SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.37 número1Categorías raciales en Buenos Aires: Negritud, blanquitud, afrodescendencia y mestizaje en la blanca ciudad capitalLas prácticas de escritura en el entramado escolar: entre conocer, saber y conocimiento índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Runa

versión On-line ISSN 1851-9628

Runa vol.37 no.1 Ciudad Autónoma de Buenos Aires jul. 2016

 

ARTÍCULOS

De la ilusión al desencanto". Senegaleses en Buenos Aires y la construcción de representaciones respecto a su migración

Gisele Kleidermacher*

 

* Doctora en Ciencias Sociales, Becaria posdoctoral. Universidad de Buenos Aires. Facultad de Ciencias Sociales , Instituto de Investigaciones Gino Germani (IIGG). Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. Correo electrónico: kleidermacher@gmail.com.

Fecha de recepción: noviembre de 2015. Fecha de aceptación: mayo de 2016.


Resumen

El artículo se propone reflexionar respecto a las representaciones sociales que los jóvenes senegaleses arribados a la Argentina en las dos últimas décadas construyen sobre su migración. Entiendo dichas representaciones sociales como una modalidad particular de conocimiento que incide en los comportamientos y la comunicación entre los individuos. A partir de esta categoría de análisis he podido reflexionar en torno a las expectativas y perspectivas de los protagonistas respecto a condicionamientos sociales, culturales, económicos, históricos y familiares que influyen de diversas maneras en el proyecto migratorio.

Palabras clave: Migración senegalesa; África Subsahariana; Representaciones sociales; Ciudad Autónoma de Buenos Aires; Estrategias migratorias

"From illusion to disappointment". Senegalese in Buenos Aires and social representations about their migration

Abstract

The article reflects on the social representations that young Senegalese who arrived in Argentina over the last two decades construct regarding their migration. I understand social representations as a particular type of knowledge that influences individual’s behavior and communication. On this basis, I reflect on the expectations and perspectives of the protagonists on various social, cultural, economic, historical and family conditions that have influenced their migration projects in numerous ways.

Key words: Senegalese migration; Subsaharian Africa; Social representations; Autonomous City of Buenos Aires; Migration strategies

"Da ilusão à decepção". Senegaleses em Buenos Aires. A construção de representações sobre a sua migração

Resumo

O artigo tem como objetivo refletir sobre as representações sociais que os jovens senegaleses que desembarcaram na Argentina nas últimas duas décadas construíram sobre a sua migração. Considero as representações sociais como uma forma de conhecimento que influencia o desenvolvimento de comportamentos e a comunicação entre os indivíduos. Partindo dessa base, reflito em relaçao às expectativas e perspectivas dos protagonistas em diversas condições sociais, culturais, econômicas, históricas e familiares que influenciam de várias maneiras o projeto migratório.

Palavras-chave: Migração do Senegal; África Subsaariana; Representações sociais; Ciudad Autónoma de Buenos Aires; Estratégias de migração


Introducción

En el presente escrito me propuse reflexionar en torno a la migración senegalesa presente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) entre los años 1995 y 2014, a partir de las representaciones que los propios migrantes construyen sobre su trayectoria y proyecto migratorio.1 Si bien existen diferencias al interior de la comunidad senegalesa en la Argentina, he tomado en consideración los aspectos que comparten sus integrantes, tales como el país de procedencia, las condiciones de inserción laboral en el lugar de destino, la pertenencia a redes y cadenas migratorias y, finalmente, su filiación religiosa al islam sufí.2

Para alcanzar este objetivo desarrollé una metodología cualitativa que constó de la realización de 21 entrevistas en profundidad no estructuradas a migrantes senegaleses residentes en la CABA, que fueron complementadas con 50 entrevistas semi estructuradas a migrantes con menor dominio del idioma español, provenientes del África Subsahariana (mayoritariamente senegaleses pero también pertenecientes a otras nacionalidades).3

El corpus de datos obtenido fue grillado y analizado bajo la metodología de la "teoría fundamentada"4 así como en base a las guías de pautas flexibles previamente diseñadas. Asimismo, lo he complementado con el uso de investigaciones antropológicas e históricas sobre el continente africano, así como con informes sobre la situación económica de Senegal, para analizar los factores intervinientes en el momento de partir y las representaciones construidas sobre aquel suceso.

Sostengo que las migraciones constituyen un hecho social en el que intervienen factores de diversa índole que deben ser considerados en el análisis de las representaciones sobre los proyectos y trayectorias migratorias. Estas trayectorias migratorias son consecuencia de las condiciones objetivas pero, también, de decisiones individuales, parentales y sociales. He tomado en consideración las variables que Sayad (2010) denomina "de origen" y que define como un conjunto de características sociales, disposiciones y aptitudes socialmente determinadas de las que los emigrados ya eran portadores antes de su llegada al país de destino. Consideré también las variables "resultantes": situaciones que transitan los inmigrados en la sociedad receptora en relación a su hábitat, condiciones de trabajo, etcétera.

 

Acerca de las representaciones sociales

Considero que las representaciones sociales constituyen una puerta de entrada a la subjetividad de los migrantes y también la clave en la articulación entre sus mundos subjetivos y objetivos. En este caso, me han permitido analizar los factores que han condicionado la partida de los actores, su visión respecto de la sociedad receptora y su inserción en ella. Esas son las razones por las cuales este andamiaje teórico que desarrollo brevemente a continuación ha cobrado relevancia en mi investigación.

Las representaciones sociales han sido abordadas por diferentes disciplinas dentro de las ciencias sociales. Berger y Luckman (2011) retoman la definición de Alfred Schütz (1899-1959) quien postuló que la experiencia personal inmediata tiene relación con la perspectiva desde la que el sujeto aprehende la realidad y que la comprensión se hace en relación a la posición que ocupa en el mundo. La teoría desarrollada por Schütz llevó a los mencionados autores a escribir que el conocimiento de la realidad es una construcción social en el ámbito subjetivo; intentando descubrir la relación entre la representación y el objeto que la origina, así como su surgimiento y evolución a través de la comunicación.

Desde los "Estudios Culturales", Stuart Hall (2010) plantea que hay cuatro ámbitos desde donde se han abordado las representaciones sociales. Estos no son mutuamente excluyentes, ya que se refieren a niveles muy diferentes de análisis: el lingüístico, el social, el cultural y el psíquico, respectivamente. El autor destaca que son centrales para el abordaje de la diferencia y de la "otredad". Esta diferencia puede ser positiva o negativa, y es necesaria para la producción de significado, la formación de lenguaje y cultura, la construcción de identidades sociales y el sentido subjetivo del sí mismo como sujeto. Sin embargo, también puede ser amenazante, al producir sentimientos negativos y de agresión hacia aquel que es identificado como un "otro".

Desde el campo de la sociología, Bourdieu (1988) también se interesó en esta temática, realizando una aproximación bajo el concepto de habitus, entendido como sistema de esquemas de percepción y apreciación y como estructuras cognitivas y evaluativas que se adquieren a través de la experiencia duradera de una posición del mundo social. Se trata de aquellas disposiciones a actuar, percibir, valorar, sentir y pensar de una cierta manera, que han sido interiorizadas por el individuo en el curso de su historia. Ahora bien, las prácticas y las representaciones no solo están relacionadas con el habitus sino también con una determinada posición social. La distribución desigual de los diversos capitales a los que el autor hace alusión ‒económico, social, simbólico‒ da origen a posiciones relativas de los sujetos y a relaciones entre posiciones, es decir, relaciones de fuerza, de poder, definidas en términos de dominación-dependencia. De esta forma, para poder explicar las prácticas sociales y las representaciones que los sujetos construyen sobre ellas hay que tener en cuenta la posición del agente social, así como la trayectoria de esa posición.5

De modo complementario a este enfoque, desde la psicología social se ha considerado a las representaciones sociales como la manera en que los individuos de un contexto social conciben e interpretan la realidad a través de su interacción dentro del mismo contexto (Jodelet, 1986). Ello se logra mediante el establecimiento de un orden y de códigos para el intercambio social, para nombrar y clasificar sin ambigüedades los diversos aspectos del mundo y de su historia individual y grupal, lo que permite a los individuos orientarse en su mundo material y social (Mora, 2002).

Concebidas de esta forma, las representaciones sociales me han permitido adentrarme en las trayectorias y proyectos migratorios de los jóvenes senegaleses. Por una parte, a partir de las representaciones sobre su país y los imaginarios previos a su partida, pude analizar diversos factores que entran en juego en la decisión migratoria: la situación económica, las decisiones familiares, las migraciones previas de amigos y conocidos, las imágenes difundidas por los medios de comunicación.

Por otra parte, las representaciones sobre el país receptor me permitieron analizar su posición en la ciudad de llegada, sus estrategias de asentamiento y sus trayectorias desde Senegal, dando como resultado determinadas prácticas que son, a su vez, producto de sus representaciones sociales.

 

Contexto de origen

Senegal está situado en el extremo oeste de África. Se trata de una península que está limitada por el océano Atlántico al oeste y por el río Senegal (que la separa de la República Islámica de Mauritania) al norte. Linda con la República de Malí al este y con la República de Guinea, Guinea Bissau y Gambia, al sur. Los idiomas oficiales del país son el francés y el wolof. En cuanto a la religión, es un país laico, donde coe­xisten de forma pacífica diferentes creencias y religiones. No obstante, la gran mayoría de la población (en torno a un 90%) es musulmana y se encuentra estructurada en torno a poderosas cofradías (Qadiriyya, Tidjania, Mouridia), bajo las recomendaciones de sus líderes. La minoría religiosa de mayor peso es la cristiana, que habita principalmente en el sur del país (Moreno Maestro, 2006).

Senegal fue colonia francesa hasta 1960. Sin embargo, la independencia política no significó independencia económica: tras la emancipación del yugo colonial, el país fue víctima de la aplicación de irracionales políticas de desarrollo poscoloniales inspiradas desde el exterior, que continuaron descuidando la agricultura a favor de las ciudades, tal como sucedió durante la dominación francesa, a lo que se sumaron el deterioro en los términos de intercambio y una excesiva carga de la deuda externa (Kabunda Badi, 2007).

Los problemas en la rentabilidad de los campos debido a la falta de inversiones, sumados a la búsqueda de mejores perspectivas ‒con las cuales se representaba a los núcleos urbanos‒, produjeron una masiva migración del campo a la ciudad en los años posteriores a la independencia, que continúa hasta la actualidad. Sin embargo, las ciudades carecían de infraestructura para acoger a esa masa poblacional, por lo que se produjo un fenómeno conocido como ,urbanización prematurau; es decir, una urbanización rápida y desordenada, producto de las migraciones masivas del campo a la ciudad en un corto período de tiempo, dando lugar a la formación de barrios sin servicios básicos, tales como luz y agua potable.6

Esta situación contribuyó a la generación de nuevas oleadas migratorias hacia la ex metrópolis y otras zonas del continente europeo. Otra de las consecuencias del crecimiento exponencial de las ciudades fue el desarrollo del sector de servicios y la falta de desarrollo de la industria y la agricultura dentro de la estructura económica de Senegal, de modo que hasta la actualidad, el sector terciario de la economía continúa siendo uno de los motores de su crecimiento y el que provee la mayoría de los puestos de trabajo ‒principalmente en el sector informal‒, como se observa en el cuadro N°1.

 

Cuadro N°1. Estructura del Producto Interior Bruto de Senegal. 2014.

Fuente: OFECOME Dakar 2015; Dirección de Previsión y Estudios Económicos,
Ministerio de Economía y Finanzas (MEFP) de Senegal

 

Cabe agregar que en enero de 1994 el gobierno senegalés impulsó un profundo programa de reforma económica con el apoyo de la comunidad de donantes internacionales. Esta reforma comenzó con una devaluación de 50% de la moneda, el franco CFA, que se mantenía con una tasa de cambio fija en relación al franco francés. El control gubernamental de precios y los subsidios fueron desmantelados al tiempo que el Estado aumentaba su dependencia de los donantes internacionales y su economía, de las remesas. Además, bajo el control del programa del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la ayuda a los países más pobres, Senegal se Cbenefició" con la condonación de dos tercios de la deuda externa bajo la condición de mantener el plan de liberalización de su economía (Alonso y Herrera, 2010).

Esta situación en la que se encontró envuelta la economía senegalesa repercutió sin escalas en la disminución de la cantidad y calidad de empleos disponibles, de modo que aumentaron las tasas de desempleo, subocupación y precarización laboral.

A pesar de ello, los factores que inciden sobre las migraciones senegalesas no se reducen a los relativos al contexto económico. Así, cabe mencionar en primer lugar que las migraciones intra-africanas han sido una constante en la historia del continente y generaron una costumbre significativa entre sus habitantes.7 En el caso de Senegal deben adicionarse, como factores que intervienen en la decisión de migrar, las experiencias migratorias previas dentro y fuera del país.

En un comienzo las migraciones fueron fomentadas por el mandato colonial durante su dominio, al enviar a Francia a las elites colaboracionistas para formarse y, al retornar, obtener mayor poder y prestigio.8 Luego tuvieron lugar las migraciones dentro del país, a las que aludí anteriormente. También fueron frecuentes, y lo siguen siendo, las migraciones de jóvenes que se marchan de sus casas hacia pueblos cercanos, para asistir a escuelas formales o residir en escuelas coránicas pertenecientes a alguna de las cofradías.

Todo ello ha dejado hondas secuelas en el imaginario de los senegaleses, que ven en la emigración una salida para la obtención de un futuro más próspero del que el país puede ofrecerles ‒con tasas de desocupación que alcanzaron el 25,7% (OFECOME, 2015)‒, pero también una posibilidad para emanciparse de sus familias y obtener el particular prestigio que los emigrantes poseen en Senegal.9

En relación a la actual migración senegalesa hacia la Argentina, su inicio data de la década de los noventa y se profundizó entre los años 2004 y 2008, sin sufrir interrupciones hasta la actualidad. Dada la inexistencia de representaciones diplomáticas entre ambos países, los senegaleses no puedan solicitar la visa10 requerida para ingresar a la Argentina, por lo que el ingreso suele realizarse por pasos fronterizos no habilitados, principalmente a través de Bolivia o Brasil. También por ello, entre otras razones, no hay datos precisos en la Argentina con respecto al número de pobladores provenientes de Senegal. El último censo nacional de población realizado en el año 2010 cuenta con un importante sub-registro de la población senegalesa. Tal como queda reflejado en el Cuadro N°2, solo se registraron 459 senegaleses frente a la cifra muy superior de entre 2500 y 4000 personas que declara la comunidad. Estos números encuentran correlato en los datos ofrecidos por la Dirección Nacional de Migraciones respecto al Plan de Regularización que estuvo vigente entre los meses de Enero y Julio del año 2013, tras el que han regularizado su condición migratoria alrededor de 2000 senegaleses.11

 

Cuadro Nº 2. Migrantes Nacidos en Senegal por grupo de edad, en CABA y Argentina según censo 2010.

Fuente: Elaboración propia a partir de datos del Censo Nacional de Población, Hogares y Vivienda, 2010 (INDEC).

 

La comunidad senegalesa en Argentina está compuesta mayormente por hombres jóvenes que han migrado solos, dejando en muchos casos a mujeres e hijos en Senegal. Ello obedece, entre otras razones, a la representación de la migración como un proyecto cortoplacista, ligado al ahorro y al envío de remesas ‒entre diversos factores que lo movilizan‒, razón por la cual la reunificación familiar se ha producido en muy pocos casos.

 

Representaciones previas a la partida

Al analizar las representaciones que los migrantes senegaleses presentes en la CABA construyen respecto a su migración, consideré necesario dividirlas en base a los ejes temporal y espacial. En primer lugar, las representaciones previas a la salida; es decir, aquellas ligadas al destino elegido y el futuro en él. En segundo lugar, las representaciones respecto de la llegada y la vida en la Argentina una vez asentados en la CABA.

Las representaciones construidas con anterioridad a la partida permiten vislumbrar algunos de los factores intervinientes en la decisión de migrar. Al respecto, Teófilo Altamirano (1996), antropólogo peruano, señala que la migración internacional no debe ser vista solo como un proceso poblacional y económico sino como un proceso cultural, dentro del cual se verá a la migración como un "modelo a imitar". Entiendo de esta forma que el desempleo y la falta de oportunidades inciden en la decisión migratoria, pero a ello debe adicionarse la tradición presente en los jóvenes de partir hacia otras tierras en busca de mejores oportunidades para ellos y sus familias. Es decir, que la decisión migratoria no estaría impulsada solo por factores económicos, sino que al estar asociada al prestigio y a un mayor conocimiento del mundo también es entendida como un rito en el paso hacia la adultez, hacia la independencia. Se trata de una opción posible, a la que familiares y jóvenes de la comunidad han accedido.

También intervienen en la decisión de migrar las imágenes difundidas por los medios masivos de comunicación, que han penetrado cada uno de los hogares senegaleses. En ellos se muestran imágenes vinculadas al consumo, a modos de vida más urbanizados y occidentalizados (Montero, 2006).

Este conjunto de factores contribuye a sobrevalorar lo que no es propio, principalmente, aquellos destinos asociados a la prosperidad. Se suele denominar a esta situación de anhelo por llegar a estos países como "el sueño americano" o "el sueño europeo". Es decir, representaciones sociales construidas en base a un ideal de modernización, urbanización y comodidades que suelen asociarse a Europa o Estados Unidos en el imaginario de la población.

De esta forma, las condiciones históricas de fomento de la migración por parte de la metrópolis, las imágenes de riqueza que los migrantes transmitían a sus familiares a su regreso desde Europa, las bajas posibilidades de inserción laboral en el país y las pocas posibilidades que las familias ampliadas tienen para sostener económicamente a todos sus miembros, contribuyen a generar una fuerza expulsora para los jóvenes senegaleses, que buscan nuevos horizontes por fuera de su país. Pero también tiene un peso relevante la mirada que se proyecta sobre el emigrado, una presión ejercida por la comunidad de origen a la cual no se puede defraudar mediante un regreso prematuro sin un capital cosechado.

Estos elementos están presentes en las representaciones que los senegaleses construyen antes de su llegada a la Argentina, país al que equiparan al continente europeo; es decir, como un destino donde se puede "triunfar", obtener dinero, vivir mejor. En el otro extremo, su país es representado de manera opuesta: un lugar que no les ofrece oportunidades, en el sentido de la rápida obtención de riquezas para la construcción de una casa propia, un local, etc.

La situación es ilustrada en el siguiente fragmento de una entrevista: "En general, nosotros, los paisanos africanos pensamos que acá mejor que allá. Que todos los países que tienen piel blanca, que todos los países blanquitos, mejor que africanos. Por eso venimos acá" (Hombre senegalés, 29 años. Entrevista realizada en febrero de 2014).

Dentro de la oposición poseídos/desposeídos, Argentina es ubicada del lado de los poseedores, de "los blanquitos". Esto se debe ‒entre otras razones‒ al hecho de que el imaginario de blanquedad dado a la nación argentina12 no es exclusivo de este país, sino que forma parte de una lógica más amplia que cruza las fronteras y es reproducido por los medios de comunicación, la educación, la narrativa histórica oficial, llegando a los futuros emigrantes senegaleses. Se construye entonces una representación de un país formado por blancos, que ofrecería aquello que el propio país no brinda: la posibilidad de trabajar y ganar dinero, pero sin las dificultades que presenta una Europa calificada como racista, en referencia a las diversas problemáticas que allí enfrentan sus compatriotas. En el siguiente fragmento de entrevista aparece de forma ilustrativa este tema:

Hablando desde África, desde Senegal, Argentina es donde hay nuevas oportunidades, algo nuevo, porque con la crisis, no de este año sino que de hace mucho tiempo que viene, porque muchos inmigrantes ayudan y con el desempleo no pueden, entonces acá era como buscar una oportunidad en América Latina, hay unos que van a Brasil, otros a Argentina, que es como algo nuevo, como dicen el "nuevo continente" pero para nosotros también es algo nuevo para migrar, ver qué hay en América Latina. Argentina es un país en el cual se puede estar, hay más tranquilidad que en los otros países (Hombre, 29 años. Entrevista realizada en Noviembre de 2011).

Esta representación se encuentra a la vez influida por el desconocimiento que gran parte de los entrevistados reconoció haber tenido respecto de la Argentina, e incluso de América Latina antes de su salida de Senegal. Solo unos pocos habían realizado breves búsquedas en internet, que les permitió acceder a algunas imágenes de la ciudad de Buenos Aires.

Entiendo que, en parte, esto se debe al papel fundamental que cumplen las redes migratorias otorgando apoyo al recién llegado, lo que hace que su salida sea más "despreocupada", ya que el migrante contará con ayuda de su comunidad donde quiera que vaya. No es lo mismo migrar solo, en el sentido de llegar a un destino donde no se conoce a nadie ni se sabe acerca de la presencia de otros compatriotas, que migrar con la certeza de que se encontrarán con miembros de su país en el nuevo destino al que se arriba, sean ellos parientes, amigos o meros paisanos. Como menciona uno de los entrevistados: "Yo nunca escuché Argentina, nunca pensé que iba a llegar a Argentina, pero sinceramente hace poco conocimos Argentina nosotros y ya hay chicos" (Hombre senegalés, 29 años. Entrevista realizada en Julio de 2010).

En solo uno de los relatos el entrevistado había intentado obtener más información sobre el país. Se mostraba orgulloso de ello, en contraposición a sus connacionales que, como él mismo afirmaba, no lo hacían:

Yo soy una persona que antes de hacer algo se va por internet para buscar mucha información. Yo sabía, ya había buscado muchas cosas de Argentina (…). Antes de venir acá yo sabía más o menos como era Argentina, capaz que puedo decir que soy el único chico que sabía, yo sabía que es una mezcla de culturas, que no hay una cultura que es la típica argentina, porque vinieron los españoles, los italianos, los portugueses, yo sabía que Argentina la población tiene la cultura europea, entonces yo sabía que lo que voy a encontrar son los europeos, y yo tenía amigos que venían de Europa a Senegal y charlábamos de muchas cosas (Hombre senegalés, 28 años. Entrevista realizada en Mayo de 2014).

Se observa también en la entrevista la representación de la Argentina como un país de blancos, más cercano a Europa en el imaginario de aquellos que están por migrar, que a las representaciones construidas sobre América Latina.

Por otra parte, el acto de emigrar también incluye una visión emancipadora de los jóvenes. Tal como menciona un entrevistado: "Antes de llegar acá yo no sabía nada de Argentina, vengo para saber, aprender, para abrir la cabeza, y cuando llegué, vi que es un país diverso, como Europa, pero más tranquilo, me gusta por eso"(Hombre, 41 años. Entrevista realizada en Mayo de 2014).

Argentina es representada como un destino tranquilo. De esa forma, los entrevistados denotan la ausencia de conflictos violentos con los que representan la situación en Europa. Se agrega a ello la ausencia en la Argentina de una práctica habitual de deportación por problemas con la documentación y también, al menos hasta el momento de realización de las entrevistas, la posibilidad de realizar la venta ambulante sin mayores conflictos.13

Otro elemento presente en las representaciones sociales es el de la migración como una salida a la presión económica que aqueja a muchas familias senegalesas. Así, la migración puede comprenderse como una ilusión, es decir, "una construcción interna del individuo o auto identificación de carácter proyectivo que expresa un deseo o una motivación asociada al beneficio que esperan" (Goycoechea, 2003: 24). Un anhelo positivo en el sentido económico que permitiría mejorar sus condiciones de vida y las de sus familias ampliadas ‒padres, tíos, sobrinos, abuelos y demás miembros del grupo familiar que viven bajo el mismo techo.

Los senegaleses entrevistados, todos ellos jóvenes en edad de trabajar, han asociado el proyecto migratorio al envío de remesas para sus familias que han quedado en Senegal. Para esas familias ese dinero constituye una ayuda fundamental, ya que lo utilizan para pagar alimentos, remedios o la educación de alguno de sus miembros. De esta forma, la migración es entendida como un proyecto conjunto para diversificar el ingreso de la familia.

Finalmente, no debe dejarse de lado la influencia que presentan los medios de comunicación al difundir información favorable sobre el país de destino como punto de atracción, principalmente las imágenes difundidas por la televisión a través de publicidad, telenovelas y películas. Pero también es relevante la información que transmiten los migrantes desde Argentina a sus familiares y amigos en Senegal: la totalidad de los jóvenes entrevistados posee un teléfono celular y tiene acceso a computadoras para comunicarse con su familia. La telefonía celular, las redes sociales como facebook y el skype, se convierten en una herramienta indispensable que facilita la comunicación permanente entre las familias. Las noticias transmitidas siempre son positivas. No se comunican los problemas a los que deben enfrentarse cotidianamente, sino los logros que contribuyen a formar la imagen del emigrado como un personaje exitoso.

 

Después de la llegada, la decepción

Aquellas representaciones idealizadas de la Argentina como la tierra de oportunidades, se desmorona rápidamente al llegar y comprobar que las imágenes construidas antes de la partida no tienen correlato con las situaciones que se viven, escuchan y observan. Cabe destacar que esta representación social de desencanto ante el proyecto migratorio no ocurre únicamente en la migración senegalesa, sino que también ha sido analizada por Maffia (2010) para la migración caboverdeana en la Argentina, así como por Novick (2007) para el caso de los migrantes argentinos en España, entre otros.

En principio, la mayor sorpresa se produce al momento de la llegada, cuando ingresan a los hoteles-pensión o departamentos donde otros compatriotas están viviendo. Las imágenes de personas compartiendo pequeños espacios en medio de objetos de venta (valijas, mesas, bijouterie, relojes y carteras) producen un fuerte impacto en el recién llegado. Al tratarse en la mayoría de los casos de habitaciones en hoteles-pensión, de dimensiones reducidas y sin divisiones, en un mismo espacio hay colchones, mesas, productos de higiene personal, comestibles y productos de limpieza, lo cual genera representaciones negativas en el joven emigrado, como queda ilustrado en una de las entrevistas: "Estaba viviendo en una casa con los africanos, 17 personas, y yo le digo peor que en África, te juro, vas a una casa, un hotel donde viven muchos africanos y es un desastre" (Hombre senegalés, 35 años. Entrevista realizada en julio de 2014).

Posteriormente, una segunda decepción en el país de destino se produce con relación a la inserción laboral. En ese momento, el sueño de enviar remesas y luego regresar a su país comienza a vislumbrarse un poco más lejano, y en muchos casos hasta imposible, tras lo cual llega el arrepentimiento por la decisión tomada:

Algunos chicos, cuando nos sentamos a hablar, que tienen su oficio, por ejemplo, dicen, mira, a mí me dijeron de venir acá, porque acá está bien, porque gana plata, y algunos vendieron sus negocios para venir acá y llegaron acá y no era (Hombre senegalés, 50 años. Entrevista realizada en Noviembre de 2009).14

O como menciona uno de los referentes de la comunidad senegalesa:

Hay chicos que gastaron fortunas, antes de llegar aquí, cuando no tienen la más mínima idea, porque le cuentan, digamos, el cuento de hadas, les dicen "allá ustedes van a ganar etcétera, etcétera, etcétera" y cuando llegan acá es la desilusión total (Hombre, 52 años. Entrevista realizada en Junio de 2008).

La ilusión de poder trabajar y enviar dinero a su país se quiebra ante una realidad que se presenta más compleja. La representación de las oportunidades se desmorona y nuevas estrategias deben ser adoptadas para sortear los obstáculos, ya que la inversión para llegar, como se menciona en la entrevista, es muy grande. Son considerables sumas de dinero que los jóvenes deben ahorrar para comprar un pasaje aéreo que les permita atravesar el océano. Ello a su vez indica que no son los más pobres quienes migran hacia la Argentina, sino que se trata de sectores más favorecidos que tienen la posibilidad de afrontar tal gasto, y no sin esfuerzos: en muchos casos, las familias ayudan a cubrir el costo mediante la venta de tierras, automóviles y otros bienes.

Esta experiencia de la realidad de la emigración viene a desmentir la ilusión inicial antes de la partida. Como observara Sayad (2010) para los migrantes argelinos en París, es toda la experiencia del emigrado la que oscila continuamente entre estas dos imágenes contradictorias: una representación sobre la tierra de oportunidades y otra, nueva, como una tierra del desencanto.

Este desencanto debe ser ocultado a los familiares que se encuentran en Senegal porque de lo contrario no podría mantenerse el proyecto migratorio, donde el emigrado es visto como la persona exitosa, quien obtiene dinero, lo envía regularmente mediante remesas, y en sus viajes de vacaciones, repleto de regalos, da cuenta de dicho éxito. Se produce una tensión, entonces, entre las representaciones que tenían antes de partir, las expectativas que sus familiares tienen sobre ellos y la realidad con la que se encuentran, representada con gran decepción. Es por ello que ponen en práctica estrategias que no hacen más que reforzar esta imagen sobre su proyecto migratorio: la vida del esfuerzo, el trabajo en largas jornadas y el ahorro que permita el envío periódico de remesas.

Al igual que Sayad (2010) lo observa para los migrantes argelinos en París en los años setenta y ochenta, también los actuales migrantes senegaleses en Argentina representan su migración como un "no vivir":

(…) y bueno, yo venir para acá, soy un boludo,15 sí, (risas) porque acá ahora muy difícil para mí, para vivir, para mandar plata, no tengo vida, no vivo con mi familia, yo trabajo y a fin de mes quiero mandar plata y tengo problemas para mandar plata (Hombre, 29 años. Entrevista realizada en Febrero de 2014).

La representación que uno de los jóvenes entrevistados construye sobre la vida de los migrantes senegaleses en Argentina es ilustrativa de la situación aludida:

En general los chicos cuando salen afuera, como estaban pensando que afuera iban a ser ricos lo más rápido posible, cuando llegan y no encuentran esas cosas, empiezan a ahorrar todo lo que trabajan y lo mandan porque no quieren que en Senegal sientan que, "mirá, afuera no es", no quieren que la gente sepa que afuera lo están pasando mal, entonces muchos no tienen vida acá (Hombre senegalés, 30 años. Entrevista realizada en Abril de 2014).

Este "no vivir" tiene dos connotaciones. Por un lado, la separación de su familia y su comunidad, ruptura que sufren todos los migrantes al dejar sus países, pero que, en el caso de los senegaleses, cobra una profundidad mayor. Se trata de familias ampliadas, que se ven disgregadas en los cinco continentes y pueden reencontrarse solo si alguno de los miembros puede afrontar el costo del pasaje para volver de visita unos pocos meses cada tres o cuatro años.

Cabe destacar que la estructura comunitaria en Senegal tiene un lugar relevante, que se plasma en todas las actividades cotidianas: las comidas se realizan alrededor de un gran recipiente apoyado en el suelo, sobre el cual los comensales se agrupan, generalmente en dos grandes rondas, una de mujeres y otra de hombres. Durante las tardes, se sacan las sillas al exterior de la casa y se conversa con vecinos y conocidos durante horas. Asimismo, y al tratarse de un país musulmán, la religión genera un lazo de comunidad mediante los rezos diarios, las festividades tradicionales y otras celebraciones vinculadas al animismo, que conviven en un país donde el sincretismo religioso se hace presente en cada hogar. Finalmente, puede decirse que la economía tiene su base comunitaria, principalmente en familias ampliadas, pero también en comunidades de hombres y de mujeres, fundamentalmente en la agricultura y la pesca (Moreno Maestro y Aris Escarcena, 2013).

Por otra parte, el "no vivir" hace referencia a las largas jornadas laborales que los migrantes deben afrontar día tras día, donde no hay feriados, no hay fines de semana, no hay vacaciones. Se trabaja de lunes a lunes, desde la mañana hasta la noche, en condiciones difíciles en muchas ocasiones, a la intemperie, con el riesgo de perder la mercadería por robos o por decomisos de la policía. No hay días de descanso, ya que el objetivo es juntar dinero y enviarlo a sus familias en Senegal, en algunos casos, como ellos dicen "porque de lo contrario no comen", pero en otros, para sostener la representación de una migración exitosa.

También las remesas cobran una mayor importancia por la organización que los senegaleses conforman a partir de las dahíras,16 es decir, reuniones semanales que realizan en el marco de la fe musulmana sufí, en las que se reza, se discuten los asuntos problemáticos que tienen en la vida cotidiana, pero también se reúne dinero, ya sea para costear el viaje del líder espiritual, o bien para enviar a la ciudad santa de Touba en Senegal.

Los actos de racismo y discriminación que sufren los migrantes senegaleses también dificultan su vida en Argentina, principalmente durante las largas jornadas de venta en las calles, en las que son blanco de bromas y agresiones verbales por parte de la población, así como de acoso por parte de la policía ‒solicitud de coimas, decomiso de artículos. Estos hechos han llevado a la comunidad senegalesa a manifestarse mediante una denuncia conjunta contra la policía y fiscalía federal y marchas bajo la consigna "no al racismo".17 La discriminación también se manifiesta en las dificultades que encuentran aquellos senegaleses que desean insertarse en otros ámbitos laborales por fuera de la venta ambulante y no logran hacerlo por las trabas burocráticas existentes para legalizar sus títulos, así como los prejuicios de muchos empleadores que relacionan África=falta de educación.18 Es por ello que la comunidad despliega sus redes de ayuda para que los recién llegados puedan insertarse y obtener el sustento mediante un préstamo de mercadería para la venta ambulante y la enseñanza de dicha actividad.

Se desprende de todo lo antedicho la importancia que la comunidad tiene para los jóvenes senegaleses, tanto en origen como en destino, así como la relevancia del envío de dinero al país de origen bajo diversas circunstancias y motivaciones.

 

Palabras finales

Las representaciones sociales ayudan a comprender el estudio de las migraciones desde un enfoque diferente al utilizado tradicionalmente en los estudios migratorios, al permitir adentrarse en el mundo subjetivo de los actores sociales para poder conocer sus expectativas, anhelos y motivaciones, que se presentan en la realidad cotidiana como consecuencia del abandono del lugar de origen y la movilidad hacia otros destinos.

De esta manera, al hablar sobre lo que la migración representa para los senegaleses en Argentina, se desprenden oportunidades y problemas, siendo grandes las expectativas antes de la salida, y teniendo mayor peso las percepciones negativas en relación al destino, principalmente en lo relativo a las dificultades para insertarse en el ámbito laboral, elemento de suma importancia en una migración donde el envío de remesas a las familias en origen es prioritario.

Otro aspecto importante dentro de la construcción del imaginario sobre la migración es el papel que cumplen las redes de familiares y amigos en el intercambio de información sobre el tema. En el origen, las redes juegan un papel primordial desde el momento en que se concibe la idea de viajar. Funcionan como un facilitador al proveer información y medios para la preparación del viaje, dinero a través de préstamos de familiares y colaboraciones diversas tales como el arreglo de documentos y pasajes y demás factores vinculados al viaje.

También en destino las redes cumplen un papel central, ya que a partir de ellas tienen acceso a la vivienda, el mercado de trabajo, los espacios donde vender la mercadería y también donde adquirirla. Las dahíras son particularmente importantes en este sentido, ya que no son solo un espacio para el rezo sino también para el asesoramiento y la difusión de información práctica sobre las diversas problemáticas que puedan ir aconteciendo en el día a día de los senegaleses en la ciudad.

Es necesario considerar también que las representaciones sociales tienen una gran incidencia en la decisión de migrar, ya que en su construcción tienen relevancia los relatos favorables sobre la situación beneficiosa en la que se encuentran los inmigrantes senegaleses. Ello crea expectativas en el futuro migrante y en su familia, que en muchos casos lo alienta a tomar la decisión. A esto se suma el carácter económico que en muchos casos adquiere la migración, con el envío de remesas y su utilización en la adquisición de casas, terrenos, vehículos y otros bienes que difícilmente podrían ser adquiridos con los ingresos que se obtienen en el país de origen. Esta evidencia material construye la imagen positiva de la migración como respuesta a la crisis económica que se vive en Senegal y a la que referí en el primer apartado.

En este sentido, la mayoría de los migrantes senegaleses presenta, al comunicarse con sus familiares y amigos, una imagen exitosa que pretende no causar preocupaciones. Prefieren seguir manteniendo el discurso positivo sobre el proyecto emprendido, aunque estén enfrentando en muchos casos situaciones difíciles. De esta forma, las representaciones sociales inciden en el propio acto de la migración a la vez que se construyen sobre el mismo proceso.

 

Notas

1. El presente escrito tiene su origen en mi tesis doctoral desarrollada en la Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Buenos Aires, bajo la dirección de la Dra. Marta Maffia y el Dr. Néstor Cohen.

2. No ignoro de esta forma que existen marcadas diferencias al interior de la comunidad que, como todo grupo social, presenta heterogeneidades. Tales distinciones se relacionan, principalmente con las trayectorias laborales y educativas en el país de origen, la constitución familiar y los lugares de procedencia (áreas rurales o urbanas). Sin embargo, esas heterogeneidades no serán trabajadas en el presente escrito debido a que no produjeron distinciones en la construcción de las representaciones sociales que aquí se analizan.

3. Los entrevistados fueron contactados principalmente en la vía pública. Una vez establecidas relaciones de confianza con algunos referentes de la comunidad, fueron ellos mismos quienes facilitaron nuevos contactos para realizar las entrevistas. La mayoría de ellas fueron desarrolladas en las habitaciones de sus hoteles-pensión al finalizar las jornadas laborales. Dado que no todos los migrantes senegaleses hablan francés –su idioma es el wolof–, fue necesario restringir las entrevistas a aquellos que contaban con conocimientos de idioma francés o español.

4. Es una de las tradiciones de investigación cualitativa, que se define como aquella que permite formular una teoría que se encuentra subyacente en los datos obtenidos de la realidad investigada. Asimismo, es definida por sus propios autores como una metodología que "relaciona datos de manera sistemática y analizados por medio de un proceso de investigación" (Strauss y Corbin, 2002: 14). Para desarrollar este proceso, realicé inicialmente una codificación abierta según la metodología de Strauss y Corbin (2002) para estimular el descubrimiento de categorías, propiedades y dimensiones de análisis. Posteriormente implementé la codificación selectiva en la búsqueda de un proceso de reducción de categorías, facilitando el entrelazamiento de codificación-grillado, análisis de contenido de los discursos e interpretación de la información obtenida.

5. Al definir de esta manera al concepto de habitus, Borudieu (2012) intenta salvar aquella dicotomía presente en las ciencias sociales entre objetividad y subjetividad. En sus escritos, el autor plantea que es en la unión del habitus (historia hecha cuerpo) y del campo (historia hecha cosa) donde se presenta el mecanismo principal de la producción del mundo social. Esa conjunción se logra mediante un movimiento de interiorización del exterior (habitus/clases de habitus) y de exteriorización de lo interior (campos/campos de fuerzas y luchas). Bourdieu otorga cierta primacía a las estructuras objetivas de las dimensiones objetiva y construida de la realidad social, que constituyen tanto el fundamento de las representaciones subjetivas como los constreñimientos estructurales que pesan sobre las interacciones (Corcuff, 2005).

6. En la región de Dakar se concentraba, a finales de la década de 1990, casi el 30% de la población del país. En año 2005 esta cifra se situaba en torno al 23%. Entre el año 2002 y 2005, el ritmo de crecimiento de la región de Sant-Louis ha sido superior al 8%. Véase http://www.statoids.com.

7. De acuerdo a los datos publicados por el Ministerio de Asuntos Exteriores de Francia, en 2006 las migraciones intra-regionales en la zona del África Subsahariana Occidental supusieron el 90%, es decir, superaron en nueve veces a las extra-africanas que se dirigen hacia Europa o Estados Unidos. Las migraciones en África Occidental están constituidas principalmente por trabajadores que se dirigen hacia las plantaciones de cacahuete de la cuenca del río Senegal; a la Office du Níger (organismo responsable de la gestión del riego de millones de hectáreas en Malí); a los campos de regadío en el Valle del Senegal; a las producciones de cacao y café de Costa de Marfil y Ghana; y a los puertos industriales de Porto Novo y Port-Harcourt en Nigeria (Alvear Trenor, 2008).

8. Según Jabardo Velasco, en la década de los sesenta el gobierno francés comenzó a reclutar senegaleses, malienses y mauritanos para crear una "fuerza móvil de trabajo", bajo sistemas de reclutamiento temporal y con restricciones a la entrada de familiares. Francia veía en esos países del África Occidental "el granero que había perdido después de la guerra de Argelia" (Jabardo Velasco, 2005:86).

9. Sobre este tema también pueden consultarse los trabajos de Montero (2006), para la emigración de ecuatorianos a España y Estados Unidos; Novick (2007), respecto a la emigración de argentinos a España y el estudio de Portes et al (2003) sobre la emigración de países centroamericanos hacia los Estados Unidos, entre otros.

10. Argentina ha cerrado su embajada en Senegal en el año 2002 durante el breve mandato del presidente Eduardo Duhalde y desde entonces la solicitud de visado deben realizarla a través de Nigeria –uno de los cuatro países en el África subsahariana donde Argentina continúa manteniendo representación diplomática.

11. Durante Enero y Julio de 2013 estuvo en vigencia un plan especial de regularización para migrantes senegaleses y dominicanos. En ese marco fueron regularizados alrededor de 2000 migrantes senegaleses que ingresaron entre 2004 y la fecha en que estuvo vigencia el plan. Asimismo, y de acuerdo al Informe especial de 2014 de la Dirección Nacional de Migraciones, entre Enero y Diciembre de 2014 se resolvieron 3170 radicaciones temporarias de senegaleses –cabe destacar que no todas fueron en el marco del Plan de regularización.

12. La blanquedad argentina es el resultado de una construcción, de una narración oficial que se ancló en procesos reales que estaban ocurriendo en aquel entonces en el país. Fueron decisivas para la construcción de este relato las masivas migraciones transatlánticas del siglo XIX y comienzos del XX; pero también fue necesario invisibilizar a africanos, afrodescendientes y pueblos originarios. Ello fue realizado no sólo mediante un exterminio físico, sino también a través de la manipulación de las categorías censales y la negación de sus producciones culturales. Para más detalle en el tratamiento de estos temas ver Reid Andrews (1989), Solomianski (2003), Frigerio (2006); entre otros.

13. Esta situación se ha visto modificada entre marzo y abril de 2016, al ponerse en marcha diversos operativos policiales en los barrios porteños de Flores y Caballito que prohiben la venta ambulante.

14. Entrevista realizada junto a Silvina Agnelli en el marco del proyecto de investigación PIP (5163) Conicet "Nuevos inmigrantes en la Provincia de Buenos Aires y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires". Universidad Nacional de la Plata. Directora: Dra. Marta Maffia. Marzo de 2008 a Septiembre de 2009.

15. Término popular en la Argentina, de uso coloquial, que denota la referencia a una persona tonta, estúpida o idiota; pero no siempre implica esa connotación de insulto o despectiva. Se usa como fórmula de tratamiento entre jóvenes que tienen algún grado de confianza entre ellos.

16. En Senegal, la religiosidad musulmana (mayoritaria) se manifiesta principalmente a través de las hermandades religiosas sufíes (también llamadas dahíras), que poseen un enorme poder de unión entre la población senegalesa, fenómeno que se reproduce en la emigración al exterior. En Argentina, a pesar de existir diferentes cofradías religiosas, la cofradía Mouride es la que posee mayor cantidad de fieles (al igual que en Senegal) seguida en número por la cofradía Tidjane.

17. Las representaciones en relación a la población argentina han sido analizadas en otros trabajos de la autora. Para ampliar este tema ver Kleidermacher (2013).

18. Este tema ha sido ampliamente desarrollado en mi tesis doctoral mediante la aplicación de una encuesta a la población nativa residente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Puede consultarse en Kleidermacher (2015).

 

Bibliografía

1. ALTAMIRANO, Teófilo. 1996. Migración: el fenómeno del siglo. Lima: PUCP-Fondo Editorial.         [ Links ]

2. ALONSO, Farah y HERRERA, Carmen. 2010. "Evolución y perspectivas de países subdesarrollados africanos. El caso de Senegal". Actas de la XII Reunión de Economía Munidál, Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Santiago de Compostela, Santiago de Compostela, del 26 al 28 de mayo de 2010. http://www.usc.es/congresos/xiirem/pdf/43.pdf (15 de Noviembre de 2014).         [ Links ]

3. ALVEAR TRENOR, Beatriz. 2008. Los flujos migratorios actuales en África Subsahariana: el predominio de la migración intra-africana sobre la extra-africana. Serie Documento de Trabajo, Nº 50. Real Instituto Elcano.         [ Links ]

4. BERGER, Peter y LUCKMANN, Thomas. 2011. La construcción social de la realidad. Buenos Aires: Amorrortu.         [ Links ]

5. BOURDIEU, Pierre. 1988. La distinción. Criterios y bases sociales del gusto. Buenos Aires: Taurus.         [ Links ]

6. BOURDIEU, Pierre. 2012. Bosquejo de una teoría de la práctica. Buenos Aires: Prometeo Libros.         [ Links ]

7. CORCUFF, Philipe. 2005. Las nuevas sociologías. Madrid: Alianza Editorial.         [ Links ]

8. FRIGERIO, Alejandro. 2006. "‘Negros’ y ‘Blancos’ en Buenos Aires: Repensando nuestras categorías raciales". Temas de Patrimonio Cultural, 16: 77-98.

9. GOYCOECHEA, Alba. 2003. Los imaginarios migratorios. Quito: Ediciones Abya-Yala.         [ Links ]

10. HALL, Stuart. 2010. "El espectáculo del ‘otro’". En: Textos de antropología contemporánea. Madrid: Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). pp. 75-94.

11. JABARDO VELASCO, Mercedes. 2005. "Migraciones y género. Cuando el continente africano se hace pequeño". Revista española de Desarrollo y cooperación, 16: 81-98.         [ Links ]

12. JODELET, Denise. 1986. "La representación social: fenómenos, conceptos y teoría". En: S. Moscovici (Comp.). Psicología social. Barcelona: Paidós. pp. 469-493.         [ Links ]

13. KABUNDA BADI, Mbuyi. 2007. "Las migraciones africanas: más horizontales que verticales". Revista Pueblos, 28. http://www.revistapueblos.org/spip.php?article671 (20 de noviembre de 2009)        [ Links ]

14. KLEIDERMACHER, Gisele. 2013. "Entre cofradías y venta ambulante: Una caracterización de la inmigración senegalesa en Buenos Aires". Cuadernos de Antropología Social, 38: 109-130.         [ Links ]

15. KLEIDERMACHER, Gisele. 2015. Miradas sobre la otredad. Producción de representaciones sociales en torno a migrantes senegaleses y argentinos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (2010-2014). Tesis de doctorado. Universidad de Buenos Aires.         [ Links ]

16. MAFFIA, Marta. 2010. "Una contribución al estudio de la nueva inmigración africana subsahariana en la Argentina". Cuadernos de antropología social, 31: 7-32.         [ Links ]

17. MONTERO, Gabriela. 2006. "Las representaciones sociales de los emigrantes ecuatorianos en España sobre el proceso migratorio". Revista Alternativas, 14: 35-48.         [ Links ]

18. MORA, Martín. 2002. "La teoría de las representaciones sociales de Serge Moscovici". Revista Athenea Digital, 2: 1-25.         [ Links ]

19. MORENO MAESTRO, Susana. 2006. Aquí y allí, viviendo en los dos lados. Los senegaleses de Sevilla, una comunidad trasnacional. Sevilla: Junta de Andalucía, Consejería de Gobernación.         [ Links ]

20. MORENO MAESTRO, Susana y ARIS ESCARCENA, Juan Pablo. 2013. "La pesca en Senegal. Entre el mercado global y la subsistencia comunitaria". Revista andaluza de Antropología, 4: 103-121.         [ Links ]

21. NOVICK, Susana. 2007. Sur-Norte. Estudios sobre la emigración reciente de argentinos. Buenos Aires: Catálogos.         [ Links ]

22. OFECOME. 2015. Ficha país. Senegal: Dirección de Previsión y Estudios Económicos, Ministerio de Economía y Finanzas (MEFP).         [ Links ]

23. PORTES, Alejandro, GUARNIZO, Luis y LANDOLT, Patricia. 2003. La globalización desde abajo: Transnacionalismo inmigrante y desarrollo. La experiencia de Estados Unidos y América Latina. México: FLACSO.         [ Links ]

24. REID ANDREWS, George. 1989. Los Afroargentinos de Buenos Aires. Buenos Aires: Ediciones de la Flor.         [ Links ]

25. SAYAD, Abdemalek. 2010. La doble ausencia. Barcelona: Anthropos.         [ Links ]

26. SOLOMIANSKI, Alejandro. 2003. Identidades secretas: la negritud argentina. Rosario: Beatriz Viterbo Editora.         [ Links ]

27. STRAUSS, Anselm y CORBIN, Juliet. 2002. Bases de la investigación cualitativa.Medellín: Universidad de Antioquía.         [ Links ]

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons