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Revista argentina de cardiología

versión On-line ISSN 1850-3748

Rev. argent. cardiol. vol.89 no.6 Ciudad Autónoma de Buenos Aires dic. 2021  Epub 01-Dic-2021

http://dx.doi.org/10.7775/rac.v89.i6.20467 

ANÁLISIS HISTÓRICO DE LA EVOLUCIÓN DE LAS IDEAS

La “reinterrogación del signo”

The “reexamination of the sign”

JORGE C. TRAININI1 

1 Sociedad Argentina de Cardiología (SAC). Consejo de Insuficiencia Cardiaca e Hipertensión Pulmonar. Área de Investigación.

Acaeció hacia 1938 cuando el cardiólogo argentino 1Pedro Cossio fue requerido desde la ciudad de Río de Janeiro. Dollabella Portela, con el título nobiliario de conde de la poderosa familia Matarazzo, se moría de insuficiencia cardiaca terminal. Lo trataba von Bergmann, el clínico alemán más importante de su tiempo. Los médicos locales ante el estado expirante que presentaba y agotadas las alquimias terapéuticas de la época pensaron en Pedro, el cual dudó en partir. El presidente argentino Roberto M. Ortiz, a instancias de los Ministerios de Relaciones Exteriores de ambos países, lo convenció de la necesidad de que prestase ayuda al hermano territorio. Fatigoso e inclemente fue el viaje en uno de los primeros cuatrimotores de la época, en trayectos parciales pero continuos para llegar con premura.

Ya en su destino, sin pausa ingresó al aposento que olía a incienso. El vaho disfrazaba el olor a la agonía, mientras un aguacero tropical sin piedad volvía más cálido y húmedo al aire enrarecido. Un hombre bastante moreno con desasosiego lo esperaba sentado en el borde de la cama. El examen fue minucioso. La palabra en el interrogatorio era aguda; el tacto y el oído exasperados al máximo para hallar un principio de esperanza en alguna modificación que aliviara al enfermo. Éste, abotagado, casi incorporado para aprovechar la respiración dificultosa, con una fatiga acentuada luego de cada maniobra o respuesta dada al facultativo, mostraba la piel fría y húmeda. Los pies hinchados. Su nariz eran dos alas soplantes que se ensanchaban buscando algo más de aire para sus pulmones insuficientes.

Inclinado con la ansiedad de un explorador, el médico repitió incesante sus maniobras y las preguntas. El enfermo apenas podía seguirlo con la mirada. Una neblina en sus ojos se interponía con el médico. Todos sus músculos se contraían al máximo con cada respiración dejando ver un torso disecado por el esfuerzo, al momento que sus venas en el cuello se volvían prominentes y tortuosas, de carácter premonitorio. El oído se detuvo largamente en el pecho. El corazón galopaba y los labios permanecían azules.

Dejó al paciente. Estudió y cotejó repetitivamente los análisis buscando un indicio que no intuía. Revisó la medicación. Todo era lógico y actual. No evidenció nuevos hallazgos en el examen ni encontró de utilidad modificar la terapéutica otorgada.

Cossio se despidió del paciente con la convicción del fracaso. Lo macilento del moribundo se le volvía intolerable. Hasta el portal del hotel lo acompañó su colega brasileño. Sólo intercambiaron algunos monosílabos en la despedida ante la arrogancia de la frustración.

Encerrado en su habitación regresó con la imaginación a la observación acontecida. Cinceló nuevamente al paciente. Reinterrogó al signo. De pronto lo recordó con todo el esplendor del ajamiento que ostentaba. No dudó. Se precipitó a su encuentro. Estaba iluminado. Solicitó un recuento de glóbulos. Tenía apenas un millón y medio. Como el enfermo era de piel oscura no había advertido su palidez. Estaba anémico y para colmo le habían hecho catorce sangrías suponiendo que se trataba de un cuadro de edema pulmonar. La situación ahora tenía significado. La anemia era la causa de la precipitación de su insuficiencia cardiaca.

A medida que la sangre se deslizaba por medio de la transfusión hacia el paciente, éste fue perdiendo su amarillez y disminuyendo el ahogo. Dos semanas después el conde volvió a la oficina y siguió dirigiendo sus negocios.

El suceso que relato es verídico. Demuestra la importancia de la “reinterrogación del signo” en semiología para alcanzar al diagnóstico certero.

BIBLIOGRAFÍA

1. Agewall S, Beltrame JF, Reynolds HR, Niessner A, Rosano G, Caforio AL, et al. ESC working group position paper on myocardial infarction with non-obstructive coronary arteries. Eur Heart J 2017;38:143-53. https://doi.org/10.1093/eurheartj/ehw149Links ]

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