SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 número24A doscientos años, cuentas estatales por saldar ante la Corte Interamericana de Derechos HumanosLos desafíos del desarrollo argentino: reflexiones desde el Bicentenario índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Estudios - Centro de Estudios Avanzados. Universidad Nacional de Córdoba

versión On-line ISSN 1852-1568

Estud. - Cent. Estud. Av., Univ. Nac. Córdoba  no.24 Córdoba dic. 2010

 

ARTÍCULOS ORIGINALES

La Fundacion Mediterránea: burguesía industrial y asociaciones corporativas: pasado y presente1

Julio C. Gambina2

 


Resumen:
La inserción de la Argentina al sistema capitalista concretada hacia fines del Siglo XIX, conllevó la estructuración de la  relación capital trabajo que fue mutando simultáneamente con el modo de producción. Así, la burguesía se asoció sistemáticamente a los diferentes proyectos políticos dominantes, en tanto que los trabajadores desarrollaron estrategias y alianzas para superar su condición de explotación. En esa dinámica de lucha de clases, el golpe de Estado de 1976 modifica sustancialmente el modelo de desarrollo del país en el capitalismo mundial, dando paso a una ofensiva contra los trabajadores que se verá reflejada elocuentemente en indicadores como la distribución funcional del ingreso medida en términos históricos.
Las clases dominantes han dispuesto de los recursos económicos para crear y mantener intelectuales e instituciones orgánicas que sean funcionales al modelo y colaboren con la creación de consenso desde el ámbito «académico».
El caso estudiado en este artículo es la Fundación Mediterránea, con vínculos desde el origen con la dictadura genocida del 76 que dejó su sello en las regresivas transformaciones estructurales que aún persisten.

Palabras claves: Fundación Mediterránea; Capitalismo; Burguesía; Hegemonía.

Abstract:
Argentina's insertion into the capitalist system materialized by the end of the nineteenth century, led to the structuring of the  capital work that was mutating simultaneously with the mode of production. Thus, the bourgeoisie was consistently associated with different dominant political projects, while workers developed strategies and alliances to overcome their condition of exploitation.
In this dynamic of class struggle, the coup of 1976 substantially modified the country's development model on global capitalism, leading to a crackdown on workers who will eloquently reflected in indicators such as functional income distribution as historical terms.
The ruling classes have provided the financial resources to create and maintain organic intellectuals and institutions that are functional to model and collaborate with the creation of consensus from the field of «academic.»
The case studied in this paper is the Mediterranean Foundation, with links from the source to the genocidal dictatorship of 76 he left his stamp on the regressive structural changes persist.

Key words: Mediterranean Foundation; Capitalism; Bourgeoisie; Hegemony.


 

I - Introducción

La Argentina ingresó en forma tardía y dependiente al sistema mundial del capitalismo. La revolución de mayo levantaba el programa que había sustentado el ideario y práctica del «librecambio», esencia de la concepción renovada que aportaban los clásicos de la economía política y la vanguardia burguesa (mundial) que condenaba al pasado las tradiciones mercantilistas y que en nuestros territorios luchaba contra los legados del atraso que suponía la continuidad de la subordinación a la corona española.

Argentina conmemora en 2010 el bicentenario de una revolución que pretendía el desarrollo de un país independiente. Eran momentos en que el sistema mundial del capitalismo extendía su régimen económico y social a escala mundial bajo el liderazgo de Gran Bretaña. El Reino Unido no había podido reemplazar la dominación española en estas partes de la colonia ibérica pese al intento invasor de 1806 y 1807. El camino seleccionado por la nación de los piratas transformados en «señores» fue el contrabando de su producción y la asociación a la demanda de la incipiente burguesía comercial en el Río de la Plata. Todo bajo la bandera de la libertad de comercio.  Manuel Belgrano traducía al fisiócrata Francoise Quesnay (1694-1774) y su «Tableau economique» de 1758, el primer intento por describir el funcionamiento del sistema económico. El librecambio y la fisiocracia eran en estos territorios la puerta de ingreso al capitalismo consolidado en los principales países desarrollados, donde la revolución industrial ya tenía historia. En el nuevo país se comenzaba un trayecto hacia la acumulación capitalista burguesa. Había llegado al sur del continente la hora del librecambio, sostenida teóricamente desde 1776 por la Economía Política (Adam Smith) y políticamente por la revolución independentista de las colonias británicas en el norte de América.

Nuestro país ingresó con pretensión autónoma al sistema capitalista mucho después de la instalación hegemónica del régimen del capital en el sistema mundial. Es cierto que el proceso de constitución capitalista en el país no se completará sino hacia 1880, con la definición de su territorio tal como hoy lo conocemos; la capitalización de la ciudad de Buenos Aires; y la conformación de una clase dominante articulada entre el capital externo (Ferrocarriles, Frigoríficos y Bancos), y el poder terrateniente, asociado a una burguesía comercial y financiera local en expansión. Fueron siete décadas de una acelerada acumulación originaria del capitalismo local, que disparó el desarrollo de las fuerzas productivas hacia el centenario (1910), inspirando la imaginación de algunos grandilocuentes que supusieron un destino para el país entre las máximas potencias mundiales.

Los británicos forjaron su acumulación entre los Siglos XIV y XVI, expandieron su hegemonía mundial y una de sus colonias, Estados Unidos, se había independizado en simultáneo con la formación del Virreinato del Río de la Plata en 1776. Para el centenario de la Argentina, EEUU es parte del «nuevo capitalismo» que disputa hegemonía al «viejo», antiguo y decadente socio de la «Argentina potencia». Todavía en 1932, con el pacto Roca-Runciman, las clases dominantes de la Argentina -a contrapelo de la historia- negociaban la subordinación a Londres. El resultado ya lo conocemos: la dependencia mutó hacia EEUU y con ello, cambió el bloque social en el poder. El capital estadounidense y la burguesía industrial se transformarían en los organizadores económicos de la sociedad en Argentina, claro que subsistiendo un importante peso de los grandes propietarios de la tierra.

El surgimiento del capitalismo gestó a sus clases sociales más importantes, al proletariado y a la burguesía, en una disputa de siglos que reorganizó la civilización mundial y sus poblaciones. Con la Revolución de Mayo en 1810 recién comenzó el proceso social de constitución de condiciones materiales para una inserción pretendidamente «autónoma» en el capitalismo global. Fue una aspiración rápidamente abortada en las luchas por la organización nacional que se proyectarán hasta 1880 con la definida inserción subordinada de la Argentina en el sistema mundial del capitalismo.

Nuestro país llegó atrasado al régimen del capital, cuando ya se había terminado la primera etapa de libre concurrencia con la dominación de los monopolios hacia fines del Siglo XIX. Los monopolios son los que definen la etapa imperialista y de transnacionalización actual. La clase obrera europea se conformó sobre el desplazamiento de la población rural hacia las urbes, y el crecimiento de la manufactura y la industria «a sangre y fuego», como señala Marx en el capítulo de su máxima obra, sobre la «acumulación originaria del capital». La gestación de la clase de los trabajadores en la Argentina estará atravesada por la destrucción de la población originaria en los nuevos territorios incorporados y con un proceso de inmigración que se registra como de los más numerosos mundialmente en ese tiempo (1850-1925).

Las clases sociales locales están influidas desde su surgimiento por la experiencia de la lucha de clases en el capitalismo europeo. La violencia sistémica constituyó al capitalismo en Europa, recorriendo el mismo sendero en el país, con las sucesivas «conquistas del desierto» o las múltiples represiones a la organización de los trabajadores, coronadas en torno del centenario con el «estado de sitio», y luego, las masacres de la Semana Trágica, de la Patagonia, o de la Forestal, por mencionar las más emblemáticas.

¿Es necesario recordar la gestación violenta del capitalismo local y su continuidad de terror3? Es imprescindible, pues tampoco puede entenderse la problemática actual de la economía en Argentina y su inserción mundial contemporánea, sin procesar el significado de la violenta reestructuración del Estado, de la economía y de la sociedad, ocurrido en la dictadura genocida desde 1976, aún antes con el accionar de las «Tres A» bajo gobierno constitucional4. En este proceso se constituyeron corporaciones y grupos de poder y contrapoder que explican la historia de la lucha de clases en Argentina.

 II - La «burguesía nacional» y el proyecto de capitalismo autónomo

La burguesía industrial asociada a un proyecto de capitalismo autónomo, si es que esto fuera posible, se desarrolló en el periodo de la industrialización sustitutiva de importaciones (ISI) entre la década de 1920 y fines de los años 70´.

Esa burguesía está asociada a los proyectos políticos del periodo y adquiere relevancia como categoría política, de modo especial con el peronismo (dos periodos entre 1945-55 y otro entre 1973-76). La asociación entre movimiento obrero, burguesía nacional (con predominio industrial) y fuerza militar constituye la base social y política de un proyecto con importante visibilidad social y apoyo mayoritario en la sociedad argentina desde fines de la primera mitad del Siglo XX y que bajo otras circunstancias (sociales, políticas, ideológicas) subsiste terminada la primera década del Siglo XXI. Hace varios años que el peronismo actúa en el oficialismo y en la oposición, a veces hegemonizando ambos polos de la ecuación política.

La especificidad de esos proyectos de «capitalismo nacional» radicaba en su orientación al desarrollo interno y desde allí se proyectaba la intención de actuar en el escenario mundial. Entre otros aspectos, era el fundamento de la tercera posición en política internacional, pues podía negociar con los «dos mundos» existentes: el capitalismo y el socialismo.

Es con la Confederación General Económica5, la CGE de los años 70, liderada por José Ber Gelbard6, a la sazón Ministro de Economía del último gobierno de Juan D. Perón (1973-74), cuando el proyecto de capitalismo autónomo adquiere mayor protagonismo. Es el momento del pacto social, entre el gobierno, la CGE y la Confederación General del Trabajo (CGT); y de una política económica que privilegió el desarrollo del mercado interno, lo que suponía resolver ganancias para sus emprendimientos y salarios en condiciones de pleno empleo bajo el supuesto del desarrollo y promoción del comercio interior. Es el aliento a un programa de acumulación que se enfrentará con la realidad de transnacionalización de la economía argentina7.

La cuestión de la «burguesía nacional» es un concepto discutido aún en el periodo mencionado, habiendo autores (el mencionado Paz entre otros) que señalaban que ante la ausencia de un actor nacional hegemónico entre los empresarios -en un contexto de dominación transnacional en los tempranos años setenta- la función de «burguesía nacional» debía ser asumida por el Estado nacional, claro que bajo orientación del peronismo en el gobierno; del peronismo como movimiento nacional y popular, lo que supone en sí mismo la discusión sobre el fenómeno político y cultural que expresa el peronismo, ayer y hoy.

El golpe de Estado de 1976 modifica sustancialmente el modelo de desarrollo e inserción de la Argentina en el capitalismo mundial, confirmando el rumbo de la transnacionalización. Ya no será el mercado interno el móvil principal de la actividad económica, mucho menos de la política económica, sino que la apertura al mercado mundial será una de las banderas de los ideólogos golpistas de la genocida dictadura que se extendió entre 1976 y 1983. Los gobiernos constitucionales que se sucedieron desde diciembre del 83 a la actualidad (2010) no han modificado sustancialmente esa orientación de la forma de desarrollo económico social de la Argentina. Las leyes de inversiones externas y de entidades financieras de la dictadura generaron las condiciones para una profundización de la subordinación al proceso de transnacionalización de la economía local. De ese modo se procesa la apertura al ingreso de capitales foráneos, vía Inversión Externa Directa (IED) ó Préstamos (Deuda Externa), y con la salida de empresas locales al exterior para ampliar la frontera de la acumulación, todo lo cual se consolidó en los años 90´ con las leyes de Reforma del Estado y de Emergencia Económica, que habilitaron junto a la institucionalización de la seguridad jurídica de las inversiones externas, tratados bilaterales de inversión mediante, la extranjerización y transnacionalización de la economía local.

La burguesía hegemónica en la Argentina es ahora transnacional. A sólo modo de prueba puede estudiarse la situación de dos empresas emblemáticas: ARCOR y TECHINT, productoras de caramelos y acero respectivamente. Ambas surgidas en la Argentina, la primera en el interior cordobés, hoy son principales actores de la economía mundial, liderando en sus respectivos rubros.

ARCOR, indica en su sitio de internet ser el «primer productor mundial de caramelos y el principal exportador de golosinas de Argentina, Brasil, Chile, y Perú. Y a través de Bagley Latinoamérica S.A. es la mayor empresa de galletas de América del Sur»8. El Grupo TECHINT, incluye entre sus empresas a «Tenaris, líder global en la producción de tubos de acero y servicios para la industria del petróleo y gas, y para aplicaciones industriales y automotrices especializadas; Ternium, líder latinoamericano en la provisión de aceros planos y largos, producidos en tres plantas integradas de nivel mundial ubicadas en Argentina, Venezuela y México; Techint E&C, un grupo de empresas de ingeniería y construcción especializadas en grandes proyectos de infraestructura, industriales y civiles; Tenova, uno de los mayores proveedores mundiales de tecnologías, productos y servicios de vanguardia para las industrias metalúrgica y minera; Tecpetrol, una empresa de exploración y producción de petróleo y gas, que a su vez promueve y opera redes de transmisión y distribución de gas natural en América Latina; Humanitas, una red en Italia de instituciones de salud de alta complejidad orientadas a la investigación(...)»9

Entre 1975 y 2010 se procesa la mutación transnacional de la «burguesía nacional ». Es discutible aún a mediados de los 70´ el carácter nacional de la burguesía en Argentina, pero aceptemos la calificación en función del proyecto político asumido en articulación con el mayor partido político del país, el peronismo, y especialmente con los trabajadores, altamente organizados, para entonces, en la CGT. Si era posible o no el capitalismo nacional es otro problema, que no interesa al efecto de las presentes reflexiones. El imaginario hegemónico del proyecto de gobierno entre 1973 y 1974 era así percibido. A modo de ejemplo, puede asociarse ese tiempo al momento liberador de la Universidad Pública, intervenida entre 1966 y 1973 (anulando la autonomía) y colonizada por el proyecto fascista10 de Oscar Ivanisevich11 y Alberto Ottalagano12. El proyecto de capitalismo autónomo era asociado a la consigna «liberación o dependencia», que se manifestaba en la lucha universitaria, sindical y de la sociedad en su conjunto.

En función de lo que venimos diciendo, en un estudio sobre los sectores dominantes en la región latinoamericana, se afirma que «(E)l modelo desarrollista latinoamericano suponía una burguesía nacional que se fortalecía y luego pasaba a conquistar el mercado mundial mediante la exportación de sus productos desde las unidades productivas ubicadas en el país, o un capitalismo de Estado que cumplía, en mayor medida, las mismas funciones. Esa burguesía ha desaparecido como actor económico relevante» A continuación señala que el Estado puede jugar un papel importante si es capaz de «adquirir la autonomía necesaria para disciplinar al capital mediante la activación de los sectores populares.» (Basualdo y Arceo; 2006:25) Esta última consideración es de vital importancia para pensar en las transformaciones socioeconómicas terminada la primera década del Siglo XXI, especialmente con una crisis de la economía mundial capitalista. El Estado sigue siendo sujeto en disputa por las clases dominantes y las subalternas, claro, para proyectos contrapuestos de desarrollo social.

En otro artículo más reciente, Basualdo alude a las reformas estructurales a fines de los 70´ en Argentina, señalando que «dentro de los funcionarios que implementaron las reformas se cuentan destacados «intelectuales orgánicos» (en el sentido gramsciano del concepto) provenientes tanto de la oligarquía porteña como de las burguesías u oligarquías provinciales, que en reiteradas ocasiones integraban las fundaciones o institutos financiados por capitales extranjeros y nacionales.» (Basualdo; 2009:327) A continuación señala en una cita el ejemplo de FIEL13, la Fundación Mediterránea14 y el CEMA15. Vale mencionar que la dictadura genocida del 76 persiguió a los principales dirigentes gremiales de los trabajadores y del empresariado nacional, interviniendo y prohibiendo el accionar de esas organizaciones corporativas. Habilitaron así el accionar de viejas y nuevas corporaciones de las clases dominantes que influirán en la configuración del régimen político, económico y social vigente, esencialmente, hasta nuestros días.

Dice Basualdo en el texto citado «...si bien FIEL es la institución más tradicional por haber sido fundada en los años sesenta, durante el periodo analizado surgen otras como la Fundación Mediterránea y el CEMA. En la organización y financiación de la primera tuvo un papel protagónico el grupo económico local Arcor (líder en la producción de alimentos), y es conocida popularmente porque de allí proviene D. Cavallo, funcionario de la dictadura y ministro de los gobiernos constitucionales peronistas que le sucedieron en la década del noventa y el de la Alianza hasta el 2001.» Acerca del CEMA dirá que «...tuvo como impulsor al grupo económico de la provincia de Mendoza Catena Zapata, líder en la producción vitivinícola (vino tinto) junto a la empresa francesa Chandon (vino blanco).» (Basualdo; 2009:327)

La burguesía hegemónica otorgó función a sus cuadros intelectuales mediante organizaciones académicas que formulaban objetivos generales de contenido «neutral » y bajo formas organizativas no lucrativas. Fueron y son ámbito de articulación de profesionales y gerentes para un Estado que necesitaba «modernizarse» en aras del nuevo patrón de acumulación instalado a sangre y fuego entre 1975 y 1976.

III - La Mediterránea y sus aportes

Estos comentarios introductorios nos son de utilidad para enmarcar la emergencia de la Fundación Mediterránea (FM). Nada mejor que recorrer su propia presentación en internet16.

Allí leemos, respecto de sus «orígenes y objetivos», que la FM «es una asociación civil sin fines de lucro creada en la ciudad de Córdoba, República Argentina, el 6 de Julio de 1977, por iniciativa de 34 empresas de la provincia de Córdoba, convocadas por el señor Pedro Astori, con el objeto de: promover la investigación de los problemas económicos nacionales; contribuir al mejor conocimiento y solución de los problemas económicos latinoamericanos; crear un foro apartidista donde se discutan los grandes problemas nacionales y latinoamericanos; donde hombres estudiosos aporten su inteligencia para diseñar soluciones económicas con el solo condicionamiento impuesto por la adhesión irrenunciable al respeto de la libertad y dignidad de la persona humana.»

Cada manifestación podría habilitar un comentario, pero concentrémonos sólo en algunos de ellos. El primero e insoslayable es la fecha de fundación, a casi un año y medio de iniciado el gobierno genocida. Toda formulación de objetivos está atravesada por el contexto histórico que supone la dictadura. Es bajo el imperio del terror de Estado que se habla de un «foro apartidista», con partidos políticos prohibidos y el temor instalado en la sociedad, por torturas, desapariciones y diversas formas de intimidación a la sociedad, especialmente a la parte organizada del movimiento popular.

Resulta curioso la mención al «irrenunciable respeto de la libertad y dignidad de la persona humana», cuando la libertad y dignidad eran avasalladas por la persecución política, la conculcación de derechos sociales y económicos, el deterioro de la calidad de vida vía reducción de salarios, afectación del derecho laboral y de huelga, la flexibilización laboral y salarial, el empobrecimiento, el desempleo y el subempleo.

Entre el 2 de abril de 1976 y la fundación de la FM, se ejecutaba el Plan Económico de la Dictadura bajo la dirección de José Alfredo Martínez de Hoz, que sustentaba su política en la concepción de modernizar la economía argentina. En su Plan, dice el ex ministro que es el «primer objetivo básico el «Bienestar Humano» engarzado en el contexto general del Bien Común. El concepto de bienestar tiene una faz espiritual y una faz material. La primera se vincula con tres principios que hacen al fundamento de la concepción de los valores humanos: libertad, justicia y solidaridad» (Martínez de Hoz; 1981:16). Luego completará el pensamiento aludiendo como segunda la concepción sobre «...el progreso económico, tanto en el orden individual como en el nacional, dependerá del esfuerzo propio de cada uno, organizado en el contexto de reglas generales y objetivas que eliminen la distribución discrecional y arbitraria del favor oficial por un Estado paternalista» (Martínez de Hoz; 1981:17)

El lenguaje de los fundadores de la FM es similar al del primer ministro de la economía de la dictadura, que no en vano mostraba como antecedente la presidencia de Acindar (Grupo Arcelor Mittal17) principal empresa productora de acero en el país, y la titularidad del Consejo Empresario Argentino, corporación que reunía a los empresarios del capital más concentrado en la Argentina (hoy se expresa como Asociación Empresaria Argentina18). Los vínculos con los golpistas eran previos a la asunción del dictador Videla, puesto que el ensayo terrorista se realizó, entre otros, en la represión al movimiento anti burocrático en Villa Constitución19.

Pero volvamos a la Fundación Mediterránea. A fin de cumplir con los objetivos anteriormente enunciados, se creó el Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana, el IEERAL, «con un equipo de economistas profesionales dedicados a tiempo completo a la tarea de investigación». Se proponían estudios para «un país próspero», con «igualdad de oportunidades» y «con una economía integrada, dinámica y eficiente, que asegure un continuo mejoramiento de la calidad de vida de todos los argentinos». Se pronunciaban con énfasis en la centralidad de la «estabilización económica». En el pronunciamiento original convocaban a investigaciones «en condiciones de absoluta resignación de intereses sectoriales o de grupos, a favor del interés general de la Nación Argentina».20

Son formulaciones en línea con los dichos del ex ministro de la dictadura, pero con énfasis en la preparación de un equipo profesional para la función de gobierno y la influencia en la «academia». La preocupación por formar cuadros de gobierno (es un tema para insistir) será una preocupación central, para lo cual «invertirán» recursos y convocarán a profesionales e intelectuales con voluntad de poder, especialmente confirmado con la designación de Cavallo (con formación de posgrado en la Columbia University de Nueva York, EEUU) al frente del Instituto de estudios (IERAL).

Es muy aleccionador como, luego de más de tres décadas del gobierno de la dictadura se reivindiquen aquellos años del inicio de la actividad de la Fundación Mediterránea. Señalan para el 2006 (fecha de actualización de la página en internet) que desde «su creación hasta 1982 desarrolló una amplia tarea de investigación que fue difundida a los miembros de la Asociación de Economía Política y a todos los sectores empresarios. Durante toda esa época la Institución fue conducida por los señores Pedro Astori y Fulvio Pagani, alternadamente. El Instituto creado por la Fundación Mediterránea fue dirigido por el Dr. Domingo Felipe Cavallo. La amplia labor de investigación realizada por el Instituto, además de la presencia del Dr. Domingo Cavallo, convocado por el Gobierno Nacional para ejercer importantes funciones que permitieron la aplicación de numerosas propuestas del Instituto, motivaron a empresarios de todo el país a crear filiales de la Fundación Mediterránea en todas las regiones del país».21

Esa convocatoria en la que se alude a Cavallo fue la presidencia del Banco Central en un periodo clave para la estatización de la deuda privada, un fenómeno iniciado previamente a la gestión del economista mediterráneo, pero que se prolongó bajo su presidencia, constituyendo una de las grandes estafas que aún hoy soporta el presupuesto estatal a costa de otras erogaciones que serían necesarias para atender insatisfechas necesidades sociales. Es motivo de orgullo para los mediterráneos que su gente haya sido convocada para asumir funciones durante la Dictadura, dicho luego de los Juicios a la Junta en 1985 y la anulación de las leyes de la impunidad, el punto final y la obediencia debida en 2003. La novedad es ahora el enjuiciamiento a Martínez de Hoz luego de la declarada inconstitucionalidad del indulto otorgado oportunamente por Menem.

Más delante, la FM realizará el panegírico de las ventajas para investigadores y empresarios, al margen de cualquier comentario sobre la época y represión a los propios empresarios y sus organizaciones de articulación empresarial o política, tema por el cual se concreta el encarcelamiento del otrora poderoso ministro de Videla. Esa actitud de reconocimiento a su capacidad de influir (incidencia, lobby) en tiempos del Terrorismo de Estado, se ratifica inmediatamente resaltando que «(E)n enero del año 1991, el Dr. Domingo Felipe Cavallo ocupa el Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos de la Nación, llevando como colaboradores a los principales investigadores del Instituto. Desde el 30 de enero de 1991 hasta el 26 de julio de 1996 se dedicaron a la reorganización económica nacional, dejando el país décadas de decadencia, restableciendo la vigencia del presupuesto, estabilidad monetaria, apertura de la economía, aumento sustancial de la productividad y crecimiento vigoroso.»22

Se hacen cargo así de la incorporación de sus cuadros profesionales e intelectuales en la configuración de la economía regresiva de la década del 90´, con graves secuelas en la dimensión social, la pobreza, la indigencia y el desempleo, la informalidad laboral y la flexibilización de las relaciones laborales.

Más aún, asumen el discurso de Cavallo al momento de renunciar, cuando señalan que «(C)ulminada esta etapa, otras áreas del sector público, tales como: Educación, Salud, Justicia y Seguridad, no tuvieron la misma reorganización que se realizó en el área económica. Estas circunstancias han motivado a la Fundación Mediterránea a modificar sus estatutos sociales para ampliar sus objetivos a investigar las mismas, para proponer soluciones que permitan su reorganización y facilitar la sustentabilidad de la reorganización económica realizada».23 Es lo que se llamará luego «reformas de segunda generación».

En el discurso inaugural difundido (aún en la página en internet) puede leerse que el único «condicionamiento impuesto por la adhesión irrenunciable al respeto de la libertad y dignidad de la persona humana que constituye la esencia de la cosmovisión cristiana del hombre y la sociedad a la que adhiere masivamente el pueblo argentino.» Resulta increíble en 1977 hablar de «respeto a la libertad y dignidad de la persona humana». Pero continúa el discurso inaugural señalando que «hemos vivido al borde de la guerra civil y el colapso económico». Destaca que «Estamos seguros que uniendo el espíritu de progreso al respeto por las tradiciones lograremos la Gran Argentina que todos deseamos.»24

Las valoraciones en tiempo de dictadura (1977) y a la salida de Cavallo del gobierno de Menem (1996) dan cuenta de la adhesión de la FM a las políticas de máxima agresión a los trabajadores y sectores empobrecidos de la sociedad argentina.

IV - Una lectura diferente a la de la Fundación Mediterránea

En un texto de reciente edición fundamentamos junto a Osvaldo Bayer y Atilio Boron la ofensiva del capital sobre el trabajo, con conclusiones bastante diferentes de la realizada por los mediterráneos hacia el 2006 (fecha correspondiente a la actualización del sitio en internet de la FM) Tomamos los gráficos del texto citado por su elocuencia, manteniendo la numeración y citas del original (Bayer y otros; 2010:119 a 124). Para un detalle de los argumentos se puede leer el texto en su conjunto. Otra fuente para abonar en la argumentación que sostenemos es el artículo de Susana Torrado publicado en Le Monde Diplomatique de mayo del 2010.

                                              
Fuente: Esquivel y Maurizio (2005), en Lindemboin (2005)

Gráfico Nº 5 - Evolución de los salarios reales, 1940-2003, 1970=1

Resulta notoria la inflexión desde el comienzo de la dictadura y la clara tendencia a la baja que se opera desde entonces hasta el 2003, última referencia de la gráfica. Es decir que la tendencia ascendente desde los años 40' se revierte claramente desde el accionar de lo que llamamos la «ofensiva del capital», impulsada por la dictadura con la asistencia, entre otros, de la profesionalidad de la Fundación Mediterránea.

Es un proceso agudizado en la década del noventa, con accionar destacado de la administración de Menem y Cavallo, donde la FM actuó plenamente. En sus apreciaciones de este periodo, la FM sostiene argumentos muy elogiosos, resaltando los aportes de su líder académico y equipo, ya que la cohorte acompañante del ministro de economía, gestor del régimen de convertibilidad, fue principalmente proveniente de la Fundación cordobesa.

Fuente: Graña, Kennedy y Valdez; 2008.

Gráfico Nº 6- Evolución del salario promedio en dólares corrientes. 1993-2006

La gráfica presentada es elocuente en el deterioro en la pos convertibilidad cuando, a pesar del crecimiento de la economía luego del 2003, la recuperación salarial no alcanza los niveles de la última etapa del régimen convertible y consolida la disminución estructural del salario en la distribución del ingreso. Este fenómeno puede verificarse claramente en la gráfica Nº 7. Los periodos de recuperación son contrastados por una tendencia regular a la disminución de la participación del salario respecto de las ganancias empresariales en la distribución funcional del ingreso.

La tendencia histórica es declinante, y el periodo que se extiende entre la dictadura y el menemato -años destacados en la valoración de los mediterráneos- constituyen el momento de mayor agresión hacia los trabajadores. Por ello no hay duda de la participación de Domingo F. Cavallo y sus discípulos de la Fundación Mediterránea en ambos periodos, definidos por una gran ofensiva del capital sobre el trabajo.

           

FUENTE: Área de Economía y Tecnología de la FLACSO en base a datos de BCRA, Altimir y Becaria (1999) y Lindemboim, Graña y Kennedy (2005)

Gráfico N° 7 - Distribución funcional del ingreso: participación de los asalariados en el producto bruto interno, 1950-2004.

La interrupción estadística está asociada a las dificultades para reconstruir la serie por limitaciones derivadas de la discontinuación de los datos relativos a distribu¬ción funcional de! ingreso desde los tiempos de la dictadura. La reconstrucción de datos se debe a esfuerzos realizados desde e! campo académico y, recientemente, desde fuentes oficiales.

Más allá de las diferencias en e! método de inducción o deducción de las refe¬rencias, las tendencias de los distintos estudios son convergentes y es lo que pretende asumir esta gráfica construida por Eduardo M Basualdo, del Área de Economía y Tecnología de FLACSO.

Cabe destacar e! importante deterioro en los salarios a partir de la devaluación operada en 2002, deterioro que constituye la base de la importante recuperación de la economía argentina desde e! 2003. El cambio de tendencia que se registra sobre e! final de! periodo mencionado en la gráfica no alcanzará a recuperar las mediciones históricas en la paridad de la distribución funcional entre ganancias y salarios que existían al previa al Terrorismo de Estado.

 

 

Gráfico N° 8 - Evolución de la participación de los asalariados, el PEI Y la masa salarial, 1995 - 2007 (primer semestre) (2001=100)

 Fuente: Basualdo Eduardo (2008) Fuente del Ministerio de Econo11Úa de la Nación y FIDE.

En esta gráfica pueden observarse los 28 puntos que expresan la recuperación de la participación de los trabajadores en la distribución funcional del ingreso, por encima del piso de los 23 puntos que existían en el peor momento de la crisis puesta de manifiesto en ~al2003, la cual resulta expresión de la larga y profunda recesión que atraveso la economía argentina entre 1998 y 2002, Aún así, se encuentra lejos del ya débil registro de 31 puntos en la crisis del 2001. El daño estructural de la ofensiva del capital desde 1975/76 se mantiene pese a relativos momentos de cambio de tendencia que no modifican la regresiva restructuración del orden económico vigente desde hace años.

v - Algunas conclusiones

El recorrido realizado nos permite sacar algunas conclusiones sobre el papel asumido por las corporaciones y grupos de poder. En este sentido cabe destacar que nuestra historia está atravesada por la inserción capitalista de la Argentina en el sistema mundial y, así como Manuel Belgrano es traductor de las nuevas lecturas de la realidad del orden social contemporáneo, cada momento cuenta con una hegemonía intelectual y social que empuja el desarrollo social hacia un rumbo determinado.

En el texto colectivo mencionado, escrito en conjunto con Osvaldo Bayer y Atilio Boron, se pone de manifiesto la influencia y destino imaginado por el pensa¬miento y la práctica de Moreno, Belgrano y Castelli en el desarrollo de esa gesta emancipatoria que asociaba nuestro destino al de otros pueblos de la región y del mundo. Se sostenía un proyecto de emancipación e indef61dencia tempranamente abortado pese a la declaración de la independencia en 18,6. Desde entonces y hasta ahora, las clases dominantes han dispuesto de los recursos e,conómicos para fomentar camadas de profesionales e intelectuales funcionales a sus necesidades.

El accionar de la Fundación Mediterránea se inscribe en esta lógica. Basta sólo con leer sus propias afirmaciones públicas en el sitio oficial de internet. Allí no encontraremos ni una sola crítica al contexto de su surgimiento y desarrollo, como si el país hubiese atravesado, entre 1977 y la actualidad, una etapa de enriquecimiento social.

La declaración de la Asociación Empresaria Argentina, AEA, a propósito del bicentenario sostiene que «un marco institucional republicano sólido, la seguridad jurídica, la previsibilidad, y el pleno respeto a la actividad privada son condiciones indispensables para el desarrollo del país.»25 Se trata de la corporación del capital más concentrado que actúa en la Argentina, entre los cuales figuran los fundadores y sostenedores de la Fundación Mediterránea.

La declaración insiste en conceptos como la «seguridad jurídica» (de los capi¬tales) sin una sola mención al avasallamiento de los derechos de trabajadores y otros sectores empobrecidos y limitados en el ejercicio de derechos constitucionales barri¬dos por la ofensiva del capital. El texto re marca el «respeto a la actividad privada» colocando el énfasis en los intereses específicos del capital.

La FM es expresión de la hegemonía intelectual en el diseño de la Argentina desde la nueva situación generada con el golpe genocida de 1976 y desafia a pensar en términos alternativos, emancipatorios, para hacer realidad a doscientos años el sueño por la emancipación latinoamericana y caribeña.

Notas

1 Este articulo resulta de una ponencia presentada en el Congreso «Corporaciones y grupos de poder en la Argentina del Bicentenario: pasado y presente», organizado por el Doctorado y la Maestría en Partidos Políticos del Centro de Estudios Avanzados de la Universidad Nacional de Córdoba, con aval del CONICET; en junio de 2010.
2 Profesor Titular de Economía Política en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario, UNR. Doctorando en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA. Presidente de la Fundación de Investigaciones Sociales y Políticas, FISYP. Miembro del Comité Directivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, CLACSO

3 La crueldad argentina ha dicho Osvaldo Bayer.
4 Ver el libro de Osvaldo Bayer, Atilio A. Boron y Julio C. Gambina (2010).
5 http://www.cge-argentina.com.ar/ar/catalogo/cge/index.asp
6 Para mayor información acudir al sitio sobre Gelbard organizado por la CGE:
www.josebergelbard.com.ar
7 Ver Pedro Paz (1985)
8 www.arcor.com.ar. Consultada el 26/06/2010.
9 http://www.techint.com/group/es/
10 La «Misión Ivanisevich» introdujo el terrorismo parapolicial por intermedio de las «Tres A» en la Universidad, situación potenciada con la oscuridad universitaria bajo administración dictatorial. El Terrorismo de Estado no sólo barrió con la «Universidad para la liberación» sino que preparó las condiciones para una subordinación del proyecto intelectual a las necesidades de reformulación reaccionaria del proyecto de país en función de la lógica del capital transnacional.
11 Ministro de Educación y Justicia (1974-75) en la Presidencia de María Estela Martínez de Perón, quién sucedió en el gobierno (1974-76) a Perón luego de su muerte.
12 Rector de la UBA designado por Ivanisevich.
13 Fundación de Investigaciones Económicas y Sociales. Institución privada fundada en 1964 y con actividad desde 1966. Información disponible en http://www.fiel.org/
14 Información utilizada en el artículo remite a http://ieral.win-servers.com/data/
15 Surge como Centro de Estudios en 1978, comenzando un Master en Economía en 1980 y conformándose como Universidad en 1995. Información en http://www.ucema.edu.ar/institucional/mision.php
16 http://ieral.win-servers.com/data/. Consultada el 26/06/2010.
17 Información en http://www.acindar.com.ar/
18 Fundada en Mayo del 2002. Arcor y Techint son animadores desde el primer momento y activos involucrados en la toma de decisiones de la organización. Información en http://www.aeanet.net/
19 Información sobre el «Villazo» en el sitio de la UOM de Villa Constitución, en http://uomvc.blogspot.com/2009/03/historia.html
20 http://ieral.win-servers.com/data/default.asp Consultada el 26/06/2010.
21 http://ieral.win-servers.com/data/default.asp Consultada 26/06/2010.
22 Ibídem.
23 Ibídem.
24 Ibídem.
25
http://www.aeanet.net/ Mensaje de AEA con motivo del Bicentenario. 22 de mayo de 2010. Consultado 26/06/2010.

Bibliografía

1. BASUALDO, Eduardo M. (2009), «Evolución de la economía Argentina en el mar¬co de las transformaciones de la economía internacional de las últimas déca¬das». En Arceo Enrique y Basualdo Eduardo (Comps.), Las condiciones de la crisis en América Latina. Inserción nacional y modalidades de acumulación. Buenos Aires: CLACSO libros; Páginas 321 a 382.         [ Links ]
2. BASUALDO, Eduardo M. y ARCEO, Enrique (2006) «Documento inicial del Gru¬po de Trabajo de CLACSO sobre los sectores dominantes: Los cambios de los sectores dominantes en América Latina bajo el neoliberalismo». En Arceo Enrique y Basualdo Eduardo (Comps.), Neoliberalismo y sectores dominantes. Tendencias globales y experiencias nacionales. Brasil: CLACSO libros; Páginas 15 a 26.         [ Links ]
3. BAYER, Osvaldo, BORON Atilio y GAMBINA, Julio (2010), El Terrorismo de Esta¬do en la Argentina. Apuntes sobre su historia y sus consecuencias. Buenos Aires:
Instituto Espacio para la Memoria.         [ Links ]
4. GRAÑA, Juan M., KENNEDY Damián y VALDEZ Jimena (2008), El modelo de la post-convertibilidad: contenido, límites y perspectivas; II Jomadas de Economía Política;         [ Links ] Universidad de Gral. Sarmiento.
5. LINDEMBOIN Javier (2005), «La distribución del ingreso: un objetivo innegociable para los trabajadores tras 30 años de retroceso», en Revista Engranajes #3; Buenos Aires: FE TIA- CTA. S/n.         [ Links ]
6. LINDEMBOIN, Javier, Graña Juan M. y Kennedy Damián (2005), Distribución funcional del ingreso. Ayer y hoy; Documento de trabajo N° 5; Buenos Aires: CE¬PED- FCE/UBA.         [ Links ]
7. MARTINEZ DE HOZ, José A. (1981), Bases para una Argentina moderna, 1976¬80. Buenos Aires: Edición del autor.         [ Links ]
8. PAZ, Pedro (1985), «Proceso de Acumulación y Política Económica en Argentina», Imperialismo y Crisis en América Latina. México: Universidad Nacional Autónoma de México; 83 - 112.         [ Links ]
9. TORRADO Susana (2010); «1974/2002: tres décadas de retroceso. Una sociedad empobrecida». En Revista Le Monde Diplomatique, Dossier Argentina, 200 años después ; N° 131; Edidón Cono Sur. Dossier, mayo 201 O.

Páginas webs consultadas:

http://ieral.win-servers.com Idata/
http://uomvc.blogspot.com 12009 103/historia.html
http://www.acindar.com.ar/ http://www.aeanet.net/
http://www.arcor.com.ar
http://www.cge-argentina.com.ar/ar /catalogo/cge/index.asp.
http://www.fiel.org/
http://www.techint.com/group/es/
http://www.ucema.edu.ar/institucional/mision.php
http://www.josebergelbard.com.ar

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons