SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.16 suppl.1Materias primas líticas y su utilización en las cuencas de los ríos Chico y Santa Cruz (provincia de Santa Cruz, Patagonia argentina)Obsidiana verde en Tierra del Fuego y Patagonia: caracterización, distribución y problemáticas culturales a lo largo del Holoceno índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Intersecciones en antropología

versión On-line ISSN 1850-373X

Intersecciones antropol. vol.16  supl.1 Olavarría oct. 2015

 

ARTÍCULOS

Disponibilidad de rocas y costos de aprovisionamiento en el extremo austral de Patagonia meridional: integración de resultados en una escala regional

 

Judith Charlin y Cecilia Pallo

Judith Charlin. Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Instituto Multidisciplinario de- Historia y Ciencias Humanas (IMHICIHU). Universidad de Buenos Aires. Saavedra 15, 5º piso (1083), Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. E-mail: judith.charlin@gmail.com
Cecilia Pallo. CONICET. IMHICIHU. Saavedra 15, 5º piso (1083), Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. E-mail: ceciliapallo@gmail.com

Recibido 21 de noviembre 2014.
Aceptado 10 de junio 2015


RESUMEN

Nuestro trabajo en el sur de Patagonia meridional estuvo orientado al estudio de la disponibilidad de rocas para la manufactura de artefactos con el objetivo de evaluar las estrategias de aprovisionamiento y explotación de las materias primas líticas implementadas por los grupos humanos durante el Holoceno tardío. Nuestro foco de trabajo ha sido el campo volcánico Pali Aike (CVPA, Santa Cruz, Argentina) y áreas vecinas, sumando un total de 84 fuentes potenciales de aprovisionamiento que han sido muestreadas. El presente trabajo persigue tres objetivos: por un lado, se presenta una síntesis de los análisis petrográficos y geoquímicos realizados, y de las principales conclusiones derivadas; por otro lado, se integran los resultados sobre la abundancia, riqueza, tamaño y calidad de las rocas para la talla por fuente potencial de aprovisionamiento en una escala regional mediante un análisis de componentes principales. Finalmente, se comparan los radios de distancia implicados en la obtención de las rocas representadas en los contextos arqueológicos por sectores del espacio y se evalúa el ajuste de diferentes modelos espaciales a través de regresión múltiple. De esta forma se discuten los costos vinculados a la obtención de los recursos líticos con el fin de ofrecer una visión integrada de la movilidad y uso del espacio por parte de las poblaciones cazadoras-recolectoras que ocuparon el sur de Patagonia meridional.

Palabras clave: Materias primas líticas; Disponibilidad; Costos de aprovisionamiento; Sur de Patagonia meridional.

ABSTRACT

Rocks availability and provisioning cost in southernmost patagonia: results integration on a regional scale.

Our studies about lithic raw materials availability in southernmost Patagonia pursued the aim to assess provisioning and exploitation rock strategies by hunter-gatherer populations during Late Holocene. With this objective we sampled a total of 84 lithic potential sources in the Pali Aike Volcanic Field (PAVF, Santa Cruz Province) and areas nearby. In the present study our goals are threefold: on the one hand, a synthesis of previous petrographic and geochemical studies and their main conclusions are presented. On the other hand, data about lithic raw materials abundance, richness, flaking quality and size of each potential source are integrated in a regional scale. Finally, provisioning distances by sectors are compared and the fit of different spatial models are tested using multiple regression. All these data are used to assess provisioning costs and to discuss hunter-gatherers mobility and landscapeuse in southernmost Patagonia.

Keywords: Lithic raw materials; Availability; Provisioning cost; Southernmost Patagonia.


 

INTRODUCCIÓN

El estudio de la disponibilidad de rocas ha ocupado un lugar de extrema importancia en el desarrollo de nuestras investigaciones, ya que constituye el marco de referencia para evaluar la explotación de las materias primas líticas por parte de los cazadores-recolectores que ocuparon el sur de Patagonia meridional durante el Holoceno tardío (Charlin 2009). Así, el estudio de la disponibilidad de rocas ha involucrado tres tareas fundamentales: 1. el muestreo de las fuentes potenciales de aprovisionamiento lítico; 2. la determinación petrográfica de muestras naturales y artefactuales; y 3. la realización de análisis geoquímicos. Con base en ello, nuestro trabajo se organiza de la siguiente manera: Primero, se presenta una breve síntesis de la información obtenida y los resultados alcanzados en cada una de las tres áreas recién señaladas. Luego, se resume la información sobre abundancia de tipos de roca, calidad para la talla, tamaño y riqueza por fuente potencial de aprovisionamiento lítico a través de análisis estadísticos multivariados, mostrando la relación entre casos y variables según sectores del espacio. Finalmente, se comparan las distancias implicadas en el aprovisionamiento de rocas y se evalúa el ajuste de varios modelos espaciales que dan cuenta de la cantidad de tipos de rocas que es posible obtener en función de la distancia. Nuestro objetivo general es evaluar similitudes y diferencias en el uso del espacio y la movilidad asociada con el aprovisionamiento de rocas en una escala regional de análisis, para ofrecer una síntesis e integración de viejos y nuevos datos.

SÍNTESIS DE LOS ESTUDIOS PREVIOS

Para evaluar la disponibilidad de materias primas líticas en el sur de Patagonia meridional hemos seguido la estrategia de muestreo para fuentes potenciales de aprovisionamiento lítico propuesta por Franco y Borrero (1999). Dicha técnica permite comparar la oferta relativa de recursos líticos en diferentes puntos del espacio con una base cuantitativa, registrando la cantidad de rocas aptas para la talla que un número de personas puede obtener en una unidad de tiempo establecida (minutos). Así, hemos realizado un total de 84 muestreos de roca que cubren los diferentes sectores del CVPA (valle del río Gallegos, interfluvio Gallegos-Chico y sur del río Chico), las nacientes del río Gallegos (zona de Los Morros y río Turbio hacia el NO) y la costa nororiental del estrecho de Magallanes. En la Tabla 1 se muestran las principales variables cuantitativas que permiten evaluar el rendimiento relativo de cada fuente y, en una escala mayor, de los diferentes sectores del espacio regional. Por cuestiones de espacio solamente se incluye la proporción de RGFO y dacitas por fuente potencial de aprovisionamiento, dado que han sido las principales materias primas utilizadas para la manufactura de artefactos (ver infra el detalle sobre la medición de cada variable). Las investigaciones previas en el CVPA señalaban que la roca predominantemente utilizada para la manufactura de los artefactos líticos en los diferentes sitios del área era el basalto (Sanguinetti de Bórmida 1976, 1982, 1984; Massone e Hidalgo 1981; Nami 1984a y b, 1986, 1999; Gómez Otero 1986-1987, 1989-1990; Bird 1988; Prieto 1989- 1990, 1997, entre otros). Por su parte, los estudios geológicos indicaban que el CVPA, el cual cubre una superficie entre 4500-3000 km² según las distintas estimaciones, estaba compuesto por basalto alcalino y basanita (Skewes 1978; D'Orazio et al. 2000; Mazzarini y D'Orazio 2003, entre otros).

Tabla 1. Información cuantitativa sobre los muestreos de roca efectuados en 84 fuentes potenciales de aprovisionamiento lítico.


Referencias: Loy: Punta Loyola; GA: Güer Aike; PA: Palermo Aike; PAc: Palermo Aike camping; 1MY: Primero de Mayo; BTR: Las Buitreras; CAR: La Carlota; Z: El Zurdo; IN: el Indio; PKA: Potrok Aike; RR: Río Roble; LC: Laguna Carolina; Bi: Laguna Bismarck; RCH: Río Chico; DB: Don Bosco; 3EN: Tres de Enero; FR: Sierra de los Frailes; AZ: Laguna Azul; PAL: Paleocauce; OB: Orejas de Burro; MtAy: Monte Aymond; RiM: Roncón del Morro; LCdr: Laguna Cóndor; MCh: Morro Chico; RT: Río Turbio; Fleu: Fleuret; Lga: Laguna Larga; Pos: Bahía Posesión; PtaDel: Punta Delgada; BSan: Bahía Santiago; SGr: San Gregorio; BLar: Bahía Laredo. nc: no es posible calcular el desvío estándar ya que el dato de tamaño no corresponde a la media sino a un sólo ejemplar apto para la talla.

Los primeros muestreos de rocas que realizamos en los depósitos secundarios al SO del CVPA no mostraron la disponibilidad de nódulos de basalto en ningún caso, por lo cual nuestra hipótesis preliminar de trabajo fue que los afloramientos primarios del CVPA habrían funcionado como la principal fuente de aprovisionamiento de esta roca. Para testear esta hipótesis y gracias a la colaboración del Dr. M. D'Orazio (Departamento de Ciencias de la Tierra, Universidad de Pisa, Italia), efectuamos análisis geoquímicos sobre una muestra de 10 artefactos procedentes de distintos sectores del CVPA con el objetivo de determinar su procedencia. El conjunto de estas muestras nos brindaba una cobertura espacial amplia que nos permitía evaluar la existencia de variabilidad en los tipos de basalto utilizados en distintos sectores del CVPA. Esto era importante ya que los estudios previos de D'Orazio y coautores (2000) indicaban la existencia de tres unidades volcánicas con diferente composición geoquímica. El análisis de las muestras artefactuales fue realizado en el Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Pisa. Los elementos mayoritarios fueron determinados mediante fluorescencia de rayos X, en tanto que los elementos traza fueron identificados mediante espectrometría de masa (ICPMS) (ver Tykot 2004 para una descripción de los diferentes tipos de análisis geoquímicos; Charlin et al. 2010). Una síntesis de los resultados obtenidos es la siguiente:

1. Ninguna de las muestras artefactuales analizadas fue manufacturada sobre rocas del Plioceno- Cuaternario del CVPA.
2. Siete de las muestras son composicionalmente muy similares, con una distribución de elementos típica de rocas orogénicas. La identificación de un corte delgado efectuado sobre una de las muestras indicó que se trata de dacitas; en consecuencia, no se encuentran relacionadas con las rocas volcánicas de los plateau basálticos cenozoicos de Patagonia.
3. Las tres muestras restantes corresponden, cada una de ellas, a diferentes tipos de roca (dos sedimentarias y una dudosa, debido al elevado grado de alteración que presenta).

La conclusión más importante que se desprende de estos resultados es que los afloramientos primarios del CVPA no fueron utilizados como fuente de abastecimiento de basalto, a pesar de su abundante oferta (Charlin et al. 2010). Esto puede encontrarse relacionado con la baja calidad para la talla que en general presenta este tipo de basalto (siguiendo los criterios de textura de la matriz y contenido de cristales u otras heterogeneidades señaladas por Aragón y Franco 1997). Por otro lado, la distribución espacial de las muestras artefactuales analizadas mostró que la dacita (el basalto de los estudios previos) había circulado por los distintos sectores de Pali Aike (norte, centro y sur del CVPA, incluyendo sitios cercanos a la costa Atlántica, como cañadón Gap). Estos resultados, junto con aquellos obtenidos a partir de la determinación microscópica de cortes delgados efectuados sobre otro conjunto de muestras, indicaron que las rocas negras utilizadas para la manufactura de artefactos correspondían a diferentes tipos petrográficos, en muchos casos diferentes al basalto. Por este motivo, se decidió denominar "rocas de grano fino oscuras" (RGFO) a este conjunto de materias primas de color negro, para evitar ambigüedades en la clasificación a ojo desnudo (Charlin 2005). Esto impulsó un muestreo más intensivo de los depósitos glacifluviales con el fin de detectar la fuente de procedencia de la dacita negra y de las otras variedades de RGFO registradas. Así, fueron muestreadas diferentes unidades del paisaje, tales como márgenes de ríos y lagunas, hoyadas de deflación, terrazas fluviales, entre otras. Las RGFO mostraron ser escasas y de disponibilidad restringida a determinados sectores del espacio regional, como el valle del río Gallegos y el interfluvio río Gallegos-río Chico, hacia el norte del CVPA. Hacia el sur del río Chico estas rocas se encuentran totalmente ausentes (Charlin 2009).
A partir de las nuevas muestras de RGFO recolectadas en el sector septentrional del CVPA se realizaron nuevos análisis geoquímicos. Se seleccionaron 20 ejemplares: seis muestras naturales recuperadas en Punta Loyola (n = 1), Palermo Aike (n = 2), Potrok Aike (n = 2) y El Zurdo (n = 1), 14 artefactos de sitios arqueológicos con secuencias de ocupación prolongadas,
que se extienden desde principios del Holoceno tardío hasta momentos históricos (Charlin y D'Orazio 2010). La selección de las muestras artefactuales estuvo orientada a evaluar la existencia de posibles cambios temporales en la explotación de estas rocas. La determinación de los elementos mayoritarios se efectuó mediante espectrometría de emisión óptica (ICO-OES), y la de los elementos traza, a través de espectrometría de masa (ICP-MC) en el laboratorio ACTLABS (Canadá).
Los resultados arrojados por estos estudios indicaron que la mayoría de las muestras (n = 15), tanto naturales como artefactuales, representaban el mismo tipo de roca. Se trata de la dacita detectada en los análisis previos (Charlin y D'Orazio 2010). Los análisis geoquímicos indicaron que esta roca se encuentra disponible en la laguna Potrok Aike (debido a su mayor abundancia en esta laguna, esta dacita es actualmente denominada "tipo Potrok Aike" [Charlin y Pallo 2013]), en la margen sur del río Gallegos en la Eª Palermo Aike, y en la costa atlántica, en Punta Loyola. Otros tipos de RGFO también fueron detectados en las fuentes muestreadas: basanita primitiva del CVPA en El Zurdo, andesita basáltica en Potrok Aike y otro tipo de andesita en Palermo Aike. Ninguna de estas variedades tiene su correlato en las muestras artefactuales incluidas en ambos estudios geoquímicos (Charlin y D'Orazio 2010). Con respecto a los artefactos líticos, solamente se registraron dos muestras que no correspondían a la dacita tipo Potrok Aike. Se trata de una andesita diferente a la detectada en Palermo Aike y de una dacita diferente a la tipo Potrok Aike. Ambos tipos de RGFO son de procedencia desconocida hasta el momento (Charlin y D'Orazio 2010). De acuerdo con los fechados asociados con las muestras de artefactos analizadas es posible sostener que la dacita tipo Potrok Aike ha sido la roca principalmente seleccionada para la manufactura de artefactos desde los ca. 4000 AP hasta momentos históricos (Charlin y D'Orazio 2010).
El relevamiento reciente de la colección John Fell en el Instituto de la Patagonia (Universidad de Magallanes, Chile) ha mostrado que la explotación de esta roca se remonta a fines del Pleistoceno. La información geoquímica señaló que la dacita estudiada tiene una geoquímica de roca total diferente de otras rocas volcánicas ácidas conocidas en el sur de Patagonia para el Cuaternario (como las de los volcanes Reclus 50°S 73°W y Burney 52°S 73°W). La mayor afinidad se mantiene con las traquidacitas que proceden de los volcanes Macá y Cay, localizados más al norte (~45°S 73°W). Sin embargo, lo más probable es que los volcanes que fueron la fuente primaria de esta roca se encuentren actualmente erosionados (Charlin y D'Orazio 2010). Con los estudios subsiguientes, mediante los cuales se intentó discriminar las distintas variedades de RGFO al menos según su naturaleza, fue posible identificar una distribución diferencial en el espacio regional de las variedades volcánicas, sedimentarias y metamórficas (Charlin y Pallo 2013; Charlin y D'Orazio 2014). Así, mientras las RGFO volcánicas (frecuentemente dacitas, basaltos y andesitas) son predominantes a lo largo del río Gallegos (incluyendo el sector de su desembocadura en la costa Atlántica) y en el interfluvio Gallegos-Chico, las variedades sedimentarias (principalmente lutitas y fangolitas) son mayoritarias en la zona de sus nacientes (Los Morros y río Turbio), hacia el NO del CVPA (Charlin y Pallo 2013). Los muestreos de rocas realizados recientemente a lo largo de la costa del estrecho de Magallanes, entre bahía Posesión y bahía Laredo, han mostrado que las variedades metamórficas (pizarras) son las más abundantes en este sector del espacio (Charlin y D'Orazio 2014). Es importante remarcar que en ninguno de los nueve muestreos realizados en la costa del estrecho de Magallanes se ha recuperado dacita tipo Potrok Aike (Charlin y D'Orazio 2014). Este tipo sólo ha sido detectado en las fuentes antes señaladas, identificadas en los análisis geoquímicos (Potrok Aike, Palermo Aike y Punta Loyola) y en muestreos realizados en forma posterior, localizados en los mismos sectores del espacio donde se encuentran las fuentes identificadas geoquímicamente, a saber: en el río Zurdo -cerca de su confluencia con el río Gallegos-; en la Eª Primero de Mayo (fuera del tiempo de muestreo, curso inferior del río Gallegos); en la Eª Las Buitreras (curso medio del río Gallegos); y en las lagunas muestreadas en el interfluvio Gallegos-Chico, donde se registra su mayor abundancia. Nos referimos a las lagunas Carolina 1 y 2 (Eª La Carlota), Bismarck (Eª Markatch Aike, donde se recuperaron dos ejemplares fuera del tiempo de muestreo) y una laguna actualmente seca en el predio del INTA (Charlin y Pallo 2013).

LAS FUENTES POTENCIALES DE APROVISIONAMIENTO EN UNA ESCALA REGIONAL

Dado que los muestreos de roca efectuados hasta la fecha son abundantes (n = 84), realizamos un análisis de componentes principales (ACP) para presentar la información de manera sintética y mostrar las principales tendencias en la disponibilidad de rocas a escala regional. El espacio regional fue subdividido en cinco sectores con el objetivo de evaluar la existencia de diferencias en la disponibilidad de rocas. Tales sectores son: el río Gallegos, el interfluvio Gallegos-Chico (ambos al N del CVPA), el sur del río Chico (S del CVPA), las nacientes del río Gallegos hacia el NO del CVPA (zona de Los Morros y río Turbio) y la costa del estrecho de Magallanes. Los sectores han sido definidos de manera arbitraria y como una medida operativa, pero siguiendo las principales diferencias ambientales y topográficas. El ACP es una técnica descriptiva multivariada que da cuenta de la interrelación entre las variables que describen un fenómeno y entre estas y los casos de estudio, poniendo de manifiesto la estructura subyacente de los datos a través de variables hipotéticas o transformadas (los componentes), que explican la mayor parte posible de la varianza (Manly 1994). Para realizar dicho análisis se utilizaron el programa PAST 3.01 (Hammer et al. 2001) y las variables de la Tabla 1. A continuación describimos cómo ha sido medida cada una de las variables consideradas.
Abundancia: la recolección de rocas en los distintos puntos del espacio fue realizada en un tiempo determinado por un número de personas (Franco y Borrero 1999). Dado que estos parámetros no se mantuvieron constantes, fue necesario convertirlos a una unidad comparable. Como el número y tiempo mínimo registrado es de una persona por cinco minutos (1 p × 5 m), el rendimiento relativo de cada fuente potencial de aprovisionamiento fue estandarizado a dicha unidad. A partir del número total de rocas que es posible obtener por una persona en cinco minutos, se calculó la proporción de dacita y RGFO -los dos tipos de materias primas líticas más explotados para la manufactura de artefactosposibles de obtener en ese tiempo.
Proporción de rocas aptas para la talla: Dado que el número de rocas adecuadas para la manufactura de artefactos mediante talla no siempre es proporcional a la abundancia de nódulos en la fuente potencial de aprovisionamiento, se calculó la proporción de rocas aptas para la talla que es posible obtener en la unidad de comparación considerada (1 p × 5 m). La aptitud para la talla fue evaluada sobre la base de la calidad de las rocas para la manufactura de artefactos por percusión (sensu Aragón y Franco 1997). Así, aquellas rocas con calidad ≥ a buena fueron consideradas como rocas aptas. En muchos casos, la baja calidad de las rocas para la talla no se debe a las características intrínsecas de la pasta/matriz de la roca, sino a procesos de alteración físico-químicos, como la oxidación, el relleno secundario de fisuras o la infiltración de manganeso, entre otros.
Riqueza: se refiere al número de tipos de rocas por muestreo (Jones y Leonard 1989). Se trata de un número mínimo, dado que las RGFO -que constituyen diferentes tipos petrográficos- fueron contabilizadas como un sólo tipo, al igual que los casos en los cuales rocas volcánicas básicas (como basalto y andesita) o ácidas (como dacita y riolita) de grano fino, no pudieron ser identificadas con un mayor nivel de detalle a ojo desnudo. Asimismo, aquellas rocas clasificadas en un nivel genérico como sedimentitas, vulcanitas o metamorfitas -debido a diferentes factores que dificultaron su identificación megascópica, como la presencia de una alteración intensa, entre otros- sólo fueron contabilizadas en los casos en que no había otras rocas identificadas petrográficamente en estas grandes categorías. Las rocas indeterminadas fueron excluidas. Debido a que existe una correlación positiva (correlación de Spearman, rs = 0,57) y significativa (á = 0,05, p = < 0,01) entre la riqueza (s) de rocas y el tamaño de la muestra (n), los valores de riqueza fueron estandarizados a s/√n (Hammer et al. 2001).
Tamaño: se calcularon la media aritmética y el desvío estándar del eje mayor o diámetro máximo de las rocas aptas para la talla por fuente potencial de aprovisionamiento. Se utilizó el eje mayor como medida de tamaño porque es la variable con la que se cuenta para la totalidad de los relevamientos.

El ACP se realizó sobre la matriz de correlación dado que las variables están medidas en diferentes unidades. El biplot (casos y variables) se muestra en la Figura 1. Los dos primeros componentes resumen el 66% de las variaciones en la disponibilidad de materias primas de acuerdo con las variables consideradas. El eje 1 explica el 36,95% de las variaciones, que se encuentran principalmente relacionadas con la abundancia de rocas por fuente potencial de aprovisionamiento, la proporción de rocas aptas para la talla, el tamaño medio de ellas y sus variaciones (indicadas por el desvío estándar). Estas variables son las que muestran la correlación más alta con dicho eje (r = 0,74, 0,85, 0,67 y 0,68, respectivamente). El eje 2 explica el 29,27% de las variaciones y muestra las mayores correlaciones con la riqueza de rocas y la proporción de dacita y RGFO por fuente potencial de aprovisionamiento (r = 0,83, -0,74 y 0,64, respectivamente). Según los sectores diferenciados, en el gráfico se observan diferencias en la dispersión de los casos (las fuentes potenciales de los distintos sectores) y, por consiguiente, en su relación con los ejes. Las muestras del río Gallegos y del sector del CVPA al sur del río Chico son las que presentan la mayor dispersión (posiblemente relacionada con el mayor tamaño de las muestras de ambos sectores), la cual se encuentra principalmente relacionada con el eje 1 (y variables asociadas). Por el contrario, las muestras del interfluvio -del NO del río Gallegos y del estrecho de Magallanes- se encuentran más agrupadas, principalmente restringidas al sector derecho del gráfico, con puntajes en su mayoría positivos en ambos ejes. Esta distribución diferencial a lo largo de los ejes señala diferencias en la disponibilidad de rocas por sectores. Mientras el río Gallegos presenta variabilidad (valores altos y bajos) en la abundancia de rocas por fuente, en la proporción de rocas aptas para la talla y en el tamaño de ellas, las fuentes localizadas al sur del río Chico muestran predominantemente valores bajos en estas variables (menor abundancia en general y de rocas aptas para la talla en particular, y tamaños promedio más chicos en estas últimas, asociados con una menor variabilidad en dichos tamaños). Con respecto al eje 2, ambos sectores muestran una riqueza de rocas baja y una mayor cantidad de fuentes en las que predomina la dacita, especialmente en el caso del sector al sur del río Chico, donde las RGFO están completamente ausentes (Tabla 1). Por su parte, las fuentes potenciales de aprovisionamiento del interfluvio, del sector al NO del río Gallegos y del estrecho de Magallanes, son las que muestran la mayor abundancia de rocas en general y de rocas aptas para la talla en particular, los tamaños de nódulos más grandes en promedio pero ofreciendo variabilidad en el conjunto, la mayor cantidad de RGFO, la menor abundancia de dacita y la mayor riqueza de rocas disponibles.


Figura 1.
Análisis de componentes principales por fuente potencial de aprovisionamiento lítico.

En el ACP hemos considerado principalmente variables descriptivas relacionadas con el rendimiento relativo de las fuentes (abundancia, riqueza, calidad para la talla y tamaños de las rocas en general) y solamente hemos incluido dos variables referentes a los tipos de rocas disponibles (proporción de RGFO y dacita) para mantener la claridad de los patrones en un gráfico multivariado en dos dimensiones. Por este motivo, a continuación señalaremos brevemente algunas tendencias sobre la disponibilidad de otros tipos de rocas (que son menos abundantes en el paisaje) en los sectores diferenciados. Estas tendencias se desprenden del cálculo de una medida de abundancia relativa derivada de la cantidad de muestreos en los que se recuperaron los distintos tipos de rocas sobre el total de muestreos por sector del espacio (Tabla 2). Se excluyen los casos indeterminados. Para la clasificación de las materias primas se siguió la terminología propuesta por Alberti y Fernández (2015), y se incluyeron además algunas categorías utilizadas previamente a dicha propuesta. Muchas de ellas son resultado de la identificación microscópica de cortes delgados (Tabla 2).

Tabla 2. Abundancia relativa de tipos de rocas por sector del espacio.

Referencias: Cuar: cuarzo, Calced: calcedonia, Jas c/imp: jaspe con impurezas, Ft: ftanita, Rio: riolita, Traq: traquita, Andes: andesita, Bas: basalto, BBA: basalto-basanita.andesita, Tonal: tonalita, Dio: diorita, Diab: diabasa, Limol: limonita, Arenis: arenisca, Fangol: fangosita, Anfibil: anfibolita, Cuarc: cuarcita, Metabas: metabasalto.

Silicatos
El cuarzo muestra un incremento en su disponibilidad de norte a sur, y es más abundante en el estrecho de Magallanes, donde fue recuperado en siete muestreos sobre nueve. En el valle del río Gallegos y en el interfluvio se registran las menores frecuencias, que aumentan levemente hacia el NO, en la zona de Los Morros y río Turbio. Del total de 84 muestreos realizados a escala regional, la calcedonia solamente ha sido recuperada en uno de ellos, localizado al sur del río Chico, donde sólo se recuperó un ejemplar de esta roca (Charlin 2009). En el interfluvio, la calcedonia ha sido detectada fuera del tiempo de muestreo en las lagunas Potrok Aike y Carolina 1. En cada una de estas lagunas se han recuperado diferentes variedades según la coloración: blanca traslúcida en la primera y distintas variedades coloreadas en la segunda (Charlin y Pallo 2013). La disponibilidad del jaspe se incrementa de sur a norte, y es particularmente abundante en la zona de Los Morros-río Turbio, donde esta roca se recuperó en el 56% de los muestreos. La variedad de jaspe con impurezas también es más frecuente en el sector septentrional del CVPA, especialmente en el interfluvio. La ftanita (sensu Terruggi 1984) ha sido detectada en todos los sectores, excepto al sur del río Chico, y es más abundante en el interfluvio.

Rocas ígneas
Volcanitas ácidas e intermedias-básicas
La riolita solamente ha sido detectada en tres de los sectores muestreados; y mantiene porcentajes iguales y bajos (22%) en el interfluvio y al sur del río Chico. La traquita sólo ha sido identificada en el estrecho de Magallanes, zona donde se registran los porcentajes más altos de andesita (67%) y basalto (44%). La categoría basalto-basanita-andesita (BBA) ha sido acuñada en trabajos previos (Charlin 2009) para incluir a aquellas rocas basálticas, basaníticas y/o andesíticas que no es posible diferenciar a ojo desnudo. Las mayores abundancias se registran hacia el norte del CVPA, por lo cual, considerando las tendencias previas, estos tres tipos de rocas se encuentran disponibles frecuentemente a lo largo de toda la región de estudio.

Plutonitas ácidas e intermedias-básicas
Mientras el granito se encuentra más representado al sur del río Chico y hacia el NO del río
Gallegos (zona de Los Morros-río Turbio), la tonalita, la diorita y la diabasa son más abundantes en la costa del estrecho de Magallanes. La tonalita ha sido recuperada en todos los muestreos realizados en este sector (n = 9). Por su parte, el gabro, si bien muestra porcentajes de detección bajos, es relativamente más abundante en el interfluvio.

Rocas piroclásticas
Solamente se ha recuperado toba al NO del río Gallegos.

Rocas sedimentarias
Excepto la pelita -que ha sido registrada en todos los sectores (aunque con predominio hacia el NO del río Gallegos y en el estrecho de Magallanes)- y la lutita -en tres de ellos (aunque más frecuente en el interfluvio y hacia el NO del río Gallegos)-, la mayoría de las restantes variedades sedimentarias identificadas solamente han sido detectadas en lugares puntuales, sin mostrar una tendencia espacial clara. Así, la limolita sólo ha sido detectada en el valle del río Gallegos; la arenisca, al sur del río Chico; y la fangolita, en el estrecho de Magallanes. Rocas metamórficas Las distintas variedades de rocas metamórficas también muestran un patrón de distribución puntual, como en el caso anterior. Mientras la filita y el esquisto sólo han sido identificados al sur del río Chico (Charlin 2009), la pizarra y el metabasalto sólo se encuentran en el estrecho de Magallanes (Charlin y D'Orazio 2014). La anfibolita es más frecuente en el primer sector señalado, aunque también se encuentra disponible en el interfluvio. La cuarcita se encuentra distribuida por los cinco sectores, aunque predomina en el río Gallegos y al sur del río Chico con porcentajes de detección similares.

EL APROVISIONAMIENTO DE ROCAS EN LOS CONTEXTOS ARQUEOLÓGICOS: UNA EVALUACIÓN DE LOS COSTOS SEGÚN DISTANCIAS

A partir del ACP se mostraron las variaciones en la disponibilidad de rocas entre sectores del espacio, lo cual implica diferentes costos de aprovisionamiento relacionados con la distancia que es necesario recorrer para la obtención de los diferentes tipos de rocas y el transporte asociado (Beck et al. 2002; Kuhn 2004, entre otros). En el presente trabajo se considera la distancia lineal mínima (en km) entre los sitios arqueológicos y las fuentes potenciales de aprovisionamiento como un proxy de los costos asociados a éste (entre otros factores aquí no considerados, ver Kuhn 2004 para una discusión sobre el tema, y Charlin 2007 y 2009 para una evaluación de la relación entre intensidad de uso de los artefactos y distancia a la fuente de aprovisionamiento). Así, nos interesa comparar las distancias implicadas en el aprovisionamiento de rocas entre sectores del espacio regional. Persiguiendo este fin fueron cuantificados los tipos de rocas representados en los contextos arqueológicos (n = 65, incluyendo conjuntos de superficie y estratigrafía) y la cantidad de tipos que es posible obtener en radios de 5, 10, 20, 30 y 40 km lineales desde el sitio, de acuerdo con la información sobre la disponibilidad de rocas recuperada en los muestreos. En el conteo de las materias primas presentes en los contextos arqueológicos (CA en adelante) se tomaron en consideración tanto los artefactos como los ecofactos. Se excluyeron las obsidianas, cuya procedencia es alóctona considerando el umbral clásico de 40 km sugerido en los estudios etnoarqueológicos (Gould 1978; Gould y Saggers 1985), y las rocas que no poseen una determinación petrográfica precisa, como aquellas clasificadas genéricamente como vulcanitas, sedimentitas, metamorfitas y ftanitas (Teruggi 1984). Si bien se poseen datos de primera mano sobre la disponibilidad de rocas a lo largo de la costa del estrecho de Magallanes (Charlin y D'Orazio 2014), resulta difícil establecer un correlato con las materias primas presentes en los CA del área según los trabajos publicados, ya que en la mayoría de los casos estas han sido agrupadas en categorías generales, como "material silíceo" (Massone 1979) u "otros", donde se agrupan jaspe, cuarzo, calcedonia (Massone 1979: 79) y en algunos casos también ópalo (Massone 1979: 97). Otros trabajos sólo presentan las materias primas más frecuentes en los instrumentos (Prieto 1988; Constantinescu et al. 1999).
De acuerdo con la identificación de cortes delgados realizada recientemente sobre muestras naturales procedentes de la costa del estrecho de Magallanes (Charlin y D'Orazio 2014), se puede considerar a las rocas clasificadas como basalto y lutita en los trabajos previos (Massone 1979; Constantinescu et al. 1999) como RGFO, aunque no sabemos fehacientemente el color de estas rocas para incluirlas en esta categoría. Teniendo en cuenta todos estos factores, se decidió dejar de lado el sector del estrecho de Magallanes en la comparación regional. Así, se realizó un análisis de regresión múltiple (ver Moore 1995; VanPool y Leonard 2011, entre otros) considerando la cantidad de tipos de rocas representados en los CA como variable dependiente o respuesta (y) y la disponibilidad de esas rocas en el espacio (según los radios de distancia antes señalados) como variables independientes o predictoras (x1, x2, x3, x4 y x5). Este análisis nos permite evaluar cuántos km (en radio) es necesario recorrer desde los CA para obtener la mayor parte de las materias primas allí presentes. Para evitar tamaños de muestra pequeños, se agruparon los CA en dos grandes áreas: el N y S del río Chico, en relación con las grandes diferencias observadas en la disponibilidad de rocas según el ACP. El análisis de regresión nos permite poner a prueba la hipótesis nula de independencia entre la cantidad de tipos de rocas representados en los CA y la disponibilidad de rocas en el espacio. Así es posible evaluar comparativamente a qué distancia del sitio es posible obtener la mayor parte de las materias primas al N y S del río Chico. Sólo se contaron los "nuevos" tipos disponibles en cada rango de distancia, para evitar redundancia en la medición de las variables y multicolinealidad. En los casos en los que a pesar del aumento de la distancia no es posible obtener nuevos tipos de rocas se completó con cero, aunque los tipos de roca disponibles en el radio de distancia previo también se encontraran presentes. De esta forma, se intentó evitar la pérdida de independencia entre las variables predictoras (Tabla 3) que, por encontrarse medidas en una escala geográfica pequeña, podían mostrar autocorrelación espacial (similitud por cercanía).

Tabla 3. Matriz de correlación entre las variables predictoras en la regresión múltiple.

Referencias: Triángulo superior: valores p (α = 0,05) y Triángulo inferior: valores del coeficiente de correlación de Spearman

La autocorrelación espacial es una propiedad general de todas las variables medidas a lo largo del espacio geográfico en tanto comparten un mismo contexto físico y ambiental de acuerdo con la cercanía (Legendre 1993). Dado que los valores en un punto pueden ser, al menos, parcialmente predichos por los valores de los puntos vecinos, dichos valores no son independientes (Legendre 1993: 1659). La violación de este supuesto afecta la confianza en la inferencia estadística (Goodchild 2009). Sin embargo, desde la geoestadística y las ciencias geográficas esto no es considerado como un problema sino como una característica propia de los datos geográficos, la cual debe ser incluida en los análisis y modelados (Legendre 1993; Goodchild 2009). Dado que la cantidad de tipos de rocas presentes en los CA muestra una distribución con asimetría a la derecha, dicha variable (y) fue transformada a logaritmo de base 10. De esta manera se obtuvo una distribución simétrica según el test de Shapiro-Wilk (ver Hammer et al. 2001) bajo la hipótesis nula de que la muestra fue tomada de una población con distribución normal (W = 0,9495, p = 0,1641 para el sector N; W = 0,9509, p = 0,1207 para el sector S).
El modelo de regresión muestra un buen ajuste en ambos casos (ver resultados del ANOVA en Tabla 4), dado que explica el 67% de las variaciones en las materias primas presentes en los CA localizados al N del río Chico y el 88% en aquellos del sur. Sin embargo, las variables predictoras que muestran una relación significativa y explican los mayores porcentajes de varianza en ambos sectores del espacio son diferentes (Tabla 5). Al norte, el rango de distancia de 5 km es el que explica la mayor parte (31%) de las materias primas presentes en los CA, lo cual se encuentra en concordancia con la mayor oferta de rocas en este sector del espacio. Si bien los 40 km también muestran una relación significativa, el porcentaje de varianza explicado es muy bajo (1%). De hecho, en el radio de distancia de 40 km, son sólo dos los CA (Palermo Aike y Las Buitreras) que logran sumar una materia prima más al conjunto. El 65% (n= 13) de los CA localizados a lo largo del río Gallegos, el 50% (n= 2) de los ubicados al NO, y el 100% (n= 6) de los CA correspondientes al interfluvio Gallegos-Chico obtienen la mayoría (entre 60-100%) de las materias primas en 5 km (Figura 2).

Tabla 4. Ajuste del modelo de regresión múltiple.

Referencias: R Múltiple = coeficiente de correlación múltiple, R2 Múltiple = coeficiente de determinación múltiple y gl = grados de libertad.

Tabla 5. Parámetros del modelo de regresión.


Figura 2.
Radio de distancia donde se obtiene entre el 60-100% de las materias primas líticas por contexto arqueológico.

Diferente es el panorama hacia el sur, donde se observa un gradiente en la obtención de las materias primas según la distancia involucrada. Todas las variables predictoras mantienen una relación significativa con y, aunque su poder explicativo es diferente. En este análisis no se incluyó el rango de distancia de 40 km ya que no aporta ninguna materia prima nueva a ninguno de los CA aquí incluidos. Las mayores variaciones en las materias primas representadas en los CA (36%) son explicadas por el radio de distancia de 30 km, que es la distancia en la cual todos los sitios (n = 35) logran adquirir entre el 60-100% de las materias primas (Figura 2). Las diferencias en las distancias involucradas en la obtención de rocas señalan claramente las variaciones en la oferta regional y, por consiguiente, en los costos de abastecimiento entre estos dos grandes sectores del espacio. Esta diferencia se acrecienta notablemente si consideramos sólo la disponibilidad de RGFO. Para ejemplificar esto calculamos el índice de riesgo relativo (RR), el cual es un cociente entre las probabilidades de éxito en la obtención de RGFO al N y S del río Chico (RR = p1/p2 = 0,89/0,23 = 3,85). El RR indica que la probabilidad de obtener RGFO al N del río Chico es un 85% mayor que al S, lo cual marca una diferencia estadísticamente significativa en las probabilidades de aprovisionamiento entre un área y otra (z = 4,5396, p = < 0,01). Comparativamente, el mismo índice ha sido calculado para las dacitas, rocas que se encuentran ampliamente disponibles en la región, y en este caso muestra que las probabilidades de obtener esta roca son sólo un 6% mayores en el sector N con respecto al S (RR = p1/p2 = 0,98/0,92 = 1,06), lo cual no marca diferencias estadísticamente significativas entre ambas zonas (z = 1,1201, p = 0,26268).

CONCLUSIONES

Los análisis aquí presentados han mostrado claramente las variaciones en la oferta de rocas entre sectores del espacio y las diferencias que esto implica en las distancias involucradas en el aprovisionamiento. Así, diferentes costos y riesgos han sido señalados para el N y el S del río Chico. Esto tiene sus implicancias sobre las estrategias de aprovisionamiento y uso de las materias primas implementadas por los grupos humanos para hacer frente a estas variaciones, y en la movilidad y uso del espacio a escala regional. Al norte, la abundante oferta de recursos líticos facilita que el aprovisionamiento de rocas pueda ser realizado como una actividad embedded (Binford 1979); en tanto que al sur, su escasez (en abundancia, riqueza, calidad y pequeños tamaños) -sobre todo de las RGFOconlleva la necesidad de implementar una estrategia de conservación de los artefactos, que anticipe la necesidad de materiales o instrumentos en situaciones de incongruencia en la disponibilidad espacial de recursos (Binford 1979).
Esto implica una planificación del aprovisionamiento de rocas, lo cual puede ser entendido como un aprovisionamiento directo en términos de Binford (1979). Estos factores, junto con otros aquí no considerados, tales como la distribución de los recursos de procedencia marina y los valores de isótopos estables sobre restos óseos humanos (Borrero et al. 2001; Barberena 2002, 2008; Borrero y Barberena 2006), han mostrado un panorama que sugiere distintas formas e intensidad de uso de los sectores localizados hacia el norte y sur del CVPA, en concordancia con diferencias ambientales y ecológicas entre ambos espacios. Asimismo, estos sectores muestran diferentes relaciones con las costas, lo cual ha sido entendido en términos de esferas de circulación y rangos de acción (Barberena 2008; Charlin 2009).

Agradecimientos

El estudio de las materias primas líticas del sur de Patagonia meridional ha sido llevado a cabo en el marco de numerosos proyectos dirigidos por el Dr. L. A. Borrero (PIP-CONICET 112-200801- 00589, PICT-ANPCyT Nº 2046, UBACyT F-046, PIP-CONICET Nº 5676, PICT-ANPCyT Nº 04-9498, National Geographic Research Grant Nº 7736-04) y por la primera autora de este trabajo (PICT-ANPCyT 2008 nº 15). Agradecemos profundamente a la Dra. M. C. Etchichury y al Dr. M. D'Orazio, que han colaborado desinteresadamente en la identificación petrográfica de cortes delgados y en la realización e interpretación de los análisis geoquímicos. Por último, nuestros agradecimientos a los evaluadores del manuscrito, que han contribuido en su mejoramiento.

REFERENCIAS CITADAS

1. Alberti, J. y V. Fernández 2015 Propuesta clasificatoria para las materias primas en Patagonia (Argentina). Arqueología. En prensa.         [ Links ]

2. Aragón, E. y N. Franco 1997 Características de rocas para la talla por percusión y propiedades petrográficas. Anales del Instituto de la Patagonia 25: 187-199.         [ Links ]

3. Barberena, R. 2002 Los límites del mar. Isótopos estables en Patagonia Meridional. Colección Tesis de Licenciatura. Sociedad Argentina de Antropología, Buenos Aires.         [ Links ]

4. Barberena, R. 2008 Arqueología y biogeografía humana en Patagonia meridional. Colección Tesis Doctorales. Sociedad Argentina de Antropología, Buenos Aires.         [ Links ]

5. Beck, C., A. Taylor, G. Jones, C. Fadem, C. Cook y S. Millward 2002 Rocks are heavy: transport cost and Paleoarchaic quarry behavior in the Great Basin. Journal of Anthropological Archaeology 21: 481-507.         [ Links ]

6. Binford, L. 1979 Organization and formation processes: looking at curated technologies. Journal of Anthropological Research 35: 255-273.         [ Links ]

7. Bird, J. 1988 Travels and Archaeology in South Chile. University of Iowa Press, Iowa.         [ Links ]

8. Borrero, L. y R. Barberena 2006 Hunter-gatherer home ranges and marine resources. Current Anthropology 47 (5): 855-867.         [ Links ]

9. Borrero, L. A., R. A. Guichón, R. Tykot, J. Kelly, A. Prieto y P. Cárdenas 2001 Estudios de dieta por medio de isótopos estables sobre huesos humanos de Patagonia Meridional y Tierra del Fuego. Anales del Instituto de la Patagonia 29: 119-127.         [ Links ]

10. Charlin, J. 2005 Aprovisionamiento de materias primas líticas en el campo volcánico de Pali Aike (Santa Cruz): una primera aproximación a partir del análisis de los núcleos. Werken 7 (2): 39-55.         [ Links ]

11. Charlin, J. 2007 Una perspectiva espacial de la intensidad de uso de las materias primas líticas en el campo volcánico Pali Aike (Prov. Santa Cruz, Argentina). En Arqueología de Fuego-Patagonia. Levantando piedras, desenterrando huesos… y develando arcanos, editado por F. Morello, M. Martinic, A. Prieto y G. Bahamonde, pp. 129-138. Centro de Estudios del Cuaternario de Fuego, Patagonia y Antártica (CEQUA), Punta Arenas.

12. Charlin, J. 2009 Estrategias de aprovisionamiento y utilización de las materias primas líticas en el campo volcánico Pali Aike (Prov. Santa Cruz, Argentina). BAR International Series 1901. Archaeopress, Oxford.         [ Links ]

13. Charlin, J. y M. D'Orazio 2010 Fuentes primarias vs. secundarias de aprovisionamiento lítico: una comparación geoquímica (Pali Aike, Santa Cruz). En La arqueometría en Argentina y Latinoamérica, editado por S. Bertolino, G. R. Cattaneo y A. D. Izeta, pp. 153-158. Editorial de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba.         [ Links ]

14. Charlin, J. y M. D'Orazio 2014 Disponibilidad de materias primas líticas en la costa nororiental del estrecho de Magallanes (Chile). Una aproximación exploratoria. Magallania. Enviado para su publicación.         [ Links ]

15. Charlin, J. y M. C. Pallo 2013 Disponibilidad de materias primas líticas y uso del espacio en el interfluvio Gallegos-Chico (Pali Aike, Santa Cruz, Argentina). En Tendencias teóricometodológicas y casos de estudio en la arqueología de la Patagonia, editado por F. Zangrando, R. Barberena, A. Gil, G. Neme, M. Giardina, L. Luna, C. Otaola, S. Paulides, L. Salgán y A. Tívoli, pp. 307-316. Sociedad Argentina de Antropología, Buenos Aires.         [ Links ]

16. Charlin, J., N. Franco y M. D'Orazio 2010 El Campo Volcánico Pali Aike y las fuentes potenciales de aprovisionamiento lítico: primeros resultados geoquímicos. En Arqueología de Pali Aike y Cabo Vírgenes (Santa Cruz, Argentina), editado por L. A. Borrero y J. Charlin, pp. 31-53. CONICETIMHICIHU, Buenos Aires.         [ Links ]

17. Constantinescu, F., M. Arroyo, L. Contreras, F. Morello, M. San Román, I. Martínez y P. Cárdenas 1999 Estudios de impacto ambiental y arqueología en la costa norte del estrecho de Magallanes. Anales del Instituto de la Patagonia 27: 209-219.         [ Links ]

18. D´Orazio, M., S. Agostini, F. Mazzarini, F. Innocenti, P. Manetti, M. J. Haller y A. Lahsen 2000 The Pali Aike volcanic Field, Patagonia: Slab- Window Magmatism near the Tip of South America. Tectonophysics 321: 407-427.         [ Links ]

19. Franco, N. V. y L. A. Borrero 1999 Metodología de análisis de la estructura regional de recursos líticos. En En Los tres Reinos: Prácticas de recolección en el cono Sur de América, editado por C. Aschero, M. Korstanje y P. Vuoto, pp. 27-37. Magna, Universidad Nacional de Tucumán, Tucumán.         [ Links ]

20. Gómez Otero, J. 1986-1987 Investigaciones arqueológicas en el Alero Potrok Aike, provincia de Santa Cruz. Una revisión de los Períodos IV y V de Bird. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología XVII (1): 173-200.         [ Links ]

21. Gómez Otero, J. 1989-1990 Cazadores tardíos en la zona fronteriza del paralelo 52º sur. El paraje de Juni Aike. Anales del Instituto de la Patagonia 19: 47-71.         [ Links ]

22. Goodchild, M. 2009 What problem? Spatial autocorrelation and geographic information science. Geographical Analysis 41: 411-417.         [ Links ]

23. Gould, R. 1978 Anthropology of human residues. American Anthropologist 80 (4): 815-835.         [ Links ]

24. Gould, R. y S. Saggers 1985 Lithic procurement in Central Australia: a closer look at Binford's idea of embeddedness in archaeology. American Antiquity 50 (1): 117-136.         [ Links ]

25. Hammer, Ø., D. Harper y P. Ryan 2001 PAST: Palaeontological statistics software package for education and data analysis. Palaeontologia electronica 4 (1): 9 pp.         [ Links ]

26. Jones, G. y R. Leonard 1989 The concept of diversity: an introduction. En Quantifying Diversity in Archaeology, editado por R. Leonard y G. Jones, pp. 1-3. Cambridge University Press, Cambridge.         [ Links ]

27. Kuhn, S. 2004 Upper Palaeolithic raw material economies at ücagizli cave, Turkey. Journal of Anthropological Archaeology 23: 431-448.         [ Links ]

28. Legendre, P. 1993 Spatial autocorrelation: trouble or new paradigm? Ecology 74 (6): 1659-1673.         [ Links ]

29. Manly, B. 1994 Multivariate statistical methods: A primer. Chapman & Hall, CRC, Londres.         [ Links ]

30. Massone, M. 1979 Panorama etnohistórico y arqueológico de la ocupación Tehuelche y Prototehuelche en la costa del Estrecho de Magallanes. Anales del Instituto de la Patagonia10: 69-107.         [ Links ]

31. Massone, M. y E. Hidalgo 1981 Investigaciones arqueológicas en el alero Pali Aike 2. Anales del Instituto de la Patagonia 12: 125-140.         [ Links ]

32. Mazzarini, F. y M. D'Orazio 2003 Spatial distribution of cones and satellitedetected lineaments in the Pali aike Volcanic Field (southernmost Patagonia): insights into the tectonic setting of a Neogene rift system. Journal of Volcanology and Geothermal Research 125: 291-305.         [ Links ]

33. Moore, D. 1995 Estadística aplicada básica. Antoni Bosch, Barcelona.         [ Links ]

34. Nami, H. G. 1984a Análisis tipológico de los instrumentos provenientes del sitio "El Volcán" C. 4. Cuenca del Río Chico, Provincia de Santa Cruz. PREP: Informes de Investigación 1: 55-81.         [ Links ]

35. Nami, H. G. 1984b Algunas observaciones sobre la manufactura de las puntas de proyectil de El Volcán. PREP: Informes de Investigación 1: 85-107.         [ Links ]

36. Nami, H. G. 1986 Experimentos para el estudio de la tecnología bifacial de las ocupaciones tardías en el extremo sur de Patagonia Continental. PREP: Informes de Investigación 5: 1-120.         [ Links ]

37. Nami, H. G. 1999 Arqueología en la localidad arqueológica de Pali Aike, cuenca del río Chico (Provincia de Santa Cruz, Argentina). Praehistoria 3: 189-218.         [ Links ]

38. Prieto, A. 1988 Cazadores-recolectores del istmo de Brunswick. Anales del Instituto de la Patagonia 18: 113-131.         [ Links ]

39. Prieto, A. 1989-1990 Cazadores tardíos en la zona fronteriza del paralelo 52º sur. El alero Peggy Bird. Anales del Instituto de la Patagonia 19: 73-85.         [ Links ]

40. Prieto, A. 1997 Algunos resultados de los trabajos arqueológicos en Juni Aike 2. Anales del Instituto de la Patagonia 25: 137-146.         [ Links ]

41. Sanguinetti de Bórmida, A. 1976 Excavaciones prehistóricas en la cueva de Las Buitreras, Santa Cruz, Argentina. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología X: 271-292.         [ Links ]

42. Sanguinetti de Bórmida, A. 1982 Introducción a la prehistoria de la Patagonia Argentina. Tesis Doctoral inédita. Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires.         [ Links ]

43. Sanguinetti de Bórmida, A. 1984 Noticias sobre el sitio "El Volcán", su relación con el poblamiento tardío de las cuencas de los ríos Gallegos y Chico (Provincia de Santa Cruz, Argentina). PREP: Informes de Investigación 1: 5-34.         [ Links ]

44. Skewes, M. 1978 Geología, petrología, quimismo y origen de los volcanes del área de Pali-Aike, Magallanes, Chile. Anales del Instituto de la Patagonia 9: 95-106.         [ Links ]

45. Teruggi, M. 1984 Diccionario sedimentológico, vol. II, Rocas aclásticas y suelos. Científicas Argentinas, Librart, Buenos Aires.         [ Links ]

46. Tykot, R. 2004. Scientific methods and applications to archaeological provenance studies. En Proceedings of the International school of Physics "Enrico Fermi", editado por M. Martini, M. Milazzo y M. Piacentini, pp. 497-432. IOS Press, Amsterdam.         [ Links ]

47. VanPool, T. y R. Leonard 2011. Quantitative analysis in Archaeology. Wiley- Blackwell, Oxford.         [ Links ]