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Cuyo

versión On-line ISSN 1853-3175

Cuyo vol.29 no.2 Mendoza dic. 2012

 

DOSSIER

 

Análisis de la red epistolar en torno a Francisco Romero (1922-1963)

Analysis of the Epistolary Network around Francisco Romero (1922-1963)

 

Alejandro Paredes1

Universidad Nacional de Cuyo - CONICET

 


Resumen

Las redes epistolares pueden brindar una imagen de las redes entre intelectuales de una época determinada. Esto se vincula con el concepto de "colegios invisibles", que son conjuntos de personas que trabajan en campos científicos semejantes y se comunican mutuamente por algún medio informal. Al final de su vida, Romero (1891-1962) se había conectado por cartas con un gran número de intelectuales del mundo. En este trabajo se analizan 1.025 cartas enviadas a Francisco Romero por 302 autores entre 1922 y 1963.

Palabras clave: Redes epistolares; Francisco Romero; Historia de las Ideas.

Abstract

Epistolary networks can provide an understanding of the intellectual networks within a certain time. This is linked to the concept of "invisible colleges" which are groups of people working in scientific fields similar to each other who communicate informally by any means. At the end of his life Romero (1891-1962) had been connected by letters with a large number of intellectuals in the world. In this study, we analyzed 1025 letters to Francisco Romero by 302 authors between 1922 and 1963.

Keywords: Epistolary Networks; Francisco Romero; History of Ideas.


 

1. Los "colegios invisibles"

Las redes epistolares pueden brindar una imagen de las redes entre intelectuales de una época determinada. En la década de 1970 Diane Crane utilizó la acepción de "colegios invisibles", que ya había sido usada en el siglo XVII, como un concepto sociológico que se refiere a las formas de intercambio de información entre investigadores científicos (Gracia Guillén, D. 2005, 12-18). Los colegios invisibles son conjuntos de personas que trabajan en campos científicos semejantes y que se comunican mutuamente por algún medio informal (López Piñero y Terrada, M. 1992, 98). Esto da origen a redes de intercambio entre intelectuales que favorecen la divulgación científica y el debate de teorías. Son comunidades informales de personas que estudian un mismo tema, se relacionan entre sí e intercambian información. Los colegios invisibles pueden manifestar distintas jerarquías entre sus miembros según las trayectorias individuales, desempeños profesionales, entre otros. Las posiciones centrales de un colegio están ocupadas por los autores de mayor producción y visibilidad; ellos actúan como principales receptores y difusores de información (Iñiguez et al. 2006, 10). Para reconstruirlas se utiliza el rastreo de redes de citas, los trabajos en coautorías, las asistencias a congresos, las redes epistolares, entre otras. Finalmente, existen dos conceptos similares al de colegio invisible. Se trata de "Comunidad Epistémica" y "Comunidad de Práctica", que no serán utilizados ya que en cierta forma se encuentran incluidos en el primero.

Comunidad Epistémica fue propuesto por D. J. S. Price en 1973, para referirse a "diversos colectivos de científicos que, trabajando en lugares distintos sobre temas similares, intercambian información por medios diferentes a los de la literatura impresa" (Peñaranda Ortega, M. y Quiñones Vidal, E. 2005, 213). Es una comunidad que comparte normas y valores, creencias sobre causalidad y nociones de validez, que les cohesionan a la hora de enfrentar un problema (Haas, P. 1992, 3).

Comunidades de Práctica es un concepto más antropológico que describe a grupo de personas que comparten un interés o una pasión sobre un tema y que profundizan su conocimiento a través de una interacción continua. En este proceso, la práctica y la participación es esencial para entender los procesos de conocimiento (L'Hebdo, 25/09/2003).

2. La reconstrucción de la red epistolar

Para muchos, el pensamiento de Francisco Romero (1891-1962) fue un ejemplo de compromiso para que la filosofía alcanzase cierto grado de profesionalidad (él lo llamará "normalidad filosófica"). En tanto otros lo sitúan entre los ontologistas latinoamericanos, tal como fue ubicado por los críticos en los años sesenta y setenta (Cf. Jalif de Bertranou, C. A. 1997, 115-127).

La actividad de Francisco Romero tuvo un impacto continental y al final de su vida se había vinculado por carta con un gran número de intelectuales del mundo. Su importante archivo epistolar denota su actitud militante en pos de entramarse con los pensadores de su época.

Para reconstruir su red epistolar se analizaron 1.025 cartas enviadas a Francisco Romero por 302 autores entre 1922 y 19632. No se hizo un análisis del discurso de cada carta, sino que se tomaron los nombres del remitente, la fecha y el lugar de origen de la carta para poder tener una perspectiva holística sobre el comportamiento general del corpus. Para su examen se usó el software Pajek (por medio de díadas relacionales) y posteriormente se profundizó en el estudio por medio de una matriz relacional, que fue analizada con otro software llamado UCINET.

Se focalizó en las características temporales de la red epistolar, es decir en el análisis de los periodos de mayor y menor recepción de cartas, la distribución geográfica (los países y ciudades emisores predominantes) y finalmente en el desplazamiento de los autores durantes esos años.

Debido al gran número de miembros que componen la red, se ha realizado un gran esfuerzo por sintetizar la información en cuadros y gráficos. Sin embargo, inevitablemente muchos de ellos deben manejar una gran cantidad de datos. Tal es el caso de la presentación total de la red que se muestra en la figura número uno.

Figura 1

Referencias: círculos negros, países; círculos rojos, autores
Fuente: Epistolario Francisco Romero

El gráfico manifiesta el gran tamaño de la red. Los nodos rojos representan a los autores y los negros a los países desde donde escribieron. En muchas ocasiones, las naciones aparecen vinculadas por autores, lo que significa que esa persona escribió cartas desde esos países que une. Por ejemplo, el español Juan David García Bacca aparece en la parte inferior a la derecha uniendo a Francia, Ecuador y Venezuela. De este modo puede inferirse que entre 1922 y 1963 García Bacca se movilizó entre ellas. Si observáramos las fechas de sus cartas notaríamos que entre 1936 y 1938 vivió en París, los años siguientes en Quito y finalmente en la década de 1960 escribe desde Caracas. Juan David García Bacca era un exiliado, que huía de la Guerra Civil española.

Otro análisis que permite el gráfico es la presencia de subgrupos en torno a cada país. Los subgrupos más grandes son los de Argentina y los Estados Unidos, pero también fueron importantes las comunidades de intelectuales de Alemania, Chile, España, México y Uruguay. ¿Implica esto que los autores de cada país que se escribieran con Romero conocían a sus compatriotas que también le escribían? La propiedad transitiva de las redes sociales afirma que existe una alta probabilidad que sí3. Por esta razón puede afirmarse que son distintas comunidades intelectuales o "colegios invisibles".

Finalmente, el gráfico no permite ver el grado de participación de cada miembro ya que algunos sólo escribieron una carta a Romero mientras que otros superaron las treinta. A continuación veremos en detalle algunos aspectos de la red epistolar.

3. La expansión geográfica de la red epistolar

Entre 1922 y 1963 Romero recibió cartas desde 125 ciudades pertenecientes a 36 países. En un primer momento analizaremos a los países según el número de miembros y de ciudades que participaron en la red. Posteriormente nos detendremos en los autores que escribieron desde cada país.

La presencia de las distintas naciones en el epistolario es muy variable. Romero se escribió con 99 autores de Argentina y 55 de los Estados Unidos. En el extremo opuesto, sólo recibió cartas de un autor de Japón, Lituania, Bélgica, India, Polonia, Panamá y la antigua Checoslovaquia.

La expansión geográfica de la red muestra características similares a la de otros intelectuales latinoamericanos de la época: gran interrelación con Hispanoamérica y los países centrales (el resto de Europa y la América anglosajona) junto a una escasa vinculación con África, Asia y Oceanía. El cuadro que sigue a continuación ilustra en detalle la expansión geográfica de la red epistolar.

En un análisis de mayor precisión puede observarse que las ciudades conocidas involucradas son 125, una ciudad desconocida (la carta sólo dice "Polonia") y una carta escrita desde un buque. El siguiente cuadro se detiene en la cantidad de ciudades (o en algunos casos Estados) que intervinieron en cada país4. Como es de suponer, en las naciones con mayor presencia están involucradas más cantidad de ciudades.

Cuadro 2

Si vinculamos a los miembros de la red y los países desde donde fueron enviadas las 1.025 cartas obtendremos el número de 360 personas y no el de 302 que es el número real de personas que componen la red epistolar. Esto se debe a que aparecen superpuestas las personas que han escrito desde más de un país. Hay 58 superposiciones de personas (360 menos 302), pero si lo hiciéramos con las ciudades el número sería aún mayor. Tampoco debe confundirse el origen de la carta con la nacionalidad del autor ya que muchos de ellos mantuvieron su vínculo epistolar desde sus viajes en sus lugares de exilio (esto se ve claramente en el caso de los españoles, los cubanos y algunos argentinos que emigraron a Estados Unidos de Norteamérica por disidencias con la política universitaria del peronismo). El tercer cuadro, en la página siguiente, se detiene en este análisis.

Fuente: Epistolario Francisco Romero

4. Los cambios de la red en el tiempo

Durante el periodo analizado la red fue variando en su intensidad desde un escaso número en la década de 1920 hasta su máxima intensidad a principios de los sesenta, poco antes de morir.

En las referencias del cuadro anterior, las décadas de 1940 y 1950 se subdividieron para estudiar en detalle el impacto del peronismo en la red. Si bien la mayoría de los intelectuales argentinos con los que se vinculó Romero fueron opositores al peronismo (los más moderados eran críticos a la política universitaria del peronismo y los más radicalizados eran abiertamente antiperonistas), la actividad epistolar no denota un gran crecimiento a partir de 1943. De hecho, el incremento de la red es mucho más acentuado entre 1930 y 1939 que de 5 cartas del periodo anterior (1922-1929) saltó a 115, mientras que durante los dos gobiernos peronistas las cartas crecieron de 151 (1940-1943) a 254 (1950-1955). Sí es evidente, en cambio, el impacto de la caída del peronismo, en el año 1953. Francisco Romero recibió 59 epístolas y 56 al año siguiente, mientras que en 1955 y 1956 recogió 16 cartas por cada año.

5. Los movimientos de los participantes de la red

Un aspecto interesante para examinar es la permanencia en la trama de sus integrantes. No todos los miembros permanecieron vinculados a Romero durante las casi cinco décadas que duró la red. Esto puede inferirse a partir del número de cartas que envió cada uno de ellos y la fecha de envío.

El cuadro anterior demuestra que casi el 41% de los miembros de la red sólo le escribieron una carta a Francisco Romero. Poco más de un cuarto (26,24%) escribió más de tres cartas a Romero. Solamente cuatro personas le enviaron más de 15. El argentino Risieri Frondizi entre 1939 y 1961 le escribió 16 cartas y recibió 13 de Romero. El español José Ferrater Mora, entre 1936 y 1961, envió 31 cartas que fueron respondidas por 27 de Romero. El español Julián Izquierdo, entre 1959 y 1962, le remitió 37 cartas, como contraparte a las 23 de Romero. Finalmente, el más productivo fue el paraguayo Rodríguez Alcalá, con 63 cartas entre 1949 y 1962, que fueron respondidas con al menos 48 de Romero.

Están excluidas de esta red las personas a las que Francisco Romero escribió pero nunca recibió respuesta (o no fue guardada en el repositorio) ya que no hubo una relación bidireccional entre ambos. Un ejemplo es la carta enviada el 18 de abril de 1955 a Arturo Frondizi (quien fue electo presidente de los argentinos en 1958).

Finalmente, nos detendremos en el estudio del desplazamiento espacial de los integrantes. Para ello debemos descartar a los autores de los que sólo participaron en la red a través del envío de una carta. Esto se debe a que el desplazamiento es un estudio longitudinal ya que es necesario medir la locación del actor en dos tiempos diferentes para saber si se mantiene constante o no. En esta red los tiempos son medidos a través de la fecha de cada carta. Por esta razón el 40,87% de la red no pudo ser utilizado ya que son 123 autores que al enviar una única carta figurarían todos en un sólo lugar, como si no se hubiesen desplazado. El cuadro que sigue a continuación es una matriz que relaciona la cantidad de cartas que escribió cada autor con el número de ciudades o países diferentes de cada carta.

La matriz permite ver que de los 178 (72,42%) autores de cartas a Francisco Romero en los que pudo rastrearse la movilidad espacial, la mayoría no se desplazó a otro lugar. Debe tenerse en cuenta que a mayor cantidad de cartas de un autor es factible encontrar mayor movilidad porque se posee mayor cantidad de medidas de locación. De hecho, los miembros encontrados con un desplazamiento igual o superior a 5 lugares escribieron más de 16 cartas. De todos modos esto no es un sesgo invalidante para el análisis; como ejemplo podemos tomar al único caso que escribió 37 cartas a Romero y nunca se desplazó.

6. Algunas conclusiones

Nos encontramos frente a un trabajo prioritariamente descriptivo. La red encontrada es muy amplia, pues se trata de 1.016 cartas escritas por 302 autores pertenecientes a 125 ciudades o regiones de 36 países diferentes. El análisis general del corpus epistolar de Francisco Romero permite contextualizar cada carta para un ulterior análisis del discurso.

Con respecto a su expansión geográfica notamos que es una trama con muchos nodos en Hispanoamérica y los países centrales (resto de Europa y América Anglosajona), pero con casi nulos contactos en Asia y África. Esto puede estar altamente relacionado con los circuitos globales de información científica que aísla a los sectores periféricos entre sí en tanto los mantiene fuertemente con los países centrales.

Temporalmente la red epistolar aparece como una cristalización del crecimiento y la legitimación de Romero en el campo académico. Por esta razón los primeros años muestra una correspondencia débil, mientras que en sus últimos años es muy alta.

El desplazamiento no es muy alto, pues el 72,42% nunca se mudó y el 17, 41% solo se mudó una vez. ¿Puede tener esto relación con el perfil ideológico de la red? Al encontrarnos ante intelectuales hispanoamericanos moderados podríamos proponer que el exilio y la persecución tuvo un impacto menor que en otros intelectuales de la región que adhirieron a corrientes de pensamientos mucho más radicalizadas, como los movimientos que defendieron la acción armada frente a gobiernos impopulares o los que hicieron una relectura del cristianismo desde el marxismo, que años posteriores dio origen a la Teología Latinoamericana de la Liberación.

Notas

1. Docente e investigador Universidad Nacional de Cuyo/CONICET. <aparedes@mendoza-conicet.gob.ar>

2. En la actualidad el archivo epistolar de Francisco Romero está compuesto por 358 corresponsales, pero para este trabajo se excluyeron a aquellos que Romero les escribió y no le respondieron. De este modo, la red analizada quedó compuesta por 302 personas. En cuanto al recorte temporal, si bien el filósofo falleció en 1962, el archivo contiene cartas (algunas de ellas de condolencias a la familia) con fechas posteriores.

3. La propiedad transitiva de las redes sociales podría sintetizarse en la frase "los amigos de mis amigos son mis amigos". En otras palabras, es probable que Romero mencione en una carta a un autor alemán que se escribe con otro alemán o que el autor germano le presente a otros intelectuales de ese país.

4. Ciudad Trujillo fue el nombre que llevó Santo Domingo entre 1936 y 1961 (República Dominicana).

Fuentes

Archivo epistolar de Francisco Romero

Referencias

1. Gracia Guillén, Diego. 2005. De los colegios invisibles al campus virtual. En II Jornada Campus Virtual UCM: cómo integrar investigación y docencia en el CV-UCM. 12-18. Madrid: Editorial Complutense.         [ Links ]

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4. Jalif de Bertranou, Clara Alicia. 1997. El hombre como destino de superación en Francisco Romero. Cuyo. Anuario de Filosofía Argentina y Americana (Mendoza: Universidad Nacional de Cuyo, Facultad de Filosofía y Letras, Instituto de  Filosofía Argentina y Americana) 14: 115-127.         [ Links ]

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7. S/A Etienne Wenger, gourou suisse de la connaissance, L'Hebdo, (2003-09-25), Suiza. www.hebdo.ch         [ Links ]