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Revista Pilquen

versión On-line ISSN 1851-3123

Rev. Pilquen  n.7 Viedma ene./dic. 2005

 

ARTÍCULOS

Una perspectiva sobre la construcción del ciudadano en el territorio Nacional del chaco. Diagnóstico y propuestas de Juan Ramón Lestani

María Silvia Leoni
Facultad de Humanidades - UNNE

Resumen
El objetivo de este trabajo es examinar una de las variantes regionales que asumió el proceso de construcción de la ciudadanía en los territorios nacionales a través de la actuación de un integrante de la elite dirigente del Chaco. La intervención de Juan Ramón Lestani (1904-1952), un político socialista, en la instauración de distintas instancias de participación en el territorio, nos revela los problemas planteados en torno a la constitución del espacio público y del ciudadano en el Chaco, propia de la década de 1930, así como los conflictos suscitados con respecto a las propuestas de transformación política que se manejaron. Por otro lado, a través del ensayo, Lestani nos proporciona un interesante diagnóstico sobre la situación del territorio y las causas de su postergación política.

Palabras clave: Territorios nacionales; Chaco; Política; Ciudadanía; Lestani.

A perspective about the construction of the citizen in the national territory of Chaco. Diagnosis and proposals's Juan Ramón Lestani

Abstract
The objective of this work is to examine one of the regional variants that assumed the process of construction of the citizenship in the national territories through the performance of a member of the leader elite of the Chaco. The intervention of Juan Ramon Lestani (1904-1952), a socialist politician, in the restoration of different instances of participation in the territory, reveals the problems created around the constitution of the public space and the citizen in the Chaco, proper of the decade of 1930, as well as the conflicts provoked with respect to the proposals of political transformation that were handled. On the other hand, through the essay, Lestani provides an interesting diagnosis on the situation of the territory and the causes of its political delay.

Key words: National territories; Chaco; Politics; Citizenship; Lestani.

Recibido: 23/06/05
Aceptado:
18/11/05

En los territorios nacionales, si bien existió un goce efectivo de los derechos civiles, no ocurrió lo mismo con los derechos políticos, que estuvieron restringidos a la vida municipal hasta mediados del siglo XX. Sin embargo, recientes trabajos han demostrado que esta restricción no impidió que el ciudadano de los territorios participase de instancias socio-políticas locales y territoriales que revelan un cierto grado de conciencia cívica y de pertenencia identitaria (Ruffini 2005)

Es por ello que, además de las razones de carácter económico, social y político por las cuales se excluyó de aquellos derechos a los habitantes de los territorios y se postergó el otorgamiento de la autonomía a estos espacios, debemos atender a cómo fue encarada la problemática en los mismos territorios, con las propuestas, los conflictos y debates suscitados entre quienes buscaban atribuirse la representación de la opinión pública. Los análisis que se vienen realizando sobre estas cuestiones revelan la diversidad de aspiraciones manifestadas en los territorios y las posturas muchas veces contrapuestas entre distintos sectores de una misma gobernación (Arias Bucciarelli 2001)

Por otro lado, la distorsión existente entre las instituciones proyectadas por el estado nacional para el gobierno de los territorios y las prácticas sociales concretas se manifestó en los variados reclamos, la agitación en la prensa, los debates y propuestas de diversos organismos e instituciones intermedias, como así también en la realización de asambleas de municipios regionales o congresos nacionales, que durante las décadas de 1930 y 1940 instalaron en el espacio público nacional el debate sobre las formas de inclusión de los territorianos al cuerpo político de la nación. Las diferentes cuestiones planteadas en estas instancias son reveladoras sobre la construcción social de la ciudadanía, ya que nos señalan las discrepancias existentes entre los distintos espacios y en el interior de cada uno de ellos respecto a las experiencias concretas de la vida política territoriana y las propuestas exigidas para su solución (Favaro y Arias Bucciarelli 1995)

En el contexto señalado, el análisis de la actuación de Juan Ramón Lestani nos parece particularmente significativo, por haber participado en las distintas instancias de la vida territoriana donde se definían los reclamos ante el gobierno nacional, por haber asumido explícitamente el papel de intérprete y formador de la opinión pública y por haber introducido la discusión de temas que se volverían centrales en el Chaco en los debates en torno a la identidad política. Es por ello que su itinerario biográfico nos revela no sólo su intervención en los distintos ámbitos de acción de la vida política territoriana, sino también en la constitución del espacio público y del ciudadano en el Chaco, propia de la década de 1930. 

LESTANI: UNA TRAYECTORIA POLÍTICA EN EL CHACO DE 1930 

Juan Ramón Lestani había nacido en Resistencia en 1904; pertenecía a la tercera generación de una de las familias italianas que desembarcaron en ese lugar en 1878 para poblar la nueva colonia y cuyos descendientes formarían parte de la elite local. El proceso de elitización se había producido a principios del siglo XX, fundamentalmente a través del éxito económico obtenido por estos inmigrantes; esta elite resistenciana estaría formada también por profesionales y altos funcionarios públicos llegados con cada nueva gestión, representantes de las grandes empresas establecidas en el territorio y por un reducido grupo intelectual, conformado por los dueños de periódicos, directores de escuelas y profesores de los escasos colegios secundarios existentes.

La educación formal de Lestani se limitó a los estudios primarios, pues "el catecismo de las escuelas privadas y el positivismo de las escuelas oficiales no eran adecuados para pulir las aristas de un temple rebelde como el suyo" (Miranda 1957). Buscó ampliar sus conocimientos a través de la experiencia directa, de los viajes, una práctica inusual en el ámbito local, aunque común entre la intelectualidad americana; en 1928 recorrió Europa, donde fue un observador preocupado por las cuestiones socio-políticas; sus reflexiones serían expuestas en Turismo proletario (Crónica europea), en 1934. También publicó un ensayo sobre la revolución mexicana, titulado México (El experimento mexicano), en 1938.

Se incorporó a las filas del socialismo, que junto con el radicalismo eran las dos principales fuerzas que se disputaban las comunas electivas del Chaco desde 1915. Lestani fue el primer intendente nativo de Resistencia, cargo que desempeñó en dos oportunidades, entre 1933-1935 y 1940-1942. La importancia de este papel se justiprecia si tenemos en cuenta que la política municipal fue el único ámbito de participación directa con que contaron los habitantes de los territorios nacionales, por lo que los municipios fueron considerados "escuelas de gobierno propio".

Lestani se dedicó al periodismo político, dispuesto a formar a la opinión pública del territorio. Fue director y colaborador de La Verdad, periódico del Partido Socialista, y dirigió Región (1936), órgano de la Alianza Civil Territorial. También aparecieron sus artículos en otros periódicos y revistas locales de orientación socialista, como Estampa Chaqueña, de la que fue editorialista en la década de 1930. Los diarios en la Argentina de principios del siglo XX se habían convertido en expresión de una nueva forma de sociabilidad política, nucleando a escritores que hacían sus primeras armas y encontraban en ellos un medio para insertarse políticamente; también funcionaron como ámbitos de discusión y elaboración de propuestas políticas, integrándose en una "cultura de la movilización" (Zimmermann 1998: 47). Estas circunstancias se observan nítidamente en cuanto al periodismo del Chaco. La actuación de los periódicos fue decisiva, tanto en el marco municipal como en la gestación de movimientos y asociaciones territoriales. Asimismo se destacaron por su labor de promoción de las más diversas actividades e instituciones culturales y recreativas, en un esfuerzo por aunar a los chaqueños tras objetivos comunes. De esta manera, dieron espacio a escritores, como Lestani, que pudieron difundir a través de sus páginas sus perspectivas y propuestas sobre la realidad territoriana.1

A partir de la década de 1920, Lestani participó en varios movimientos por los derechos políticos de los territorianos, a los que nos referiremos más adelante. Siempre dentro de este contexto de defensa de los intereses territorianos, representó al Chaco en congresos de territorios, municipales, algodoneros y de escritores. También intervino en la gestación de numerosas instituciones locales. El crecimiento experimentado en las primeras décadas del siglo por Resistencia permitió la formación de la esfera pública, con el desarrollo alcanzado por la prensa, la actividad de centros, clubes y cafés, que proporcionaron espacios de encuentro y discusión, y con la creación de asociaciones de diverso tipo. En la década de 1920, Lestani participaba de las reuniones en el bar Olimpo, en Resistencia, donde se discutía sobre temas políticos y culturales. Integró la Peña de los Bagres y el Ateneo del Chaco (1938), institución central en el desarrollo del campo artístico y literario del territorio; fue socio fundador y presidente del Consejo de la Universidad Popular (1929) y socio fundador de la Sociedad Argentina de Escritores, filial Chaco (1942), surgida con la finalidad de dar respaldo a la presencia de los escritores chaqueños en los encuentros nacionales.

Problemas de salud y la revolución de 1943 lo alejaron de la escena pública. Falleció en Resistencia en 1952, un año después de que el Chaco fuera provincializado, proceso en el cual no llegó a participar. Otros actores habían ocupado entonces su lugar.

LA VIDA MUNICIPAL

En la década de 1930, el Chaco vio incrementado el número de municipios de cinco a diez, una cantidad aún insuficiente para su progresivo desarrollo urbano. La actividad política restringida a estos espacios, la existencia de escasas comunas y la falta de vinculación entre las distintas localidades que componían el territorio, obstaculizaron el establecimiento de las estructuras partidarias a escala territorial, así como la formación de una identidad política chaqueña.

A los partidos tradicionales -la UCR y el Socialismo- se sumaban para las elecciones comunales, muchas veces reñidas, partidos vecinales de distinto carácter y breve vida. Lestani, como vocero del socialismo de Resistencia, consideraba negativamente la presencia de estas agrupaciones ocasionales, así como la proclamada apoliticidad de sus candidatos al concejo. Remarcó la necesidad de garantizar en todas las elecciones la participación de los dos partidos tradicionales, para evitar la intromisión de agrupaciones que sólo se formaban para defender los intereses de un reducido sector de comerciantes e industriales e imponer un candidato, para disgregarse luego de las elecciones. Insistía en que había que combatir a estos grupos dispersos, los cuales "se creen en el derecho de gobernar la comuna sin interesarles la responsabilidad ante el pueblo".2

La aparición de la Concordancia del Chaco en 1938, iniciativa del gobernador José Castells, causó gran preocupación en Lestani, pues vaticinaba que, si llegara a triunfar, el Chaco se convertiría en un infeudo correntinoln ya que, con la creación de este partido, Castells se había propuesto retribuir al autonomismo de Corrientes "las atenciones recibidas que le permitieron sostenerse como gobernadorln. Defendía entonces la formación de un Frente Unido entre socialistas y radicales en Resistencia, para evitar así que el gobernador no sólo manejara a su antojo la comuna capitalina, sino que el autonomismo se consolidara en todo el territorio, iepues una vez que caiga Resistencia, el interior cederá fácilmente" (Cit. en Mari 1999: 174-175)3. Aquí se ponen de manifiesto dos cuestiones sobre las que insistiría Lestani y que retomaremos luego: una, el papel central que tenía y debía tener Resistencia (y su dirigencia) frente a los demás centros urbanos a la hora de definir y dirigir la política territorial; otra, la nefasta injerencia correntina en la política chaqueña.

Las malas prácticas que se manifestaban en la vida municipal (fraudes, conflictos) fueron atribuidas a la intromisión de los gobernadores, ya que "el pueblo elige y vota muy bien. Hay más orden y cultura cívica en nuestras luchas electorales, que en casi todas las provincias argentinas" (Lestani, 1935: 45). Esta preocupación por brindar una visión positiva de la política municipal se fundaba en la necesidad de demostrar la capacidad de los territorianos para alcanzar la autonomía.

DE LA REPRESENTACIÓN PARLAMENTARIA A LA PROVINCIALIZACIÓN

Integrantes de las elites urbanas del Chaco se organizaron a partir de la década de 1920, aunque con mayor intensidad en la siguiente, en agrupaciones, movimientos y congresos -que en muchos casos nucleaban a los distintos territorios- con la finalidad de obtener la ampliación de los derechos políticos y mejoras en las condiciones judiciales, educativas, sanitarias y de infraestructura del territorio. Estas manifestaciones ocuparon un espacio significativo en la política local y alcanzaron repercusión en el ámbito nacional. A través de estas vías informales se constituyó una dirigencia que asumió un rol de intermediaria entre el conjunto de la sociedad y el estado, así como de formadora de la conciencia territoriana. El hincapié en el campo político estuvo puesto en la obtención de la representación parlamentaria, la elección popular de gobernadores, la designación o remoción de determinadas autoridades, la creación de municipios y la formación cívica de los habitantes del Chaco, quedando la provincialización en un segundo plano (Leoni de Rosciani 2002)

Esta postura se observa claramente en Lestani, quien hasta mediados de la década de 1930 no abonó la provincialización. Entre las agrupaciones en las que intervino, se encuentran la Unión Territorial del Chaco (1920), la Agrupación pro derechos territoriales (1930), la Alianza Civil Territorial (1936) y, finalmente, la Junta Provincialista (1940)

La Agrupación pro derechos territoriales, integrada por un grupo de jóvenes de Resistencia bajo la inspiración y con el apoyo del naturalista Enrique Lynch Arribálzaga4, se proponía exigir al gobierno nacional, junto con la representación parlamentaria, la creación de municipalidades autónomas y la designación de jueces de paz electivos, así como interesarlo por la designación de gobernadores con arraigo en el territorio.5

La Agrupación obtuvo un triunfo en 1931 con la designación como gobernador de Juan S. Mac Lean, integrante de la terna de candidatos que había elevado al poder ejecutivo. Lestani, designado secretario general de la Agrupación, realizó giras por el interior en 1931 para formar otros núcleos similares, pero la organización, sin mayor convocatoria, terminó por desaparecer.

Lestani se mostraría decepcionado por la segmentación de la opinión pública local frente a los temas políticos, lo cual resultaba muy claro cuando se trataba de proponer nombres para la gobernación. Así, ante la posibilidad de que fuera nombrado gobernador Juan Vrillaud en 1932, se enfrentaron dos grupos: uno, encabezado por Estampa Chaqueña, insistía en la necesidad de un candidato radicado en el territorio, bajo el lema "El Chaco para los chaqueños"; el otro grupo, integrado por comerciantes de Resistencia, acusaba al primero de chauvinismo y apoyaba el nombramiento del candidato propuesto por Justo, quien fue finalmente designado. Ante la falta de unidad en esta circunstancia, Lestani realizaba un diagnóstico pesimista, que también nos da indicios sobre la debilidad de la Agrupación:

Impera actualmente en el ambiente del territorio un espíritu de desconfianza, de cobardía moral, con la falta absoluta de esa entereza necesaria para ponerse al frente de un movimiento, sostener un nombre, pedir apoyo, concretando una acción responsable y orientar una vez más el sentimiento disperso de nuestra población, asentando las bases de una conciencia colectiva, anarquizada en su primera escaramuza.6

Si bien Lestani instaba a tomar como modelo el movimiento autonómico de La Pampa, aconsejaba que "Sin ir al extremo -por ahora- de exigir la autonomía del territorio, debemos poner todo el entusiasmo a favor de la obra en que está empeñada la agrupación local, que brega por la representación parlamentaria".7

A comienzos de 1932, en la ciudad de Charata, un grupo de figuras destacadas de la localidad formó un comité para luchar por la autonomía, sin interesarse por la representación parlamentaria, por no considerarla una solución de fondo.8 Lestani lamentaba que la acción de este grupo no se hubiera hecho sentir en Resistencia, de donde debía partir "la opinión más autorizada sobre este importante punto". Admitía las razones esgrimidas por los provincialistas, pero sostenía que primero debían difundir su pensamiento y consultar a todos los habitantes del territorio, para que la transformación política no quedara circunscrita al manejo de un reducido grupo. Descreía que alcanzaran apoyo popular e insistía en que, ante la crítica situación vivida bajo el gobierno de los malos funcionarios, la representación parlamentaria constituía la solución en ese momento.9 Se oponía entonces a quienes solicitaban la provincialización y advertía que "no se puede tener en cuenta algunas gestiones aisladas promovidas por grupos del interior, que parecen obedecer a sospechosas sugestiones" y para "evitar el confusionismo y el desorden en que caerá nuestro territorio con la aplicación sistemática de la provincia".10 Su temor se centraba en la posibilidad de que Corrientes montara su máquina electoral en la nueva provincia. Esta postura antiprovincialista no parecía diferenciarse de la de los distintos sectores contrarios a la provincialización que se manifestaban entonces (empresarios, comerciantes, funcionarios), aunque fundada en distintas razones.

Si bien Lestani reconocía que los datos del desarrollo material del Chaco abonaban la idea autonómica, no advertía lo mismo en el plano socio-político, pues el territorio carecía de una conciencia popular: la mayor parte de la población no había tenido oportunidad de participar políticamente, ni demostraba inquietudes cívicas; tampoco existía un lazo espiritual entre los chaqueños. Sobre este punto volvería reiteradamente.

Debido a que las organizaciones políticas de Resistencia no llevaban su acción más allá de la ciudad y el tema de la autonomía no había sido atendido por ellas, proponía un camino progresivo que contemplaba, en primer lugar, la creación de municipalidades según la ley; luego obtener la representación parlamentaria con voz y voto por dos o tres períodos para, por último, lograr la autonomía, al contar con fuerzas políticas organizadas.11

Sostenía que la obtención de la representación parlamentaria era un paso imprescindible para que en el futuro quedara expedito el camino de la autonomía.

Sin embargo, su posición antiprovincialista debió modificarse, ya que en 1932 varió la posición del Partido Socialista a nivel nacional con respecto a los territorios, al pasar del patrocinio de la representación parlamentaria al de la provincialización, tras advertir las dificultades legales de la implementación de aquella (Favaro y Arias Bucciarelli 1995). Lestani fue entonces uno de los pocos que, a mediados de la década de 1930, comenzaron a abogar por la provincialización del Chaco, aunque sin dejar de indicar los problemas que podría traer aparejada. Señalaba en aquel momento nuevamente lo que consideraba un escollo ineludible: inNo existe una conciencia colectiva que opine en favor o en contra de determinadas aspiraciones. El pueblo no está organizado civilmente para este asunto. He ahí su indiferencialc, lo cual atribuía a que iudemasiado nuevo es nuestro pueblo para madurar un sentir colectivolo (Lestani 1935:3)

Si bien abandonó su prédica en favor de la representación parlamentaria, insistiría entonces en empezar la transformación política por la vida municipal: "Lo que necesitamos, es ejercicio pleno de los derechos comunales... Comunas electivas antes que cualquier reforma de fondo... Ampliada a todos los centros la acción política comunal, la provincialización se debe acordar inmediatamente" (Lestani 1935: 45). Otro paso era la creación de legislaturas territoriales, contempladas en la ley de Organización de los Territorios Nacionales pero que nunca llegaron a implementarse; ante la falta de normativas al respecto, proponía que ellas deberían ser autorizadas por ley a resolver, cuando lo creyeran oportuno, la provincialización del territorio (Lestani 1935: 46)

Propuso también crear una gran institución territorial, sin orientación partidaria, que funcionara como un organismo de control de la acción oficial de gobierno; una institución en la que los habitantes se sintieran protegidos y respaldados para participar y expresar sus ideas. Se ocuparía de defender las autonomías provinciales, proponer la creación de municipalidades y comisiones de fomento, atender los pedidos de escuelas y maestros, vigilar la acción policial y judicial, solicitar la realización de obras públicas, entre otras cosas. Esta institución, además, por un lado, permitiría aglutinar a los ciudadanos y, por otro, demostraría la capacidad cívica de los habitantes del Chaco (Lestani 1938: 30-32)

Su postura, ahora provincialista, se manifestó en congresos de municipios chaqueños y en el primer Congreso General de los Territorios Nacionales, que se realizó en mayo de 1939 en Buenos Aires; en esa oportunidad, fue designado secretario de la mesa permanente. En el Tercer Congreso de Municipalidades y Comisiones de Fomento del Chaco, celebrado en 1940, se aprobó un proyecto de declaración que presentara Lestani, en el cual se solicitaba que en el próximo período legislativo se concretara la provincialización del Chaco. Entre los fundamentos de la solicitud, se señalaba que el territorio había llegado, por su capacidad económica e importancia demográfica, a cumplir con los requisitos necesarios para ser provincializado y que resultaba insuficiente para su desenvolvimiento económico y político la situación vigente desde 1884, pues se hallaban sin solución una serie de problemas que afectaban directamente los intereses de la comunidad territorial, que sólo se solucionarían con la provincialización.

Más allá de estas iniciativas, los movimientos y asociaciones que reclamaban derechos políticos tuvieron corta vida y escasa adhesión en el ámbito local. Ello se debió, según el propio Lestani, a que no existía una conciencia colectiva que opinara en favor o en contra sobre determinadas aspiraciones. Con esta apreciación coincidirían los periódicos locales que, a pesar de su constante prédica, no lograron despertar inquietudes al respecto más que en un ambiente reducido. Lestani, por otra parte, no dejaba de reconocer que los habitantes del Chaco, especialmente los comerciantes, "le tienen un miedo pánico a los políticos", así como al aumento de los impuestos que acarrearía el establecimiento de la estructura provincial.12

La percepción de este escenario lo llevó a profundizar en las raíces de la apatía de los chaqueños ante una situación que él consideraba insostenible. La respuesta encontrada la ofrecería en sus libros. Su producción, que comprende ensayos, relatos, investigaciones históricas y obras de teatro, estaba destinada a cumplir un mismo objetivo: despertar la conciencia cívica de los habitantes del territorio, particularmente de la juventud chaqueña.

UN ANÁLISIS DE LA REALIDAD CHAQUEÑA 

Lestani inauguró el género del ensayo en el territorio. Sus trabajos buscan desentrañar la realidad chaqueña, en la cual identificó como el principal problema la falta de una identidad local, así como de un campo intelectual que se ocupara de formarla y orientarla. Estas cuestiones vertebran las tres obras que publicara entre 1935 y 1940: El Territorio Nacional del Chaco (Oro y miseria) (1935); Unidady conciencia. Aspectos morales del Chaco. Hacia la formación de la unidad territorial (1938) y En los caminos del Chaco (Bocetos regionales) (1940)

El subtítulo del primer trabajo, Oro y miseria, resume en una frase la visión que Lestani tenía del Chaco: tras el brillo del desarrollo económico, el sufrimiento de quienes no gozaban de sus beneficios. La obra pretende ser "un alegato hiriente en defensa de nuestros derechos de ciudadanos argentinos" (Lestani 1935: 3). Expone, en la primera parte, los distintos aspectos de la realidad del territorio, para lo cual se basa en publicaciones y datos recogidos en oficinas públicas, ante la ausencia de estadísticas. En la segunda parte realiza una evaluación de los problemas planteados en torno a los aspectos desarrollados en la primera: la adjudicación de la tierra pública, la explotación forestal, las condiciones de los trabajadores, el mal desempeño tanto de la policía como de gobernadores y funcionarios. Finalmente, presenta su propuesta política.

En Unidad y conciencia plantea la necesidad de dar contenido moral a una sociedad que califica como pragmática y cuyas características atribuye a los condicionamientos del ambiente, que han creado una modalidad especial en el carácter de los hombres, que denomina el "tipo Chaco". Encuentra que la solidaridad y comunidad de los habitantes de la primitiva colonia Resistencia se fue perdiendo a medida que llegaron nuevos contingentes de extranjeros y de habitantes de otras provincias, atraídos por las noticias sobre la facilidad de hacer fortuna: "la lucha por el oro... puso sordo (sic) a toda otra manifestación que no fuera la del mediato interés y beneficio personal". (Lestani 1938:10). Aquí también presentará sus ideas para modificar esta situación.

En los caminos del Chaco ensaya otra vía, la del relato, que le permite dibujar la sicología de los distintos personajes que vinieron a "hacer Chaco", para determinar cómo se ha formado éste y cuál es su tendencia hacia el futuro. A través de narraciones breves que pintan a personajes representativos -la condesa, el comerciante, el obrajero, el anarquista, el médico, la maestra rural, entre otros- Lestani se propone mostrar los aspectos negativos de la realidad chaqueña, que deben revertirse: el desarraigo, la explotación del obrero, la falta de ideales, la lucha por la riqueza sin atender a los medios.

Su diagnóstico puede resumirse en una frase: "Tierras de aluvión, de aventura, se vive al impulso de los vientos que soplan. La emotividad localista, no es una condición ambiente... El Chaco es un gigante con brazos hercúleos que no siente ni piensa: Acciona". Lo mismo ocurre con las propuestas: "Para que se oriente y organice, démosle cerebro y corazón: es decir, Unidad y Conciencia" (Lestani1938: 3)

¿Cómo lograrlo? Un elemento central en esta construcción de la identidad chaqueña es el magisterio; sin embargo, dice Lestani, éste no ha asumido su misión, debido a que se envía a los egresados de la escuela normal de Resistencia (única formadora de maestros en el territorio) al interior del Chaco, para dar cabida en la capital y en los pueblos que ofrecen comodidades a "elementos extraños", ubicados por políticos de prestigio -en abierta alusión a los maestros correntinos. Así se malogran las mejores voluntades y no se encauza un sentimiento colectivo, pues los maestros nativos terminan por vegetar en lugares inhóspitos (Lestani 1935: 33-34)

Por otro lado, la situación política del territorio constituye el nudo de esta problemática, al no existir instituciones que estimulen la acción de los hombres en pos del bien común. Para Lestani, los chaqueños no tienen un concepto claro sobre el panorama general de su territorio, sino que su visión se reduce al marco de su localidad, siempre dependiente de la influencia de las provincias limítrofes. Constantemente denunciará esta intromisión de intereses extraños en los asuntos del Chaco: "los chaqueños debemos ocupar las posiciones manoseadas por aventureros, que simulando un falso sentimiento de localismo, entregan desde sus posiciones oficiales al territorio a la voracidad de las provincias vecinas".13 No sólo ellas se aprovechan de esta situación de minoridad, sino también quienes, ajenos al medio, se apoderan de las riquezas del Chaco: "El Chaco, que es y seguirá siendo la despensa de industriales y grandes propietarios, ha acostumbrado, por su condición de inconstitucionalidad, a que estos señores se beneficien directamente con el producto de explotación de nuestras riquezas, sin dejar para el erario público, ni una parte de ella."14

Flaco servicio hace a la unidad nacional el Poder Ejecutivo, postergando indefinidamente el problema político de los territorios nacionales [...] en los territorios se nota la influencia creciente de poderes extraños que, favorecidos por la ambigüedad del sistema político que los rige, hacen propaganda desmesurada e insolente, a favor de regímenes europeos. El hogar de un extranjero en los territorios, es la prolongación de su patria de origen. Allí se cultiva, desde la lengua hasta las tradiciones de tierras extrañas. (Lestani 1938: 10-11)

Su preocupación se centra en los jóvenes nacidos en los territorios que no tienen "ninguna inquietud nacional porque les está vedada"; esta circunstancia hace que fácilmente se orienten "hacia cultos que tienen como fuerza de persuasión el calor y la ternura del consejo paterno. Así se atenta, muchas veces inconscientemente, contra la integridad de la patria."

No obstante esta preocupación por la argentinización de los habitantes del territorio, que parecía concentrarse fundamentalmente hacia la inmigración eslava de la década de 1930, Lestani se esforzó por reafirmar su identidad chaqueña, así como la de la del grupo dirigente al que pertenecía, como lo demuestra en esta respuesta a un artículo escrito por un autor correntino:

Nada tengo que ver con Italia, pues si bien soy descendiente de padre italiano, que vino aquí a los seis años, mi madre es argentina, de las primeras hijas de la colonia. Puede bajar a Resistencia para comprobar dónde se manifiesta la influencia italiana en nosotros, sus descendientes. Yo no hablo italiano, y me interesa tanto Italia como cualquier otro país de Europa... Pero toda nuestra educación la recibimos bajo el sol de nuestra bandera y en las inspiraciones de nuestra tradición histórica.15

Finalmente, para Lestani, otro factor que explica la ausencia de una identidad chaqueña es la falta de una tradición, de un arte y una literatura propios. Si bien no ahondó en estas cuestiones en sus escritos -excepción hecha de la historia-, su participación en distintas instituciones y distintas iniciativas que emprendió se dirigieron a cubrir ese vacío.

EL PAPEL DE LA HISTORIA

Lestani reconoció el papel que juega la historia en la formación de una identidad local. Es por ello que en 1947 publicó trabajos históricos en colaboración con el periodista Carlos Primo López Piacentini.16

En estas interpretaciones que nos brinda del pasado chaqueño, el indígena aparece como una figura legendaria, digna de imitar en cuanto al amor profesado hacia su tierra, sentimiento que buscaba despertarse en los chaqueños. Evocará a esos hombres "valientes y heroicos para defender su suelo nativo y mantener la integridad moral de las tribus. No se entregaron al invasor: lucharon más de doscientos cincuenta años... hasta sucumbir antes que aceptar la esclavitud de los conquistadores. ¡Digna enseñanza para los hombres de hoy!" (Lestani 1938: 9)

Pero el lugar central en esa sociedad en formación estaba destinado a la elite local de Resistencia. En este sentido, Lestani se ocupó también de erigir irlugares de memorials para el Chaco que legitimaban este espacio demandado. Reivindicó el 2 de febrero de 1878, atribuido a la llegada del primer contingente inmigrante, como única fecha iepropiale de los chaqueños. En 1935, bajo su intendencia, la municipalidad declaró fiesta cívica el 2 de febrero, sancionó el feriado definitivo para esa fecha y determinó la creación del parque "2 de febrero de 1878" sobre las márgenes del río Negro, en el lugar del desembarco. Una editorial de Estampa Chaqueña aplaudía la medida y pedía que se consagrara la fecha para todo el territorio.

Al celebrarse el sexagésimo aniversario, la revista señalaba que la fecha era "base indiscutible y punto de partida de la vida agrícola, es decir, civilizada, en nuestro territorio", pues "marca el jalón principal en la conquista e incorporación del Chaco a la vida de la Nación", y advertía que "no falta quienes se hallan empeñados en restarle importancia a tal efemérides tratando de relegarla a un episodio sin importancia en la historia chaqueña."17

El gobernador José C. Castells oficializó la conmemoración en 1939, al declarar feriado esa fecha. En esa oportunidad, Lestani, tras subrayar que la recordación ya había sido establecida por la municipalidad, hizo pública su disconformidad ante el gobernador Castells, acusándolo de presentarse "como campeón de festejos que ni siente ni le interesan", pues recordemos que lo acusaba de favorecer los intereses correntinos.

Así, el 2 de febrero quedó consagrado en la década de 1930 como aniversario de la ciudad y fecha de nacimiento del Chaco contemporáneo, en un intento por independizar la historia chaqueña de la correntina, a la que estuviera tan ligada en tiempos del territorio.

Por tal motivo, Lestani se enfrentó en 1937 en una polémica periodística con Ramiro de la Hoz (probable seudónimo del historiador correntino Federico Palma), quien insistía sobre el origen correntino de Resistencia. Por su parte, afirmaba Lestani que "tenemos razón los chaqueños de crear nuestro día, para que la historia tenga punto de arranque y sirva a las generaciones del futuro como estímulo, por el esfuerzo realizado. En esta fecha, para nosotros emotiva, todo comenzó". Sólo podía admitirse como fundadores a quienes se habían asentado definitivamente en el lugar, no a aquellos pobladores y obrajeros anteriores a 1878, "sin ninguna clase de raigambre". Lestani no dejó de comparar la realidad del Chaco con la de Corrientes ("por sus tierras de pasado se vive, pues para presente está el Chaco que trabaja") provincia de cuya tutela deseaba sacar al territorio. Mientras que éste era sinónimo de progreso y promesa por realizar, aquella personificaba el estancamiento, producto del peso de la tradición; uno tenía la mirada puesta en el futuro, la otra, en el pasado. De esta manera, Lestani configuraba un "nosotros" en contraposición al "otro", representado por Corrientes, al que se le adjudicaban cualidades totalmente negativas y contrapuestas a las del territorio, al mismo tiempo que lo consideraba una presencia nefasta para el desarrollo del Chaco:

lucho tenazmente para que el Chaco sea grande, rico y generoso, tanto que alcance a disminuir la miseria y el dolor de las provincias atrasadas, como Corrientes... Lucho por su cultura, dentro de mis medios y alcance, para que florezca una juventud vigorosa, sana y fuerte, y persiga dentro de su idealismo, la fórmula positiva de la verdad, ajena a dogmas y tradiciones obscuras, que aplastan y detienen el progreso de los pueblos, como ocurre en Corrientes.18

REFLEXIONES FINALES

Lestani integró una elite dirigente que buscó arrogarse la representación de la opinión pública, al mismo tiempo que encargarse de formarla y orientarla. Esta dirigencia, que se conformó en torno a los espacios disponibles en el territorio para su acción (periódicos, movimientos, asociaciones de diverso tipo y la política municipal), reveló conflictos de intereses en cuanto a sus aspiraciones políticas, que fragmentaron y debilitaron su lucha por la ampliación de los derechos políticos; a ello contribuyó que, si bien por diversos motivos, las consecuencias de la provincialización eran, en general, vistas con temor, más allá de los reclamos en favor de la misma.

Al propugnar transformaciones en el campo político, Lestani lo hizo dentro de una perspectiva globalizadora que apuntaba a construir la identidad del Chaco. Comprendió que la postergación política era una de las causas principales de las "miserias" del territorio. Pero también determinó que una simple transformación política era insuficiente, pues halló la raíz del problema en la falta de "unidad y conciencia" de los chaqueños. Si bien lo enfocaba desde una perspectiva moral, hacía referencia con esta frase a un problema que volvería a plantearse luego con insistencia en la región: el de la falta de una identidad territoriana. Para delinearla, Lestani apeló a una definición del "otro", en la que la provincia de Corrientes era el espejo en el que no debía reflejarse el Chaco y personificaba al opresor que impedía que el territorio alcanzara su autonomía.

Notas

1. El papel del periodismo en los espacios territorianos ha sido estudiado recientemente en trabajos con importantes aportes, como los compilados por Prislei, Leticia (dir). Pasiones sureñas. Prensa, cultura y política en la frontera norpatagónica (1884-1946). Bs. As: Prometeo Libros-Entrepasados, 2001. Para el Chaco, véase Leoni, María Silvia. "Prensa y opinión pública en el Territorio Nacional del Chaco. El caso de Estampa Chaqueña (1929-1943)". En: XIX Encuentro de Geohistoria Regional. Corrientes: UNNE, 1999.

2. Estampa Chaqueña (en adelante ECh), Resistencia 29-X-1932, p1.

3. Finalmente, si bien la Concordancia no logró imponerse en las elecciones municipales de Resistencia en 1938, sí lo hizo en seis de los ocho municipios restantes (Ruzich 2003)

4. Un completo estudio sobre esta figura que tuvo una activa participación en la vida política del Chaco en Viyerio, Julio César. Vida, pensamiento y obra de Enrique Lynch Arribálzaga. Resistencia, Fac. de Humanidades, UNNE, 1999.

5. ECh, 26-XII-1930, p.p. 1-2.

6. Lestani, J.R. "El ambiente del territorio y su aspiración máxima" En: ECh, 23-IV-1932, p.5.

7. Lestani, J. R. "Pampa y Chaco. Aquel punto y el nuestro" En: ECh, 27-II-1931, p.5.

8. Fue precisamente el representante de Charata ante el Primer Congreso de Municipalidades de los Territorios Nacionales (1933), Anselmo Z. Ducca, quien instauró allí el tema de la provincialización.

9. Lestani, J. R. "Pueblos chaqueños" En: ECh, 15-V-1931, p.15.

10. Lestani, J. R. "El ambiente del territorio y su aspiración máxima" En: ECh, 23-IV-1932, p.5.

11. Lestani, J. R. "Representación parlamentaria de los territorios" En: ECh, 21-V-1932, p.5.

12. Archivo General de la Provincia del Chaco. Secc.Municipios. Varios. Caja Nº 12. Actas del Tercer Congreso de Municipalidades y Comisiones de Fomento del Chaco (25 al 27 de octubre de 1940). Versión taquigráfica.

13. Lestani, J.R. "1878-2 de febrero-1938" En: ECh, 29-I-1938, p.3.

14. ECh, 17-VI-1933, p.5.

15. El Territorio, Resistencia, 13-II-1937, p. 3.

16. Publicaron en 1947 Chaco; Etimología del vocablo; Antecedentes históricos, geográficos y políticos; Reducción de San Buenaventura del Monte Alto y Resistencia.

17. ECh, 22-1-1938, pp 3-4.

18. Lestani, J.R. "Sobre la fundación de Resistencia" En: El Territorio, Resistencia, 13-II-1937, p.3.

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