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Anuario de investigaciones

versión On-line ISSN 1851-1686

Anu. investig. vol.18  Ciudad Autónoma de Buenos Aires dic. 2011

 

PSICOANALISIS

 

Algunas implicaciones de la escritura ante lo imposible

On implications of writing when facing the impossible

 

Salinas, María Victoria1

1 `Psicóloga. Docente, Facultad de Psicología, UBA. Becaria UBACyT. E-mail: vicvega7@hotmail.com

 


Resumen
En el presente artículo partimos del análisis de un escrito que retoma las preguntas de Job ante el sacrificio de millones de inocentes en el Holocausto. ¿Dónde estuvo Dios en Auschwitz?, se pregunta ZviKolitz, quien, a su modo, interpela a un Dios que en el momento de mayor dolor y desvalimiento oculta su rostro. Tal escrito, encontrado dentro de una botella en las ruinas del gueto de Varsovia, representa un testamento redactado en las postrimerías. Con lucidez, aunque apasionadamente, interpela a Dios, lo convoca y lo rescata transformándolo en Su Dios, rescatándose de este modo a sí mismo.
Apoyándonos en estos escritos nos interrogamos sobre la función del Otro y la escritura cuando el goce atormenta al sujeto. Frente a los fenómenos de segregación, de reducción del otro a una pura nada, postulamos que lo que salva al hombre de esta reducción es la capacidad de transformase en un sujeto a través de rescatar a un Otro, no universal sino singular. Por último, nos preguntaremos qué relación existe entre el Otro, en este caso Dios, el sufrimiento del hombre y la escritura.

Palabras clave:
Sufrimiento; Otro; Goce; Escritura

Abstract
This article begins analyzing a letter that brings back Job´s questions, this time regarding the slaughter of millions of innocent people in the Holocaust. Where was God in Auschwitz?, asks ZviKolitz, who, in his own way, questions a God who in times of pain and helplessness hides His face. Such writing, found inside a bottle in the ruins of the Warsaw ghetto, becomes a testament made at the end of life. Lucidly but passionately, he challenges God, calls for Him and turns Him into his own God, thus saving himself. This study is based on that posthumous letter to focus on Writing and the role of the Other when the enjoyment torments the subject. Against segregation phenomena, that
turns victims to a pure nothingness, we postulate that what rescues a person from this reduction is the ability of becoming aSubject by turning the Other from universal to unique. Finally, we will ind out the existing relationship between the Other, in this case God, the suffering of men and Writing.

Key words:
Suffering; Other; Enjoyment; Writing


 

. La pregunta de Job
El libro de Job pertenece al Antiguo Testamento, la historia narrada de este hombre se ha convertido en el paradigma del sufrimiento del inocente. Se trata de un hombre religioso, bondadoso y justo, quien es sometido a una prueba de fe terroríica consistente en la privación de sus bienes, la muerte de sus hijos y las vejaciones en su cuerpo. Job es presa de una apuesta de Lucifer contra Dios sobre la creencia del hombre. Dios acepta la apuesta con la condición de que no sea él mismo quien cometa las atrocidades sino Lucifer y que, además, lo mantenga vivo. Luego de todos los tormentos producidos en Job, éste queda siete días y siete noches sin hablar, la mudez del dolor no le permitía ninguna elaboración más que la pasividad del padecimiento.
"Después de esto, Job rompió el silencio y maldijo el día de su nacimiento"1
"Los gemidos se han convertido en mi pan y mis lamentos se derraman como agua. Porque me sucedió lo que más temía y me sobrevino algo terrible. ¡No tengo calma, ni tranquilidad, ni sosiego, sólo una constante agitación!"2

Frente a los tormentos Job convoca a Dios: "Pero yo quiero hablarle al Todopoderoso, mi deseo es discutir con Dios."3. Sin embargo Dios es ausencia, frente a esto sus amigos lo intentan convencer del castigo merecido, de los pecados cometidos, de la sabiduría del Creador y de su necesario temor. Pero Job desestima esos dichos, se reconoce como un hombre más, no acepta el castigo que cree infundado y afirma su inocencia. Luego de que una a una de las justificaciones van cayendo, Dios se le aparece a Job y lo desafía:
El Señor se dirigió a Job, y le dijo:"¿Va a ceder el que discute con el Todopoderoso? ¿Va a replicar el que reprueba a Dios?"
Y Job respondió al Señor:
¡Soy tan poca cosa! ¿Qué puedo responderte? Me taparé la boca con la mano.
Hablé una vez, y no lo voy a repetir; una segunda vez, y ya no insistiré."4
En las escrituras la historia cuenta que luego de ser reprendido por no aceptar la Voluntad Divina y por haberse quejado en el dolor, Dios le devuelve la felicidad a Job.

. Yósel: la pregunta por Dios y la respuesta en la Torah
La escritura en este caso, permite testimoniar la experiencia singular, íntima que el acontecimiento produce en el hombre que al enfrentarse con su propio sufrimiento y quedar reducido como desecho, precisa pensar sobre el nuevo estado de cosas y convocar a su vez a otro que participe de su extimidad, entendiendo por extimidad a aquello que está más próximo, más interior sin dejar de ser exterior.
Un testimonio sobre la relación con Dios, o lo que es aún más preciso, un testimonio sobre la ruptura de la relación con Dios como Otro sin barrar y el advenimiento de un Dios singular, producto de la desarticulación total y encuentro con lo real es lo que encontramos en la escritura de YóselRákover.
Yo, Yósel, hijo de David R ákover de Tarnopol, seguidor del Rabino de Ger y descendiente de los justos, sabios y santos de las familias de Rákover y Meisls, escribo estas líneas mientras las casas del gueto de Varsovia están en llamas, y el edificio en el que me encuentro es uno de los últimos que aún no arden. hace ya unas horas que estamos sometidos a un rabioso fuego de artillería, y a mi alrededor los muros se quiebran y revientan con estruendo bajo la lluvia de granadas. dentro de poco, también esta casa, como casi todas las del gueto, se habrá convertido en la tumba de sus defensores y moradores. (...) Probablemente, el sol ni siquiera sabe cuán poco lamento no volver a verlo jamás.
...No es cierto que Hitler tenga atributos de bestia. Es (...) un típico hijo de la humanidad moderna. La humanidad en su conjunto lo ha engendrado y criado, y él es la expresión sincera y desenmascarada de sus más íntimos y recónditos deseos.
Hoy me ha llegado la hora, y puedo decir como Job -sin ser yo el único que pueda decirlo-: desnudo regreso a la tierra, desnudo como el día en que nací. (...) Ahora bien, no puedo decir -después de todo lo que me ha tocado vivir- que mi relación con Dios no haya cambiado. pero sí puedo afirmar con seguridad absoluta que mi fe en Él no ha variado en lo más mínimo. Antes, cuando me iba bien, mi relación con Él era como la que se tiene con alguien que nos ofrece dádivas sin cesar, y con el cual por lo tanto estamos siempre en deuda. Ahora mi relación con Él es como la que se tiene con alguien que también nos debe algo a nosotros, y no poco. (...) lo de ahora ya no es una cuestión de castigo por los pecados y las faltas cometidas. Es más bien algo muy particular lo que ocurre en el mundo, y tiene un nombre: HastoresPonim, que significa que éstos son los tiempos en que Dios oculta Su rostro.

...He aquí la peculiar y esencial diferencia entre nuestro Dios y el Dios en el que creen los pueblos de Europa: mientras que nuestro Dios es el Dios de la venganza y nuestra Torah amenaza con la muerte a quienes cometen la más leve falta, cuenta el Talmud que en los tiempos en que el sanedrín era el tribunal supremo de nuestro pueblo -cuando todavía vivíamos libres en nuestra tierra-, la única pena de muerte que éste dictó en setenta años bastó para que se increpara a los jueces con gritos de "asesino!...El Dios de los gentiles, en cambio, al que se llama "Dios del amor", mandó que fuera amada toda criatura hecha a su imagen y semejanza; y no obstante, nos asesinan en su nombre, sin piedad y día tras día, desde hace casi dos mil años.
Estoy orgulloso de ser judío, no a pesar de la relación que el mundo tiene con nosotros, sino precisamente a causa de esta relación. (...) pues ser judío es una proeza. (...) el judío es un batallador, un testigo de sangre, un apegado a dios: Su propiedad sagrada.
Creo en el Dios de Israel aunque haya hecho todo para que no crea en Él. Creo en Sus leyes aunque no pueda justificar Sus hechos. Ahora mi relación con Él a no es la de un siervo con su señor, sino como la de un discípulo con su maestro. me inclino ante Su grandeza, pero no besaré la vara con la que me pega. Me es querido, pero más quiero a Su Torah. Aunque me hubiere engañado con Él, yo seguiría guardando Su Torah. Dios quiere decir religión., pero Su Torah significa una manera de vivir. y cuando más morimos por esta forma de vida, tanto más inmortales seremos.
5
¿Qué ha hecho el hombre en presencia de Dios? ¿O es que es tan grande su ausencia que entonces "todo" está permitido? La experiencia del dolor y de la angustia denuncia la inconsistencia del Otro, simbólico e imaginario. La angustia es la señal de la inconsistencia del Otro, señala que no hay palabras que alcancen esa certeza, ni imagen que apacigüe la desgracia en el cuerpo. Junto con la angustia, la sensación de dolor también es un fracaso del lenguaje. Sin embargo, las experiencias escritas por Kolitz nos hacen preguntar por el valor de la escritura allí donde lo económico-pulsional irrumpe como lo no ligado, es decir, un real que afecta al sujeto, quien intenta tramitarlo.
Para el filósofo Fernando Bárcena "...el dolor no es solo un hecho de la materia sino un acontecimiento del existir"6 , se trata entonces de un "exceso de existencia".7. Desde el psicoanálisis podemos entender este exceso como un goce indecible que inunda al ser humano. Este exceso puede tramitarse mediante la escritura en donde el sujeto se inscribe en un tiempo, un espacio y una filiación. Por eso es que Yósel comienza su escrito presentándose como hijo, apelando a su descendencia y a los valores que supo cultivar junto a su familia. Inscribirse en la trama familiar, en una historia, le da un nombre, funcionando como un primer trazo que busca ligar la experiencia del dolor como acontecimiento a-temporal.
Junto con el trazo de un tiempo, en un encuadre apaciguador, la escritura es una invitación al cuerpo a expresarse, más allá de las palabras, pero no sin ellas, el cuerpo propio se pone en juego. Se trata de escribir el propio padecimiento, lo indecible que los ojos ven, enlazados con una pregunta más allá de la iniquitad de los órganos:¿Dónde está Dios si es que existe? Se trata entonces de una escritura testigo e invocante, en donde el sujeto se ofrece al Otro para garantizar su existencia y así encontrar un sentido a su experiencia.
En Yósel observamos que la relación entre Dios y el hom
bre no es sin mediación, sino que es por intermedio de una enseñanza: la Torah. "Es precisamente una palabra no encarnada de Dios la que asegura un Dios vivo entre nosotros. La confianza en un Dios que no se manifiesta por medio de ninguna autoridad terrestre no puede descansar más que sobre la evidencia interior y sobre el valor de una enseñanza."8 Por eso escuchamos decir a Yósel: "Yo lo amo, pero más amo Su Torah...Y aun si me decepcionara de Él seguiría observando los preceptos de Su Ley"9. Según EmmanuelLévinas se trata de una "protección contra la locura de un contacto directo con lo Sagrado no mediado por razones. Pero sobre todo, confianza que no descansa en el triunfo de ninguna institución, evidencia interior de la moral contenida en la Torah."10 Es decir que la palabra de la Torah es la mediación apaciguante que no abandona al sujeto a la experiencia cruda del sacrificio sagrado. Pero además de este movimiento hay otro: "Amar a la Torah más que a Dios es, precisamente, acceder a un Dios personal contra el cual uno puede rebelarse, es decir, por la cual es posible morir".11. Hay una modificación en el sujeto antes y después de la experiencia de dolor, se trata de un Dios singular.12
Podemos leer la creencia en Dios antes y después de sentir su ausencia a partir de los cuatros discursos formulados por Lacan. Podríamos pensar que el primer estado, el de la creencia en Dios correspondería al discurso del amo, mientras que la creencia a partir del padecimiento de su ausencia podría ser entendida a través del discurso del analista. En el discurso del amo, el S1 ya está dado de antemano, está supuesto, mientras que en las experiencias límites en donde el Otro oculta su rostro, el S1 cae y en su lugar es el sujeto quien posicionado en el lugar de objeto produce un S1 (discurso del analista). Al respecto Mario Goldemberg desarrolla: "la cuestión del Uno, es una cuestión central para el psicoanálisis. La ilusión del inconciente, de la neurosis, de la religión, es que hay un Uno que preexiste. En cambio, como ha planteado Jacques-Alain Miller, el discurso analítico refuta esto diciendo que el Uno no es un Uno que preexiste, es un Uno que se produce."13 Así, la experiencia de la escritura como invocación a otro que cae de su pre-existencia señala un viraje del discurso del amo al analítico. Mientras que en el discurso del amo el S1 comanda y hace que todo marche, el discurso analítico produce un S1.

Testimonio posible. Testimonio imposible.
¿Cuál es la salida cuando ya no hay salida? Diversos testimonios de personas que padecen, desde los escritos de Primo Levi, hasta el testimonio deKolitz, señalan que siempre queda la posibilidad de la escritura, de hacer de la palabra una morada y un "gesto de resistencia"14. Frente a la experiencia del dolor, en los límites de la vida, la escritura invoca la subsistencia de la función vital del significante, donde la palabra hace lazo, anuda y salva de la muerte silente, la sin-palabra. Primo Levi comienza a escribir con la motivación única de testimoniar, y tal como desarrolla G. Agamben, su gran descubrimiento y su insistencia, fue aquella zona gris dónde las víctimas se convierten en victimarios y los victimarios en víctimas. La figura de la "Escuadra Especial" compuesta por deportados encargados de llevar a la cámara de gas y a los crematorios a los prisioneros, revela la reducción a la pura nada, y por su parte esta figura remite a la incesante necesidad de poder escribir algo acerca de ello. De testimoniar sobre lo que excede la palabra pero que justamente posibilita el testimonio. (...) "De hombres que han conocido esta privación extrema no podemos esperar una declaración en el sentido jurídico del término sino otro tipo de cosa, que está entre el lamento, la blasfemia, la expiación y el intento de justificación, de recuperación de sí mismos"15. El hombre para ser hombre se abraza a la palabra que sella la lengua materna. Ésta deja marcas de deseo y de goce que conducirán en última instancia a la sin-palabra, la muerte del ser hablante. Cuando ella llegue lo único que el sujeto puede dejar de sí, además de su nombre, es lo que alguna vez le dio vida: sus palabras. ¿Acaso una de las funciones de la vida consistirá en hacer propio lo heredado?
Supongo que el crepúsculo cubre con su manto púrpura el cuerpo de arena de cada hombre y envuelve el silencio de Dios.
Porque Dios vive en el silencio. He pensado que Dios no soporta el silencio como nosotros no soportamos nuestra soledad. Dios ha decidido escribir un verso para desalojar las toneladas del silencio. Y ese verso (Dios es un gran poeta, quizás el mejor poeta) inventó la palabra, y así es que venimos nosotros a existir, por obra del insoportable silencio de Dios.16

Conclusión
Experiencias límites en la historia del hombre, nos ayudan a pensar hitos propios de la clínica específicamente en lo relacionado al límite mismo de la castración.

A través de la escritura de ZviKolitz, observamos que alguien que ha estado presente en un acontecimiento que ha discontinuado el estado de cosas anterior, que lo ha enfrentado a un real; produce algo nuevo que a su vez forma parte de su experiencia más íntima, este hecho que paradojalmente no le pertenece, ha dado lugar a una producción singular. A la producción de un testimonio.
El testigo de un acontecimiento traumático al que ha estado expuesto, tal el caso de ZviKolitz, necesita de otro que aloje aquella producción singular que posibilitó la salida al lugar de puro desecho. Ese otro que el testigo fabrica para comprender - comprenderse en la escritura ante lo Real es lo que nos queda como producción ante lo imposible.

1 Job 3:1. Antiguo Testamento. Libro de Job. Capítulo 3. Monólogo inicial: la protesta de Job.[http://www.vicariadepastoral.org.mx/sagrada_escritura/biblia/antiguo_testamento]

2 Job 3:24-26. Antiguo Testamento. Libro de Job. Capítulo 3. Monólogo inicial: la protesta de Job.[http://www.vicariadepastoral.org.mx/sagrada_escritura/biblia/antiguo_testamento]

3 Job 13:3. Antiguo Testamento. Libro de Job. Capítulo 13.[http://www.vicariadepastoral.org.mx/sagrada_escritura/biblia/antiguo_testamento]

4 Job 40:1-5. Antiguo Testamento. Libro de Job. Capítulo 40. El desafío del Señor y la respuesta de Job.[http://www.vicariadepastoral.org.mx/sagrada_escritura/biblia/antiguo_testamento]

5 YóselRákover apela a Dios. Barcena, F., Charlier, C., Lévinas, E., Lois, J. & Mayorga, J. (2004). La autoridad del sufrimiento Silencio de Dios y preguntas del hombre, (pp. 139-155). Barcelona: Anthropos

6 La prosa del dolor. Barcena, F., Charlier, C., Lévinas, E., Lois, J. & Mayorga, J. (2004). La autoridad del sufrimiento Silencio de Dios y preguntas del hombre, (p 63). Barcelona: Anthropos.

7 La prosa del dolor. Barcena, F., Charlier, C., Lévinas, E., Lois, J. & Mayorga, J. (2004). La autoridad del sufrimiento Silencio de dios y preguntas del hombre, (p 65). Barcelona: Anthropos.

8 Amar a la Torah más que a Dios. Barcena, F., Charlier, C., Lévinas, E., Lois, J. & Mayorga, J. (2004). La autoridad del sufrimiento Silencio de Dios y preguntas del hombre, (p.p109-110). Barcelona: Anthropos.

9 YóselRákover apela a Dios. Barcena, F., Charlier, C., Lévinas, E., Lois, J. & Mayorga, J. (2004). La autoridad del sufrimiento Silencio de Dios y preguntas del hombre, (pp. 139-150). Barcelona: Anthropos

10 Amar a la Torah más que a Dios. Barcena, F., Charlier, C., Lévinas, E., Lois, J. & Mayorga, J. (2004). La autoridad del sufrimiento Silencio de Dios y preguntas del hombre, (p 110). Barcelona: Anthropos.

11 Ibid, 111.

12 Profundizar en el desarrollo histórico de la muerte de Dios nos alejaría de los objetivos de nuestro trabajo aunque es fundamental señalar la relación entre el abandono de Dios tanto a Job como a Kolitz y los desarrollos del Seminario 7, donde se plantea que la idea de la muerte de Dios no resuelve nada, por el contrario, tal como lo demuestra el cristianismo: la muerte del padre refuerza su presencia.Los casos particulares de Job y Kolitz nos llevan al punto de inlexión donde el hombre se encuentra sin consuelo. Ubicamos aquí la declinación inexorable del Padre.Declinación que invariablemente es la del Otro. No hay un uno que preexiste y este orden de cosas plantea una diferencia respecto a la muerte de Dios, que nos permite avanzar en nuestro desarrollo.

13 Goldenberg, M. (2008). ¿dios ha muerto? [http://www.lacan.com/symptom/?p=33]

14 La prosa del dolor. Barcena,F., Charlier,C., Lévinas,E., Lois,J., Mayorga,J (2004) La autoridad del sufrimiento Silencio de Dios y preguntas del hombre, (p 77). Barcelona: Anthropos.

15 Levi, P (1989) los hundidos y los salvados, (pp. 46-47). Barcelona: Muchnik.

16 Rilke, R. M (1995) cartas a un joven poeta, (p.p 98-99). Madrid: Alianza, 98.

Bibliografía

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2- Antiguo Testamento. Libro de Job. http://www.vicariadepastoral.org.mx         [ Links ]

3- Barcena, F., Charlier, C., Lévinas, E., Lois, J. & Mayorga, J. (2004). La autoridad del sufrimiento Silencio de Dios y preguntas del hombre. Barcelona: Anthropos        [ Links ]

4- Freud, S. (1924). El problema económico del masoquismo. O.C XIX. Argentina: Amorrortu Editores.         [ Links ]

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6- Kollitz Z. (2001). YóselRákover apela a Dios. Madrid: Nueva Galaxia Gutenberg        [ Links ]

7- Lacan, J. (2008). El Seminario. Libro XVII. El reverso del psicoanálisis. Argentina: PaidósLinks ] Helvetica, sans-serif">.

8- Lacan, J. (2008). El Seminario. Libro VII. La ética del psicoanálisis. Argentina: Paidós        [ Links ]

9- Levi, P. (1989). Los hundidos y los salvados. Barcelona: Muchnik        [ Links ]

10- Miller, J.A. (2008). Cosas de finura en psicoanálisis vi.[http: //ampblog2006.blogspot.com/2009/01/jam-cosas-de-finura-en-psicoanálisis-vi.html]

11- Miller, J.A.(2010).Extimidad. Argentina. Paidós.         [ Links ]

12- Rilke, R. M. (1995). Cartas a un joven poeta. Madrid: Alianza        [ Links ]

Fecha de recepción: 6 de abril de 2011
Fecha de aceptación: 13 de septiembre de 2011

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