SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 issue22Corporations, entrepreneurs, social alliances and political disputes in the return of peronism (1969-1974)Politics for Dignity: A Proposal to go Beyond the Workers Crisis author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

  • Have no cited articlesCited by SciELO

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Trabajo y sociedad

On-line version ISSN 1514-6871

Trab. soc.  no.22 Santiago del Estero June 2014

 

PERSONAJES DE UNA CRISIS SOCIAL: EMPRESARIOS, TRABAJADORES Y POLÍTICOS

Los trabajadores escondidos: Método de inclusión de la ocupación faltante en las mediciones del Producto Bruto Geográfico de General Pueyrredón 

Hidden workers: including method of missing occupation on measurements of Gross Geographic Product of Municipality of General Pueyrredón

 

Ana Julia Atucha y María Eugenia Labrunée*

* Docentes e Investigadoras del Grupo Estudios del trabajo y Grupo Indicadores Económicos, Centro de Investigaciones Económicas y Sociales de la UNMDP. Este documento explicita el esfuerzo de todo el equipo de trabajo que llevó adelante el Proyecto Estimación del Producto Bruto del partido de General Pueyrredon (UNPRE) del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas de la Nación y el Municipio de Gral. Pueyrredon. Por eso se hace una mención especial a todos ellos: la coordinadora, Marisa Wierny, los consultores, María Isabel Bertolotti, Elizabeth Errazti, María Teresa López, Guillermo Volpato y los ayudantes Hernán Gomis, Virginia Governatori, María Victoria Lacaze y Sandra Pesciarelli. También se resalta la participación en la construcción de la matriz de empleo demográfica de Susana Kidyba, del equipo del Observatorio Pymes de Gral. Pueyrredon y zona de Influencia, y el Centro de Investigación Estadística de la Municipalidad de General Pueyrredon. E-mail: melabrun@mdp.edu.ar

 


RESUMEN

La necesidad de contar con información sobre las características productivas y laborales de la región a partir de estimaciones de indicadores generados localmente fundamentó que sean reanudadas las estimaciones del Producto Bruto Geográfico -PBG- en el Municipio de General Pueyrredón. El estudio obtuvo el nuevo año base 2004 e incluye mediciones de la Economía No Observada (ENO) con el objetivo de mejorar la captación de las actividades económicas y de ese modo, ofrecer una imagen más ajustada de la economía local.
El objetivo de este escrito es presentar el método utilizado en las estimaciones del PBG para la incorporación de la ocupación faltante. Se describen con ese fin, desde la óptica de las Cuentas Nacionales, las principales definiciones operativas y formas de medición de la Economía No Observada propuesta por los organismos internacionales pertinentes, y el método adoptado a nivel local, denominado método italiano.
Los principales resultados hallados, medidos en términos de cantidad de ocupados y valor agregado, indican que se incluyeron más de 77 mil trabajadores al PBG local, quienes en promedio, incorporaron un 67% adicional de valor agregado, sin sumar las estimaciones de los servicios propios de las vivienda y el servicio doméstico, las cuales también son consideradas parte de la ENO.

Palabras clave: Economía informal; Economía no observada; Economía subterránea; Producto bruto geográfico; Ocupación faltante.

ABSTRACT

In order to have updated information on the labor and production characteristics of a region, the previous estimation of the Gross Geographic Product (GGP) for the Municipality of General Pueyrredon has been reconsidered via a study conducted in 2010-2011, including the calculation of a new base year (2004). With the aim of improving the valuation of economic activities, and also with the purpose of having a more realistic snapshot of local economic performance, the study included an important effort to measure the non-observed economy (NOE).
The objective of this article is to present the strategy applied in order to include informal work in the productivity metric. To address this issue, both the major operative definitions and the key NOE metric are described from the National Accounts perspective. Particularly, we have emphasized the approach that was selected for the local NOE measurement, the so-called Italian method.
As a consequence of the corrections implemented, more than 75,000 employed workers and an increase of 67% of added-value were incorporated in the GGP measurement. However, these findings fail to cover two important NOE sectors: housing services and paid domestic service.

Keywords: Informal economy; Unobserved economy; Underground economy; Gross Domestic Product; Missing occupation.


 

SUMARIO

Introducción. 1. Antecedentes y marco conceptual. 2. La ENO desde la contabilidad nacional. 3. Métodos para lograr la exhaustividad. 4. Metodología de estimación. 4.1. Aspectos generales en referencia a la estimación del PBG del Partido de General Pueyrredón. 4.2. Metodología de incorporación de la Economía no Observada en la estimación del Producto Bruto Geográfico. 5. Resultados. Palabras finales. Bibliografía.

*****

 

Introducción

Durante 2010 y 2011 se llevó adelante en el Municipio de General Pueyrredón un estudio destinado a reanudar la estimación del Producto Bruto Geográfico -PBG- para el año 2004, nuevo año base de las Cuentas Nacionales y Provinciales. El proyecto consistió en desarrollar y sistematizar la metodología y estimar el Producto Bruto Geográfico, tanto de las actividades registradas como las no observadas, a partir de los lineamientos pautados por el Sistema de Cuentas Nacionales (SCN)2 que emanan de Naciones Unidas (ONU). En este recorrido, se utilizaron diferentes estrategias en cada sector, de acuerdo con sus particularidades y la disponibilidad de información.
Con la intención de ofrecer una imagen adecuada sobre la economía local, se intentó mejorar el nivel de captación de todas las actividades económicas. Esto es, algunas no pasan por el mercado, por lo cual es difícil cuantificar y valorizar su aporte a la economía y otras no son fácilmente observables con los dispositivos de recolección que generalmente se utilizan. Eso dio lugar a que fueran consideradas zonas problemáticas para las estimaciones en las cuentas nacionales. Por ello, se realizó el esfuerzo de incluir mediciones de lo que se asigna bajo el nombre de Economía No Observada (ENO), aún teniendo presente que "A pesar de estos esfuerzos que seguramente requerirán mucho más tiempo, los
datos básicos no llegarán nunca a cubrir la totalidad de la producción incluida en el ámbito de la producción tal como lo propone el Sistema de Cuentas Nacionales" (OCDE, 2002).
Este documento trata específicamente de este último punto, expone cuáles fueron los criterios y el método de ajuste por la ENO en el Partido para la estimación del PBG en el nuevo año base 2004, ante el convencimiento de la importancia de que sean explicitados claramente los alcances de las estadísticas económicas generadas. Como profesionales abocados a estas estimaciones, las autoras y el resto del equipo de trabajo del Proyecto Estimación del PBG del Partido de General Pueyrredón, asumen esta responsabilidad siendo conscientes del valor social que tiene la información: "La información ayuda a los individuos a crear valor, pero aporta un valor social adicional" (ANCE, 2009, pp. 63).
Las estimaciones permiten dar cuenta de la magnitud y amplitud de las áreas de la economía que no son captadas por los registros oficiales, ya sea por realizarse dentro de la economía informal o subterránea, por corresponder a aquellas que realizan los hogares para su uso final propio, o simplemente, por los vacíos en los dispositivos de captura de los datos básicos.
Debido a la propia naturaleza de la ENO, suelen cometerse imprecisiones conceptuales acerca de los distintos aspectos de la economía que no son captadas adecuadamente en las mediciones del Producto bruto. Por lo cual, explicitar sus significados facilita el proceso de operacionalización y los esfuerzos para conocer su escala real. Por ello, el primer apartado presenta una sistematización de la bibliografía referida a la ENO, las definiciones y métodos de detección más importantes considerados por el SCN,-marco de alcance internacional para la elaboración y presentación de un conjunto consistente de estadísticas-.
De esta forma, se avanza al segundo apartado el cual describe los métodos usados en el marco del Proyecto de PBG del Partido, así como las fuentes de información empleadas. En particular, para detectar la ENO se sigue el denominado método italiano, el cual requiere conciliar fuentes de información económicas y sociodemográficas disponibles a nivel local. Por último, se exponen los principales resultados para cada rama de actividad sujeta a ajustes: su importancia relativa y el aporte a la economía en términos de Valor Agregado (VA) y puestos de trabajo.

1. Antecedentes y marco conceptual

El Producto Bruto es el indicador más conocido y frecuentemente utilizado para evaluar el funcionamiento y la evolución de una economía. La información que provee facilita la toma de decisiones de los agentes, permite la definición de políticas públicas convenidas de acuerdo a problemáticas reales y relevantes para el territorio y contribuye, además, al seguimiento y la evaluación de sus efectos.
Se define como el valor monetario de todos los bienes y servicios finales producidos por una economía durante un período. El calificativo de Interno (PBI) indica que la cuantificación de todas las actividades son las desarrolladas dentro de las fronteras de un país. En cambio, si está referido a una jurisdicción política de menor nivel -provincia o municipio- recibe el nombre de Producto Bruto Geográfico (PBG). En Argentina, la estimación se basa en el "método de la producción", el cual consiste en la sumatoria de las estimaciones, para todos los establecimientos localizados en cada región, del valor agregado3 que aportan. Una de las principales fuentes de información que permiten estas mediciones son los censos económicos por el detalle de la información que recopila y su amplia cobertura geográfica y de actividades.
Sin embargo, cualquiera de las formas consideradas para medir el PBI (o el PBG), más allá de los recursos utilizados, ya sea monetarios, de aplicación de técnicas de recolección de datos o tiempo asignado excluye, en mayor o en menor cuantía, ciertas operaciones económicas. Reconocer la existencia de la ENO no escapa que la bibliografía específica afirme que "algunas actividades productivas escaparán siempre a la observación directa" (cf. OCDE, 2002). El resultado de ello es que los datos reflejan una imagen equivocada de los aportes y la magnitud de cada sector en la economía y dificulta las comparaciones con otros espacios y momentos. En este sentido es que los sistemas estadísticos de los países trabajan por mejorar sus mediciones e incluir la mayor cantidad de actividades económicas desarrolladas en sus territorios.
Por caso, Argentina incluyó por primera vez correcciones de este tipo en la actualización del PBI para el año base 1986. En ese momento, se había detectado una ocupación faltante de 350 mil asalariados y de 200 mil cuentapropistas (Wierny y Yoguel, 1997). Esta tarea se repitió en la siguiente renovación del año base (1993), oportunidad en la cual el Partido de General Pueyrredon también aplicó un ajuste a las estimaciones de su PBG, recurriendo a la misma metodología del Ministerio de Economía de la Nación. Las correcciones llevadas a cabo en el año base 2004 -que se explican en los apartados siguientes- emplean una metodología similar.
El marco conceptual para definir y diseñar los métodos de resolución o detección de las zonas problemáticas de la ENO se inscribe principalmente en el SCN 1993 y su última actualización, el SCN 2008. Estos documentos contienen el conjunto de recomendaciones relativas a la elaboración de mediciones de la actividad económica, las cuales establecen normas que son aceptadas en forma consensuada a nivel internacional. Sigue convenciones contables estrictas a partir de principios económicos y aclara el tratamiento en la contabilidad nacional de una amplia gama de temas, entre ellos el sector informal, de especial interés en este trabajo.
De acuerdo a las pautas generadas en estos ámbitos, el campo de análisis para las mediciones es el de la producción. Las actividades económicas que deben tenerse en cuenta en las estimaciones del PBI están contenidas dentro de lo que se llama "frontera de la producción" y su definición es más restringida que el ámbito general de la producción. Queda demarcada de esta forma cuáles serán las condiciones para considerar la exhaustividad de las mediciones Para el SCN:

"La producción se entiende como un proceso físico, realizado bajo la responsabilidad, control y gestión de una unidad institucional, en el que se utilizan mano de obra y activos para transformar insumos de bienes y servicios en productos de otros bienes y servicios. Todos los bienes y servicios producidos como productos han de ser susceptibles de ser vendidos en el mercado o al menos poder ser provistos de una unidad a otra, onerosa o gratuitamente. El sistema incluye dentro de la frontera de la producción toda la producción realmente destinada al mercado, para la venta o el trueque. Incluye, asimismo, todos los bienes o servicios prestados gratuitamente a los hogares individuales, o proporcionados colectivamente a la comunidad, por unidades gubernamentales o de las instituciones sin fines de lucro que sirven a los hogares (ISFLSH)" (SCN, 1993).

La tarea de delimitar lo que hay que registrar en las cuentas de producción del SCN exige tomar decisiones acerca del tratamiento de algunas actividades que, o bien no pasan por el mercado o no son fácilmente observables, y por ello son consideradas zonas problemáticas de la ENO.

2. La ENO desde la Contabilidad Nacional

Existen diferentes posiciones ideológicas que exponen sus conceptualizaciones o explicaciones acerca de la existencia de la ENO, las cuales se plasman en el diseño de metodologías para estimarla. Su existencia es referenciada por distintos ámbitos haciendo uso de una amplia cantidad de vocablos que aluden indistintamente a lo no medido en el PBI/PBG como: economía oculta, economía en la sombra, economía paralela, economía subterránea, economía informal, sector informal, economía invisible, mercado negro, economía alternativa, economía invisible, no gravada, secundaria, autónoma, disimulada, irregular, oculta, dual, la otra economía, submarina, clandestina, fantasma, marginal, contraeconomía, gris, negra, periférica, velada, etc. Si no se expone explícitamente el sentido del uso de estos vocablos, dan lugar a imprecisiones conceptuales, metodológicas y de las mediciones.
En forma simplificada, los grupos de actividades calificadas por la OCDE (2002) como parte de la ENO son cinco, no excluyentes entre sí. Estas actividades son: las subterráneas; las ilegales; las informales; las no observadas debido a vacíos en el dispositivo de captura de los datos básicos y las que realizan los hogares para su uso final propio.
En este apartado se presentan las definiciones operativas desarrolladas por las Cuentas Nacionales acerca de estas actividades económicas. La forma en que se definen y clasifican cada uno de los conceptos incluidos en la ENO responde a cuestiones técnicas, teóricas y de principios económicos y repercute considerablemente en las posibilidades de uso e interpretación de los datos. Las mismas fueron tenidas en cuenta para estimar la ENO del Partido en el cálculo del PBG.

La economía informal, subterránea e ilegal.

Estos tres tipos de actividades no remiten a situaciones novedosas:

"El contrabando, la piratería, la evasión de toda clase de tributos o cargas públicas, los mercados negros de la más diversa índole, han sido las distintas formas en que el problema de la informalidad se manifestó a lo largo de la historia. También la actividad criminal, que insume importantes recursos, forma parte de la economía informal" (Guisarri, 1989).

Todas ellas son a menudo referenciadas incorrectamente bajo la denominación de economía informal. En realidad, la denominación de actividades subterráneas es utilizada por los expertos en contabilidad nacional, los economistas y el SCN 1993 para indicar al "conjunto de las actividades de producción legales voluntariamente disimuladas a las autoridades públicas con la finalidad de evitar: a) pagar impuestos a la renta, al valor agregado u otros impuestos; b) pagar contribuciones sociales; c) ajustarse a algunas normas jurídicas, tales como el salario mínimo, la cantidad máxima de horas de trabajo o las normas en cuanto a seguridad y salud etc.; d) ajustarse a algunos procedimientos administrativos, tales como responder a cuestionarios estadísticos o llenar formularios." (OCDE, 2002: 155) Este no es el único significado, cada disciplina social y la sociedad ofrece otros, en función de sus juicios de valor, así como las necesidades específicas de análisis de quienes utilicen el término.
Por su parte, las ilegales, según el SCN 1993, incluyen la producción y la distribución de bienes tales como estupefacientes o pornográficos ilegales; servicios como la prostitución (para aquellos territorios en la que es efectivamente ilegal); las actividades legales pero ejercidas por productores no autorizados -medicina ilegal, juegos de dinero o la producción de alcohol sin licencia-; las actividades furtivas, la producción y venta de productos falsificados, el contrabando al por mayor y al por menor, el encubrimiento de bienes robados; la corrupción y lavado de dinero, entre otras (OCDE, 2002)
La noción de informalidad es quizá la más discutida por lo que se detalla con mayor precisión en las siguientes líneas ya que es necesario dilucidar entre diferentes acepciones.
Los estudios sobre economía oculta que parten desde la perspectiva neoclásica, sostienen que hay un problema de elección racional a partir de un análisis de costo (presión fiscal) versus beneficio (riesgo de ser descubierto) y centran la idea sobre la evasión. En relación a esa postura, Hernando de Soto (1987) definía la informalidad como una respuesta de la producción frente al costo de la legalidad, refiriéndose a los obstáculos que presenta el complejo burocrático del Estado para operar dentro de la economía formal. Por otro lado, el estructuralismo norteamericano analiza estas situaciones con una
dinámica estrechamente relacionada con la flexibilidad laboral y las nuevas condiciones del comercio internacional (Narodowski, 2008).
El Programa Regional de Empleo para América Latina y el Caribe (PREALC) de OIT, asociaba el fenómeno a las características de los modelos de desarrollo adoptados en los países de América Latina. Sus procesos de industrialización no generaban oportunidades de empleo consistentes con la creciente oferta laboral, dando espacio a un excedente permanente de mano de obra, sin posibilidades de insertarse. La alternativa viable en este escenario resulta ser la propia generación de oportunidades de empleo al margen del sector moderno de la economía, en actividades con bajas productividades y escaso acceso al capital (Mezzera, en Labrunée y Gallo, 2005).
Al momento de operacionalizar estos conceptos y explicaciones para abordar empíricamente la existencia de actividades productivas que funcionan en el sector informal de la economía, se deben expresar algunas cuestiones tratadas por los organismos de la ONU, máximos referentes internacionales en materia de empleo y cálculo del PBI. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) aporta dos conceptos, sector informal y empleo informal, que reúne bajo el término economía informal. Con el fin de lograr una compatibilidad y coherencia conceptual, la Decimoséptima Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo (CIET), perteneciente a la OIT (2003), ofreció una definición del sector informal que pudiese servir al SCN. En ese sentido sus directrices manifiestan: "El concepto de sector informal se refiere a unidades de producción como unidades de observación, mientras que el concepto de empleo informal se refiere a los empleos como unidades de observación". En esta conferencia queda incorporado, aunque extraoficialmente, la terminología de economía informal como el conjunto de sector informal y empleo informal.
El SCN 1993 adopta esta definición de la CIET de 2003 y, además, proporciona el marco conceptual para medir la ENO, al diferenciar el sector informal de la producción sumergida, la producción ilegal y también de la producción de los hogares para su propio uso final. Sin embargo aclara que no son mutuamente excluyentes, es decir, "las unidades del sector informal pueden realizar actividades que son subterráneas o no observadas debido a vacíos en el dispositivo de captura de los datos" (SCN, 1993: 47)
El sector informal queda determinado entonces según las características de las empresas donde se desarrollan las actividades y no en función de las características de las personas involucradas o de su empleo. Las empresas del sector informal son, en general, establecimientos pequeños, con una baja dotación de capital por trabajador, escasa calificación de la mano de obra, división del trabajo incipiente y baja productividad laboral (Labrunée y Gallo, 2005). Por otra parte las personas ocupadas en el sector informal quedan definidas como aquellas que, "durante un determinado período de referencia, han trabajado por lo menos en una empresa del sector informal, independientemente de su estatus en el empleo o del carácter principal o secundario del empleo" (OIT, 2003)
Teniendo en cuenta estas conceptualizaciones, queda claro que no todas las actividades informales son no observadas y viceversa, aunque hay coincidencias y superposiciones. En todos los países existe ENO y empresas informales, pero varía la dimensión de cada uno así como los esfuerzos estadísticos y políticos por identificarlos. La Figura 1 (CEPAL, 2008) expone en forma gráfica estas distinciones.


Figura 1: La economía no observada y el sector informal
(Fuente: CEPAL, 2008: 110)

La economía no captada por las estadísticas oficiales

El cuarto punto que es necesario diferenciar dentro de la ENO es la porción de la producción que no es posible captar por las carencias de los dispositivos de captura de datos, cuestión relacionada con el concepto de exhaustividad. La OCDE manifiesta al respecto que este grupo incluye a "todas las actividades de producción que deberían tenerse en cuenta en el dispositivo de captura de los datos básicos, pero que faltan debido a vacíos estadísticos. Se lo califica a veces como producción subterránea por razones estadísticas" (OCDE, 2002: 49.).
Estas fallas obedecen a tres motivos: a) la insuficiencia de la cobertura de las empresas por ser nuevas con fecha de inicio de actividades posterior al momento de observación b) la ausencia de respuesta de las empresas que están incluidas en la muestra porque el cuestionario no fue dirigido a la persona correspondiente o simplemente la firma no devolvió el cuestionario, entre otras situaciones, y c) a la subdeclaración por parte de las empresas, esto es, declaran algunos datos pero inexactos (OCDE, 2002).

La producción de los hogares

Entre las actividades que el SCN 93 considera dentro de la frontera de la producción figuran, como ya se hizo referencia, la producción por cuenta propia de todos los bienes que sus productores destinan a su autoconsumo final o a la formación bruta de capital para su uso; la producción por cuenta propia de los servicios de las viviendas ocupadas por sus propietarios y de los servicios domésticos y personales producidos por personal de servicio doméstico remunerado".
En particular, los servicios domésticos y personales desarrollados por los miembros del hogar y para su autoconsumo se excluyen de las mediciones de las cuentas nacionales, aún teniendo presente que gran cantidad de mano de obra se dedica en forma exclusiva a estas actividades y que las mismas generan bienestar económico. Se trata específicamente de la elaboración de comida, la limpieza del hogar, cuidado de hijos, entre otras. La exclusión, por un lado obedece, a consideraciones referidas a que estas labores no pasan por el mercado, lo cual implica que su valorización resulte muy compleja. Pero, por otro lado, incluirlas generaría consecuencias en las mediciones de empleo, generando tensiones entre la distinción entre activos e inactivos económicamente (OCDE, 2002).
Entre las actividades que forman parte de la producción de los hogares y que serán tenidos en cuenta en las estimaciones de Producto se puede mencionar dos: los servicios de las viviendas ocupadas por sus propietarios, es decir el alquiler imputado a los propietarios ocupantes y el servicio doméstico remunerado.
El SCN incluyó siempre dentro de la frontera de la producción a la imputación de los servicios de la vivienda propia, como excepción a la norma general. Este concepto debe incluirse como actividad económica en tanto constituye un bien durable con una importante incidencia en el patrimonio de las familias y en el stock de capital, independientemente del régimen de tenencia. "La proporción entre las viviendas ocupadas por sus propietarios y las viviendas alquiladas puede variar significativamente según los países, e incluso durante breves períodos de tiempo en un mismo país" (SCN, 1993: 238). Imputar este valor asegura la comparabilidad temporal y espacial.
Por su parte, los servicios del empleo de personal doméstico remunerado no son captados por las encuestas económicas, de allí su clasificación dentro de la ENO, pero forman parte de la frontera de producción en tanto son servicios prestados a los hogares y que tienen un valor de mercado.

3. Métodos para lograr la exhaustividad

Para aumentar la cantidad de actividades observadas por sobre el total no observado en las estimaciones del producto existen diferentes métodos. La aplicación de uno u otro depende de la importancia relativa que tenga cada zona problemática de la ENO en el territorio y la información disponible. El Cuadro 1 explicita en forma sintética los principales, tal como presentan Schneider y Enste (2002). Estos autores los clasifican en de acuerdo al tipo de información a partir de la cual proceden y diferencian así tres enfoques: los directos que desarrollan operativos especiales para medir lo no observado; los indirectos en los que se usan indicadores existentes en el territorio para inferir lo oculto y, finalmente, los modelos, para los cuales se construyen modelos ad hoc.

Cuadro 1. Métodos para medir la economía oculta


(Fuente: Schneider y Enste, 2002: 13).

Los efectivamente empleados en las estimaciones del PBG local se ubican dentro de los indirectos, por lo que se opta por describir únicamente este grupo. Éstos, en general, utilizan indicadores extraídos de los datos disponibles (OCDE, 2002) para abordar actividades no observadas del sector subterráneo e informal y las inobservables debido a imperfecciones del dispositivo de captura de los datos básicos. Exigen ser cautelosos para evitar dobles contabilizaciones, para considerar ámbitos de cobertura parciales de cada fuente y detectar imperfecciones en los contenidos, las diferencias en las nomenclaturas, conceptos y en las normas contables empleadas.
Por su parte, otros autores ofrecen una clasificación distinta en referencia a estos métodos indirectos. Dividen en aquellos establecidos desde la producción o desde el gasto (OCDE, 2002). Los primeros se basan en la oferta, en la mano de obra utilizada, en la demanda, en los ingresos y en el flujo de mercancías y ofrecen metodologías específicas para cada rama de actividad. Uno de ellos es el utilizado localmente, y se describe en el apartado siguiente: el método italiano. Por otra parte, desde laóptica de los gastos, los métodos indirectos usan datos referidos al consumo final de los hogares, de la administración pública y de las instituciones sin fines de lucro entre otros, inaplicables localmente por la información que demanda.
Habiendo presentado someramente las características generales de los métodos diseñados para medir la ENO, en el apartado siguiente se describe la metodología de estimación del PBG del año base 2004 en el Partido y, en particular, el procedimiento seguido para incorporar la ENO.

4. Metodología de estimación

Gracias al impulso del Municipio y la Universidad pública local, se retomó la estimación del Producto Bruto Geográfico del Partido de General Pueyrredón, mediante un proyecto financiado por el BID, cubriendo así un área de vacancia desde el año 2000. El cálculo se ejecutó entre octubre de 2010 y septiembre de 2011, periodo durante el cual se desarrolló, sistematizó la metodología y estimó el Producto Bruto Geográfico, tanto de las actividades registradas como no registradas, partiendo de los lineamientos del SCN (Naciones Unidas), con las adaptaciones necesarias en cada sector.

5.1 Aspectos generales en referencia a la estimación del PGB del partido de General Pueyrredón

El período abarcado se corresponde con el nuevo año base de las Cuentas Nacionales y Provinciales, 2004, lo cual permite la comparabilidad y consistencia de los datos, series y criterios utilizados a localmente con los de los territorios de mayor importancia. Las mediciones de las actividades responden al máximo nivel de desagregación, 5 dígitos de la Clasificación Industrial Internacional Uniforme (CIIU)4.
Para estimar el PBG, la metodología plantea la elaboración de la cuenta de producción, la que incluye la medición de tres variables: Valor Bruto de Producción (VBP), Consumo Intermedio (CI) y Valor Agregado (VA). El VBP es el conjunto de bienes y servicios que se producen en un país, región o partido en un período de tiempo. Surge de sumar todos los bienes producidos por cada sector de actividad en dicho período. Dicho valor se puede desglosar en dos partes bien diferenciadas: el CI es el valor de los insumos empleados, es decir, los bienes y servicios que se consumen, transforman o incorporan en la producción, mientras que el VA es el valor que el propio sector adicionó a estos insumos en el proceso productivo. El VA equivale a las remuneraciones a los factores productivos y se obtiene por diferencia entre VBP y CI. La adición de los VA por sector de actividad conforma el PBG (Lacaze et al., 2012).
Los métodos usados en cada rama de actividad se pueden se pueden clasificar de acuerdo a la información disponible. De forma simplificada las estimaciones del VA de ciertas ramas partieron de multiplicar precios por cantidades producidas, como fue el caso de la agricultura, la ganadería y una parte de la construcción; ramas en las que las estimaciones se basan en gastos como enseñanza, alquileres, esparcimiento; ramas que emplean estimaciones de costos y ganancias y otras que se determinan a partir de información sobre la mano de obra empleada. Es decir, se acudió a las tres vías posibles de estimación, producto, gasto e ingreso.
Una de las principales fuentes de información fue del último Censo Nacional Económico (CNE), operativo que relevó información correspondiente a 2003. Ya que este censo no abarca todas las actividades económicas, la construcción, las actividades agrícola-ganaderas, la pesca y la minería han sido relevadas por censos y encuestas específicas realizados en años diferentes al año base. Las diversas fuentes fueron revisadas y ampliadas con entrevistas a informantes claves de los diferentes sectores económicos en un detallado trabajo de conciliación entre las mismas y cuando correspondía, se actualizaron al año base. En otras actividades, si bien esta fuente ofrecía datos, se contaba con información local más completa y específica, por lo cual se optó por reconstruir el PBG a partir deéstas últimas.

5.2 Metodología de incorporación de la Economía no Observada en la estimación del Producto Bruto Geográfico.

La información relevada por los censos económicos tiene en su totalidad un carácter formal, de lo cual se infiere que deja fuera o capta inapropiadamente las actividades ocultas e informales. La estrategia de incorporación de la ENO aplicada cubrió particularmente aquellas actividades correspondientes a la economía informal, la subterránea y a los vacíos en los relevamientos estadísticos. Las ilegales han sido excluidas explícitamente en este trabajo debido a su dificultad de medición y siguiendo argumentaciones similares consideradas a nivel nacional5.
La base de datos del CNE 2004/2005 con que se efectuaron las estimaciones de VBP, CI y VA, ya contemplaba ajustes de coherencia global, con revisiones y correcciones en aquellas ramas en las que se verificaban respuestas que implicaban la existencia de inconsistencias, así como la incorporación de locales que no habían sido censados, ya sea por haber cerrado antes del operativo censal o iniciado actividades luego de éste, pero con actividad durante el 2003 o por no haber sido detectadas correctamente durante el operativo.
En la industria manufacturera, a pesar de haberse concretado con anterioridad esfuerzos para completar los vacíos estadísticos, estaba disponible localmente otro relevamiento generado por el
Observatorio PyME6, que permitió contar con datos de empresas que en el CNE no habían sido relevadas ni incorporadas posteriormente. En algunas ramas del terciario, también se contó localmente con información muy detallada, tal el caso de Hotelería y Gastronomía. Estos sectores -de relevancia en el Partido por su impronta turística- que recaban abundante información económica a lo largo de todo el año y especialmente durante el período estival, por lo que se incluyeron locales que en el CNE no habían sido captados por la fecha del operativo. Un tratamiento similar fue posible instrumentar en la rama de educación privada.
Así, la incorporación de la economía informal, subterránea y por vacíos estadísticos se realizó en forma indirecta a partir de la detección de trabajadores no captados para cada una de las categorías ocupacionales y para cada una de las ramas y subramas de actividad económica, para el año 2003 ya que la principal fuente de información (CNE) corresponde a ese año. El método seguido se agrupa dentro de los enfoques indirectos, en tanto requiere de estadísticas de la fuerza laboral y fue el denominado italiano. Inicialmente fue aplicado en ese país, pero es factible de aplicar en otros territorios si cumplen con las siguientes particularidades: muchas pequeñas empresas que no figuran o que están mal clasificadas en el registro de empresas, ya sea porque no están registradas o debido a una alta tasa de rotación; un gran volumen de mano de obra irregular (no registrada); una considerable subdeclaración de la producción por parte de las empresas y una encuesta rigurosa sobre la población activa (OCDE, 2002). Como en el caso nacional, estas características se ajustan efectivamente a la realidad de la dinámica laboral y productiva del Partido, territorio en que se instrumenta además la Encuesta Permanente de Hogares (EPH)7-.
La metodología se basa principalmente en el manejo de estadísticas de la mano de obra utilizada y los procedimientos de estimación se diferencian por actividad económica, según los datos disponibles. El esquema de ajustes efectuados se expone en el Cuadro 2. La primera actividad a desarrollar al incorporar la ENO es ajustar los datos tanto en forma temporal como conceptual y territorial. Este ajuste implica considerar los conceptos y definiciones del SCN que sirven de marco a las estimaciones.

Cuadro 2: Método italiano

(Fuente: OCDE, 2002: 92)

En segundo lugar la secuencia de correcciones indica que se deben integrar los datos de oferta para estimar los empleos registrados y no registrados, lo cual puede estructurarse en una Matriz de Empleo Demográfica, con los de la demanda de trabajo o Matriz de Empleo Económica, tal como expone la CEPAL (2010). La primera refiere a todos los ocupados desagregados por actividades económicas, categorías ocupacionales y modos de producción, de forma tal de detectar hogares productores y el sector informal. Las categorías ocupacionales dividen a los ocupados en asalariados - registrados y no registrados- y no asalariados -patrón, trabajador por cuenta propia y trabajador familiar no remunerado-. Esta matriz demográfica se construye a partir de los Censos de Población y las Encuestas de Empleo (en este caso EPH), donde la población económicamente activa ocupada informa sobre sus características laborales y la cantidad de ocupaciones y permite obtener la cantidad total de puestos de trabajo.
La elaboración de esta matriz requirió adicionalmente consistir la información del censo poblacional con la de la encuesta. Entre ambos operativos se presentan diferencias entre los formularios ya que uno es muestra y el otro, censo. Otra consistencia necesaria es el período de referencia ya que se necesita la información completa de los ocupados por categoría ocupacional y por ramas de actividad para el 2003 y el CNPyV la provee para el 2001.
Por otra parte, y en paralelo, se deben distinguir los empleos principales y secundarios, lo cual resultaría en una Matriz de Empleo Económica. Su construcción se basa en información recogida del CNE, de encuestas económicas anuales, otras investigaciones estadísticas estructurales a empresas, y registros administrativos, del gobierno, sector financiero y seguros, de minería e hidrocarburos, entre otras. Estas fuentes muestran el empleo más formal y visible de la economía (CEPAL, 2011).
El manual de la OCDE (2002) indica que "los salarios y el empleo medidos desde el punto de vista de los empleos (empleador) y del de recursos (empleado) pueden compararse. Después de la consideración de las diferencias conceptuales, las medidas obtenidas deberían ser idénticas". Sin embargo al comparar estas dos matrices, se observa que la primera presenta una ocupación mayor en cada rama de actividad. El análisis de las discrepancias permite conjeturar acerca de la amplitud y de la distribución de las actividades faltantes en los datos relativos a las empresas. Al respecto Wierny et. al. opinan:

"Las fuentes sociodemográficas dan cuenta de una ocupación mayor para el mismo periodo que el censo económico. Esto es indicio de la presencia de subregistro y subcaptación de locales por parte del censo económico y plantea la necesidad de efectuar correcciones al mismo" (2012).

Con ambas matrices (demográfica y económica) se conforma la matriz de empleo compatibilizada o de síntesis en la que se homogenizan las estimaciones de la mano de obra a través de las horas de trabajo, para poder así convertir las estimaciones de los puestos de trabajo faltantes en empleos equivalentes a tiempo completo. Como resultado, se obtiene la cantidad de puestos a incorporar, para cada rama de actividad estimada en base a la información censal. A los nuevos puestos a incorporar se les deben imputar los valores correspondientes de VBP, CI y VA, cuestión que se efectúa diferenciadamente por cada categoría ocupacional (Wierny et.al., 2012).
Para imputar el VA en el caso de los puestos no asalariados, es decir, de patrones, trabajadores por cuenta propia y trabajadores familiares no remunerados, se los multiplica por el coeficiente de la productividad por ocupado (VA/ocupado) ya que se equiparan a una unidad productiva. Esa valorización surge de los datos del CNE referidos a la rama que corresponda y grupo de empresas constituidas por hasta cinco ocupados. El CI se obtiene de la relación entre insumos y valor agregado del CNE (CI/VA) también para cada rama de actividad diferenciando también las microempresas. El VBP surge como la suma del CI y el VA imputados. En el caso de los asalariados, se utiliza en la valorización la remuneración neta de la rama considerando, considerando igualmente para ello los estratos de establecimientos de menor cantidad de empleados (hasta 5).
La segmentación de la base del CNE por tamaño de los establecimientos de acuerdo al VBP y a la cantidad de ocupados se basa en la necesidad realizar estos cálculos asegurando una imputación de VA acorde a las características de los puestos de trabajo y locales a incorporar. Por ello se asignó a las incorporaciones los importes de las remuneraciones y los coediciones de productividad correspondientes a los establecimientos registrados en el CNE en establecimientos pequeños de hasta cinco ocupados, a priori, informales, tal como se detalló en el apartado de Antecedentes y Marco Conceptual. El argumento que sustenta esta imputación de valor con las relaciones provenientes de los establecimientos más pequeños y menos productivos de la economía bajo análisis, reviste así características cautelosas y conservadoras.
Un sector con importante ENO es la construcción, para cuya estimación se combinan también fuentes sociodemográficas con registros administrativos. Por un lado, el CNPyV y la EPH para determinar la matriz de empleo demográfica y el stock de viviendas del partido. Por otro, la información económica
relativa volúmenes físicos de obras públicas y privadas8. De manera muy simplificada, la diferencia entre el volumen físico captado por los registros oficiales y las viviendas totales que figuran en el CNPyV 2001, es una forma de medir la ENO en esta actividad.
Otro sector no observado y estimado para el PBG local, lo constituye la producción de los hogares, conformado por el servicio doméstico remunerado y los servicios por el uso de la vivienda propia. En el caso del servicio doméstico, se utilizaron los datos provistos por la EPH para el año 2004 para incluir el VA generado por las actividades de hogares privados que emplean personal doméstico de todo tipo. El VA se calcula como la suma de los sueldos y jornales pagados y los aporte patronales correspondientes.
La imputación de los servicios de la vivienda propia, implicó, en primer lugar, determinar una serie del stock de viviendas por tipo (casas A, departamentos y deficitarias) según CNPyV 2001, actualizado con la evolución de los permisos de edificación hasta 2004. Para la valorización, que refiere a un significado económico diferente de los monetarios (SCN ,1993) se definieron tres usos de las viviendas; para veraneo, de residencia durante todo el año y otros destinos en zonas más alejadas del centro, correspondiendo imputarle diferentes valores de alquileres a cada una.
Estos servicios -vivienda propia y servicio doméstico remunerado- que no son captados por las estadísticas económicas, forman parte de la CIIU y son siempre considerados en las mediciones de las Cuentas Nacionales. Las especificaciones que se han provisto completan la metodología de los ajustes efectuados en el Partido para el año base 2004.

6. Resultados

En la Tabla 1 se presenta la estimación del PBG por ramas de actividad de acuerdo a la clasificación de actividades antes mencionada. El VA total (o PBG) asciende, en 2004, a algo más de 6 mil millones de pesos. El Sector Primario participa con un 9,8% del PBG; el Sector Secundario con un 26,3% y con un 63,9%, el Sector Terciario. La clara orientación hacia los servicios del partido es consistente con una ciudad orientada al turismo (Atucha y Volpato, 2002).

Tabla 1. Producto Bruto Geográfico del Partido de General Pueyrredón, según los principales
sectores de actividad. Año 2004. En miles de pesos.


(Fuente: elaboración propia en base a Wierny et al., 2012)

Como se ha desarrollado en el apartado anterior una parte importante de estos valores corresponden a la ENO. Cabe recordar que el SCN menciona específicamente los cinco tipos de actividades de difícil medición que recomienda deben ser incluidas dentro de la frontera de la producción aunque las ilegales no han sido tenidas en cuenta en este trabajo siguiendo el tratamiento que reciben a nivel país.
Mediante la aplicación del método italiano fue posible acercarse a los puestos de trabajo faltantes en aquellas ramas alcanzadas por el CNE inicialmente. En la Tabla 2, puede verse en forma discriminada por asalariados y no asalariados, los ocupados captados por el Censo y la cantidad a incorporar.

Tabla 2. Puestos de trabajo registrados por el CNE y a incorporar mediante el método italiano. En miles. Año 2003

(Fuente: elaboración propia en base a Wierny et al., 2012)

Los ocupados captados por la matriz de empleo económica eran 55,1 mil y los determinados a partir de la construcción de la matriz de empleo demográfica sumaban 133 mil, por lo tanto, fue necesario incorporar 77,8 mil puestos de trabajo, es decir, un 59% adicional. Los asalariados que se agregan suman casi 42 mil puestos de trabajo, y representan el 54% del ajuste. El resto son los no asalariados detectados gracias a la comparación entre las matrices, otros 36 mil9. El gráfico 1 muestra en las porciones más claras de cada barra la cantidad de puestos faltantes, y por ende, ilustra una primera aproximación de la importancia de la ENO por rama.


Gráfico 1. Comparación de los puestos de trabajo captados por el CNE y los incorporados por ENO. 2003 por ramas de actividad corregidas.

Este gráfico expone claramente que el grado de sub registro de ocupados es diferencial por rama. Luego de las imputaciones de valor a cada nuevo puesto, según su característica de asalariado o no asalariado, se estimó el VA que se debe sumar a las estimaciones del CNE. La tabla 3 resume los resultados originales del CNE para el año 2003 por sector y los resultados finales para el mismo período luego de incorporar los locales no captados por el censo económico y captados por otras fuentes o registros (como en el caso de industria por el Observatorio PyME o en el caso de Restaurantes por padrones gastronómicos locales), conjuntamente con los ocupados incorporados a partir de las fuentes sociodemográficas. La diferencia entre los resultados originales y los corregidos son los atribuidos a la economía no registrada o no observada.

Tabla 3. VA de la economía no observada estimada por el método italiano Año 2003. En millones de pesos.

(Fuente: Wierny et al., 2012)

Al interpretar estos ajustes y sus magnitudes que, en promedio, duplican los valores registrados por el CNE es necesario diferenciar las razones de estos subregistros. Además de poner de manifiesto características de informalidad o formar parte de la economía subterránea, parte de estos resultados remiten a omisiones propias del dispositivo censal. Específicamente, la fecha en que se realizan estos operativos no permite captar adecuadamente aquellas actividades estacionales, de importancia en la estructura productiva local tales como las relacionadas con el esparcimiento (gastronomía, espectáculos, balnearios, etc.).
Hasta aquí, las ramas ajustadas indican un aumento del PBG en un 54,5% y la rama que está sujeta a un mayor ajuste (127,8%) forma parte del sector terciario y es la de los servicios a las empresas que incluye las actividades contables, de gestión, de arquitectura, ingeniería. jurídicas, de publicidad, de investigación y seguridad, de limpieza, de fotografía, etc. Le siguen en orden decreciente la salud privada (100%), hotelería y gastronomía 63,3%) y el comercio (56,9%). Esto modifica sustancialmente la estructura de participación relativa de cada rama en el total del PBG.
Como consecuencia de la aplicación de la metodología descripta en este trabajo se producen ajustes muy disimiles en las variables de empleo y VA, 78% y 59% respectivamente. La productividad final (VA por ocupado) resulta, como consecuencia, inferior a la inicial. Esto es producto de que las imputaciones de VA, de acuerdo a la metodología adoptada, se determinan en base a los valores que corresponden a los estratos de los establecimientos más pequeños registrados por el CNE -lo cual resulta consistente con la informalidad.
Las ramas que figuran en la tabla 1, sobre las que se efectuaron ajustes a partir de la información del CNE, no abarcan la totalidad el espectro productivo local perteneciente a la ENO. Otro sector no observado cuya inclusión sigue el método italiano es la construcción en el cual la economía no registrada es muy significativa. Tenía un VA registrado para el año base de de 85,3 millones de pesos y se le añadieron 265,5 millones de VA no registrado, es decir la ENO más que triplica el valor de lo observado. Con la incorporación de esta actividad, el ajuste llega a casi el 67% del Valor Agregado total del partido. Por su parte, los servicios de la vivienda, actividad que no pasa por el mercado,
agregan al PBG local casi 7000 millones de pesos en 2004 y el servicio doméstico remunerado 36,8 millones.
Finalmente, hay que destacar los sectores dentro del PBG que no tienen ENO por definición, tal el caso del sector público, el cual incluye la actividad de la administración pública en las tres jurisdicciones así como la salud y la educación públicas. Tampoco figuran en la tabla los sectores pertenecientes al Sector Primario dado que la fuente de estimación usada en ellos no es el CNE sino operativos especiales como los censos agrícolas ganaderos, los mineros o los pesqueros que relevan información con foco en la producción prescindiendo así de la necesidad de confrontar fuentes demográficas y económicas.

Palabras finales

Este documento expone en forma detallada las actividades económicas que implican zonas problemáticas de la ENO y pudieron ser incluidas en las mediciones del PBG del Partido de General Pueyrredón. Así se da cumplimiento a la prescripción de que

"Corresponde (...) a los expertos en contabilidad nacional informar a los usuarios acerca de la amplitud de la economía no observada- en otros términos, de la amplitud de la actividad económica que puede no estar considerada en el PIB, después de haber procedido a los distintos ajustes..." (OCDE, 2002).

Se ofrece así una imagen más completa de la economía local, ya que las estadísticas generadas resultan más precisas y abarcativas de todas las actividades económicas, aún de aquellas que quedan ocultas de los registros y operativos económicos, de acuerdo a las definiciones y pautas consensuadas en el SCN.
En este sentido, es necesario poner de manifiesto que la tarea efectuada contó con ciertos elementos facilitadores del entorno. Por un lado, responde a que el Municipio es consciente de la importancia de contar con datos de empleo y producción, consistentes conceptual y metodológicamente, confiables y comparables, en tanto permite la toma de decisiones en el ámbito público y privado. En ese sentido, impulsó que sean reanudadas las estimaciones del PBG y gestionó los recursos necesarios. Por otra parte, la Universidad Nacional de Mar del Plata cuenta con investigadores formados para llevar adelante un proyecto de tal magnitud y reconoce que toda la comunidad dedicada a la investigación científica en las disciplinas sociales se beneficiarán directamente de esta nueva información.
La posibilidad de alcanzar una mayor exhaustividad en las estimaciones del PBG se debe además a la disponibilidad de fuentes de información sociodemográfica -EPH, CNPyV, registros locales específicos-, además de la económica, como el CNE, que posibilitaron los ajustes necesarios.
Los resultados hallados informan acerca de la importancia de las actividades informales, subterráneas y no captadas por deficiencias de los instrumentos de recolección de datos en el territorio. Casi el 70% de las actividades económicas que se realizan en el Partido están sujetas a situaciones de este tipo. Esto debe ser considerado como una señal de alerta, sobre todo porque remiten en mayor medida, a una alta sub declaración de las empresas y a condiciones de desprotección social de los marplatenses, desde el punto de vista de su inserción laboral.
En posteriores comunicaciones se presentarán análisis pormenorizados para cada rama de actividad, diferenciando además las contribuciones de cada categoría ocupacional, así como sus ingresos generados de la inserción laboral en la Economía No Observada.
Para finalizar, se retoma la idea presentada en la introducción, acerca del valor social de la información. Las externalidades positivas de contar con estadísticas, en este caso económicas, se
refieren a la reducción de los riesgos y las incertidumbres que interfieran con la toma de decisiones de producción e inversión de los agentes económicos (ANCE, 2009) que propendan a un mayor bienestar económico y social de la población.

Notas

2 El SCN es un conjunto de de recomendaciones aceptado por todos los países, relativas a la elaboración de mediciones de la actividad económica, elaborado por ONU. Su quehacer se desarrolla más adelante.

3 El concepto de Valor Agregado será definido en el apartado metodológico-

4 Para estimar el PBG del Partido se usó la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (ClaNAE 04) que se basa en la Clasificación Internacional Industrial Uniforme (CIIU) Revisión Tercera. Los dígitos dan cuenta de la desagregación de la actividad, así por ejemplo con el 01 (dos dígitos) aparece Agricultura, Ganadería, Caza y Silvicultura; a tres dígitos (011) es sólo Agricultura; a cuatro (0111) comprende el cultivo de Cereales, Oleaginosas y Forrajeras y a cinco dígitos (01111) comprende sólo Cereales. La mención de "a cinco dígitos" refiere entonces al máximo nivel de detalle.

5 La incorporación de las actividades ilegales en las estimaciones de PBI se halla aún en etapa de experimentación. En algunos países los flujos monetarios generados por estas actividades son de tal magnitud que provocan distorsiones internas en las estadísticas formales de producción y empleo, por lo que han realizado esfuerzos deliberados en pos de su inclusión (PNUD, 2009; OCDE, op.cit. SCN 1993 CEPAL, 2008).

6 El Observatorio PyME Regional de General Pueyrredón y zona de influencia es producto de la iniciativa de la Universidad de Bologna, la Fundación Observatorio Pyme y el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires. La Universidad Nacional de Mar del Plata participó en la aplicación de una metodología uniforme para crear un mecanismo continúo de análisis comparativo del papel de las PyME en cada región, su evolución y el impacto que en ellos tienen las grandes transformaciones económicas. Se consideraron Instrumentos para monitorear continuamente la demografía industrial y empresaria de las PyME de las distintas regiones de Argentina.

7 Ofrece información sistemática y periódica sobre aspectos demográficos, sociales y de empleo.

8 Los registros oficiales consisten en metros permisados o finales de obra para vivienda privada y ejecuciones presupuestarias en construcción pública.

9 En el caso del sector educación privada, los padrones administrativos locales superaban los establecimientos del CNE. Se incorporaron los locales faltantes con el VA, VBP y CI y ocupados de establecimientos similares registrados. Al comparar esta nueva base ajustada, con la Matriz de Empleo demográfica, resultó que no había diferencias que indicaran ocupación faltante a imputar.

Bibliografía

1. Academia Nacional de Ciencias Económicas (2009). Sistemas estadísticos Aportes para una estrategia. Documento del grupo de Trabajo en Información Económica y Social. Buenos Aires [En línea] http://www.anceargentina.org/documentos/1/SISTEMAS%20%20ESTADISTICOS%20%20APORTES%20PARA%20UNA%20ESTRATEGIA.pdf         [ Links ]

2. Atucha, Ana Julia y Volpato, Guillermo (2002). "Características productivas del Partido de General Pueyrredon. Características y evolución de la estructura productiva". En: UNMdP. FCEyS. Mar del Plata productiva: diagnóstico y elementos para una propuesta de desarrollo local. Mar del Plata: FCEyS, pp. 24-30.         [ Links ]

3. CEPAL, 2008. Sistema de Cuentas Nacionales (mimeo). [En línea] http://www.cepal.org/cgibin/getprod.asp?xml=/publicaciones/sinsigla/xml/2/41572/P41572.xml&xsl=/deype/tpl/p10f.xsl&base=/deype/tpl/top-bottom.xsl         [ Links ]

4. CEPAL, 2010. "Elementos para una Metodología de Medición del Sector Informal en las Cuentas Nacionales. Documento de Trabajo". Serie Estudios Estadísticos y Prospectivos División de Estadística y Proyecciones Económicas. Santiago de Chile. [En línea] http://www.eclac.cl/publicaciones/xml/3/46353/LCL3462e.pdf        [ Links ]

5. Coremberg A. (2009) "Midiendo las fuentes del crecimiento en una economía inestable: Argentina. Productividad y factores productivos por sector de actividad económica y por tipo de activo". Serie Estudios y Perspectivas 41. Buenos Aires: CEPAL [En línea] http://www.eclac.org/id.asp?id=37587        [ Links ]

6. Guisarri A. (1989). La Argentina informal. Realidad de la vida económica. Buenos Aires: Emecé         [ Links ].

7. Labrunée, M.E. y Gallo, M.E. (2005). "Informalidad, precariedad y trabajo en negro. Distinción conceptual y aproximación empírica". En: Realidad Económica (210). pp. 60-76. ISSN 0325-1926         [ Links ]

8. Lacaze, M.V.; Atucha, A.J.; Adlercreutz, E.G. (2012). "Valor agregado en el cinturón frutihortícola de General Pueyrredón, Argentina: un análisis para cultivos tradicionales". (mimeo) remitido a Cuadernos de Desarrollo Rural, Pontificia Universidad Javeriana. ISSN 0122-145. (En evaluación).         [ Links ]

9. Luna M. 2008 "La reivindicación de la Cuentas Nacionales en la Economía Mundial" En: Revista Electrónica Ibertoamericana. Vol. 3 Nro. 2 [En línea] http://www.urjc.es/ceib/investigacion/publicaciones/REIB_03_02.pdf        [ Links ]

10. Narodowski P. (2008) La economía oculta como forma de ajuste en la cadena de valor. El caso de la petroquímica-plásticos. LITTEC. Universidad Nacional de General Sarmiento. En: Estudios del Trabajo, Nº 35. pp 35-70         [ Links ]

11. OCDE (2002) "Manual sobre la medición de la economía no observada". Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. Proyecto de Cooperación UE-CAN Estadísticas ANDESTAD [En línea] http://www.ilo.org/public/spanish/bureau/stat/download/guidelines/defempl.pdf        [ Links ]

12. OIT ( 2003). Informe de la Decimoséptima Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo. Ginebra, 24 de noviembre a 3 de diciembre. [En línea] http://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/---dgreports/---stat/documents/meetingdocument/wcms_087570.pdf         [ Links ]

13. OIT (1993). "Resolución sobre las estadísticas del empleo en el sector informal, Anexo II", Informe de la Conferencia, Decimoquinta Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo. Ginebra.         [ Links ]

14. Schneider F. y Enste D. (2002) "Ocultándose en las sombras. El crecimiento de la economía subterránea". En: Serie Temas de Economía 30. Washington: Fondo Monetario Internacional [En línea] http://www.imf.org/external/pubs/ft/issues/issues30/esl/issue30s.pdf        [ Links ]

15. Wierny, M ; Atucha, A.J.; Errazti, E.; López, M.T.; Volpato, G.; Governatori, V.; Labruneé, M.E. (2012). Producto Bruto Geográfico del Partido de General Pueyrredon. Año base 2004. Estimaciones y metodología. Mar del Plata: Universidad Nacional de Mar del Plata. [En línea] http://eco.mdp.edu.ar/pbg/pbg_estimaciones_2004.pdf        [ Links ]

Recibido: 26-11-12
Revisión editorial: 11.03..13
Aprobado definitivamente: 09.06.13