El bocio y la pintura antigua

Recientemente, el Dr. J. Barry Ferriss de la ciudad de Cork, Irlanda, publicó en la revista Thyroid (18:387-393, 2008) un excelente artículo en el cual se refirió a las muchas razones por las cuales el bocio puede ser visto en las pinturas antiguas. El Dr. Ferriss dividió las causas en diferentes ítems: a) bocio endémico, b) tiroiditis del embarazo y el postparto, c) dishormonogénesis, d) bocio que induce pena o repulsión, e) bocio usado como caricatura, f) bocio para reflejar la pobreza o el bajo nivel social, g) bocio usado como autobiografía, h) bocio para indicar el lugar de origen, y i) bocio como accesorio erótico.
En sus conclusiones menciona que hay un gran número de pinturas que ilustran la vastedad de la endemia bociosa en el pasado, pero también muestran el bocio incidental, como el de la tiroiditis postparto. Finaliza diciendo que cuando se visita una galería de arte de magnitud, uno puede fácilmente ser desbordado por la enorme cantidad de obras expuestas. Sin embargo, podría ser de utilidad circunscribirse a observar algunos detalles puntuales que pueden ser comunes a muchas de ellas. Para el caso de los tiroideólogos, esta búsqueda tendría un sabor muy especial cuando se trate del bocio. Para aquellos lectores de RAEM, que tengan inclinación por el arte pictórico, les recomendamos especialmente la lectura del artículo del Dr. Ferriss en el número de abril de la revista Thyroid.

Dra. María del Carmen Silva-Croome
Dr. Hugo Niepomniszcze

Coordinadores del CABE-FASEN