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Revista argentina de cardiología

versión On-line ISSN 1850-3748

Rev. argent. cardiol. vol.81 no.2 Ciudad Autónoma de Buenos Aires mar./abr. 2013

http://dx.doi.org/10.7775/rac.es.v81.i2.2300 

ARTÍCULO ORIGINAL

Integración de marcadores humorales, ecocardiograma Doppler convencional y strain bidimensional sistólico en la detección de toxicidad miocárdica secundaria a la quimioterapia*

Serum Markers, Conventional Doppler Echocardiography and Two-dimensional Systolic Strain in the Diagnosis of Chemotherapy-Induced Myocardial Toxicity

 

Sergio BarattaMTSAC, Mario A. Damiano, María L. Marchese, José I. Trucco, Manglio M. Rizzo, Flavia Bernok, Demián Chejtman, Daniel Olano, Mercedes Rojas, Alejandro HitaMTSAC

* Trabajo ganador del Premio Orías
Servicio de Cardiología y Medicina Interna, Departamento de Medicina Interna, Hospital Universitario Austral
MTSAC Miembro Titular de la Sociedad Argentina de Cardiología

 

Recibido: 11/12/2012
Aceptado: 14/01/2013

Dirección para separatas: Dr. Sergio Barattam, J. D. Perón 1500 (1629) Derqui Provincia de Buenos Aires e-mail: sbaratta@cas.austral.edu.ar

 


RESUMEN

Introducción
La disfunción ventricular izquierda es una complicación grave del tratamiento antineoplásico, con impacto desfavorable en la evolución clínica futura. El diagnóstico precoz de cardiotoxici-dad en pacientes que reciben quimioterapia podría ser de utilidad para definir una estrategia de prevención del deterioro de la función ventricular.
Objetivo
Analizar la utilidad de marcadores humorales [troponina T (TnT), BNP y NT-proBNP] y del strain bidimensional sistólico longitudinal (SBL) y radial (SBR) para la detección de disfunción ventricular sistólica en pacientes tratados con quimioterapia cardiotóxica.
Material y métodos
Se incluyeron forma prospectiva 36 pacientes, edad promedio (± DE) de 47 ± 16 años (42% hombres), con enfermedad neoplásica con masa miocárdica normal y fracción de eyección = 55% tratados con agentes antineoplásicos. Se efectuaron dosajes de marcadores humorales y ecocardiograma basales y al 2°, 3°, 4° y 6° mes posterior al inicio del tratamiento oncológico. Se consideró punto final (PF) a los 6 meses a la caída de la fracción de eyección según consenso internacional.
Resultados
Alcanzaron el PF 7 pacientes (19,4%). Se observaron los siguientes predictores relacionados con el PF: NT-proBNP 4° mes [PF positivo (G1) 152 ± 42 pg/ml vs. PF negativo (G2) 61 ± 38 pg/ml; p < 0,001], BNP 4° mes (G1 41 ± 12 pg/ml vs. G2 26 ± 11 pg/ml; p < 0,01), SBL 3er mes (G1 -16,3 ± 2,4% vs. G2 -19,6 ± 2,02%; p < 0,01) y 4° mes (G1 -15,9 ± 1,77% vs. G2 -19,9 ± 2,2%; p < 0,001) y SBR 4° mes (G1 46,4 ± 2,4% vs. G2 52 ± 3,4%; p < 0,001).
Conclusiones
El dosaje de péptidos natriuréticos y la medición del strain bidimensional sistólico longitudinal y radial fueron de utilidad para predecir disfunción sistólica ventricular de grado leve en pacientes tratados con quimioterapia.

Rev Argent Cardiol 2013;81:151-158. http://dx.doi.org/10.7775/rac.es.v81.i2.2300

Palabras clave: Strain; Quimioterapia; Cardiotoxicidad.

Abreviaturas:

BNP

Péptido natriurético cerebral

NT-proBNP

Fracción aminoterminal del propéptido natriurético cerebral

FAM

Fracción de acortamiento mesoparietal

PF

Punto final

FEVI

Fracción de eyección del ventrículo izquierdo

SBL

Strain bidimensional longitudinal

G1

Grupo 1 (cardiotoxicidad +)

SBR

Strain bidimensional radial

G2

Grupo 2 (cardiotoxicidad - )

TnT

Troponina T

ABSTRACT

Background
Left ventricular dysfunction is a serious complication of antineoplastic treatment with unfavorable impact in future clinical outcome. Early diagnosis of cardiotoxicity in patients receiving chemotherapy might be useful to define a strategy for the prevention of ventricular function impairment.
Objective
The aim of this study was to analyze the usefulness of serum markers [troponin T (TnT), BNP and NT-proBNP] and two-dimensional longitudinal (LS) and radial (RS) strain to detect ventricular systolic dysfunction in patients treated with cardiotoxic chemotherapy.
Methods
Thirty six patients [average age (±SD) 47±16 years, 42% men], with neoplastic disease with normal myocardial mass and left ventricular ejection fraction (LVEF) =55% receiving chemotherapy treatment, were prospectively included. Assessment of serum markers and echocardiography were performed before chemotherapy and at 2, 3, 4 and 6 months after onset of cancer treatment. The 6-month cardiotoxicity endpoint (EP) was defined as reduced LVEF according to international consensus.
Results
Seven patients reached the EP (19.4%). Endpoint predictors were: NT-proBNP at 4 months (positive EP (G1): 152 ±42 pg/ml vs. negative EP (G2) 61±38 pg/ml; p < 0.001), BNP at 4 months (G1 41±12 pg/ml vs. G2 26±11 pg/ml; p < 0.01), two-dimensional LS at 3 months (G1 -16.3±2.4% vs. G2 19.6±2.02%; p < 0.01) and 4 months (G1 -15.9±1.77% vs. G2 19.9±2.2%; p < 0.001), and two-dimensional RS at 4 months (G1 46.4±2.4% vs. G2 52±3.4%; p <0.001).
Conclusions
Natriuretic peptides and two-dimensional LS and RS were useful to predict mild ventricular systolic dysfunction in chemotherapy-treated patients.

Key words: Strain Imaging; Chemotherapy; Cardiotoxicitiy.

VÉASE CONTENIDO RELACIONADO: http://dx.doi.org/10.7775.rac.es.v81.i2.2497 Rev Argent Cardiol 2013;81:108-109


 

INTRODUCCIÓN

La disfunción ventricular izquierda es una complicación grave del tratamiento quimioterápico con impacto desfavorable en la evolución clínica futura. Asimismo, las mejores opciones terapéuticas empleadas en el abordaje del paciente con diagnóstico de cáncer determinan un creciente aumento en el número de sobrevivientes que padecerán las consecuencias del daño estructural miocárdico. (1)
Existen numerosas publicaciones que describen la incidencia de lesión miocárdica evaluada por un parámetro de bomba como la fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI). (2-4) Si bien la biopsia es una metodología sensible, su naturaleza invasiva dificulta su indicación sistemática. (5)
Hasta el momento, los estudios clínicos sobre predicto-res bioquímicos son limitados. (4, 5) Muchos sugieren que la troponina (TnT) es un marcador temprano de lesión miocárdica en pacientes que reciben terapia cardiotóxica. (6-9) Asimismo, en algunos estudios se ha analizado el valor de los péptidos natriuréticos como predictores de disfunción ventricular con resultados dispares. (10-12)
La FEVI es un parámetro de función de bomba insuficiente en la detección de modificaciones leves en la función del ventrículo izquierdo. Nuestra hipótesis es que alteraciones mínimas de la deformación miocárdica como manifestación de la lesión miocárdica podrían ser detectadas antes de la reducción de la FEVI.
El presente trabajo se llevó a cabo con el objetivo de evaluar la relación entre las modificaciones del strain bidimensional y la FEVI durante el tratamiento qui-mioterápico y de determinar si las mediciones seriadas precoces ecocardiográficas de deformación miocárdica y biomarcadores [TnT cuantivativa, péptido natriurético cerebral (BNP), fracción aminoterminal del propéptido natriurético cerebral (NT-proBNP)] podrían predecir cardiotoxicidad.

MATERIAL Y MÉTODOS

Se incluyeron forma prospectiva 36 pacientes, edad promedio (± desviación estándar) 47 ± 16 años (42% hombres), con enfermedad neoplásica con masa miocárdica normal y fracción de eyección = 55% sin antecedentes cardiovasculares, con ritmo sinusal, tratados con agentes antineoplásicos con potencial efecto cardiotóxico. Todos los pacientes cumplieron con el proceso del consentimiento informado y el estudio fue aprobado por el Comité de Investigación institucional.
En el momento basal y al 2°, 3°, 4° y 6° mes posterior al inicio del tratamiento oncológico se efectuaron control clínico, dosaje de marcadores humorales (TnT, BNP, NT-proBNP) y ecocardiograma Doppler.
Los criterios de exclusión fueron: edad < 18 años, enfermedad cardiovascular, creatinina > 1,5 mg/dl, enfermedad hepática, FEVI < 55%, ventana ultrasónica inadecuada, bloqueo de rama izquierda.
Se consideró punto final (PF) como parámetro de cardio-toxicidad a los 6 meses a la disfunción sistólica definida como caída de 5 puntos de la FEVI con un valor < 55% en pacientes sintomáticos o descenso de 10 puntos con un valor de FEVI < 55% en pacientes asintomáticos. (13)

Determinaciones bioquímicas

Las muestras de sangre venosas se almacenaron a 70 °C y los resultados se mantuvieron ciegos a los investigadores hasta la finalización del estudio.
La concentración de NT-proBNP se determinó por inmu-noensayo (Elecsys 2010, Roche Diagnostics), con un rango de análisis de entre 5 y 35.000 pg/ml (coeficiente de variación total del método: 3%).
La concentración de BNP se efectuó a través de inmu-noanálisis quimioluminiscente de micropartículas CEMIA Architect, Abbott Diagnostic.
Los niveles de TnT se midieron por inmunoensayo de tercera generación (Elecsys 2010, Roche Diagnostics); intervalo de medición: 0,01-25,00 ng/ml, coeficiente de variación total del método: 7,65%.
El análisis fue efectuado por personal técnico que desconocía las características de los pacientes.

Análisis ecocardiográfico

Se utilizó un ecocardiógrafo Vivid 7 (General Electric) con transductor de 3,5 MHz y la estación de trabajo EchoPACS para análisis off-line por dos operadores independientes. Se tomaron tres ciclos cardíacos. El ecocardiograma se realizó siguiendo la técnica estándar. (14) La FEVI fue calculada por un solo operador por el método de Simpson a través de la imagen de 2 y 4 cámaras desde el ápex. El resto de las mediciones fueron realizadas por otro operador ciego al resultado de la FEVI. Ambos lectores desconocían el tratamiento oncológico recibido y la secuencia de estudio. Se calculó la fracción de acortamiento mesoparietal (FAM) mediante la fórmula se Shimizu y colaboradores. (15)
Se almacenó un cineloop en Doppler tisular color bidi-mensional (tasa de cuadros [frame rate] > 100), realizando Doppler tisular pulsado off-line para evaluar el comportamiento sistólico regional promediando a nivel del anillo lateral y septal mitral.
Para determinar la deformación miocárdica sistólica (strain bidimensional) se utilizó la técnica de speckle tracking en eje corto paraesternal a nivel de los músculos papilares (strain radial, promedio de 6 segmentos) y mediante las vistas de 4 y 2 cámaras apicales (strain longitudinal). El strain bidimensional longitudinal (SBL) se determinó como el promedio de la deformación del segmento basal y medio de la cara anterior, inferior, septal y lateral. La simplificación del strain longitudinal obedeció a que 10 pacientes tuvieron cirugía en la mama izquierda, aspecto que dificultó la obtención de las vistas apicales convencionales. Se digitalizó la imagen con una tasa de cuadros > 50/segundo, que se adecuó al 80% de la frecuencia cardíaca. (16)

Análisis estadístico

La variabilidad intraobservador e interobservador del cálculo del strain bidimensional se determinó mediante el análisis del error de la media ± desviación estándar. La variabilidad intraobservador e interobservador en valores absolutos fue de 0,20 ± 1,1% y 0,6 ± 1,4% para el strain longitudinal y de 3,2 ± 6,6% y 3,4 ± 7,1% para el strain radial, respectivamente.
Las variables discretas se expresaron como frecuencias y porcentajes y las variables continuas, como media y sus respectivas desviaciones estándar. En variables cualitativas se buscó la presencia de asociación a través de la prueba de chi cuadrado con corrección de Yates o la prueba exacta de Fisher. Para las variables continuas independientes se aplicaron la prueba de la t de Student para datos no apareados o la prueba de la suma de rangos de Wilcoxon según correspondiera. Para evaluar el comportamiento de las variables continuas apareadas se utilizó la prueba de ANOVA para muestras repetidas. Los puntos de corte para el cálculo de sensibilidad y especificidad se determinaron mediante una curva ROC. Se consideró significativa una p < 0,05.

RESULTADOS

Se incluyeron en el estudio 36 pacientes, de los cuales 7 (19,4%) presentaron criterios de cardiotoxicidad. Se excluyeron 4 pacientes por inadecuada calidad del estudio. No se observaron diferencias en las variables basales (Tabla 1). En relación con el tipo de tumor y el tratamiento recibido, se observó mayor indicación y mayor dosis de adriamicina en los que desarrollaron el PF primario (Tabla 2).

Tabla 1. Características basales de los pacientes

Tabla 2. Descripción del tratamiento oncológico

En el seguimiento longitudinal se observaron diferencias significativas en el aumento del volumen de fin de diástole, caída de la FEVI, del strain sistólica radial y del longitudinal y aumento de NT-proBNP (Tabla 3).

No hubo diferencias en ninguna de las variables clínicas o ecocardiográficas ni en los biomarcadores al inicio del tratamiento. El comportamiento de los parámetros volumétricos, función ventricular sistólica, diastólica, deformación miocárdica y marcadores según presencia de cardiotoxicidad se muestra en la Tabla 4. El dosaje de marcadores serológicos en el seguimiento solo detectó diferencias significativas entre el G1 (car-diotoxicidad +) y el G2 (cardiotoxicidad -) en el nivel de NT-proBNP en el 4° mes (G1 152 ± 42 pg/ml vs. G2 61 ± 38 pg/ml; p < 0,001), NT-proBNP en el 6° mes (G1 159 ± 53 pg/ml vs. G2 62 ± 38 pg/ml; p < 0,001), BNP en el 4° mes (G1 41 ± 12 pg/ml vs. G2 26 ± 11 pg/ml; p < 0,01), BNP en el 6° mes (G1 52 ± 20 pg/ml vs. G2 25 ± 11 pg/ml; p < 0,001). Para la detección de disfunción sistólica al 6° mes, un punto de corte de NT-proBNP al 4° mes de 97 pg/ml tuvo una sensibilidad del 85% y una especificidad del 86% (área bajo la curva 0,95, IC 0,88-1,03, likelihood ratio positivo 6,2 y negativo 0,17) y un punto de corte de BNP al 4° mes de 31 pg/ml tuvo una sensibilidad del 86% y una especificidad del 79% (área bajo la curva 0,83, IC 0,64-1,01, likelihood ratio positivo 4,1 y negativo 0,18).
El porcentaje de deformación en el seguimiento detectó diferencias significativas entre el G1 y el G2 a nivel longitudinal en el 3.er mes (G1 -6,3 ± 2,4% vs. G2 -9,6 ± 2,02%; p < 0,01), en el 4° mes (G1 -15,9 ± 1,77% vs. G2 -19,9 ± 2,2%; p < 0,001) y en el 6° mes (G1 - 5,3 ± 1,5% vs. G2 - 20 ± 2,04%; p < 0,001) y a nivel radial en el 4.° mes (G1 46,4 ± 2,4% vs. G2 52 ± 3,4%; p < 0,001) y en el 6° mes (G1 44 ± 4,5% vs. G2 51 ± 3,1%; p < 0,001). Para la detección de disfunción sistólica al 6° mes, un punto de corte de reducción del SBL > 15% al 3.er mes tuvo una sensibilidad del 86% y una especificidad del 86% (likelihood ratio positivo 6,21 y negativo 0,17), un punto de corte de reducción del SBR > 10% al 4° mes tuvo una sensibilidad del 86% y una especificidad del 69% (likelihood ratio positivo 2,76 y negativo 0,21) y la combinación de ambos al mes tuvo una sensibilidad del 71% y una especificidad del 97% (likelihood ratio positivo 21 y negativo 0,3).

Tabla 4. Comportamiento de los parámetros de función ventricular sistólica, diastólica y biomarcadores según presencia de cardiotoxicidad

DISCUSIÓN

La FEVI es un potente predictor clínico de evolución alejada en pacientes sobrevivientes del tratamiento quimioterápico y ha sido el parámetro utilizado habitualmente para evaluar la función sistólica ventricular cardíaca al inicio del tratamiento y posteriormente. (17) La monitorización periódica de la función ventricular es fundamental para la detección temprana de disfunción del ventrículo izquierdo y la ecocardiografía constituye el método de elección para la monitorización secuencial, aunque en la población adulta la guía de la American Heart Association no especifica el método, los umbrales ni los intervalos de tiempo. (18-20)
Siete pacientes (19,4%) presentaron en el seguimiento criterios de cardiotoxicidad en ausencia de síntomas, con una prevalencia similar a la referida en otros trabajos que solo incluyeron a los pacientes tratados con drogas antraciclínicas y trastuzumab. (4-6)
En nuestro trabajo, en una población con patología oncológica de diferentes etiologías y tratadas con drogas con efectos cardiotóxicos, la reducción de la deformación miocárdica, el incremento del BNP y del NT-proBNP y la relación E/e' durante un seguimiento temprano intensivo detectaron disfunción ventricular izquierda previo a la aparición de alteraciones volumétricas y reducción de los índices de performance y función.
En un modelo murino de daño miocárdico por antraciclínicos, la reducción del strain rate como marcador relacionado con la contractilidad predijo la caída tardía de la FEVI y la mortalidad. (21) En un trabajo publicado por Sawaya y colaboradores (n = 43) sobre pacientes tratados con antraciclínicos/trastuzumab, la reducción del SBL a los 3 meses y la detección de troponina I ultrasensible a los 3 meses fueron variables predictoras independientes de cardiotoxicidad definida con los mismos criterios utilizados en nuestro trabajo. La FEVI, los parámetros de la función diastólica y el NT-proBNP no predijeron la cardiotoxicidad. (10) Asimismo, Ganame y colaboradores y Jurcut y colaboradores observaron reducción del strain sistólico pico longitudinal y radial durante la terapéutica con antra-ciclínicos, (22, 23) a diferencia de Hare y colaboradores (24) que no hallaron reducción del strain miocárdico posteriormente a la terapéutica con trastuzumab.
Stoodley y colaboradores (25) analizaron el comportamiento del strain sistólico pico longitudinal, circunferencial y radial una semana pretratamiento y postratamiento y observaron reducción del strain longitudinal global (reducción > 10%: 48% de los pacientes) y regional y del strain radial global (reducción > 10%: 59% de los pacientes) y regional en forma más precoz. En el congreso de la American Society of Echocardiography (2012), Pignatelli y colaboradores (n = 313) confirmaron el valor del SBL definido por una desviación ± 2 en el puntaje Z ajustado por edad para predecir disfunción ventricular en una población pediátrica tratada con quimioterapia. (26)
En otros contextos clínicos se ha comunicado la reducción del strain longitudinal global en pacientes con fracción de eyección conservada. (27-29) Uno de los principales hallazgos de nuestro trabajo sugiere que el SBL es más sensible que la FEVI para detectar cambios precoces en la función ventricular, incluso en relación con parámetros de función ajustados por estrés (FAM/estrés circunferencial) e incremento de volúmenes. Asimismo, y en forma semejante al trabajo de Stoodley y colaboradores, (25) su aparición precede a los cambios del strain global radial.
La anatomía del ventrículo izquierdo es una estructura compleja compuesta de tres capas musculares clasificadas no como grupos musculares diferentes, sino acorde a la orientación predominante de los miocitos. La FEVI mide la función global del ventrículo izquierdo pero es incapaz de analizar la capa afectada. En este sentido, el strain bidimensional puede analizar no solo la afectación regional, sino también el comportamiento de las fibras subendocárdicas, mesocárdicas y epicárdicas y, a diferencia del strain determinado por Doppler tisular, permite utilizar una tasa de cuadros baja, con alta reproducibilidad y sin dependencia del ángulo. (30, 31)
La aparición más precoz de la alteración del strain bidimensional sistólico longitudinal y su menor variabilidad en la medición con respecto al strain radial favorecen su utilización para la monitorización de la cardiotoxicidad. Recientemente, Fallah-Rad y colaboradores comunicaron una reducción significativa del strain longitudinal y radial luego del tratamiento con antraciclinas en pacientes tratados trastuzumab que desarrollaron cardiotoxicidad. (32) Tsai y colaboradores observaron reducción del SBL sin modificaciones del strain circunferencial y de la FEVI en sobrevivientes de cáncer tratados con antraciclínicos y/o radioterapia. (33) En otra experiencia de Ho y colaboradores se observó reducción del strain longitudinal en un grupo de pacientes tratados con antraciclínicos y en un subgrupo que recibió trastuzumab. (34)
Cardinale y colaboradores (8) detectaron elevación de la troponina I en el 33% luego del tratamiento con dosis altas de antraciclínicos, aunque en otros trabajos más actuales se evidenciaron una tasa menor de elevación de troponina y ausencia de valor predictivo para caída de la FEVI. (9, 35) En nuestro trabajo, el dosaje de troponina T cuantitativa no predijo la caída de la FEVI, a diferencia de la publicación de Sawaya y colaboradores, (10) que mediante el empleo de troponina I ultrasensible observaron su elevación en el 28% de los casos a los 3 meses y predijo caída en la fracción de eyección en dos tercios de los pacientes. Quizá las nuevas troponinas ultrasensibles sensibilicen la detección del daño miocárdico precoz y otorguen valor aditivo en la evaluación de la cardiotoxicidad.
Numerosos trabajos analizaron el compromiso precoz de la función diastólica posterior al tratamiento quimioterápico. (36, 37) En un estudio que incluyó 26 pacientes con leucemia aguda tratados con antra-ciclínicos se observó aparición precoz de alteraciones de la función diastólica previo a la caída de la FEVI. (38) Stoddard y colaboradores hallaron prolongación del tiempo de relajación isovolumétrica luego de 3 semanas de dosis acumulativa de doxorrubicina previo al desarrollo de disfunción sistólica. (39) Stoodlye y colaboradores (40) comunicaron que la alteración del strain rate diastólico precoz se correlaciona con la caída del SBL postratamiento oncológico y con la caída de la FEVI, aunque el único predictor independiente de cardiotoxicidad fue el strain bidimensional. Observamos reducción secuencial de la onda "e" ti-sular del anillo mitral y relación E/e' aumentada en el grupo que presentó cardiotoxicidad. El valor del NT-proBNP al 4.° mes y el del BNP al 4.° mes fueron predictores de reducción posterior de la FEVI. Los valores de elevación de los biomarcadores y la elevación de la relación E/e' son menores que los observados en pacientes con insuficiencia cardíaca y podrían representar incrementos incipientes en pacientes con disfunción sistólica leve. En una población sin daño miocárdico expresado por troponina cuantitativa resulta especulativo el mecanismo por el cual se observa alteración del strain bidimensional, con aumento de los péptidos natriuréticos y de la relación E/e'. Este comportamiento se contradice con el observado por el grupo de Sawaya y colaboradores, que refieren la presencia de troponina como marcador predictivo de disfunción del ventrículo izquierdo, con reducción secuencial de la onda E tisular, sin cambios en la relación E/e' tisular ni del NT-proBNP.
La presencia de una reducción de una deformación miocárdica calculada por SBL > 15% al 3.er mes y un nivel de NT-proBNP al 4.° mes > 97 pg/ml identificó al 100% de los pacientes con cardiotoxicidad.

Limitaciones

El estudio incluyó un número limitado de pacientes, semejante al de las series internacionales, provenientes de un solo centro. El seguimiento fue de 6 meses; se requiere un seguimiento más prolongado para evidenciar el valor predictivo de eventos clínicos tardíos. La sensibilidad y la especificidad deberían ser reproducidas en estudios prospectivos de mayores dimensiones. La utilización de troponina cuantitativa no ultrasensible podría haber subestimado el valor predictivo del daño miocárdico mínimo. El compromiso de la ventana apical en pacientes con cirugía de mama izquierda limitó la utilización del strain bidimensional en todos los segmentos miocárdicos del ventrículo izquierdo.

CONCLUSIONES

La medición de strain bidimensional sistólico longitudinal y radial y de los péptidos natriuréticos fueron de utilidad para predecir disfunción sistólica ventricular de grado leve en pacientes tratados con quimioterapia con potencial efecto cardiotóxico. La identificación precoz de daño miocárdico no significa suspender el tratamiento, pero podría ser de utilidad en la selección de una medicación cardioprotectora, una monitorización más intensiva o quizá una modificación del esquema terapéutico.

Declaración de conflicto de intereses

Los autores declaran que no poseen conflicto de intereses.

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