la UNLP. En el período 1999-2001 desarrolló sus investigaciones sobre heterópteros acuáticos en el Instituto de Limnología "Dr. Raúl A. Ringuelet" (UNLP-CONICET).
La mayor parte de sus logros científicos se concretaron en investigaciones postdoctorales, desarrolladas en Alemania (Instituto Max Planck, Tübingen, 2001-2003) y en Japón (Doshisha, Kyoto), país este último en el que residía desde 2003 hasta el momento en que la desafortunada circunstancia referida, lo llevara a su lamentable deceso. Desarrolló investigaciones que abordaron diversos campos de la entomología, logró el doctorado con su excelente revisión del género Lethocerus (Heteroptera: Belostomatidae) en América. Seis años después (2006) publicaba su revisión taxonómica de la subfamilia Lathocerinae Lauck & Menke (Heteroptera: Belostomatidae), excelente y completo aporte a este taxón, que fuera publicado en la "Stuttgarter Beitrage zur Naturkunde" (Stuttgart, Alemania).
Sus líneas de investigación entomológica cubrieron sucesivamente, a partir de la obtención de su doctorado, una notable diversidad de campos del conocimiento, tales como morfología funcional, biología evolutiva, ecología, biogeografía y paleo-entomología, se dedicó con mayor ahínco a las investigaciones relativas a biomecánica de insectos.
No es el propósito de esta evocación incluir una nómina exhaustiva de todos los trabajos publicados en su prolífica carrera científica, simplemente su trayectoria puede sintetizarse si se considera que sus trabajos fueron publicados en prestigiosas revistas científicas internacionales, tales como: Aquatic Insects, Journal of Insect Physiology, Journal of Comparative Physiology, Journal of Morphology, Naturwissenchaften, Hydrobiologia, Entomologia Experimentalis et Applicata, Central European Journal of Biology, Florida Entomologist, Acta Biomaterialia, etc., así como en nuestra Revista de la Sociedad Entomológica Argentina.
Definir el perfil científico del Dr. Pérez Goodwyn podría prejuzgarse como difícil, habida cuenta de la diversidad de temas que cultivara. Sin embargo, sus ramificaciones disciplinarias convergieron en un aspecto unificador: el estudio de las adaptaciones, es decir, de la conformidad entre las estructuras y sistemas de los organismos (en este caso de los insectos) con sus ambientes, expresada por su flexibilidad fisiológica, morfológica y de comportamientos.
Sus primeras investigaciones taxonómicas lo estimularon a profundizar en estudios morfológicos y a preguntarse el porqué de determinados rasgos estructurales que exhibían los insectos que estudiaba, especialmente, aunque no en forma excluyente, los heterópteros acuáticos. Precisamente este interrogante lo motivó a abordar un enfoque morfológíco-funcional, que acometió con inspiración, creatividad e intuición, apoyado, además, por su sólida formación teórica.
En cuanto a sus cualidades personales, fue una excelente persona: amable, honesto, generoso, agradecido y querible. Su permanente buena predisposición, su carácter afable y reposado y sus actitudes desinteresadas lo erigieron en un depositario del afecto de sus amigos y colegas que pudieron apreciar su calidad humana y su talento, y que se sintieron impotentes cuando el azar hizo que dejara este mundo con apenas 38 años, cuando mucho había dado, pero más le quedaba por recorrer, ya que sus proyectos de vida y de trabajo eran diversos y promisorios.
Pablo ha dejado un vacío que será permanente para quienes supimos apreciar su bondad, generosidad y simpatía. Pero nos deja el mejor recuerdo, los momentos compartidos que fueron gratos, estimulantes, inspiradores y divertidos; extrañaremos su irreemplazable calidez y sensibilidad.