SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 número48Aspectos filosóficos y metodológicos de la educación latinoamericana: Aportes de Paulo Freire¿Cómo hacer un proyecto de tesis doctoral en Ciencias Sociales? índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Ciencia, docencia y tecnología

versión On-line ISSN 1851-1716

Cienc. docencia tecnol.  no.48 Concepción del Uruguay mayo 2014

 

HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES: COMUNICACIONES

Reflexiones sobre las bases y procedimientos de la Teoría Fundamentada

 

Gaete Quezada, Ricardo

Autor: Académico de jornada completa, Departamento de Ciencias Sociales, Universidad de Antofagasta (Antofagasta, Chile). Contacto: ricardo.gaete@uantof.cl

Este artículo deriva de la tesis doctoral del autor titulada "Responsabilidad Social Universitaria: Una nueva mirada a la relación de la universidad con la sociedad desde la perspectiva de las partes interesadas. Un estudio de caso" presentada en la Universidad de Valladolid (Valladolid, España);
recibido el 13/08/2013 y
admitido el 19/02/2014.


Resumen

Actualmente, existe en la literatura un amplio debate sobre los aspectos epistemológicos y metodológicos más importantes de la Teoría Fundamentada desarrollada por Glaser y Strauss en 1967, especialmente por las discrepancias surgidas entre sus creadores originales, por lo que el presente artículo enfatiza en los principios y, muy especialmente, en los procedimientos asociados con este enfoque de investigación. Se identifican como principios más importantes y distintivos de la Teoría Fundamentada al muestreo teórico, el método de comparación constante y la generación de teorías substantivas basados en los datos obtenidos en la investigación. Asimismo, desde una perspectiva holística, resumimos en tres las etapas del procedimiento de aplicación de la Teoría Fundamentada: microanálisis, codificación y redacción de la teoría.

Palabras clave: Investigación cualitativa; Teoría fundamentada; Método de comparación constante.

Thoughts on the basis and procedures of the Grounded Theory Abstract

In current literature, there is a wide-ranging debate on the most important epistemological and methodological aspects of the grounded theory created by Glaser & Strauss in 1967, mainly derived from discrepancies between both creators. Therefore, this article emphasizes on the principles and especially the procedures associated with this approach to scientific research. Theoretical sampling, constant comparative method and the generation of substantive theories based on the data obtained in the investigation procedures are here identified as the most important principles of the grounded theory. From a holistic perspective, we have summarized the procedure for the application of the grounded theory in three stages: microanalysis, coding and writing of the theory.

Keywords: Qualitative research; Grounded theory; Constant comparative method.

Reflexões sobre as bases e procedimentos da Teoria Fundamentada

Resumo

Atualmente, na literatura existe um amplo debate sobre os aspectos epistemológicos e metodológicos mais importantes da Teoria Fundamentada desenvolvida por Glaser & Strauss em 1967, especialmente pelas divergências surgidas entre seus criadores originais, por isso este artigo focaliza nos princípios e, em particular, nos procedimentos associados a essa abordagem de pesquisa. São identificados como princípios mais importantes e distintivos da Teoria Fundamentada a amostragem teórica, o método de comparação constante e a geração de teorias substantivas baseados nos dados obtidos na investigação. Além disso, a partir de uma perspectiva holística, resumimos a três as etapas do procedimento de aplicação da Teoria Fundamentada: microanálise, codificação e redação da teoria.

Palavras chave: Investigação qualitativa; Teoria fundamentada; Método de comparação constante.


 

I. Introducción

Según Alonso (1998), la orientación cualitativa de la investigación se desarrolla como "prácticas situadas", es decir, dando importancia con ello a la forma como construyen su propio mundo los miembros de una comunidad determinada, por encima de posiciones estáticas e individuales generadas a partir de la estructura formal de una organización social, y en donde el lenguaje y la acción simbólica expresados por los actores sociales se transforman en el medio principal para analizar los procesos de producción y reproducción de lo social.
Por ello, la información (datos) obtenida en una investigación cualitativa se expresa a través de los discursos o puntos de vista que manifiestan los actores sociales respecto del problema investigado, a diferencia de un estudio cuantitativo en el cual los datos normalmente poseen una connotación numérica, donde la realidad social es interpretada de manera abierta (López Doblas, 2005).
En este contexto, en la etapa de examen e interpretación de los resultados obtenidos en la investigación cualitativa también es posible construir teoría, a partir del análisis de los textos de entrevistas o focus group, lo que se conoce como la Teoría Fundamentada en los datos o Grounded Theory, desarrollada en 1967 por Barney Glaser y Anselm Strauss (Corbin y Strauss, 1990; Valles, 1997; Rodríguez Gómez et al, 1999; Charmaz, 2000; Strauss y Corbin, 2002; Clarke, 2003; Raymond, 2005; Charmaz, 2006; Trinidad et al., 2006; Andréu et al., 2007; Trinidad y Jaime, 2007; Rodríguez Martínez, 2008; Cooney, 2010; Escalante, 2011; Licqurish y Seibold, 2011; Sbaraini et al., 2011; Hall et al., 2013).
Sin embargo, las bases y procedimientos de aplicación de la Teoría Fundamentada (TF) han estado marcados por las diferencias que surgieron entre sus autores originales (Hernández y Sánchez, 2008), generándose así lo que se denomina como las escuelas o corrientes "glaseriana" y "straussiana" (Cooney, 2010; Jones y Alony, 2011), las que respectivamente enfatizan, por una parte, en la generación de la teoría a partir de los datos producidos por la propia investigación y, por la otra, concentrándose en la descripción y análisis de los datos mediante nuevos instrumentos como la codificación axial o la utilización de programas informáticos para desarrollar los análisis (Clarke, 2003; Raymond, 2005; Valles, 2005; Charmaz, 2006; Trinidad et al., 2006; Andréu et al, 2007; Cooney, 2010; Escalante, 2011; Jones y Alony, 2011; Licqurish y Seibold, 2011; Sbaraini et al., 2011; Hall et al., 2013).
Así, el presente artículo analiza a la TF desde una perspectiva integradora y holística, ubicando el énfasis en destacar las bases principales de la misma, y muy especialmente en los elementos más importantes relacionados con los procedimientos para su aplicación al análisis de datos cualitativos, especialmente aquellos generados a partir de las transcripciones de entrevistas y focus group.

II. Bases de la teoría fundamentada en los datos (Grounded Theory)

De acuerdo con Strauss y Corbin (2002:13), la TF "es una teoría derivada de datos recopilados", destacando que este enfoque considera a la estrecha relación entre la recolección de los datos, su análisis y la posterior elaboración de una teoría basada en los datos obtenidos en el estudio como una de sus características fundamentales.
De esta forma, la TF se caracteriza por la generación o surgimiento de una teoría a partir de la información proporcionada por los propios sujetos sociales, que viven o están relacionados estrechamente con la problemática estudiada, a través de lo cual se intenta explicar los fenómenos o procesos sociales analizados en una investigación (Rodríguez Gómez et al., 1999; Charmaz, 2000; Strauss y Corbin, 2002; Trinidad et al., 2006; Andréu et al., 2007).
Sin embargo, pese a su amplitud, Suddaby (2006) reflexiona acerca de lo que no es la TF, identificando seis conceptos erróneos al respecto:
-No es una excusa para ignorar la literatura.
-No es una presentación de datos en bruto.
-No es un examen de teorías, análisis de contenidos o un conteo de palabras.
-No es la simple rutina de aplicar formulas técnicas a los datos.
-No es perfecta.
-No es fácil.
Así, a nuestro juicio, es posible identificar tres bases fundamentales que sustentan la propuesta metodológica original de Glaser y Strauss: el muestreo teórico, el método de comparación constante y la generación de teorías a partir de los datos obtenidos en la investigación. Es importante señalar que, con el transcurso de los años, la TF en su versión inicial ha recibido importantes aportes de autores tales como Corbin y Strauss (1990) o Charmaz (2006), lo que ha permitido la aparición de diferentes perspectivas y énfasis en dicha Teoría (Goulding, 1998; Andréu et al., 2007; Allen, 2010; Cooney, 2010; Jones y Alony: 2011).

II.1. El muestreo teórico
Según Glaser y Strauss (2006:45), el muestreo teórico

"es el proceso de recolección de datos para la generación de códigos, por el que el analista recoge conjuntamente, la teoría y analiza sus datos y decide qué datos recoger en adelante y dónde encontrarlos, para desarrollar su teoría que emerge de los mismos",

reflejando así uno de los elementos distintivos de la TF: el carácter simultáneo que posee la recogida y el análisis de los datos.
Asimismo, Trinidad et al. (2006) afirman que este proceso permite al investigador identificar categorías sobre personas o sucesos, las que deben "emerger" de los datos obtenidos durante la investigación que le permitan profundizar en información que sea relevante para construir una teoría, por lo que la calidad de los conceptos identificados es un aspecto importante, señalando que el muestreo teórico debe finalizar cuando la información (datos) se satura, es decir, no surgen nuevos conceptos y éstos comienzan a repetirse en el discurso de los diferentes informantes clave que aportaron datos a través de entrevistas, focus group u otra técnica cualitativa de recolección de información, lo que la literatura relativa a la TF denomina "saturación teórica".
Por ello, como señalan Rodríguez Gómez et al. (1999:49): "lo importante no es el número de casos, sino la potencialidad de cada uno para ayudar al investigador a desarrollar una mayor comprensión teórica sobre el área que está estudiando". Así, mediante el muestreo teórico, el investigador tiene la posibilidad de escoger los casos a estudiar según su aporte al análisis del objeto de estudio, definiendo el qué y a quién incorporar en la investigación a medida que se desarrolla el trabajo de campo (Trinidad et al., 2003; Trinidad y Jaime, 2007), teniendo como principal criterio para definir su muestreo a la saturación teórica, que se configura cuando "los nuevos datos comienzan a ser repetitivos y dejan de aportar información novedosa" (Trinidad et al., 2006:25), lo que le indica al investigador que no es posible obtener nuevos datos o nueva información acerca de una categoría (Valles, 1997; Glaser y Strauss, 2006; Trinidad et al., 2006).

II.2. El método de comparación constante
De acuerdo con Glaser y Strauss (2006), tradicionalmente existen dos aproximaciones para el análisis de los datos cualitativos: (a) codificar los datos primero y luego analizarlos, para convertirlos en información confiable para probar provisionalmente una hipótesis; o bien, (b) analizar los datos y luego codificarlos, para la generación de ideas integradas por categorías y sus propiedades e hipótesis, lo que le permitirá rediseñar y reintegrar conceptos que emergen tanto de los datos como de los comentarios del propio investigador sobre los mismos

. Así, según los propios Glaser y Strauss (2006:102) el método de comparación constante es propuesto por estos autores como "un tercer enfoque de análisis de datos cualitativos que combine el procedimiento de comparación explícita del primero y el estilo de desarrollo de teoría del segundo", para lo cual describen cuatro etapas para aplicar esta tercera vía de análisis de datos cualitativos:
1° Comparación de incidentes aplicables a cada categoría.
2° Integración de categorías y sus propiedades.
3° Delimitación de la teoría.
4° Redacción de la teoría.
De esta forma, el método de comparación constante se transforma en uno de los elementos distintivos de la TF aplicada al análisis de datos cualitativos (Goulding, 1998; Suddaby, 2006; Andréu et al., 2007; Kolb, 2012), no con el propósito de comprobación o generalización sino más bien para generar categorías conceptuales y sus respectivas propiedades (Trinidad et al., 2006; Kolb, 2012), siendo más apropiada cuando el estudio de las interacciones o experiencias sociales pretenden explicar un proceso, no para probar o verificar una teoría ya existente (Lingard et al., 2008).
En el Cuadro 1, se observa la estrecha relación entre el muestreo teórico y el método de comparación constante, resultando imprescindible aplicarlos conjunta e integradamente al análisis tanto de los datos generados por la propia investigación, como sobre aquellos provenientes de fuentes secundarias.

Cuadro 1. Implicancias metodológicas en el contexto de la Teoría Fundamentada

Nota: Elaboración propia, basado en Glaser y Strauss (2006).

Así, la utilización de los principios y procedimientos de la TF en un estudio empírico exige tener presente algunas dificultades u obstáculos que pueden surgir en su aplicación, tales como: reconocer oportunamente cuándo los datos efectivamente alcanzan el nivel de saturación teórica; la rigurosidad con la que debe aplicarse el proceso simultáneo de recolectar y analizar los datos conjuntamente con la generación de la teoría; la flexibilidad que el investigador debe poseer para aplicar procedimientos que le exigirán avanzar y retroceder en la exploración de diferentes interpretaciones y reinterpretaciones de los datos, categorías e hipótesis generadas durante el proceso de aplicación de la TF.

II.3. La generación de teorías
Como se ha indicado anteriormente, existe un consenso en considerar al muestreo teórico y al método de comparación constante como los pilares o principios fundamentales de la TF (Boeije, 2002; Glaser y Strauss, 2006; Suddaby, 2006; Lingard et al., 2008). Sin embargo, creemos que es absolutamente destacable como un tercer elemento distintivo la positiva acogida que este enfoque hace de la influencia de Robert K. Merton para generar teorías de alcance medio, a partir de datos cualitativos (Glaser y Strauss: 2006; Andréu et al., 2007).
Así, la TF dentro de un análisis cualitativo de los datos ofrece la posibilidad de generar dos tipos de teorías: substantiva y formal (Glaser y Strauss: 2006; Trinidad et al., 2006; Andréu et al., 2007).
Una teoría substantiva, según Andréu et al. (2007) se produce como resultado de investigar un área social específica, donde la aplicación de dicha teoría substantiva elaborada por el investigador se encuentra limitada a dicha área de estudio, recomendando primero aplicar las teorías ya existentes al análisis de los datos generados en la investigación, y posteriormente formular teorías específicas.
El otro tipo de teoría propuesto por Glaser y Strauss (2006) es la teoría formal, la que se desarrolla para analizar fenómenos sociales más amplios y genéricos. Estas teorías se desarrollan a partir de una serie de teorías substantivas, y especialmente a partir de los datos obtenidos en una investigación.

III. Etapas del procedimiento de análisis de los datos a través de la TF

Según Charmaz (2000:509), los métodos de la TF consisten en "directrices inductivas sistemáticas para recolectar y analizar datos para construir marcos teóricos de alcance medio que explican los datos recogidos", reconociendo asimismo el importante efecto legitimador que los investigadores cualitativos otorgan a los métodos de la teoría fundamentada para perfeccionar sus análisis.
En confirmación de lo anterior, Rodríguez Gómez et al. (1999) señalan que el énfasis en la generación de teoría a partir de los datos es una de las principales diferencias entre la teoría fundamentada y el resto de métodos cualitativos existentes, recalcando que quien decide utilizar esta teoría debe asumir la responsabilidad de interpretar la información obtenida en la investigación mediante categorías abstractas, y las relaciones que se logren establecer entre las mismas a través de la identificación de sus propiedades.
Así, las etapas o pasos que se seguirán en el proceso de análisis de los textos de las transcripciones obtenidos en las entrevistas o focus group, por ejemplo, de acuerdo a los principales planteamientos de la TF, serían tres: 1) identificación de los incidentes para asignarle códigos; 2) comparación de los códigos sustantivos, conceptos y categorías, y 3) integración de estos elementos en una teoría que se elabora a partir de los datos que permitan construir hipótesis teóricas (Trinidad et al., 2003; Trinidad y Jaime: 2007; Kolb, 2012).
Sin embargo, es importante destacar que, si bien las fases de análisis se presentan como etapas o pasos sucesivos, el nivel de integración y simultaneidad con la que se desarrollan cada una de ellas es bastante elevado en la práctica, no existiendo necesariamente una separación evidente entre una y otra al momento de su aplicación empírica en el análisis de los datos generados por la investigación.
Además, para desarrollar el proceso de análisis de los discursos existentes en los textos de transcripciones de las entrevistas o focus group, es posible apoyarse en el software Atlas Ti, ya que este programa computacional desarrolla su estructura de análisis lógico de acuerdo a los planteamientos de la Grounded Theoryelaborada por Glaser y Strauss en 1967 (Trinidad et al., 2006; Andréu et al., 2007), no obstante el abierto rechazo de Barney Glaser al uso de software informático para analizar los datos mediante la TF (Valles, 2005).

III.1. El microanálisis
El microanálisis consiste en un análisis detallado y pormenorizado, "palabra por palabra" o "línea por línea", de los textos examinados (Charmaz, 2000; Strauss y Corbin, 2002; Charmaz, 2006). Se utiliza para analizar e interpretar datos de manera cuidadosa, identificando porciones de texto dentro de cada entrevista realizada (Trinidad et al., 2003) con el propósito de generar las categorías iniciales con sus correspondientes propiedades y dimensiones, que permitan relacionar los diferentes conceptos que surgen de los discursos de los actores sociales entrevistados en relación con nuestro problema de investigación, lo que posibilitará posteriormente realizar el proceso de codificación de manera más expedita.
Así, el propósito de esta etapa es realizar una primera reducción de los datos obtenidos, los que serán codificados en la siguiente fase, por lo que Strauss y Corbin (2002:63) señalan que, si bien el microanálisis implica una minuciosa revisión línea por línea, también "se puede aplicar a una palabra, oración o párrafo". Además, Charmaz (2006:50) afirma que el análisis palabra por palabra "puede ser particularmente útil cuando se trabaja con documentos o ciertos tipos de materiales efímeros, como los datos de Internet".
Como señalan Trinidad et al. (2006:25), las porciones de texto seleccionadas identifican "incidentes", los que son entendidos como "aquella porción de los datos [...] que tiene significación en sí misma", es decir, partes de las entrevistas o focus group que pueden ser analizadas separadamente porque son importantes para el estudio del problema de la investigación, debido a que contienen los símbolos, palabras clave o temas relevantes. Dichos incidentes son comparados unos con otros "en cuanto a sus propiedades y dimensiones, en busca de similitudes y diferencias, y se ubica en una categoría" (Strauss y Corbin, 2002:86).
Los incidentes identificados en el texto deben recibir una denominación común, abstracta y conceptual, como códigos, que según Valles (1997:349) permitan al investigador agrupar "un conjunto variopinto de fragmentos de entrevista que comparten una misma idea", lo que se transformará posteriormente en la base de la codificación abierta, algo que Charmaz (2006) ratifica señalando que, tanto la revisión de los textos por palabra o como por líneas, corresponden a la codificación inicial, dando paso posteriormente a codificaciones más específicas. Asimismo, un elemento importantísimo de la TF que debe tenerse en cuenta desde un comienzo del análisis de los textos es la redacción de memorandos, que permitan al investigador registrar y recopilar las ideas, preguntas, o hipótesis que puedan surgir al entrar en contacto con los textos, y que le permitirán posteriormente al investigador articular los conceptos y elementos en la redacción de la teoría que surja de los datos (Strauss y Corbin: 2002; Trinidad et al., 2003; Trinidad et al., 2006; Andréu et al., 2007; Trinidad y Jaime: 2007).
De acuerdo con Charmaz (2006:72), en esta etapa la redacción de "memorandos" se transforma en un paso intermedio fundamental entre la recogida de los datos y la transcripción de la teoría, exigiendo al investigador analizar los datos y los códigos tempranamente en la investigación, señalando que "conversando con uno mismo al escribir notas, nuevas ideas y perspectivas surgen durante el acto de escribir", por lo que la redacción de "memos" debe ser un acto permanente y constante a lo largo de la investigación, pero especialmente al momento de entrar en contacto con los datos, al identificar los incidentes que luego serán codificados.
En síntesis, el microanálisis plantea un acercamiento inicial del investigador a los textos analizados, efectuando una primera reducción de los datos obtenidos mediante la identificación de incidentes que aporten elementos útiles para el análisis del problema a partir de los discursos de los actores, que a su vez proporcionen el material de base con el cual realizar el proceso de codificación.

III.2. Etapa de Codificación
Según Rodríguez Martínez (2008:153), codificar en la TF obliga al investigador a "crear categorías a partir de una interpretación de los datos", lo que pone de manifiesto que, bajo esta teoría, no es necesario contar con categorías predeterminadas para realizar la codificación. De esta manera, la etapa de codificación se transforma en un momento medular del proceso de análisis mediante la TF, razón por la cual nos referiremos brevemente a cada una de las modalidades de codificación antes señaladas. Así, esta etapa implica realizar los procesos de codificación abierta, axial y selectiva (Corbin y Strauss: 1990; Trinidad et al., 2006; Andréu et al., 2007), obligando al investigador a realizar un examen analítico y descriptivo de los datos, "escuchando" a los entrevistados a través de la lectura y revisión de los textos, para reconocer qué dicen y cómo están planteando sus discursos.

III.2.1. Codificación Abierta
Es el proceso analítico a través del cual el investigador debe identificar en los textos aquellos conceptos fundamentales relacionados con su investigación, a la vez que se descubren las propiedades y dimensiones de los mismos (Valles, 1997; Strauss y Corbin: 2002; Andréu et al., 2007).
De acuerdo con Trinidad et al. (2006:48), en esta modalidad de codificación el investigador "aprende a permanecer abierto a cualquier idea que se pueda originar desde los datos", destacando además que la codificación realizada no gira solo en torno a los datos textuales con los que se trabaja, sino también respecto de la experiencia y la revisión de la literatura sobre el problema de investigación.
En esta fase, surge uno de los principios primordiales de la TF: la comparación constante. Lo anterior, porque se debe descomponer y examinar minuciosamente los textos, para poder compararlos e identificar similitudes y diferencias, lo que según Strauss y Corbin (2002:111) tiene por propósito agrupar o clasificar en categorías a "los acontecimientos, sucesos, objetos y acciones o interacciones que se consideran conceptualmente similares en su naturaleza o relacionados en el significado", debido a su capacidad de representar fenómenos porque comparten características y significados comunes que permite agruparlos.
Otro aspecto importante en este proceso es la denominación que se otorgue a los incidentes identificados en los textos analizados, lo que según Strauss y Corbin (2002) se puede realizar a partir de lo que los propios entrevistados señalan con sus palabras en la entrevista, lo que se denomina "código en vivo". Igualmente, cuando el investigador identifica y compara los códigos, puede denominarlos basándose en el significado que tienen los incidentes para el analista, lo que se conoce como "construcción sociológica". En cualquiera de los casos, código en vivo o construcción sociológica, la denominación otorgada será determinante para agrupar los incidentes cuando poseen características o propiedades comunes, en cuyo caso deberá ocuparse el mismo nombre o código según la opción utilizada.
Asimismo, Charmaz (2000:515) identifica cinco criterios de comparación de los códigos identificados durante esta etapa: a) comparar diferentes personas (entrevistados) según sus puntos de vista, situaciones, acciones o experiencias; b) comparar los datos de los mismos individuos en diferentes puntos en el tiempo; c) comparar incidente por incidente; d) comparar los datos con la categoría; y e) comparar una categoría con otras categorías.
Una vez codificados todos los incidentes identificados en los textos de las transcripciones, corresponde agrupar los códigos (conceptos) registrados "bajo un término más explicativo denominado categoría" (Andréu et al., 2007:69). Asimismo, según Strauss y Corbin (2002:124), las categorías son "conceptos derivados de los datos, que representan fenómenos", agregando que los fenómenos responden a la pregunta: ¿qué pasa aquí?, y de acuerdo con estos mismos autores, una categoría implica "ideas analíticas pertinentes que emergen de nuestros datos". Según Glaser y Strauss (2006:36), una categoría describe "un elemento conceptual de la teoría. Una propiedad, a su vez, es un aspecto conceptual o elemento de una categoría", señalando que las categorías se distinguen por poseer determinadas propiedades que las hacen únicas dentro de la teoría. De esta manera, para Strauss y Corbin (2002), las propiedades que puede contener una categoría son las características que la definen y le dan significado, elementos distintivos que, según Trinidad et al. (2006), pueden traducirse en dimensiones, condiciones, causas o consecuencias, y que, a su vez, permite ubicar en cada categoría a los acontecimientos, sucesos, objetos o acciones antes mencionados que se encuentran relacionados conceptualmente, y que fueron codificados en el microanálisis de los incidentes.

III.2.2. Codificación Axial
En esta etapa, lo que se pretende es establecer relaciones entre las categorías y sus respectivas sub-categorías, así como con otras categorías identificadas dentro de la investigación en la fase de codificación abierta, tomando en consideración para establecer estas relaciones entre categorías a las propiedades y dimensiones que describen a cada una de las categorías identificadas (Valles, 1997; Charmaz, 2000; Strauss y Corbin, 2002; Charmaz, 2006; Andréu et al., 2007).
En términos concretos, la codificación axial según Andréu et al. (2007:92) "consiste básicamente en codificar intensamente alrededor de una categoría considerada como eje", denominándola comúnmente como categoría central por su gran capacidad explicativa respecto del problema de investigación, para lo cual estos autores identifican una serie de pasos para alcanzar dichos propósitos:
- Se extraen las propiedades de cada una de las categorías a través de dimensiones implícitas o explícitas.
- Se ahonda en el análisis buscando condiciones, interacciones, estrategias y consecuencias del fenómeno al que hace referencia cada categoría.
- Se establecen las relaciones entre las categorías y sub-categorías.
De acuerdo con Strauss y Corbin (2002:135), la codificación axial se relaciona con "el proceso de reagrupar los datos que se fracturaron durante la codificación abierta". Para lograr lo anterior, será necesario relacionar las categorías y sub-categorías mediante oraciones que denotan su vínculo, siendo importante además intentar encontrar claves en los textos que permitan relacionar las categorías principales entre sí.
 Las sub-categorías aportan una mayor fuerza explicativa del fenómeno con el cual se encuentran asociadas (fenómeno que consideramos como una categoría en nuestra investigación), porque intentan responder preguntas tales como cuándo, dónde, por qué, cómo y con qué consecuencias sucede dicho fenómeno (Strauss y Corbin, 2002; Charmaz, 2006; Andréu et al., 2007).
De acuerdo con Strauss y Corbin (2002:139), las respuestas a dichas preguntas a través de la codificación axial le permiten al investigador contextualizar los fenómenos dentro de una "Estructura Condicional", para saber por qué ocurren ciertos hechos, es decir "las circunstancias en las cuales se sitúan o emergen los problemas, asuntos, acontecimientos o sucesos pertenecientes a un fenómeno". A su vez, la codificación axial revela al analista el "Proceso" para conocer cómo actúan las personas, lo que por ende implica identificar "la acción/interacción en el tiempo de las personas, organizaciones y comunidades, en respuesta a ciertos problemas y asuntos".
De esta forma, los fenómenos a los que aluden cada una de las categorías, identificadas en la fase previa, describen los "patrones repetidos de acontecimientos, sucesos, o acciones/interacciones que representen lo que las personas dicen o hacen, solas o en compañía, en respuesta a los problemas y situaciones en los que se encuentran" (Strauss y Corbin, 2002:142), por lo que, en la codificación axial, adquiere especial relevancia la descripción de las condiciones y sus múltiples propiedades asociadas a cada uno de los fenómenos identificados. De acuerdo con Valles (1997), esta descripción de propiedades que aporta la codificación axial se sistematiza a través del "paradigma de la codificación", que implica la identificación de las condiciones, interacciones, estrategias/tácticas y consecuencias que se encuentran relacionadas con una categoría.
A partir de los elementos descritos en el Cuadro 2, deben establecerse las relaciones que vinculen a las categorías con las sub-categorías, mediante un "análisis intenso hecho alrededor de una categoría cada vez, en términos de los elementos del paradigma" (Valles, 1997:350), identificando las condiciones, acciones/interacciones y consecuencias en los datos que emergen de los textos de las entrevistas. Habitualmente, el establecimiento de estas relaciones entre categorías y sub-categorías se representa mediante diagramas que grafican dichos vínculos (Strauss y Corbin, 2002; Andréu et al., 2007).

Cuadro 2. El paradigma de la codificación

Nota: Elaboración propia, basado en Strauss & Corbin (2002) y Andréu et al. (2007)

Una posibilidad adicional para analizar más profundamente la relación entre la estructura condicional y el proceso aludida por la codificación axial, se encuentra asociada con la construcción de la "Matriz Condicional/Consecuencial", desarrollada por Strauss y Corbin como un elemento complementario a los postulados de la versión original de la Grounded Theory (Andréu et al., 2007).
Mediante esta herramienta, el investigador puede contextualizar el fenómeno investigado relacionando las condiciones y las consecuencias que fueron identificadas en la codificación axial a través del paradigma de la codificación antes descrito, permitiéndole ubicar el problema investigado en una perspectiva micro y macro en cuanto a sus alcances e impactos.
De acuerdo con Strauss y Corbin (2002:199), dicha matriz es otro mecanismo de codificación que permite "construir un relato sistemático, lógico e integrado, que debe especificar la naturaleza de las relaciones entre los acontecimientos y fenómenos significativos", traduciéndose en una tabla de doble entrada como se presenta en el ejemplo del Cuadro 3 para el concepto de responsabilidad social universitaria, ubicándose en cada una de las filas a las condiciones asociadas con el problema investigado, en tanto que en las columnas se clasifican las consecuencias derivadas de las condicionantes identificadas en cada fila (Andréu et al., 2007).

Cuadro 3. Ejemplo de Matriz condicional/consecuencial sobre Responsabilidad Social Empresaria

Fuente: Gaete (2011:498).

Así, la elaboración de esta matriz permite al investigador visualizar las relaciones que se generan entre las condiciones del problema investigado y sus consecuencias derivadas, expresadas en diferentes categorías de análisis. La matriz de equilibrio permite observar los vínculos existentes entre las acciones/interacciones que cada actor involucrado desarrolla, como respuesta a las condiciones establecidas en cada fenómeno las que inicialmente hemos identificado como una categoría.

 

III.2.3. Codificación selectiva
De acuerdo con Corbin y Strauss (1990), la codificación selectiva es el proceso por el cual todas las categorías previamente identificadas son unificadas en torno a una categoría de "núcleo" o "central", que representa el fenómeno principal que está siendo estudiado. Para Trinidad et al. (2006:50), la codificación selectiva únicamente se inicia cuando se descubre la categoría central, debido que, a partir de ese momento, el investigador "delimita la codificación solo a aquellas variables que se relacionan de manera significativa con dicha categoría", con lo cual los anteriores procesos de codificación descritos previamente deben finalizar, para concentrarse en la búsqueda de las condiciones y consecuencias de la categoría central. Asimismo, Andréu et al. (2007:95) plantean que la efectividad del proceso de codificación selectiva se fundamenta en "la interrelación de unas categorías con otras y todas a su vez con la categoría central", ratificando con ello la importancia que tiene para la construcción de la teoría la identificación de la categoría central, como el punto de partida de la redacción de la propuesta teórica a partir de los datos obtenidos en la investigación.
Basándonos en Strauss y Corbin (2002:161), las principales características que debe cumplir una categoría para ser considerada como central o nuclear serían:
- Todas las otras categorías principales se pueden relacionar con ella.
- Debe aparecer con frecuencia en los datos. Ello significa que en todos, o en casi todos los casos, existan indicadores que apunten a tal concepto.
- La explicación que se desarrolla a partir de relacionar las categorías es lógica y consistente y los datos no son forzados.
- El nombre o la frase usados para describir la categoría central deben ser lo bastante abstractos para que puedan usarse para hacer investigación en otras áreas sustantivas, que faciliten el desarrollo de una teoría más general.
- A medida que el concepto se refina analíticamente por medio de su integración a otros conceptos, la teoría crece en profundidad y poder explicativo.
- El concepto puede explicar las variaciones así como el asunto central al que apuntan los datos, o sea, cuando varían las condiciones la explicación se mantiene, aunque la manera como se expresa un fenómeno puede variar algo.
Así, el descubrimiento de la categoría central se considera como el primer paso de esta fase (Strauss y Corbin, 2002), adquiriendo gran importancia para cumplir con los propósitos de reducir e integrar todos los elementos descubiertos en los datos hasta este momento, fundamentalmente por su capacidad de representar el tema principal de la investigación debido a su poder analítico.

III.3. La estructuración de la teoría
Una vez desarrolladas las etapas anteriores, corresponde dar forma a la teoría mediante la articulación de los elementos básicos de cualquier propuesta teórica: categorías, propiedades de las categorías e hipótesis (Valles, 1997; Trinidad y Jaime, 2007).
En el caso específico de las hipótesis, en esta última etapa aparecen formuladas de manera más concreta y específica, respecto de las posibles respuestas provisionales que surgen acerca de las relaciones entre categorías. Hasta el momento, las hipótesis habían aparecido esporádicamente a lo largo de la comparación constante de incidentes, categorías y sus propiedades, expresadas como formulaciones parciales y tentativas, por ejemplo en los memorandos, pero que a partir de ahora permitirán construir o ser expresadas como hipótesis teóricas (Trinidad et al., 2003; Trinidad y Jaime, 2007).
Además, como señalan Strauss y Corbin (2002:159), en esta etapa el investigador está trabajando con datos muy refinados obtenidos comparando caso a caso, por lo que "son abstracciones y representan [...] las historias de muchas personas o grupos reducidas a términos altamente conceptuales". Se trata de conceptos abstractos que alcanzan la posición de categorías, que le permiten al investigador explicar un fenómeno mediante un conjunto de afirmaciones relacionadas entre sí. Según Valles (1997:352), en esta etapa adquiere gran relevancia la delimitación teórica, caracterizada por dos rasgos distintivos de esta fase:
- El criterio de parsimonia (o economía científica): explicación y comprensión de un fenómeno con el mínimo de conceptos y formulaciones.
- El criterio de alcance: amplitud del campo de aplicación de la teoría sin desligarse de la base empírica de partida.
En cuanto a la parsimonia o economía científica, ésta se obtiene desarrollando la codificación selectiva al buscar las categorías centrales, mediante un refinamiento analítico que permite reducir las categorías para focalizar e integrar la teoría, permitiendo explicarla con una base mínima de conceptos (Valles, 1997; Strauss y Corbin, 2002; Trinidad et al., 2006; Andréu et al., 2007).
Respecto al criterio de alcance, en la TF surgen como posibilidades de generalización la teoría substantiva y la teoría formal, que permiten cumplir con el propósito de generar una propuesta de sistematización teórica a partir de los datos obtenidos durante una investigación, distinguiendo entre la teoría desarrollada específicamente para la temática concreta de la investigación, de aquélla que pretende alcanzar un nivel de abstracción mayor, para ser aplicada en ámbitos científicos más amplios (Trinidad et al., 2006).
De acuerdo con Glaser y Strauss (2006:32), ambos tipos de teoría son de alcance medio, pero que, en el caso de la teoría substantiva, "se desarrolla en un área sustantiva o empírica de la investigación sociológica como la atención al paciente, las relaciones raciales, la educación profesional, la delincuencia, o las organizaciones de investigación". En cambio, estos autores definen a la teoría formal como aquélla que

"se desarrolla de manera formal o conceptual en un área de la investigación sociológica, como el estigma, la desviación de la conducta, la organización formal, la socialización, la congruencia estatal, autoridad y poder, sistemas de recompensas, o la movilidad social".

En síntesis, debe construirse la teoría identificando una categoría central a partir de la cual se establecen las relaciones con las demás categorías, sub-categorías y las hipótesis correspondientes, todo expuesto en un informe que condense dichos elementos a través de una estructuración lógica y coherente, utilizando el mínimo de conceptos posible para explicar su proposición teórica.
Finalmente, es importante recordar que la TF, además, identifica algunos criterios útiles para valorar la calidad de la teoría construida por el investigador, entre los que se pueden mencionar: 1) el ajuste a los datos, 2) la relevancia en la explicación y 3) la modificabilidad (Glaser y Strauss, 2006; Trinidad et al., 2006; Trinidad y Jaime, 2007). En términos muy sencillos, tal y como explican Trinidad y Jaime (2007:47), la aplicación de estos criterios implica demostrar "que la teoría sea capaz de explicar lo que sucedió en un tiempo anterior, predecir lo que puede suceder, e interpretar lo que está sucediendo" respectivamente para cada criterio.

IV. Conclusiones

El desarrollo de una investigación desde un enfoque cualitativo ofrece al investigador una riqueza de posibilidades bastante importante en el análisis de los datos, que puede ir desde lo estructural a lo interpretativo (Valles, 1997; Trinidad et al., 2006), donde la TF se ubica en el segundo caso como una propuesta fuertemente concentrada en la "construcción" de teoría desde una perspectiva fenomenológica, desarrollando simultáneamente el análisis de los datos, su categorización y la redacción de la teoría asociada al problema investigado. Sin embargo, en la literatura se observan dos grandes escuelas sobre la TF (Jones y Alony, 2011): por una parte, los "glaserianos" que mantienen una postura más ortodoxa de la TF, que apuestan por concentrarse en las bases y procedimientos más tradicionales y originales, versus los "straussianos" que han acogido de buena manera las innovaciones a la TF, tales como la codificación axial, o más recientemente la postura de aquellos autores que reconocen el aporte de los programas informáticos para realizar el análisis de los datos cualitativos a través de la TF, situación que Glaser rechazaba vehementemente (Valles, 2005).
En este contexto, en este trabajo se hace énfasis en una perspectiva holística e integradora de la TF, recogiendo sus aspectos tradicionales y fundacionales como el método de comparación constante o el muestreo teórico, así como aquellos procedimientos básicos como la codificación y categorización, incluida la codificación axial, además de la redacción de la teoría a partir de la identificación de una categoría central, sus propiedades e hipótesis.
Así, la utilización de la TF en el ámbito de las Ciencias Sociales, y muy especialmente en el análisis de datos cualitativos con el propósito de teorizar respecto de los fenómenos sociales investigados, se transforma en una opción metodológica interesante toda vez que, a nuestro juicio, supera las limitaciones del tradicional análisis de contenido aplicado a las investigaciones cualitativas, permitiendo al investigador social otorgar un valor agregado importante a las experiencias y puntos de vista aportados por las personas que están relacionadas o afectadas por una problemática social, a través del desarrollo de teorías substantivas que intentan explicar de manera más precisa dichas problemáticas.

Referencias bibliográficas

1. ALLEN, L. (2010). A critique of four Grounded Theory texts, en: The Qualitative Report, 15(6):1606-1620.         [ Links ]

2. ALONSO, L. (1998). La mirada cualitativa en sociología. Madrid: Fundamentos.         [ Links ]

3. ANDRÉU, J.; GARCÍA-NIETO, A.; PÉREZ CORBACHO, A. (2007). Evolución de la Teoría Fundamentada como técnica de análisis cualitativo. Madrid: CIS.         [ Links ]

4. BOEIJE, H. (2002). A Purposeful Approach to the Constant Comparative Method in the Analysis of Qualitative Interviews, en: Quality & Quantity, 36:391-409.         [ Links ]

5. CHARMAZ, K. (2006). Constructing Grounded Theory. A practical guide through qualitative analysis. London: SAGE.         [ Links ]

6. CHARMAZ, K. (2000). Grounded Theory. Objectivist and constructivist methods. (pp.509- 535). En: DENZIN, N.; LINCOLN , Y. (Eds.) Handbook of qualitative research. California: SAGE.         [ Links ]

7. CLARKE, A. (2003). Situational Analyses: Grounded Theory Mapping after the Postmodern turn, en: Symbolic Interaction, 26(4):553-576.         [ Links ]

8. COONEY, A. (2010). Choosing between Glaser and Strauss: an example, en: Nurse Resercher, 17(4):18-28.         [ Links ]

9. CORBIN , J.; STRAUSS, A. (1990). Grounded Theory Research: Procedures, Canons, and Evaluative Criteria, en: Qualitative Sociology, 13(1)3-21.         [ Links ]

10. ESCALANTE, E. (2011). Revisitando la crítica a la teoría fundamentada (Grounded Theory), Poliantea, 7(12):59-77.         [ Links ]

11. GAETE, R. (2011). Responsabilidad social universitaria: una nueva mirada a la relación de la universidad con la sociedad desde la perspectiva de las partes interesadas. Un estudio de caso. Tesis Doctoral. Facultad de Educación y Trabajo Social, Depto. Sociología y Trabajo Social, Universidad de Valladolid - España.         [ Links ]

12. GLASER, B.; STRAUSS, A. [1967] (2006). The discovery of Grounded Theory. Strategies for qualitative analysis. New Jersey: Aldine Transaction.         [ Links ]

13. GOULDING, C. (1998). Grounded theory: the missing methodology on the interpretivist agenda, en: Qualitative Market Research: An International Journal, 1(1):50-57.         [ Links ]

14. HALL , H.; GRIFFITHS, D.; McKENNA, L. (2013). From darwin to constructivism: the evolution of grounded theory, en: Nurse Researcher, 20(3):17-21.         [ Links ]

15. HERNÁNDEZ, N.; SÁNCHEZ, M. (2008). Divergencias y convergencias en la teoría fundamentada (Método comparativo continuo), en Revista Ciencias de la Educación, 1(32):123-135.         [ Links ]

16. JONES, M.; ALONY , I. (2011). Guiding the Use of Grounded Theory in Doctoral Studies - An Example from the Australian Film Industry, en: International Journal of Doctoral Studies, 6:95-114.         [ Links ]

17. KOLB, S. (2012). Grounded Theory and the Constant Comparative Method: Valid Research Strategies for Educators, en: Journal of Emerging Trends in Educational Research and Policy Studies, 3(1):83-86.         [ Links ]

18. LICQURISH S., SEIBOLD, C. (2011). Applying a contemporary grounded theory methodology, en: Nurse Researcher, 18(4):11-16.         [ Links ]

19. LINGARD, L.; ALBERT, M.; LEVINSON , W. (2008). Grounded Theory, mixed methods, and action research, en: British Medical Journal, 337:459-461.         [ Links ]

20. LÓPEZ DOBLAS, J. (2005). Herramientas para el trabajo sociológico. (pp.57-90). En: IGLESIAS DE USSEL, J.; TRINIDAD REQUENA, A. (Coord.). Leer la Sociedad. Una introducción a la sociología general. Madrid: Tecnos.         [ Links ]

21. RAYMOND, E. (2005). La Teorización Anclada (Grounded Theory) como Método de Investigación en Ciencias Sociales: en la encrucijada de dos paradigmas, en: Cinta Moebio, 23:217-227.         [ Links ]

22. RODRÍGUEZ GÓMEZ, G.; GIL FLORES, J.; GARCÍA, E. (1999). Metodología de la investigación cualitativa. Málaga: Aljibe.         [ Links ]

23. RODRÍGUEZ MARTÍNEZ, P. (2008). La teoría fundamentada: un plan metodológico para respetar la naturaleza del mundo empírico, en: Praxis Sociológica, 12:137-172.         [ Links ]

24. SBARAINI , A .; CARTER, S.; EVANS, W.; BLINKHORN, A. (2011). How to do a grounded theory study: a worked example of a study of dental practices, en: Medical Research Methodology, 11:128.         [ Links ]

25. STRAUSS, A.; CORBIN , J. (2002). Bases de la investigación cualitativa. Técnicas y procedimientos para desarrollar la teoría fundamentada. Medellín: Contus.         [ Links ]

26. SUDDABY, R. (2006). From the Editors: What grounded theory is not, en: Academy of Management Journal, 49 (4): 633-642.         [ Links ]

27. TRINIDAD, A.; JAIME, A. (2007). Meta-Análisis de la investigación cualitativa. El caso de la evaluación del Plan Nacional de Evaluación y Calidad Universitaria en España, en: Revista Internacional de Sociología, 65(47):45-71.         [ Links ]

28. TRINIDAD, A.; CARRERO, V.; SORIANO , R. (2006). Teoría fundamentada Grounded Theory La construcción de la Teoría a través del análisis interpretacional. Madrid: CIS.         [ Links ]

29. TRINIDAD, A.; AYUSO, L.; GALLEGO, D.; GARCÍA, J. (2003). La evaluación del Plan Nacional de Evaluación y Calidad Universitaria desde la Grounded Theory, en: Papers, 70:83-113.         [ Links ]

30. VALLES, M. (2007). Entrevistas Cualitativas. Madrid: CIS.         [ Links ]

31. VALLES, M. (2005). Metodología y Tecnología cualitativas: actualización de un debate, desde la mirada más atenta en la obra de Barney G. Glaser, en: EMPIRIA Revista de Metodología de Ciencias Sociales; 9:145- 168.         [ Links ]

32. VALLES, M. (1997). Técnicas cualitativas de investigación social. Reflexión metodológica y práctica profesional. Madrid: Síntesis.         [ Links ]

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons