EDITORIAL

Veinte años en el Cincuentenario de la Facultad

 

La conmemoración del cincuentenario de la Facultad de Ciencias Humanas nos invita a repasar la historia de una institución anclada en un lugar de privilegio a nivel local, nacional e internacional, en lo que se refiere a la formación de grado y posgrado, a los centros de investigación consolidados, a la producción editorial y las actividades de extensión. Esta identidad institucional, su reconocimiento como un espacio de excelencia al interior de la UNCPBA es fruto de un proceso donde tiempo y lugar se fueron dando de la mano para conformarla y definirla.

Cuando el 5 de junio de 1964 la Facultad -en ese momento denominada Ciencias del Hombre- comenzó el dictado de clases en una casa alquilada, le otorgó una impronta al Instituto Universitario de Tandil enmarcado en un perfil profesional que diera respuesta a las demandas de la región, la cual se potenció en el tiempo. Las primeras inquietudes permitieron conformar un Centro de formación docente, el Profesorado en Ciencias de la Educación y Filosofía y Letras como carreras inaugurales a las que se sumaron las de Maestra jardinera y Asistente educacional en 1967. La formación de profesores y la capacitación estuvieron en el centro del escenario a medida que se recalificaba la institución privada que la albergaba: compra de edificios, su reconocimiento provisorio como Universidad de Tandil (1968) y el desarrollo de un perfil profesional más amplio que habilitó la creación de las facultades de Ciencias Económicas, Ciencias Físico-Matemáticas y Ciencias Veterinarias.

El 9 de octubre de 1974 se crea la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires y la Facultad, que al año siguiente pasa a denominarse Humanidades y en 1988 Ciencias Humanas, no sólo se proyecta a la región con su cuarta colación de grados y con nuevas ofertas como Asistente en Psicopedagogía y los profesorados de Educación Inicial e Historia, sino que lo hace desde el paradigma de universidad pública regional. Este complejo proceso suma innumerables actores internos (estudiantes, docentes, no docentes, graduados) y externos (municipalidad, asociaciones de amigos, entidades vecinales y políticas de diferentes ámbitos, entre otros) que, con mayor o menor visibilidad, bregaron por el pasaje de la Facultad del ámbito privado al público, por apostar a los esfuerzos colectivos en momentos de vaivenes políticos y financieros, con el fin de conformar un emprendimiento con fuerte perfil local y regional.

En el marco de celebración de este cincuentenario, la Revista Espacios en B/anco cumple veinte años. Este aniversario nos invita a recordar y conmemorar los comienzos y a todos aquellos que han participado para que hoy se haya constituido en un referente nacional e internacional. Si nos retrotraemos a sus inicios, el primer y segundo número de la Revista actuaron como carta de presentación de la producción de un grupo de docentes e investigadores de la Facultad. Los posteriores números se fueron abriendo a un público más amplio de autores y lectores, anexando nuevas secciones hasta llegar al formato que hoy conocemos.

Ya se ha escrito en la editorial del N° 19 la historia de Espacios en Baanco, el porqué de su nombre y todos aquellos que contribuyeron y siguen contribuyendo a su vigencia y crecimiento; al que ahora se ha sumado un grupo de jóvenes investigadores del NEES quienes, como Equipo Editorial, con renovadas ideas y energías nos interpelan a nuevos desafíos. En ésta queremos hacer referencia a la importancia de la publicación en nuestra área de conocimiento y la lucha por buscar un espacio propio, definido bajo los parámetros que caracterizan y singularizan a las Humanidades y Ciencias Sociales, que no siempre tienen el lugar y el reconocimiento que consideramos les corresponde en los organismos científicos, sean estos gubernamentales, no gubernamentales y aún en nuestros propios claustros universitarios. Así como adherir a la apelación que actualmente están realizando diferentes grupos de investigadores al establecimiento de criterios diferenciales de evaluación que respeten sus presupuestos epistemológicos y metodológicos; y su modo de transferir conocimientos asumiendo un fuerte compromiso social.

Como homenaje a estos dos procesos fundacionales, entre otras actividades queremos recuperar el Tatter de Memoria Instítudona/ de la Carrera de Ciencias de la Educación que, junto con la Secretaría de Extensión de la Facultad, desde junio de 2014 realizarán una intervención permanente de diálogo entre pasado y presente. En un aula se instalarán imágenes de esos lugares, actores e hitos que, al tiempo que testimonian un pasado, pretenden generar un diálogo intergeneracional entre los que abrieron camino y los que hoy asumen nuevos desafíos. Como actividad específica del vigésimo aniversario de la Revista Espacios en B/anco, la Dirección, el Comité y Equipo Editorial, junto con los directores de los proyectos radicados en el NEES organizarán un evento académico de carácter internacional que reunirá a todos aquellos docentes, graduados, alumnos e investigadores que han sostenido su permanencia y calidad en el tiempo desde la lectura, producción, divulgación e intercambio. Dicho evento se propone generar y consolidar un ámbito para compartir experiencias, problematizar e indagar sobre los intersticios de la cuestión educativa en forma conjunta con una mirada integradora en cuatro ejes temáticos: Educación superior; Fundamentos filosófico-pedagógicos de la educación; Cambio social, sujetos y prácticas educativas; Políticas, prácticas y experiencias educativas; e Historia de la educación.

Este I Encuentro Internacional que tendrá lugar los días 29, 30 y 31 de octubre del presente año, lo hemos titulado Espacios de investigación y divulgación recuperando esos objetivos fundacionales de la Revista: invitar a ""incluirse en el espacio del pensar..., en el espacio del compartir experiencias,... brindando este uugar desde el cual se puedan anudar subjetividades, en ese ir en camino hacia el conocimiento' y su difusión. Con la convicción que el espacio que llenemos, abrirá a múltiples espacios en blanco a ser pensados, compartidos en esa búsqueda permanente del conocer.