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Temas y Debates

versión On-line ISSN 1853-984X

Temas debates (En línea)  no.30 Rosario dic. 2015

 

RESEÑAS

Libro: El nuevo rostro de la democracia
Isidoro Cheresky
Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires, 2015 (309 pp.)

 

Bárbara Zeifer

Licenciada en Ciencia Política, Instituto de Investigaciones Gino Germani, Universidad de Buenos Aires, Argentina. E-mail: zeiferbarbara@gmail.com

En El nuevo rostro de la democracia, Isidoro Cheresky propone una interpretación original acerca de las transformaciones recientes de nuestras democracias, a la luz de la cual las cuestiones más relevantes de la agenda pública cobran sentido y se inscriben en tendencias generales.
La primera de las tres partes del libro afirma que se configura "una democracia diferente a la que conocimos". Sin embargo, es necesario realizar una advertencia. Comprender esta frase, como muchas otras, requiere interpretarla en los términos del autor, atendiendo a las definiciones que desliza a lo largo del texto y que, en general, deben ser reconstruidas por el lector.
Como sugieren los dos primeros capítulos "Los principios democráticos" y "La mutación del régimen político representativo", la democracia, para Cheresky, no es solamente un régimen de gobierno caracterizado por la libre competencia política, ni un tipo ideal respecto al cual cada caso empírico se aproxima en diferentes grados. Principalmente, la democracia es una forma de sociedad, en la que la puesta en cuestión de lo legítimo y lo ilegítimo es constitutiva, sus principios son reformulados permanentemente por los ciudadanos, y la mutación de las instituciones políticas es siempre potencial.
En este sentido es que el autor describe las características del nuevo rostro de la democracia. Actualmente, el principio igualitario se ve desafiado por tendencias diversas, y la libertad política es reformulada a partir de la tensión que se genera con la demanda de reconocimiento de la singularidad de los individuos. Por su parte, la escena política nacional se reconfigura en la víspera de las elecciones, que son definidas como "minirevoluciones". La lógica de los "liderazgos de popularidad", que entablan una relación directa con el electorado y se caracterizan por su fluidez y débil sedimentación, predomina por sobre las organizaciones partidarias. Además, la oposición a los gobiernos se ubica principalmente en la ciudadanía, que a diferencia de "el pueblo", no es entendida como un sujeto sino como una arena de deliberación y argumentación, en un cambio en el modo de concebir la legitimidad democrática.
La segunda parte, compuesta por cuatro capítulos, complejiza un poco más el diagnóstico inicial: "la democracia desafía la representación". En un recorrido no lineal por la historia de la democracia como idea y como forma de gobierno, plantea que el equilibrio entre los principios democráticos y los principios del gobierno representativo, constitutivo de las democracias representativas, se encuentra actualmente desafiado. El espacio público, ámbito de la política democrática, está crecientemente disociado de la representación electoral, ya que la ciudadanía propicia nuevas formas de existencia colectiva horizontal, fundadas en el rechazo y la negatividad, que van de la autorrepresentación a la democracia directa. A su vez, cambia la fisionomía del espacio público a partir de la expansión de la nueva sociabilidad propia de Internet y las redes sociales, caracterizada por la horizontalidad, la electividad, el cosmopolitismo y la exteriorización inédita de la intimidad.
A medida que avanza el desarrollo del libro, una conclusión resulta evidente. No se trata de una crisis de la democracia o de la política, ni escribe Cheresky en un tono nostálgico. Las transformaciones que describe son producto de la indeterminación propia de las sociedades democráticas. La forma política emergente, la democracia continua –concepto acuñado por el autor en el 20111, formulado en diversas publicaciones anteriores y que alcanza su maduración en este libro– propone un nuevo equilibrio entre el sistema representativo y otras acciones ciudadanas informales.
En la tercera parte, El nuevo rostro de la democracia se refiere al surgimiento de sujetos políticos y político-sociales en el nuevo espacio público, tomando como inspiradores y ejemplos los casos actuales más sobresalientes de la agenda pública de América latina y el mundo, incluyendo los movimientos de indignados en España y Wall Street, las protestas en Bolivia por los derechos indígenas en el TIPNIS, el movimiento #YoSoy132 en México y Passe Livre en Brasil, y los caceroleros y piqueteros en Buenos Aires.
Para describir el nuevo rostro de la democracia, como se desprende del desarrollo anterior, el autor asume tres desafíos. En primer lugar, el de analizar formas de sociabilidad tan incipientes como las propias de las redes sociales, y la emergencia reciente de sujetos políticos y político-sociales, tanto en el espacio público territorial como en el digital, alrededor del mundo.
El segundo, el postular como riesgos de la democracia continua, sin explicitarlo y de manera provocativa, las características de algunos regímenes latinoamericanos, como el ser "plebiscitarios", "una suerte de ersatz (simulacro) de democracia directa", con el acceso al gobierno de líderes con poder (semi) encarnado, con vocación de retenerlo de por vida.  
Por último, la influencia de Hannah Arendt, Claude Lefort, Jacques Ranciere y Pierre Rosanvallon, principalmente entre tantos otros, en las ideas de Cheresky resulta evidente, y a menudo explícita. Pero, ¿cómo tomar ideas pensadas en base a los acontecimientos del siglo XX para explicar las experiencias contemporáneas, en un contexto en muchos aspectos distinto, y en constante mutación? Y, ¿cómo leer las realidades latinoamericanas a través de conceptos concebidos a partir de sociedades tan diferentes como las europeas? Isidoro Cheresky sale airoso de estos y otros desafíos teóricos, consagrándose como legítimo heredero y continuador de las ideas de los autores antes mencionados.

Referencias

1 CHERESKY, Isidoro (2011), "Ciudadanía y democracia continua", en I. Cheresky (comp.), Ciudadanía y legitimidad democrática en América Latina, Buenos Aires, Prometeo.

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