RESEÑAS

Sistemas políticos de América Latina (4ª EDICIÓN)
Manuel Alcántara Sáez, Tecnos, Madrid, 2013, 590 páginas

Durante las últimas tres décadas, la mayor parte de los países de América Latina comenzaron a experimentar una mayor estabilidad política, asentando progresivamente regímenes garantes de los derechos políticos y la competencia electoral. En este marco, se han desarrollado diversos estudios tendientes a analizar las dificultades iniciales que supusieron establecer regímenes democráticos, y los procesos políticos que acompañaron esos cambios. Dichas investigaciones abordaron aspectos esenciales de las nuevas democracias constituidas, como la forma de gobierno, el comportamiento de los actores sociales más relevantes, los partidos políticos y los sistemas de partidos, entre otros. Dentro de este conjunto de investigaciones, se encuentra la obra de Manuel Alcántara Sáez, que a diferencia de aquellos otros trabajos, se caracteriza por incluir la totalidad de los casos de la región.

Poniendo el foco en la organización y el funcionamiento histórico de los países de habla hispana y portuguesa de América del Sur, el libro pone de relieve las principales características del desarrollo del sistema político de cada uno de ellos. De este modo el autor logra llenar un vacío de la literatura en el tema, dando cuenta de las transformaciones políticas ocurridas en las últimas décadas, abordadas desde una perspectiva neoinstitucional.

De acuerdo al prólogo de esta cuarta edición, la política latinoamericana fue consolidando algunas características que se hicieron sobre todo visibles en la última década. El claro asentamiento de la poliarquía fue el elemento que propició la resolución de conflictos políticos a través de elecciones y arreglos institucionales capaces de encauzar severas crisis suscitadas dentro del sistema político; al mismo tiempo, el espectro partidista ha sufrido particulares transformaciones en lo referente a las ubicaciones ideológicas y una notable inestabilidad concerniente a la oferta electoral, junto a una desinstitucionalización de los sistemas de partidos que se verifica en la mitad de los países incluidos en este estudio.

La crisis de neoliberalismo, la baja institucionalización partidaria y el surgimiento de nuevos liderazgos personalistas, consolidados bajo la corriente del Socialismo del siglo XXI en algunos casos como el de Argentina, Bolivia, Ecuador, Perú y Venezuela, vienen a contrastar con la alta institucionalización partidaria que lograron algunos países como Uruguay, Chile y en menor medida Colombia, Brasil y Paraguay, tras el éxito político y económico suscitado en la última década. Esta realidad es un hecho que configura un complejo escenario heterogéneo dentro de la región. Frente a este panorama, el libro propone un esquema basado en el estudio de casos con una clara orientación narrativa y descriptiva en la que logra constituirse como manual de consulta obligado para aquellos profesionales interesados en profundizar en el conocimiento de los rasgos políticos y el desarrollo institucional de los países de América Latina.

El libro presenta un capítulo para cada caso abordado, en los que luego de una introducción analiza en sucesivas secciones el desarrollo político, el régimen político y el comportamiento político de cada uno de los países. Para comenzar, introduce las características de los respectivos regímenes políticos haciendo un recorrido histórico desde el proceso emancipador hasta nuestros días. Aquí toma además en consideración algunos elementos claves como los rasgos más relevantes de las políticas públicas implementadas en cada presidencia, las principales reformas políticas y los indicadores económicos y so-ciodemográficos (evolución del PIB per cápita, inflación, deuda externa, población, desempleo, pobreza, analfabetismo, participación de la mujer en la actividad económica) que ayudan a contex-tualizar el análisis posterior. En las siguientes secciones el autor retoma los puntos de la introducción para profundizarlos. Con respecto al desarrollo político, detalla la evolución histórico-política de cada caso, considerando los puntos de inflexión para cada uno de ellos, reuniendo los hechos más emblemáticos que constituyeron el devenir de su desarrollo político. Más adelante, en la tercera sección, detalla los principales rasgos del régimen político de cada país, considerando cuestiones como los elementos legales que lo regulan, las características básicas del poder ejecutivo, del poder legislativo y del poder judicial, la organización territorial, los principales organismos del Estado, y el sistema electoral. Finalmente, la última sección apunta a describir el comportamiento político, considerando los partidos políticos, el sistema de partidos, las corporaciones como actores socialmente relevantes, las fuerzas armadas, la opinión pública y la cultura política.

Junto con estas líneas, el libro incluye dos secciones adicionales en cada capítulo que exponen la bibliografía de referencia utilizada y los principales sitios web consultados. Ello apunta a evitar las citas a lo largo del texto, procurando a su vez exponer con mayor claridad el apoyo bibliográfico para cada uno de los países descriptos, lo cual le da el formato de manual que se propuso constituir desde el inicio.

Vale señalar que si bien se trata de estudios de caso, la estructuración interna en común de cada capítulo facilita al lector su comparación. A diferencia de los trabajos realizados hasta el momento, el autor insiste en describir los mismos aspectos para todos los casos estudiados a fin de conocer similares fenómenos en diferentes contextos y momentos históricos. También contrastando con estudios previos, esta obra incluye datos de la Cepal y diversos organismos nacionales junto a otros indicadores disponibles en el proyecto Lapop, dándole de esta forma un sólido soporte a la exposición de datos explicativos. La sistematización de la información le otorga al texto la claridad necesaria para aquellos que desean adoptarlo como material de estudio y consulta. A partir de este libro se hace más sencilla y efectiva la tarea de aquellos que buscan encontrar variables explicativas a la transformación política suscitada durante la última década en cada uno de los países incluidos. Además, resulta útil como base sobre la que se pueden construir nuevas propuestas teóricas en el campo de la política regional.

Luego de una década de continuidad poliárquica, América Latina aún enfrenta importantes desafíos de cara a la consolidación de democracias de calidad, entre ellas la crisis de los partidos políticos, la apatía de sus ciudadanos, las dificultades para encontrar consenso, el desarrollo de mecanismos institucionales para el equilibrio de poderes y el control gubernamental, entre otros. Todas ellas son cuestiones que brindan un punto de partida para la consecución de nuevas investigaciones, para las cuales este libro se torna un insumo de gran utilidad.

Nicolás Hernán Crisafi