SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.81 issue5Resolución endovascular de seudoaneurisma aórtico como complicación alejada de cirugía de coartación aórticaThe Importance of Returning author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

  • Have no cited articlesCited by SciELO

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Revista argentina de cardiología

On-line version ISSN 1850-3748

Rev. argent. cardiol. vol.81 no.5 Ciudad Autónoma de Buenos Aires Sept./Oct. 2013

 

CARTAS DE LECTORES

Homenaje a Raúl Oliveri

Al Director




El día 21 de agosto del presente en el Hospital Presidente Perón de Avellaneda se inauguró la Biblioteca Pública "Dr. Raúl Oliveri". Fruto de la donación superior a los mil volúmenes realizada por sus familiares, en el acto llevado a cabo en el Aula Magna, se detalló la figura de quien esculpió su vida a través de actividades pioneras en el campo médico. Al margen de su profesión, reunía una personalidad detallada en el existencialismo que lo llevó a la indagación permanente del ser como ente y también a profundizar el papel del hombre en la sociedad. No es de extrañar que los textos donados, que se integran a la biblioteca existente, estén abocados fundamentalmente a la temática política, filosófica y literaria. Su hija, la escritora Martha Oliveri, conmovió a los asistentes con "Carta a mi padre" en donde expresaba: "Esta biblioteca fue su tesoro más preciado y será por ello una inmensa alegría poder compartir su pensamiento a través de sus libros y de sus escritos." Se cerró el acto con una disertación a cargo del escritor Carlos Penelas.

Raúl fue mi amigo y maestro. Compartí con él innumerables charlas sobre el hombre, sus movimientos sociales y la responsabilidad en el afecto como futuro insoslayable. Por esas circunstancias fortuitas, que a veces llamamos instintivas, pude grabar esos extensos diálogos en donde yo me constituía en una requisitoria permanente para extraer de su sabiduría el existenciario del ser. Tardes íntegras en su domicilio de la Avenida Santa Fe y luego en Congreso, donde la vorágine mundana de los hombres apurados, esclavizados por el tiempo y la eternidad, colisionaban con su palabra irrenunciable al valor de la libertad del hombre, más allá del destino inexorable que lo desespera y tiraniza. Entonces decía elevando las manos para luego entrelazarlas con la fuerza vital que salía de su pensamiento: "El estado cuando se transforma en una entidad por sí mismo tergiversa la situación de democracia. El individuo debe transformarse en el objetivo fundamental de cualquier sistema." Y también: "El ser humano es una unión de todo lo físico con todas sus biografías, con sus angustias, con sus ansiedades, especialmente en las situaciones críticas en las cuales acude al médico donde piensa que puede sufrir, que se puede morir."

En una oportunidad le pregunté: "¿Por qué se hizo médico Raúl?" Su voz se volvió placentera con el recuerdo: "Yo fui un chico bastante enfermizo. Entonces me hice un gran lector. Nunca me voy a olvidar de tres libros que a los doce años me marcaron para ser médico. Cuerpos y almas de Van der Meersch, Los cazadores de microbios de Paul de Kruif y La Ciudadela de Cronin. Ellos ligaban la medicina a la ética. En ese momento decidí mi vida."

No era solo un existencialista. En la intimidad todo su proceder era de un profundo romanticismo. Por eso aunque hubiese sido eterno en la vida jamás hubiera dejado de esculpir su propia estatua. "A los 75 años no es fácil tener asignaturas pendientes, pero de todas maneras yo te digo, una de las cosas que más me hubiera gustado es haber sido escritor. Tenía un montón de cosas escritas, muchos proyectos de obras de teatro, poemas. En el año 1963 cuando allanaron mi casa me robaron todo, me robaron toda mi adolescencia y mi juventud literaria, me llevaron todo y no lo pude recuperar nunca más, era un montón de cuadernos, apuntes, cosas. Todo se acabó. Me arrancaron la faz literaria de mi adolescencia. Así que, te digo, me hubiese encantado ser escritor pero es muy difícil como dicen los húngaros montar dos caballos con el mismo traste." Tal vez por eso un día me confió que deseaba creer que había algo después de la vida: "Yo siempre digo que la angustia más profunda que puede tener el ser humano es la angustia de la muerte, ¿no es cierto?

Pese a que sabe desde el nacimiento que se va a morir, pero no lo acepta, siempre piensa en la muerte de los demás y nunca en la propia."

La muerte siempre es trágica. Encierra lo que el hombre no asimila con sus vicios de eternidad y esclavitud. El ideario de Raúl Oliveri hablaba de esas cosas que parecen hallarse en el vacío, lejos de los días de los hombres "apurados".

Jorge C. TraininiMTSAC

Creative Commons License All the contents of this journal, except where otherwise noted, is licensed under a Creative Commons Attribution License