SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.24 número4La construcción del imaginario político de la revista Pasado y Presente en el discurso social argentino de 1963-1965 índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Revista Pilquen

versión On-line ISSN 1851-3123

Rev. Pilquen. secc. cienc. soc. vol.24 no.4 Viedma dic. 2021

 

ARTÌCULO

Entre Ciudad de Mèxico y San Pablo. Itinerarios històricos del espacio latinoamericano de revistas cientìficas

Between Mexico City and San Pablo. Historical itineraries of the Latin American space of scientific journals

 

Maximiliano Salatino
maxisalatino@gmail.com
Universidad Nacional de Cuyo; Consejo Nacional de Investigaciones Cientìficas y Tècnicas. Argentina

Recibido 11|06|2020
Aceptado 29|06|2021

 


Resumen
En este trabajo proponemos historiar los itinerarios de las revistas cientìficas en Amèrica Latina desde una perspectiva socio-estructural. Identificamos perìodos de constituciòn del espacio regional de publicaciones periòdicas desde finales del S.XVIII y principios del XIX hasta la actualidad. Nos concentramos en explicar las articulaciones institucionales que emergieron entre la Ciudad de Mèxico y San Pablo que posibilitaron la formaciòn de una estructura de circulaciòn de la ciencia. En este esquema identificamos cuatro grandes perìodos: el asociacionismo (1772-1964); la documentaciòn (1950-1980); la regionalizaciòn (1971-2002) y la internacionalizaciòn (1998-hasta la actualidad).

Palabras clave: Revistas Cientìficas; Amèrica Latina; Periodizaciòn; Regionalizaciòn; Ediciòn Cientìfica.

Abstract
In this paper we propose to historicize the itineraries of scientific journals in Latin America from a socio-structural perspective. We identify periods of constitution of the regional space of periodical publications from the late 18th century and the beginning of the 19th century to the present. We focus on explaining the institutional articulations that emerged between Mexico City and São Paulo that made possible the formation of a structure for the circulation of science. In this scheme we recognize four major periods: associationism (1772-1964); documentation (1950-1980); regionalization (1971-2002) and internationalization (1998-present).

Key words: Scientific Journals; Latin America; Periodization; Regionalization; Scientific Publishing.

 

INTRODUCCIÒN

Latinoamèrica posee una larga trayectoria de publicaciòn de revistas cientìficas. Las revistas fueron muy importantes en la consolidaciòn y desarrollo de los espacios acadèmicos en Amèrica Latina y el Caribe. Como menciona Tarcus (2020) las revistas no poseen fronteras vinculadas a su espacio institucional, sino que circulan màs allà generando efectos de comunidad. Històricamente, “se crean redes de lectores, colaboradores, avisadores, suscriptores y distribuidoras. Las revistas constituyen pequeñas comunidades intelectuales que crean a su vez comunidades de lectores, mucho antes de que este tèrmino apareciera en la era digital” (Tarcus, 2020, 23). Es asì como la indagaciòn acerca de la historicidad de las revistas nos permite adentrarnos en las diferentes formas en las cuales se produce, publica y circula conocimiento en la regiòn.

Muchos estudios se han enfocado en la conformaciòn de espacios intelectuales a partir del anàlisis de las revistas que fueran el territorio de discusiones estèticas, polìticas y culturales. Sin embargo, son menos conocidos los itinerarios y desarrollos històricos de las revistas estrictamente acadèmicas latinoamericanas. Esto implica dialogar en un escenario en donde es necesario diferenciar entre revistas acadèmicas/cientìficas y revistas culturas (estèticas-polìticas).

El punto de partida de la propuesta conceptual busca situar a diferentes tipos de revistas (culturales, polìticas, estèticas y acadèmicas) en un mismo espacio intelectual. Claramente esta diversidad de revistas posee diferentes objetivos, principios, formas de ediciòn y legitimaciòn en sus determinados àmbitos. Esto no implica que no hayan podido desarrollarse concomitantemente en el mismo espacio històrico-temporal. A principios del siglo XX en Latinoamèrica coexistìan revistas de todo tipo, acadèmicas inclusive, es el caso de las Revista do Instituto Historico e Geographico Brazileiro; Anais Academia Nacional de Medicina; Anales de la Universidad de Chile; Gaceta mèdica de Mèxico; Revista del Museo Argentino de Ciencias Naturales; Gaceta Mèdica de Caracas o la Revista da Faculdade de Direito (USP). Todas estas revistas, activas en la actualidad, no pueden considerarse ni polìticas, culturales o estèticas. Sino que representaron el estado de desarrollo cientìfico y permitieron el avance particularmente de las ciencias mèdicas, fìsico y naturales.

Otro elemento importante para considerar es la transformaciòn de modalidades de publicaciòn y circulaciòn de las revistas acadèmicas, particularmente, en relaciòn con la institucionalizaciòn y profesionalizaciòn de las ciencias en Latinoamèrica. Previo a la dècada de 1950 las revistas acadèmicas se insertaron dentro de una comunidad revisteril orientadas por las pràcticas del asociacionismo. Ya que la mayor parte de ellas nacieron dentro de asociaciones, academias nacionales y organismos estatales tales como museos o hospitales. Ya a partir de la creaciòn de organismos cientìficos nacionales, la profesionalizaciòn de la docencia e investigaciòn universitaria, las revistas acadèmicas iniciaron tambièn un proceso de profesionalizaciòn y modernizaciòn al calor del desarrollo de los campos cientìficos nacionales.

En este trabajo concretamente nos centraremos especìficamente en las revistas acadèmicas. Es decir, aquellas que nacieron dentro de instituciones cientìficas/universitarias que buscaron generar un espacio de publicaciòn y circulaciòn de conocimiento acadèmico.

El espacio de circulaciòn regional de revistas cientìficas tuvo dos nodos principales de emergencia: Ciudad de Mèxico (Mèxico) y San Pablo (Brasil). Mèxico desde la publicaciòn de la primera revista cientìfica latinoamericana (el Mercurio Volante en 1772) hasta la emergencia de Latindex como el primer indexador regional se constituyò en un centro neuràlgico del desarrollo polìtico-institucional de la comunicaciòn cientìfica regional. Por su parte, desde San Pablo, se originaron las primeras instancias sistemàticas de evaluaciòn de revistas cientìficas, las primeras crìticas a la ciencia “mainstream” y la consolidaciòn del proyecto SciELO que revolucionò la circulaciòn del conocimiento cientìfico regional permitiendo el acceso a texto completo de sus colecciones y contenidos.

Los trabajos pioneros de Capel (1992), Vessuri (1987), Cetto y Hillerund (1995) y, Cetto y Alonso Gamboa (1998) se han encargado de construir los antecedentes de la publicaciòn cientìfica regional e indagar sus principales desafìos. Recientemente, Rozemblum y Alperìn (2017) proponen una periodizaciòn en tres etapas desde 1985 hasta la actualidad, resaltando las distorsiones provocadas por los procesos de internacionalizaciòn, en especial, de la evaluaciòn cientìfica.

En este trabajo proponemos una mirada històrica, estructural y regional del espacio latinoamericano de revistas cientìficas. Para ello construimos una periodizaciòn que nos permite identificar algunas trayectorias editoriales; apuestas de organismos internacionales sobre el àrea de la comunicaciòn cientìfica; la emergencia de las primeras reuniones regionales sobre documentaciòn y profesionalizaciòn editorial; la emergencia de los primeros centros de documentaciòn; la apariciòn de las primeras bibliografìas e ìndices de revistas; los debates acerca de la posiciòn perifèrica de la ciencia regional y la incidencia negativa de la utilizaciòn de indicadores cuantitativos como base de la evaluaciòn cientìfica; el desarrollo de las bases de datos y sus recursos indexatorios: la implementaciòn de polìticas de acceso abierto y la expansiòn de la digitalizaciòn. La periodizaciòn estructura el trabajo en 4 secciones, cada una corresponde a un perìodo y busca describir sus principales rasgos.

Tabla 1. Perìodos històricos del espacio latinoamericano de revistas cientìficas

Fuente: elaborado por el autor

Sostenemos que en Amèrica Latina se constituyò un espacio, una estructura de circulaciòn cientìfica orientada por la publicaciòn de revistas, la influencia de determinados agentes/especialistas y la configuraciòn de una infraestructura guiada por las instituciones editoras, principalmente, universidades nacionales. Es asì como podemos identificar una estructura de circulaciòn primigenia, orientada localmente y con una gran participaciòn de las primeras asociaciones cientìficas. El Asociacionismo (1772-1964) es el primer y largo perìodo en el cual se iniciò la publicaciòn acadèmica principalmente en asociaciones cientìficas y academias de ciencias nacionales. En este perìodo se puede advertir la segmentaciòn de las revistas del campo cultural-intelectual de las revistas estrictamente acadèmicas. Tendrà como fecha de inicio 1772, año en el cual se publicò la primera revista que se tenga registro y finaliza con la reuniòn de revistas cientìficas de la UNESCO en la Universidad de Puerto Rico Rio Piedras en 1964.

El segundo perìodo (documentaciòn 1950-1980) inicia con la fundaciòn del primer centro de documentaciòn cientìfica de Amèrica Latina en la Ciudad de Mèxico en 1950 y finaliza con la publicaciòn de la Bibliografìa Latinoamericana que es el primer listado sistemàtico de revistas cientìficas de toda la regiòn. Este perìodo està caracterizado por la articulaciòn de las primeras instancias de profesionalizaciòn de la documentaciòn y catalogaciòn cientìfica de publicaciones periòdicas.

La regionalizaciòn (1973-2003) es el periodo en el que se expande y consolida el espacio latinoamericano de revistas cientìficas. En estas dècadas se constituyen los primeros ìndices regionales de revistas, los principales estudios crìticos y la emergencia de los proyectos de las grandes bases regionales basadas en polìticas de acceso abierto (Latindex, SciELO y RedALyC).

Por ùltimo, el perìodo de internacionalizaciòn inicia en 1998 con la puesta en funcionamiento de SciELO y la expansiòn de los procesos de digitalizaciòn de las revistas cientìficas. Es un perìodo en el cual se consolidò una vìa de comunicaciòn cientìfica orientada por criterios de circulaciòn y evaluaciòn de la ciencia de la corriente principal que tendrà en 2002 con la llegada del sistema Qualis en Brasil y en 2014 con la puesta en funcionamiento del SciELO Citation Index sus dos principales itinerarios.

EL ASOCIACIONISMO 1772-1964

La ciudad de Mèxico se transformò ràpidamente en el centro neuràlgico de la publicaciòn cientìfica regional. Allì se editaron las primeras revistas cientìficas, en entre ellas, el Mercurio Volante. Esta revista fue creada por el mexicano Josè Ignacio Bartolache quien continùo su publicaciòn hasta 1773 (Cetto & Alonso-Gamboa, 1998). El Mercurio Volante formò parte de una respuesta pràctica al estado de la circulaciòn del conocimiento mèdico de la època. Hasta el momento, las posibilidades de compartir hallazgos, invitar a clases, reuniones de trabajo, promover la culturalizaciòn cientìfica y la divulgaciòn de bibliografìas se tornaba casi imposible. La respuesta fue la creaciòn de una serie de boletines o volantes donde se iniciò una tradiciòn de circulaciòn de conocimiento en medios impresos periòdicos. Estas primigenias revistas tuvieron con posterioridad un afincamiento institucional en asociaciones o sociedades cientìficas (la mayorìa de ellas de las ciencias mèdicas, fìsicas y naturales) que dieron lugar al inicio de una tradiciòn editorial presente en los principales centros cientìficos regionales. La medicina fue la disciplina que logrò una ràpida consolidaciòn, especialmente, debido a la institucionalizaciòn de asociaciones mèdicas en diferentes ciudades de la regiòn.

Durante todo el siglo XIX se consolidò una polìtica editorial en la regiòn orientada por las asociaciones cientìficas y algunos organismos estatales que buscaron generar espacios de legitimaciòn cientìfica en determinadas àreas. Es asì como, junto con las revistas de ciencias mèdicas, se fundaron muchas publicaciones relacionadas con asuntos militares, ciencias naturales, religiòn y derecho.

Este grupo de revistas son muy diferentes a sus homònimas del siglo XX. Es decir, son acadèmicas en el sentido de que la comunidad revisteril de cada una de ellas formaba parte de una comunidad cientìfica, particularmente, mèdicas y naturales. Los avances cientìficos de las ex capitales imperiales se publicaban en estas revistas junto con textos que buscaban aplicar el mètodo cientìfico a objetos locales de investigaciòn (Capel, 1992).

En la bisagra de los siglos XIX y XX, el asociacionismo se vincula con un fuerte proceso de academizaciòn. Este es un fenòmeno de larga duraciòn que se iniciò con la fundaciòn de las primeras universidades en la regiòn y que transitò durante todo el siglo XIX una dimensiòn secundaria en el mundo de las revistas cientìficas. Es recièn a partir de la llegada del nuevo siglo cuando una serie de publicaciones periòdicas editadas en universidades pùblicas (primordialmente) dieron paso por un lado a la ruptura de las fronteras de las instituciones editoras para insertarse en las dinàmicas de los emergentes campos acadèmicos nacionales.

Es durante este proceso donde se puede visualizar con mayor precisiòn el inicio de una escisiòn entre las publicaciones del campo cultural y las del campo acadèmico. Si bien consideramos hasta aquì una definiciòn màs laxa y menos tècnica de publicaciones periòdicas, es importante distinguir la emergencia de un proceso de academizaciòn de los campos culturales e intelectuales que en la esfera de las revistas posee caracterìsticas particulares. Al mismo tiempo que Marianetti publicaba en Parìs su famoso Manifiesto Futurista en 1909, en la Fundaciòn Oswaldo Cruz se iniciaba la publicaciòn de las Memorias del Instituto Oswaldo Cruz una publicaciòn mìtica del campo cientìfico brasileño y un referente para las revistas cientìficas venideras en toda la regiòn. Este doble despliegue y convergencia entre el dinàmico campo cultural vinculado a las vanguardias polìticas y estèticas y la creciente academizaciòn de los espacios universitarios permitiò la emergencia de una serie de publicaciones previas al perìodo de documentaciòn que acompañan la expansiòn de los años 1950 y 1960.}El eje central de diferenciaciòn entre las revistas acadèmicas del siglo XIX y XX refiere a las reglas de legitimaciòn de las mismas revistas y de ellas en los campos cientìficos nacionales. Es decir, ya las revistas de mediados de siglo XX tuvieron una incidencia concreta y especìfica en las esferas de consagraciòn y prestigio. La comunidad revisteril se transformò paulatinamente acorde a la competencia cientìfica, las modalidades de evaluaciòn de instituciones, proyectos y agentes y, en especial, al predominio del formato “artìculo” frente a otras modalidades de publicaciòn cientìfica. Estos procesos de cambio editorial e institucional de las revistas cientìficas se insertaron dentro de un creciente proceso de institucionalizaciòn y profesionalizaciòn de la investigaciòn cientìfica en la regiòn. En este esquema, y como fue demostrado por diversos estudios disponibles (Beigel 2010), fueron algunos organismos internacionales quienes a partir de sus estrategias de internacionalizaciòn aceleraron estas dinàmicas principalmente bajo dos mecanismos: con la contrataciòn de acadèmicos de los “centros de excelencia” para que formen a los investigadores de regiones perifèricas y a travès de la articulaciòn de sistemas de becas. En el caso concreto de la comunicaciòn cientìfica podemos advertir una fuerte presencia de la UNESCO y la OEA, y particularmente en el àrea de las ciencias agrìcolas, del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.

El hito fundamental de estas iniciativas fue la creaciòn en Mèxico del Primer Centro de Documentaciòn Cientìfica y Tècnica de la UNESCO en la regiòn en 1950. El objetivo fundamental de este acuerdo fue diagnosticar e iniciar un proceso exploratorio de las publicaciones (en todos sus formatos, soportes e instrumentos de visibilizaciòn). El centro funcionò hasta 1954 fecha a partir de la cual se iniciò un efectivo proceso de profesionalizaciòn de los estudios sobre publicaciones periòdicas orientado por el especialista Armando Sandoval quien en 1971 se convertirìa en el primer director del Centro de Informaciòn Cientìfica y Humanìstica (CICH) de la UNAM. En febrero de 1954, tras la salida de la UNESCO como promotora del centro, a travès de un decreto presidencial se creò el Centro de Documentaciòn Cientìfica y Tècnica de Mèxico (CDCTM) (Sandoval 1978).

En 1953 se publicò un informe en la sede Turrialba de la Universidad de Costa Rica sobre evaluaciòn de las revistas cientìficas en la regiòn. El informe elaborado por Shaw (director de la Biblioteca del Departamento de Agricultura de EE. UU.), Samper (jefe del Servicio de Intercambio cientìfico del Instituto Interamericano de Ciencias Agrìcolas) y Gropp (director de la Biblioteca Conmemorativa Colòn de la Uniòn Panamericana) estuvo financiado por la Organizaciòn de los Estados Americanos, la Fundaciòn Rockefeller y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. Allì se llevò a cabo un trabajo de campo compuesto por la visita a bibliotecas de toda la regiòn (excepto Bolivia, Ecuador, Paraguay, Repùblica Dominicana y Venezuela) durante 1948 y 1951. Se relevaron 115 Bibliotecas donde se identificò la suscripciòn a revistas internacionales, regionales y nacionales que poseìan al momento (Shaw, Samper, & Gropp, 1953). Este informe es el primer registro de un trabajo sobre revistas cientìficas y documentaciòn a nivel regional. La expansiòn de este tipo de estudios sobre publicaciones periòdicas se desarrollò durante toda la dècada de 1950 y 1960. Particularmente, la intervenciòn de los intereses de la OEA y el departamento de agricultura de EE. UU. tuvo un efecto muy particular en los estudios sobre las ciencias agrìcolas. Estas iniciativas se desarrollaron en un contexto històrico particular de la regiòn orientada por las polìticas de reforma agraria, la expansiòn de la revoluciòn cubana en los àmbitos polìticos latinoamericanos, la importancia del campesinado-indìgena como agente històrico, la disoluciòn de los sistemas de hacienda y latifundios como ejes de las matrices societales de producciòn y concretamente, las polìticas de los EEUU que afectaron de diversas maneras y con diferentes resultados segùn la regiòn de Amèrica Latina. Ya en 1940, el secretario de agricultura de los EE. UU., Henry Wallace, propuso la idea de creaciòn de un Instituto Interamericano que se dedicara al estudio de la cuestiòn agrìcola en la regiòn. En 1940 se creò el Instituto Interamericano de Agricultura Tropical en el marco de la polìtica regional de la “Uniòn Panamericana” que terminò escogiendo a la Sede Turrialba de Costa Rica en 1942 como sede oficial. Muchos de los informes del instituto relevaron la situaciòn de la documentaciòn y comunicaciòn cientìfica promoviendo la articulaciòn interinstitucional de las bibliotecas.

La Uniòn Panamericana llevò adelante varios relevamientos de revistas (con exclusiòn de las ciencias sociales y las humanidades) en la regiòn. En su informe de 1962, contabilizaron 950 revistas de las cuales 204 fueron editadas por Universidades Nacionales, 365 por asociaciones, 127 por algùn organismo gubernamental y 127 por museos e industrias (Uniòn Panamericana 1962). El 60% de las publicaciones provenìan de Argentina, Brasil y Mèxico y el 18% de Colombia, Perù y Venezuela. Màs de la mitad correspondìan a las ciencias mèdicas y el 13% a las ciencias agrìcolas (Uniòn Panamericana 1962).

Asimismo, el campo de la bibliotecologìa como disciplina iniciò un proceso de consolidaciòn còmo àrea en los centros regionales. Asì fue como por iniciativa de la OEA se creò en 1956 la Escuela Interamericana de Bibliotecologìa en Medellìn (Morales-Campos 2017). Una gran escuela de bibliotecologìa regional que iniciò otras iniciativas en Mèxico y Argentina. Cabe destacar que la bibliotecologìa en la regiòn ya tenìa antecedentes importantes, sin embargo, la Escuela Interamericana fue uno de los primeros proyectos regionales (Parada 2018; Martìnez Arellano 2007; Campos 2017). Durante todo este perìodo varias fundaciones estadounidenses buscaron generar colaboraciones y asistencia tècnica en esta àrea (fundaciòn Rockefeller, Kellog, Ford, Care y Sears Roebuck). Incluso la UNESCO dio inicio a un programa de asistencia en 1947 en donde expertos internacionales se vincularon con bibliotecas regionales para dar inicio a etapas de profesionalizaciòn de la documentaciòn cientìfica (UNESCO 1961).

Este creciente proceso de vinculaciòn entre las universidades nacionales y las organizaciones internacionales de cooperaciòn cientìfica consolidò la tradiciòn editorialista en espacios eminentemente acadèmicos. El ciclo de academizaciòn del editorialismo puede ser interpretado a partir de tres fenòmenos. En primer lugar, la creciente institucionalizaciòn y profesionalizaciòn de la ciencia en la regiòn, en segundo tèrmino, a partir de las estrategias de los organismos internacionales y, en tercer lugar, a partir de la pràctica de un grupo de agentes acadèmicos vinculados a la documentaciòn y registros bibliogràficos que se encargaron de generar los primeros diagnòsticos sobre la comunicaciòn cientìfica y en la elaboraciòn de los primeros directorios bibliogràficos regionales. La labor de Armado Sandoval, Adalberto Görbitz, Federico Pannier, Julio Arends, Hernàn Godoy Urzùa, Durmeval Trigueiro, entre otros referentes, fue fundamental para la expansiòn de la documentaciòn cientìfica y el paso hacia la profesionalizaciòn de la ediciòn de revistas.

LA DOCUMENTACIÒN 1950-1980

Del 28 de abril al 1 de mayo de 1964 se desarrollò en la ciudad de San Juan de Puerto Rico la reuniòn del Grupo de Trabajo para la selecciòn de revistas cientìficas latinoamericanas perteneciente a la UNESCO. El evento fue organizado por el Centro de cooperaciòn cientìfica de la UNESCO para Amèrica Latina con sede en Montevideo y tuvo lugar en la Universidad de Puerto Rico Rìo Piedras. Como presidente de la reuniòn fue designado el Dr. Armando M. Sandoval (UNAM) (UNESCO, 1964).

Con la publicaciòn del informe final de esta reuniòn en Rìo Piedras se consolidò una fase en el estudio de las revistas cientìficas. El eje fundamental del cambio es la puesta en marcha de mecanismos de evaluaciòn de la producciòn publicada y de las revistas en sì como instrumentos de comunicaciòn. El esquema de evaluaciòn de revistas propuesto en Rìo Piedras fue adoptado ampliamente en toda la regiòn por bibliotecas, centros de documentaciòn y expertos en el àrea. Y sirviò de base para los esquemas evaluativos de las primeras bases indexadoras latinoamericanas a partir de la dècada de 1990. Si desde 1950-1953 se iniciò un proceso de valoraciòn de la producciòn regional podemos asegurar que ya para 1964 existìa una masa crìtica lo suficientemente fuerte para consolidar la documentaciòn y los estudios bibliotecològicos como parte de una serie de proyectos y estudios regionales.

Una cuestiòn fundamental para comprender este perìodo y la bisagra con la Reuniòn de Rìo Piedras es la articulaciòn interinstitucional y la procedencia de los expertos que allì se reunieron. Hubo representantes de buena parte de Amèrica Latina quienes muchos de ellos eran tambièn editores (UNESCO 1964).

Mencionamos anteriormente algunos esfuerzos por parte de la OEA y la Uniòn Panamericana en relaciòn con la comunicaciòn cientìfica pero sus estudios se circunscribieron a las ciencias agrarias. Ya a partir de la dècada de 1960 se sustanciaron algunas instancias interinstitucionales (UNESCO y Universidades Nacionales, por ejemplo) con una mirada sobre màs disciplinas cientìficas. Es el caso del trabajo de 1969, del experto chileno Hernàn Godoy Urzùa quien realizò un estudio especìfico sobre el estado de la comunicaciòn de las ciencias sociales en la regiòn. Tempranamente Godoy Urzùa recomendaba la inmediata profesionalizaciòn de la comunicaciòn frente a un panorama donde la especializaciòn de la evaluaciòn de las disciplinas y de los agentes cientìficos poseìan caracterìsticas disìmiles y hasta contradictorias. La estructura de la comunicaciòn cientìfica no se habìa desarrollado en la regiòn màs allà de las 455 revistas identificadas por el autor (Godoy Urzua and Kalmon 1969), en este sentido, podemos entender que la apariciòn o emergencia de revistas no implica per se un proceso de institucionalizaciòn de la comunicaciòn cientìfica para ello es necesario la creaciòn de una infraestructura interinstitucional. Al finalizar su trabajo, Godoy Urzùa veìa en la creaciòn del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) creado en 1967 una posibilidad para la expansiòn de las capacidades de comunicaciòn de las ciencias sociales en la regiòn.

Desde los primeros informes sobre la actualidad de la comunicaciòn cientìfica y de las revistas en ciencias agrìcolas promovidas por la OEA, la Uniòn Panamericana y algunas agencias del gobierno de Estados Unidos hasta la participaciòn de la UNESCO en el campo de la documentaciòn podemos observar un proceso de singulares caracterìsticas. Como hemos podido apreciar, en la regiòn existen revistas editadas actualmente que fueron fundadas en las primeras dècadas del siglo XIX por lo expansiòn del editorialismo de revistas cientìficas tienen un camino recorrido de màs de 50 años hasta la reuniòn de Rìo Piedras. Lo diferente a los perìodos anteriores es una preocupaciòn por el conocimiento del estado de las revistas y sus limitaciones de circulaciòn. La necesidad de generar listados o directorios de revistas por disciplinas es una de las motivaciones por la cuales se desarrollò una red de instituciones y agentes que sirvieron de antecedente para los proyectos regionales de finales de siglo XX. Ya con el informe de 1964 de la Reuniòn de Rìo Piedras se avanzò un escalòn màs hacia la profesionalizaciòn de la pràctica editorial. La diseminaciòn de un esquema de evaluaciòn en las redes acadèmicas promoviò la participaciòn de los editores como agentes especializados en la ediciòn cientìfica y por tanto como la puerta de entrada al mundo cientìfico de lo publicado.

Durante este perìodo de documentaciòn, que ese extenderà hasta la dècada de 1980, se iniciò la expansiòn numèrica de revistas editadas en la regiòn. E incluso se crearon una serie de revistas que actualmente son las consideradas como clàsicas en sus respectivas disciplinas, entre ellas: Phyton (Argentina), Revista Brasileira de Anestesiologia (Brasil), Revista de la Facultad de Agronomìa (Venezuela), Brazilian Journal of Geology (Brasil), Revista mexicana de fìsica (Mèxico), Revista de Biologìa Tropical (Costa Rica), Revista Brasileira de Entomologia (Brasil), Ameghiniana (Argentina), Revista Brasileira de Reumatologia (Brasil), Revista Brasileira de Politica Internacional (Brasil), Iheringia Serie Botanica (Brasil), Investigaciòn Clìnica (Venezuela), Acta Cancerològica (Perù), Boletìn de Malariologìa y Salud Ambiental (Venezuela) y Gayana. Botànica (Chile). Podemos observar el inicio de una tradiciòn de publicaciòn de instituciones proveniente de diferentes paìses. El rol de Brasil, Argentina, Chile, Mèxico y Colombia como potencias perifèricas ha sido consolidado desde el inicio del asociacionismo sin embargo un conjunto importante de paìses emergieron con importantes revistas a mediados del siglo pasado.

LA REGIONALIZACIÒN 1971-2002

Si nos situamos a partir de las principales articulaciones institucionales en materia de revistas cientìficas y su documentaciòn, tenemos que observar una serie de propuestas por parte de la UNAM durante la dècada de 1970. Esas iniciativas dieron curso a un proceso de profesionalizaciòn de la ediciòn y documentaciòn de las publicaciones cientìficas que contribuyò a la formaciòn de una infraestructura regional. Como ya hemos mencionado, la UNAM fue sede del primer centro de documentaciòn cientìfica de la UNESCO en la regiòn lo que permitiò a partir de allì la creaciòn de una cultura de catalogaciòn y documentaciòn que se sustanciarìa institucionalmente en 1971 con la creaciòn del Centro de Informaciòn Cientìfica y Humanìstica (CICH).

El objetivo principal del CICH fue la sistematizaciòn de los recursos bibliotecològicos de la UNAM. Tenemos que pensar que en la mayorìa de las universidades de la regiòn durante este perìodo no existìa una red de informaciòn y comunicaciòn intrainstitucional que permitiera dar cuenta tanto de los recursos bibliotecològicos como de suscripciones a revistas de las diferentes unidades acadèmicas. Sandoval (1978) destaca que era necesario la creaciòn de instrumentos bibliogràficos que permitieran dar a conocer las producciones cientìficas de los mismos agentes universitarios con el fin de favorecer y contribuir a la vinculaciòn de los colegios invisibles. En este sentido, como iniciativas del CICH, se crearon ALERTA (1973), CLASE (1975) y PERIODICA (1978). Estos ìndices causaron un impacto fenomenal en el campo de la comunicaciòn cientìfica. Fueron los tres primeros proyectos de sistematizaciòn, catalogaciòn, evaluaciòn e indexaciòn de revistas cientìficas en la regiòn. Cada uno de ellos poseìa caracterìsticas particulares, asì como una orientaciòn disciplinar especìfica (Maffey et al. 1983; Cetto and Alonso-Gamboa 1998).

Un caso de base de datos especializada en una sola àrea disciplinar es LILACS (Literatura Latinoamericana en Ciencias de la Salud) creada en 1980 por BIREME (Centro Latinoamericano en Ciencias de la Salud). BIREME fue creada en Brasil por la Organizaciòn Panamericana de Salud, el Ministerio de Salud de San Pablo y la Escuela Paulista de Medicina en 1967 con el fin de organizar y documentar la informaciòn bibliogràfica sobre el campo de estudios mèdicos. LILACS fue producto de un conjunto de iniciativas ancladas en el estado de San Pablo y orientadas por iniciativas nacionales y regionales a la luz de las experiencias de Medline (luego PubMed) en Estados Unidos.

Por otra parte, durante la dècada de 1980, aparecieron una serie de trabajos cientìficos que reflexionaron sobre las revistas ya como un objeto de investigaciòn y no tanto con un ènfasis exploratorio. Los trabajos pioneros de Hebe Vessuri (1984, 1987, 1988, 1995a, 1995b) y Lea Velho (Velho and Krige 1984; Velho 1986) son ejemplos claros y marcaron a fuego este perìodo. La ediciòn y circulaciòn de revistas fue situada a nivel local y regional marcando potencialidades y lìmites en funciòn de los desarrollos cientìficos y tecnològicos, pero, asimismo, dialogaban constantemente con el posicionamiento “perifèrico” de la ciencia latinoamericana en un contexto donde el sistema acadèmico mundial habìa consolidado pautas y criterios de circulaciòn a nivel global. La situacionalidad perifèrica de las revistas permitiò iniciar una tradiciòn crìtica a los mandatos de la corriente principal en tèrminos institucionales, de indexaciòn y en lìneas disciplinares. La adecuaciòn de la producciòn latinoamericana en relaciòn con la considerada “ciencia universal” trajo consigo una serie de desajustes que fueron advertidos tempranamente por estas dos investigadoras.

El rasgo de periferialidad de las revistas acadèmicas latinoamericanas, asì como su relaciòn con los campos cientìficos nacionales permite advertir como contrapartida la constituciòn global del circuito “mainstream”. La expansiòn de los estudios bibliomètricos tras el perìodo de postguerra llevò a cambios significativos en el rol de la bibliotecologìa. Sencillamente porque los y las bibliotecarios/as identificaron sus pautas de suscripciòn de publicaciones con relaciòn a la conformaciòn de grupos de revistas centrales por disciplinas, lo que derivò en un aumento mayùsculo de su utilizaciòn en detrimento de aquellas publicaciones que habìan quedado relegadas en los anàlisis cuantitativos de la bibliometrìa. Guèdon (2011) afirma que, durante la dècada de 1960, Eugene Garfield transformò las distribuciones estadìsticas de Bradford en su propia ley de concentraciòn, lo que le permitiò crear el Science Citation Index y, con ello, la historia contemporànea de los estudios cuantitativos de la ciencia. Lo que hasta entonces se denominaba como core journals se empezò a denominar core science (Salatino y Lòpez-Ruiz, 2020).

La regionalizaciòn de la comunicaciòn cientìfica tuvo como antecedentes concretos estas reuniones cientìficas, la pràctica de los organismos internacionales y la creciente preocupaciòn de nuestros/as expertos/as por la calidad de las revistas cientìficas. En este sentido, uno de los rasgos principales de la regionalizaciòn tiene que ver con la estructuraciòn de una mirada latinoamericana acerca de estas cuestiones. Las dècadas de 1970 y 1980 seràn testigo de la amplificaciòn latinoamericana de la estructura del espacio de revistas cientìficas. Serà ya en la dècada de 1990 que estos procesos se consolidaràn.

Entre el 27 y 30 de noviembre de 1994, en el marco de la VIII Feria Internacional del Libro, en Guadalajara se desarrollò un taller denominado Publicaciones cientìficas en Amèrica Latina. Fue organizado por la UNAM y por dos comitès del ICSU (International Council of Scientific Unions).

Se reunieron en Guadalajara 34 especialistas de 14 paìses que analizaron el estado de las revistas cientìficas de la regiòn, los problemas estructurales de ediciòn, los desafìos de la publicaciòn electrònica, la evaluaciòn de las revistas, los desafìos de la indexaciòn y la experiencia de algunas trayectorias editoriales. La organizaciòn del taller estuvo a manos de Ana Marìa Cetto quien desde el campo de la fìsica y como editora de la Revistas Mexicana de Fìsica habìa ya advertido la escasa visibilizaciòn de la producciòn latinoamericana en el mundo. El financiamiento del evento estuvo a cargo de la UNESCO y Cetto logrò autorizaciòn por parte del Fondo de Cultura Econòmica para publicar sus resultados en formato libro (Ana Marìa Cetto, comunicaciòn personal, 19 septiembre de 2016).

El taller de Guadalajara fue la primera experiencia regional de congregaciòn de expertos sobre publicaciones periòdicas. Como hemos referido anteriormente, ya desde 1964 se celebraron reuniones, sin embargo, el taller de 1994 tuvo como objetivo promover una mirada latinoamericana sobre la producciòn y circulaciòn de revistas, lo que significò una apuesta hasta entonces no desarrollada1.

Aquì podemos observar dos fenòmenos congruentes, por un lado, un desarrollo muy bajo de la profesionalizaciòn de la ediciòn, lo que produjo desde mediados de siglo XX retrocesos en los procesos de evaluaciòn y estandarizaciòn de la publicaciòn perifèrica. Cuestiones de gran importancia a la hora de configurar un sistema de calidad cientìfica orientada por la pràctica de editores, autores, àrbitros, agentes editoriales, responsables de las instituciones editoras, entre otros. Y, por otra parte, un fenòmeno de invisibilizaciòn de la producciòn regional derivado de la falta de organismos de documentaciòn e indexaciòn.

Como consecuencia directa del Taller de Guadalajara y direccionada especialmente por Ana Marìa Cetto, se puso en marcha entre 1994 y 1995 el Proyecto Latindex (Ìndice Latinoamericano de Publicaciones Cientìficas Seriadas). Cetto y Alonso (1998) afirman que en la època de gestaciòn de Latindex habìa conciencia de que la mayorìa de nuestras publicaciones acadèmicas no formaban parte del circuito comercial de revistas; que no estaban bien representadas en las bases de datos internacionales màs prestigiadas, y que existìa una visiòn fragmentada y dispersa de nuestras publicaciones. En las bases de datos existentes el nùmero de revistas cubiertas estaba limitado por las polìticas de selecciòn, por el alcance regional o nacional del servicio o por su especializaciòn temàtica. En el nivel mundial, el directorio internacional Ulrich's ofrecìa para ese entonces unos 5.220 tìtulos de Amèrica Latina (Cetto y Alonso 1998), que era el universo que se conocìa, pero habìa que pagar una suscripciòn en dòlares para su consulta. Cetto afirma que: “el proyecto de Latindex buscaba contribuir a la descolonizaciòn. En mi experiencia como editora de la Revisa Mexicana de Fìsica me encontraba constantemente en la tensiòn de justificar a los autores por què era importante publicar en una revista mexicana…. Ademàs, apreciaba las escasas contribuciones a una revista local como la Mexicana de Fìsica” (Ana Marìa Cetto, comunicaciòn personal, 19 septiembre de 2016).

Latindex fue creado, de ese modo, en respuesta a la necesidad de contar con un recurso de informaciòn que cubriera de manera integrada, amplia e inclusiva el universo de revistas acadèmicas y cientìficas que se publican en los paìses de la regiòn. Latindex como proyecto de visibilizaciòn regional de la producciòn cientìfica latinoamericana iniciò un proceso de gran importancia para el desarrollo del espacio regional. En especial, por el afincamiento local/nacional de sus propuestas lo que provocò la proliferaciòn de una serie de articulaciones locales fundamentales para comprender la estructura de la comunicaciòn cientìfica. Hasta entonces los proyectos de documentaciòn, catalogaciòn y de evaluaciòn de revistas eran generados por una instituciòn (muchas veces con el apoyo de los gobiernos de turno) y a partir de ella se irradiaban sus estrategias y polìticas de circulaciòn. El quiebre que logrò Latindex fue generar espacios locales de informaciòn, documentaciòn, evaluaciòn e indexaciòn de revistas que al mismo tiempo se encontraban insertos dentro de una red regional.

La ùltima de las experiencias de base de datos regionales es RedALyC creada en 2003 por su fundador y actual director, Eduardo Aguado Lòpez en la Universidad Autònoma del Estado de Mèxico. La experiencia de RedALyC se basa principalmente en la defensa de las polìticas de acceso abierto en la regiòn, y tuvo primeramente su anclaje en las ciencias sociales y humanidades. RedALyC como base indexadora ha promovido la visibilidad de las contribuciones cientìficas latinoamericanas con una fuerte polìtica de acceso abierto, desde la promociòn de revistas hasta la presentaciòn de artìculos a texto completo. Una de las caracterìsticas principales del proyecto, se vincula con el desarrollo de tècnicas cienciomètricas ancladas a la marcaciòn por artìculo (XML-JATS) que le permite generar indicadores de productividad. A diferencia de Latindex, y en consonancia con SciELO, RedALyC tiene la posibilidad de generar indicadores cienciomètricos por paìses, disciplinas, artìculos, coautorìa y descargas.

LA INTERNACIONALIZACIÒN 1998-

Desde Brasil ya tempranamente se iniciò un proceso de documentaciòn y profesionalizaciòn cientìfica. A diferencia de las experiencias que tienen a Mèxico y la UNAM como nodo central, las iniciativas brasileñas se perfilaron con un claro rol disciplinar. En 1967 se creò BIREME (Biblioteca Regional de Medicina) como una apuesta interinstitucional de la Organizaciòn Panamericana de la Salud (OPS), el Ministerio de Educaciòn, Cultura y Salud de Brasil y la Escuela Paulista de Medicina. El agente organizador del proyecto fue la OPS quien ademàs articulò arreglos institucionales con la Fundaciòn Milbank y la fundaciòn Rockefeller ambas interesadas en el campo mèdico regional.

Desde finales de la dècada de 1980 e inicios de 1990, BIREME y FAPESP (Fundaciòn de Apoyo a la Investigaciòn del Estado de São Paulo) tuvieron una serie de iniciativas vinculadas al desarrollo de las revistas cientìficas. Fueron los pioneros trabajos de Braga, Oberhofer, Krzyanowski y Meneghini quienes buscaron un proceso de “modernizaciòn” de la ediciòn, circulaciòn y evaluaciòn de las publicaciones periòdicas (Braga & Oberhofer 1982; Krzyzanowski et.al. 1991). Ya en estas primeras instancias, podemos observar una serie de patrones que poseen como horizonte insertarse dentro de la “gran conversaciòn” vìa la corriente principal. Ha sido una preocupaciòn constante de los expertos brasileños, el lugar de la ciencia en el desarrollo nacional, el impacto de sus producciones a nivel internacional y la necesidad constante de diàlogo con los centros cientìficos mundiales. Esta orientaciòn màs internacionalista tuvo como consecuencia concreta la instauraciòn de una estructura de circulaciòn fundada en las ciencias mèdicas, quìmicas y agrarias, las cuales perfilaron el tipo de conocimiento producido y sus mecanismos de circulaciòn.

La iniciativa de SciELO (Scientific library on line) estuvo en manos de Rogerio Meneghini y de quien es su director hasta la fecha, Abel Packer. Packer habìa sido funcionario de Naciones Unidas en Santiago de Chile donde tuvo como sede de trabajo a la CEPAL. La trayectoria de Packer se situò en Brasil tras ganar un concurso en BIREME a finales de la dècada de 1970.

A partir de este proyecto piloto, Packer y Meneghini identificaron 250 revistas brasileñas “relevantes” de las cuales 10 fueron seleccionadas por la FAPESP para la experiencia piloto del futuro SciELO. El pionerismo de Packer resulta del hecho de que SciELO se estructurò como la primera iniciativa para la difusiòn de las revistas cientìficas en lìnea, y en el plano internacional como la cuarta, despuès de arXiv.org (1991), Bioline International (1993), y Highwire Press (1994). El proyecto piloto contò con 10 revistas brasileñas, la mayorìa de ellas indexadas en el Science Citation Index, del Institute for Scientific Information (ISI). La aplicaciòn con èxito del proyecto piloto con las aportaciones proactivas de las revistas participantes produjo el Modelo SciELO de indexaciòn y publicaciòn que pronto fue adoptado por Chile, lo que estimulò el desarrollo de la Red SciELO de colecciones nacionales de revistas (Packer et al. 2014). Un detalle en funciòn de este recurso de indexaciòn, su denominaciòn fue pensada directamente en inglès y no en portuguès.

SciELO revolucionò la circulaciòn del conocimiento en el nivel regional. Fue la primera experiencia en Amèrica Latina que permitiò acceso a texto completo de todos los contenidos de sus colecciones. Asimismo, la marcaciòn por artìculo resultò ser un elemento central en la potenciaciòn del proyecto. Este avance permitiò la bùsqueda en lìnea por palabra clave, por artìculo, por autor/a y, prioritariamente, para SciELO la posibilidad de su descarga gratuita.

El proyecto SciELO ademàs potenciò de la diseminaciòn de la publicaciòn electrònica y la aplicaciòn de las polìticas de acceso abierto. Ya desde la dècada de 1980, en la regiòn emergiò la necesidad de generar espacios de visibilidad a partir de la implementaciòn de las tecnologìas de la comunicaciòn y de la informaciòn. El largo proceso de digitalizaciòn de la comunicaciòn cientìfica estuvo acompañado por la adopciòn de las polìticas de acceso abierto en Amèrica Latina.

El desarrollo del acceso abierto en Amèrica Latina desde el inicio del proceso de regionalizaciòn fue posible gracias a la creaciòn de una serie de instituciones, la mayorìa de ellas actores no estatales. La organizaciòn de las sedes nacionales de Latindex y SciELO, el surgimiento de RedALyC y la incipiente publicaciòn en repositorios institucionales generaron una infraestructura de comunicaciòn cientìfica mediante la cual el conocimiento cientìfico se considera un bien pùblico.

Una de las principales organizaciones que iniciò una campaña a favor del acceso abierto fue CLACSO. Con el fin de alcanzar los objetivos de difusiòn, visibilidad y acceso a los resultados de la investigaciòn, a partir de 1998 la biblioteca de CLACSO, junto con el departamento de publicaciòn, puso en marcha una red de bibliotecas virtuales y en 2002 un repositorio digital para la investigaciòn en ciencias sociales de Amèrica Latina y el Caribe, desarrollado con software libre recomendado por la UNESCO (Babini 2011).

El nùmero de revistas latinoamericanas creciò sustancialmente a finales del siglo XX debido a la consolidaciòn de las tres grandes bases de datos e ìndices y al creciente proceso de digitalizaciòn de la comunicaciòn cientìfica. Ya entrados en el siglo XXI, en la estructuraciòn del espacio latinoamericano de revistas cientìficas podemos observar con claridad un itinerario de internacionalizaciòn heterònoma. Es decir, la aplicaciòn tanto en algunas bases regionales como en las polìticas de evaluaciòn de la ciencia de los consejos nacionales cientìficos latinoamericanos de una serie de criterios cuantitativos de corriente principal.

Este fenòmeno tiene dos efectos concretos en Amèrica Latina. Por un lado, la extensiòn del uso de indicadores cienciomètricos para medir la producciòn cientìfica de instituciones y agentes cientìficos. Es decir, los concursos de ingreso y promociòn en la carrera cientìfica se encuentran fuertemente atados a la valoraciòn cuantitativa de la producciòn cientìfica de quien se disponga a participar en estas esferas. Sumado a esto, las polìticas cientìficas de muchos paìses de la regiòn generaron diversos instrumentos normativos de jerarquizaciòn de las revistas cientìficas. Es asì como a nivel nacional se cuenta con una evaluaciòn y posterior clasificaciòn de revistas que indica de mayor a menor su relevancia e importancia. Esto es, los mismos estados nacionales generan una clasificaciòn basada en criterios de la corriente principal para evaluar proyectos editoriales nacionales. En ese esquema, solamente aquellas revistas que se hayan adaptado de mejor manera a las reglas de la competencia cientìfica internacional son destacadas y reconocidas.

Un elemento màs a considerar es el acuerdo entre SciELO y Clarivate Analytics (ex Thompson & Reuters). En 2014 SciELO firmò un contrato a partir del cual las colecciones nacionales de revistas cientìficas (sòlo aquellas quienes decidieron financiar el acuerdo) forman parte de un recurso especìfico de Web of Science: el SciELO Citation Index. La apuesta de SciELO es congruente con la direcciòn de la polìtica cientìfica brasileña, es decir, aumentar los espacios de visibilidad de la ciencia de Brasil en espacios de consagraciòn de corriente principal.

CONCLUSIONES

El proceso de conformaciòn de un espacio latinoamericano de revistas cientìficas debe ser comprendido a partir de dos grandes procesos: por un lado, la periferializaciòn de la comunicaciòn cientìfica latinoamericana con relaciòn a la constituciòn de la corriente principal o mainstream. Es decir, al tiempo que desde mediados de la dècada de 1950 en el Atlàntico Norte se iniciò un proceso de consolidaciòn de organizaciones, agentes, bases de datos, editoriales que sentaron las bases fundantes de lo que conocemos en la actualidad como corriente principal. En ese esquema, Amèrica Latina iniciò un proceso de periferializaciòn como espacio de circulaciòn diferenciado, particularmente, por el predominio del inglès como lingua franca y la bùsqueda de generar espacios de circulaciòn en español y portuguès.

En segundo lugar, se iniciò un proceso històrico de regionalizaciòn de la comunicaciòn cientìfica hacia el interior de Amèrica Latina. Ya desde la dècada de 1950 y 1960 se consolidò un espacio de circulaciòn que buscò articular revistas cientìficas, organismos estatales y no gubernamentales y expertos/as en la generaciòn de un diagnòstico que potenciara la publicaciòn latinoamericana.

Durante el siglo XX el espacio de circulaciòn regional poseìa un conjunto de limitaciones estructurales. Como fue destacado desde el Informe Final de Rìo Piedras hasta los diagnòsticos sobre disciplinas especìficas, la falta de financiamiento, la escasa profesionalizaciòn de la ediciòn, la segmentaciòn entre los espacios de producciòn de la de circulaciòn de los resultados de investigaciòn, la asunciòn de un proyecto de revista cientìfica como un desarrollo personal del editor (o de su grupo de trabajo) y la escasa interconexiòn de experiencias editoriales, fueron todas problemàticas comunes. Estos condicionamientos permitieron el inicio de una mirada sobre Amèrica Latina en relaciòn de las publicaciones periòdicas que permitiò la emergencia de algunas instancias institucionales y polìticas de convergencia. A partir de la experiencia previa, principalmente vinculado a esfuerzos de la UNESCO, la OEA y la UNAM, se sustanciaron en la dècada de 1990 un conjunto de iniciativas para “hacer visible” la ciencia producida en esta parte del mundo.

Fueron tres los principales proyectos que dinamizaron un conjunto de articulaciones que tuvieron un anclaje local y nacional muy importante que perduran hasta la actualidad. En primer lugar, el Proyecto Latindex y el rol del CICH como dependencia de la UNAM; los trabajos de la Organizaciòn Panamericana de la Salud y BIREME que finalmente dieron sustento al desarrollo del Proyecto SciELO y finalmente, la Biblioteca de CLACSO y la Campaña por el Acceso Abierto que se convirtiò en un espacio de congregaciòn interinstitucional de gran envergadura que logrò desarrollar a escalas micro y macro proyectos para comprender la circulaciòn de revistas y artìculos en relaciòn a la premisa del conocimiento como bien comùn.

Sucintamente podemos mencionar que la consolidaciòn de la ediciòn marcò un antes y un despuès en la comunicaciòn cientìfica regional. Lo que en este trabajo hemos denominado como “espacio latinoamericano de revistas cientìficas” se constituyò y consolidò principalmente orientado por cinco procesos: 1) la puesta en marcha de bases de documentaciòn, catalogaciòn e indexaciòn en la UNAM. La creaciòn de ALERTA, CLASE, PERIODICA y principalmente, la Bibliografìa Latinoamericana; 2) la emergencia de un posicionamiento crìtico a la corriente principal. La presencia de expertos/as latinoamericanos/as en diferentes instancias acadèmicas iniciò la construcciòn de un posicionamiento propiamente regional vinculado con el rescate de una tradiciòn cientìfica local y con una fuerte crìtica para los instrumentos de diseminaciòn de la corriente principal en el sistema acadèmico mundial. Tal es el caso de los pioneros trabajos de Hebe Vessuri, Lea Velho y Ana Marìa Cetto; 3). Las experiencias de evaluaciòn de revistas regionales. Desde la Reuniòn de Rìo Piedras hasta los esfuerzos de expertos brasileños (vinculados a BIREME principalmente) de principios de la dècada de 1990, se constituyò en Amèrica Latina un sistema de evaluaciòn propio basado en las dificultades de la ediciòn perifèrica pero asimismo orientado a potenciar la publicaciòn local y a valorizar su incidencia en los campos cientìficos nacionales; 4) La construcciòn de una infraestructura de comunicaciòn cientìfica basada en la circulaciòn de las revistas cientìficas en acceso abierto y; 5) la expansiòn numèrica de revistas editadas en la regiòn (10.104 revistas cientìfica activas al año 2017). A esta expansiòn en tèrminos absolutos se le debe sumar una expansiòn en tèrminos geogràficos (28 paìses cuentan con revistas) y el desarrollo de diferentes estrategias locales/regionales/internacionales de circulaciòn.

El recorrido històrico de las revistas latinoamericanas tuvo dos polos centrales de desarrollo. Uno asentado en la Ciudad de Mèxico y otro en San Pablo (Brasil.). Desde el centro de documentaciòn cientìfica de la UNESCO, pasando por Latindex y RedALyC hasta los desarrollos de BIREME, FAPESP y SciELO. Es asì como muchos de los itinerarios analizados en este trabajo tuvieron gravitaciòn por las polìticas de publicaciòn que se establecieron en estas dos grandes ciudades latinoamericanas. Al mismo tiempo, una variable central refiere al idioma de publicaciòn.

El rasgo màs relevante es una clara divisiòn entre las revistas brasileñas editadas en portuguès y el resto de Latinoamericana que mayoritariamente publica en español. Esta gran divisiòn idiomàtica debe ser contextualizada històricamente en relaciòn con la conformaciòn de los espacios intelectuales y acadèmicos en la regiòn. Bethell (2012) afirma que la relaciòn en la Amèrica española y la Amèrica lusitana tuvo un devenir de fuertes desencuentros hasta por lo menos mediados de S. XX. La propia intelectualidad brasileña durante el perìodo post-independentista e incluso con la formaciòn de la Repùblica Velha apuntò su brùjula hacia Estados Unidos y en menor medida Europa. La Amèrica española tuvo un lugar siempre relegado a pesar de ser geogràficamente el espacio de interacciòn social, polìtica, econòmica y cultural màs importante del Brasil, quien por su parte apuntò a apoyar el panamericanismo como movimiento continental (Bethell, 2012).

Fue recièn en el perìodo de posguerra en el cual Brasil comienza a ser pensado e incluido dentro de la Amèrica Latina. Seràn los organismos internacionales como la UNESCO y la OEA, fundaciones, sociedades acadèmicas y otros organismos multilaterales quienes incluyeron a Brasil en sus polìticas ahora si completamente regionales. Este proceso se vio reforzado por la emergencia de los “Latin American Studies” en muchas universidades de EE. UU. Destacamos este breve recorrido històrico ya que es llamativo el proceso de insularidad que se desarrollò con Brasil y Amèrica Latina. Pareciera que el mayor paìs de la regiòn se hubiese convertido en una pequeña isla desconectada, sin reflexiones y contactos acadèmicos fuertes con el continente. Pero, al mismo tiempo, se presenta como la potencia regional màs importante. Un elemento fundamental en esta cuestiòn es el idioma. El portuguès no fue una lengua compartida en el resto de la regiòn y, en contrapartida, el español fue desde el principio un rasgo de unidad continental primero alentado por el hispanoamericanismo y luego por el latinoamericanismo.

El desarrollo de las revistas cientìficas y sus comunidades en Mèxico y Brasil no implica que en otras ciudades latinoamericanas no se hayan desarrollado interesantes proyectos vinculados a revistas cientìficas. La Habana, Bogotà, San Josè de Costa Rica, Santiago de Chile y Buenos Aires acompañaron el ritmo de la ediciòn cientìfica regional a partir de la ediciòn de numerosas revistas y la consolidaciòn de fuertes comunidades revisteriles.

Finalmente, sostenemos que el proceso de regionalizaciòn de la circulaciòn de revistas dio paso a la construcciòn de circuitos de publicaciones con por lo menos tres orientaciones. En primer lugar, un itinerario guiado por las polìticas de acceso abierto, latinoamericanista que potencia la publicaciòn en español y portuguès; un segundo itinerario anclado en la bùsqueda de inserciòn en la corriente principal que promociona criterios restrictivos de inclusiòn en bases de datos y orienta la evaluaciòn de la ciencia hacia paràmetros cuantitativos de productividad e impacto y; tercero, un itinerario local, orientado nacionalmente que sobrevive sin indexaciones y con anclajes institucionales fuertes con una larga tradiciòn de publicaciòn.

Esperamos que el recorrido històrico propuesto sobre revistas cientìficas y la estructuraciòn del espacio regional permita contextualizar los actuales itinerarios de la comunicaciòn cientìfica. En especial, para que los debates en el marco de la evaluaciòn cientìfica y las polìticas editoriales cuenten con aproximaciones latinoamericanas al fenòmeno y se deje de depender pura y exclusivamente de los recursos cienciomètricos de la corriente principal.

CONCLUSIONES

El proceso de conformaciòn de un espacio latinoamericano de revistas cientìficas debe ser comprendido a partir de dos grandes procesos: por un lado, la periferializaciòn de la comunicaciòn cientìfica latinoamericana con relaciòn a la constituciòn de la corriente principal o mainstream. Es decir, al tiempo que desde mediados de la dècada de 1950 en el Atlàntico Norte se iniciò un proceso de consolidaciòn de organizaciones, agentes, bases de datos, editoriales que sentaron las bases fundantes de lo que conocemos en la actualidad como corriente principal. En ese esquema, Amèrica Latina iniciò un proceso de periferializaciòn como espacio de circulaciòn diferenciado, particularmente, por el predominio del inglès como lingua franca y la bùsqueda de generar espacios de circulaciòn en español y portuguès.

En segundo lugar, se iniciò un proceso històrico de regionalizaciòn de la comunicaciòn cientìfica hacia el interior de Amèrica Latina. Ya desde la dècada de 1950 y 1960 se consolidò un espacio de circulaciòn que buscò articular revistas cientìficas, organismos estatales y no gubernamentales y expertos/as en la generaciòn de un diagnòstico que potenciara la publicaciòn latinoamericana.

Durante el siglo XX el espacio de circulaciòn regional poseìa un conjunto de limitaciones estructurales. Como fue destacado desde el Informe Final de Rìo Piedras hasta los diagnòsticos sobre disciplinas especìficas, la falta de financiamiento, la escasa profesionalizaciòn de la ediciòn, la segmentaciòn entre los espacios de producciòn de la de circulaciòn de los resultados de investigaciòn, la asunciòn de un proyecto de revista cientìfica como un desarrollo personal del editor (o de su grupo de trabajo) y la escasa interconexiòn de experiencias editoriales, fueron todas problemàticas comunes. Estos condicionamientos permitieron el inicio de una mirada sobre Amèrica Latina en relaciòn de las publicaciones periòdicas que permitiò la emergencia de algunas instancias institucionales y polìticas de convergencia. A partir de la experiencia previa, principalmente vinculado a esfuerzos de la UNESCO, la OEA y la UNAM, se sustanciaron en la dècada de 1990 un conjunto de iniciativas para “hacer visible” la ciencia producida en esta parte del mundo.

Fueron tres los principales proyectos que dinamizaron un conjunto de articulaciones que tuvieron un anclaje local y nacional muy importante que perduran hasta la actualidad. En primer lugar, el Proyecto Latindex y el rol del CICH como dependencia de la UNAM; los trabajos de la Organizaciòn Panamericana de la Salud y BIREME que finalmente dieron sustento al desarrollo del Proyecto SciELO y finalmente, la Biblioteca de CLACSO y la Campaña por el Acceso Abierto que se convirtiò en un espacio de congregaciòn interinstitucional de gran envergadura que logrò desarrollar a escalas micro y macro proyectos para comprender la circulaciòn de revistas y artìculos en relaciòn a la premisa del conocimiento como bien comùn.

Sucintamente podemos mencionar que la consolidaciòn de la ediciòn marcò un antes y un despuès en la comunicaciòn cientìfica regional. Lo que en este trabajo hemos denominado como “espacio latinoamericano de revistas cientìficas” se constituyò y consolidò principalmente orientado por cinco procesos: 1) la puesta en marcha de bases de documentaciòn, catalogaciòn e indexaciòn en la UNAM. La creaciòn de ALERTA, CLASE, PERIODICA y principalmente, la Bibliografìa Latinoamericana; 2) la emergencia de un posicionamiento crìtico a la corriente principal. La presencia de expertos/as latinoamericanos/as en diferentes instancias acadèmicas iniciò la construcciòn de un posicionamiento propiamente regional vinculado con el rescate de una tradiciòn cientìfica local y con una fuerte crìtica para los instrumentos de diseminaciòn de la corriente principal en el sistema acadèmico mundial. Tal es el caso de los pioneros trabajos de Hebe Vessuri, Lea Velho y Ana Marìa Cetto; 3). Las experiencias de evaluaciòn de revistas regionales. Desde la Reuniòn de Rìo Piedras hasta los esfuerzos de expertos brasileños (vinculados a BIREME principalmente) de principios de la dècada de 1990, se constituyò en Amèrica Latina un sistema de evaluaciòn propio basado en las dificultades de la ediciòn perifèrica pero asimismo orientado a potenciar la publicaciòn local y a valorizar su incidencia en los campos cientìficos nacionales; 4) La construcciòn de una infraestructura de comunicaciòn cientìfica basada en la circulaciòn de las revistas cientìficas en acceso abierto y; 5) la expansiòn numèrica de revistas editadas en la regiòn (10.104 revistas cientìfica activas al año 2017). A esta expansiòn en tèrminos absolutos se le debe sumar una expansiòn en tèrminos geogràficos (28 paìses cuentan con revistas) y el desarrollo de diferentes estrategias locales/regionales/internacionales de circulaciòn.

El recorrido històrico de las revistas latinoamericanas tuvo dos polos centrales de desarrollo. Uno asentado en la Ciudad de Mèxico y otro en San Pablo (Brasil.). Desde el centro de documentaciòn cientìfica de la UNESCO, pasando por Latindex y RedALyC hasta los desarrollos de BIREME, FAPESP y SciELO. Es asì como muchos de los itinerarios analizados en este trabajo tuvieron gravitaciòn por las polìticas de publicaciòn que se establecieron en estas dos grandes ciudades latinoamericanas. Al mismo tiempo, una variable central refiere al idioma de publicaciòn.

El rasgo màs relevante es una clara divisiòn entre las revistas brasileñas editadas en portuguès y el resto de Latinoamericana que mayoritariamente publica en español. Esta gran divisiòn idiomàtica debe ser contextualizada històricamente en relaciòn con la conformaciòn de los espacios intelectuales y acadèmicos en la regiòn. Bethell (2012) afirma que la relaciòn en la Amèrica española y la Amèrica lusitana tuvo un devenir de fuertes desencuentros hasta por lo menos mediados de S. XX. La propia intelectualidad brasileña durante el perìodo post-independentista e incluso con la formaciòn de la Repùblica Velha apuntò su brùjula hacia Estados Unidos y en menor medida Europa. La Amèrica española tuvo un lugar siempre relegado a pesar de ser geogràficamente el espacio de interacciòn social, polìtica, econòmica y cultural màs importante del Brasil, quien por su parte apuntò a apoyar el panamericanismo como movimiento continental (Bethell, 2012).

Fue recièn en el perìodo de posguerra en el cual Brasil comienza a ser pensado e incluido dentro de la Amèrica Latina. Seràn los organismos internacionales como la UNESCO y la OEA, fundaciones, sociedades acadèmicas y otros organismos multilaterales quienes incluyeron a Brasil en sus polìticas ahora si completamente regionales. Este proceso se vio reforzado por la emergencia de los “Latin American Studies” en muchas universidades de EE. UU. Destacamos este breve recorrido històrico ya que es llamativo el proceso de insularidad que se desarrollò con Brasil y Amèrica Latina. Pareciera que el mayor paìs de la regiòn se hubiese convertido en una pequeña isla desconectada, sin reflexiones y contactos acadèmicos fuertes con el continente. Pero, al mismo tiempo, se presenta como la potencia regional màs importante. Un elemento fundamental en esta cuestiòn es el idioma. El portuguès no fue una lengua compartida en el resto de la regiòn y, en contrapartida, el español fue desde el principio un rasgo de unidad continental primero alentado por el hispanoamericanismo y luego por el latinoamericanismo.

El desarrollo de las revistas cientìficas y sus comunidades en Mèxico y Brasil no implica que en otras ciudades latinoamericanas no se hayan desarrollado interesantes proyectos vinculados a revistas cientìficas. La Habana, Bogotà, San Josè de Costa Rica, Santiago de Chile y Buenos Aires acompañaron el ritmo de la ediciòn cientìfica regional a partir de la ediciòn de numerosas revistas y la consolidaciòn de fuertes comunidades revisteriles.

Finalmente, sostenemos que el proceso de regionalizaciòn de la circulaciòn de revistas dio paso a la construcciòn de circuitos de publicaciones con por lo menos tres orientaciones. En primer lugar, un itinerario guiado por las polìticas de acceso abierto, latinoamericanista que potencia la publicaciòn en español y portuguès; un segundo itinerario anclado en la bùsqueda de inserciòn en la corriente principal que promociona criterios restrictivos de inclusiòn en bases de datos y orienta la evaluaciòn de la ciencia hacia paràmetros cuantitativos de productividad e impacto y; tercero, un itinerario local, orientado nacionalmente que sobrevive sin indexaciones y con anclajes institucionales fuertes con una larga tradiciòn de publicaciòn.

Esperamos que el recorrido històrico propuesto sobre revistas cientìficas y la estructuraciòn del espacio regional permita contextualizar los actuales itinerarios de la comunicaciòn cientìfica. En especial, para que los debates en el marco de la evaluaciòn cientìfica y las polìticas editoriales cuenten con aproximaciones latinoamericanas al fenòmeno y se deje de depender pura y exclusivamente de los recursos cienciomètricos de la corriente principal.

Nota

1. Los objetivos oficiales fueron 3: 1- promover y facilitar la colaboraciòn màs activa entre los editores cientìficos de la regiòn, 2- aumentar la visibilidad de la ciencia latinoamericana a travès de sus publicaciones y, 3- intensificar la cooperaciòn cientìfica regional e internacional (Cetto & Hillerund, 1995).

REFERENCIAS

1. Alperin, Juan Pablo, and Cecilia Rozemblum. “The Reinterpretation of the Visibility and Quality of New Policies to Assess Scientific Publications.” Revista Interamericana de Bibliotecologia, vol. 40, no. 3, 2017, pp. 231–41, doi:10.17533/udea.rib.v40n3a04.

2. Babini, Dominique. “Acceso Abierto a La Producciòn Cientìfica De Amèrica Latina Y El Caribe: Identificaciòn De Principales Instituciones Para Estrategias De Integraciòn Regional” Revista Iberoamericana de Ciencia, Tecnologìa y Sociedad, 2011.

3. Beigel, Fernanda. “La Institucionalizaciòn de Las Ciencias Sociales En Amèrica Latina: Entre La Autonomìa y La Dependencia Acadèmica.” Autonomìa y Dependencia Acadèmica. Universidad e Investigaciòn Cientìfica En Un Circuito Perifèrico: Chile y Argentina (1950-1980), Biblos, 2010, pp. 47–64.

4. Bethel, Leslie (2012). “Brasil y “Amèrica Latina””. Prismas, 16, 53-78.

5. Braga, Gilda Marìa, and Cecilia Oberhofer. “Diretrizes Para a Avaliacao de Periòdicos Cientìficos e Tècnicos Brasileiros.” Revista Latinoamericana de Documentaciòn, vol. 2, no. 1, 1982, pp. 27–31.

6. Campos, Estela Morales. “The Escuela Interamericana de Bibliotecologìa of the Universidad de Antioquia and Its Influence in Latin America.” Revista Interamericana de Bibliotecologia, vol. 40, no. 2, 2017, pp. 189–200, doi:10.17533/udea.rib.v40n2a07.

7. Capel, Horacio. “El Asociacionismo Cientìfico En Iberoamèrica. La Necesidad de Un Enfoque Globalizador.” Interciencia, vol. 17, no. 3, 1992, pp. 168–76.

8. CEPAL, CLADES. Desarrollo Del Proyecto Sobre Sistema de Informaciòn Para La Planificaciòn En Amèrica Latina y El Caribe. Sistema INFOPLAN. 1982.         [ Links ]

9. Cetto, Ana Marìa, and Octavio Alonso-Gamboa. “Scientific Periodicals in Latin America and the Caribbean: A Global Perspective.” Interciencia, vol. 23, no. 2, 1998, pp. 84–93.

10. Cetto, Ana Marìa, and Kai-Inge Hillerund. Publicaciones Cientìficas En Amèrica Latina. Edited by Ana Marìa Cetto and Kai-Inge Hillerund, ICSU Press-UNESCO, 1995.         [ Links ]

11. Godoy Urzua, Hernan, and Winn Kalmon. “Social Science Communication in Latin America.” Latin American Research Review, vol. 4, no. 2, 1969, pp. 211–13.

12. Krzyzanowski, Rosaly Favero. Evaluaciòn de Publicaciones Periòdicas Cientìficas y Tècnicas. 1998, pp. 68–77.

13. Lemarchand, Guillermo A., and United Nations Educational. RAPPORT DE L ' UNESCO. no. December, 2016.         [ Links ]

14. Maffey, L., et al. “Periòdica: Un Ìndice de Revistas Latinoamericanas En Ciencia y Tecnologìa.” Revista Española de Documentaciòn Cientìfica, vol. 6, no. 2, 1983.

15. Martìnez Arellano, Felipe. Bibliotecas y Bibliotecologìa En Amèrica Latina y El Caribe: Un Acercamiento. UNAM-CLACSO, 2007.         [ Links ]

16. Packer, Abel L., et al. “SciELO – 15 Years of Open Access: An Analytic Study of Open Access and Scholarly Communication.” UNESCO-SciELO, 2014, doi:10.7476/9789230012373.

17. Panamericana, Uniòn. Guìa de Publicaciones Periòdicas Cientìficas y Tècnicas de Amèrica Latina. 1962.         [ Links ]

18. Parada, Alejandro E. “La Otra Voz de La Historia de Las Bibliotecas. Una Proyecciòn Desde La Argentina y Amèrica Latina.” Informaciòn, Cultura y Sociedad, vol. 0, no. 39, 2018, p. 5, doi:10.34096/ics.i39.5343.

19. Salatino, Maximiliano y Lòpez-Ruiz, Osvaldo. “El fetichismo de la indexaciòn”. Revista CTS, vol. 16, n° 46. 2021.

20. Sandoval, Armando. “Centro de Informaciòn Cientìfica y Humanìstica: Un Centro de Informaciòn Universitario Del Tercer Mundo.” Boletìn Bibliotecològico UNESCO, vol. 1, no. 1, 1978, pp. 45–52.

21. Tarcus, Horacio. Las revistas culturales latinoamericanas: giro material, tramas intelectuales y redes revisteriles. Temperley: Tren en movimiento. 2020.         [ Links ]

22. UNESCO. Informe Tècnico. Grupo de Trabajo, Para La Selecciòn de Revistas Cientìficas Latinoamericanas. 1964.         [ Links ]

23. UNESCO. UNESCO and the Development of Scientific and Technical Documentacion Centres. 1961.         [ Links ]

24. Velho, Lèa. “The 'Meaning' of Citation in the Context of a Scientifically Peripheral Country.” Scientometrics, vol. 9, no. 1–2, 1986, pp. 71–89, doi:10.1007/BF02016609.

25. Velho, Lea, and John Krige. “Publication and Citation Practices of Brazilian Agricultural Scientists.” Social Stuides of Science, vol. 14, 1984, pp. 45–62.

26. Vessuri, Hebe. “El Papel Cambiante de La Investigaciòn Cientìfica Acadèmica En Un Paìs Periferico.” La Ciencia Perifèrica. Ciencia y Sociedad En Venezuela, edited by B. Dìaz Texera and Hebe Vessuri, Monte Àvila Editores, 1984.

27. Vessuri, Hebe. “Estrategias de Valoraciòn de Las Revistas Cientìficas Latinoamericanas.” Publicaciones Cientìficas En Amèrica Latina, edited by Ana Marìa Cetto and Kai-Inge Hillerund, ICSU Press-UNESCO, 1995, pp. 200–2011.

28. Vessuri, Hebe. “La Improductividad En La Universidad de Sao Paulo (Brasil).” Interciencia, vol. 13, no. 260–261, 1988.

29. Vessuri, Hebe. “La Revista Cientìfica Perifèrica. El Caso de Acta Cientìfica Venezolana.” Interciencia, vol. 12, no. 3, 1987, http://www.ivic.gob.ve/estudio_de_la_ciencia/Enlapublic/documentos/Revicient.pdf.

30. Vessuri, Hebe. “Recent Strategies for Adding Value to Scientific Journals in Latin America.” Scientometrics, vol. 34, no. 1, 1995, pp. 139–61.

Entrevistas

- Aguado-Lòpez, Eduardo -15 de septiembre de 2016-

- Alonso-Gamboa, Octavio -13 de septiembre de 2016-

- Cetto, Ana Marìa -19 de septiembre de 2016-

- Packer, Abel -03 de octubre de 2016-

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons