SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.109 issue1Inguinal hernia in the elderly. Results with conservative treatimentSolid pseudopapillary tumor of the pancreas (Frantz tumor) author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

  • Have no cited articlesCited by SciELO

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Revista argentina de cirugía

Print version ISSN 2250-639XOn-line version ISSN 2250-639X

Rev. argent. cir. vol.109 no.1 Cap. Fed. Mar. 2017

 

Articulo original

Experiencia inicial en cirugía transanal mínimamente invasiva (TAMIS)

Inital experience with transanal minimally invasive surgery (TAMIS)

 

Diego Naiderman, Lady B. Trinchero, Diego M. Cano, Gastón L. Jury, Rafael López Fagalde, Jorge L. Reales

Sección Coloproctología del Centro de Estudios Digestivos de Mar del Plata. Argentina.

Correspondencia: Diego Naiderman e-mail: naidermand@hotimail.com

Recibido el 24 de noviembre de 2016
Aceptado el 24 de enero de 2017


RESUMEN

Antecedentes: los métodos de screening (tamizaje) actuales permiten diagnosticar lesiones rectales en estadios más tempranos, por lo cual las técnicas de resección local tenen mayor auge intentando minimizar la morbimortalidad de la cirugía radical. La cirugía transanal mínimamente invasiva (TAMIS) consiste en resecar lesiones rectales mediante el uso de dispositivos transanales, con instrumental laparoscópico habitual. No hay informes nacionales sobre series de casos.
Objetivo: evaluar la factbilidad y seguridad de la resección de lesiones benignas y malignas de recto extraperitoneal con TAMIS.
Material y métodos: entre febrero de 2013 y diciembre de 2015 se recolectaron prospectivamente pacientes con lesiones de recto extraperitoneal. Se incluyeron: lesiones benignas ≥ 3 centimetros; tumores neuroendocrinos menores de 2 centimetros; lesiones T1N0 sin signos histológicos de mal pronóstico; pacientes con adenocarcinomas T2N0 con elevado riesgo quirúrgico o que rehusaron cirugía radical; pacientes con remisión clínica completa luego de neoadyuvancia y dudosa respuesta patológica.
Resultados: fueron resecados 16 pacientes, 5 con anestesia general y 11 con anestesia raquídea. El tamaño promedio de las lesiones fue 3,5 cm, con distancia media del margen anal de 5,8 cm y tempo medio operatorio de 45,5 minutos. El lecho quirúrgico fue dejado abierto en 15 pacientes. Sin fragmentar 15 piezas, una con margen de resección comprometdo: 4 fueron lesiones benignas, un tumor carcinoide y 11 adenocarcinomas: 1 ypT0, 1 pTis, 3 pT1 y 6 pT2. De las seis T2, 3 fueron subestadificados en la resonancia magnética (RM). Hubo dos recidivas; morbilidad del 25%: 1 grado 1 y 3 grado 2 (Dindo-Clavien). Sin mortalidad.
Conclusiones: la técnica TAMIS es factble y segura, con baja morbimortalidad. Se necesitan trabajos prospectivos aleatorizadospara evaluar las mejores indicaciones.

Palabras clave: TAMIS, cirugía endoscópicatransanal, resección local, cáncer de recto.

ABSTRACT

Background:current screening methods allow to diagnose rectal lesions at earlier stage with great success regarding local resecton so as to reduce the morbidity and mortality as regards radical sur-gery. Transanal minimally invasive surgery (TAMIS) consistis in removing rectal lesions using transanal devices with usual laparoscopic instrumentaton. In our country, we could not find series reportis of this innovative technique.
Objective: our aim was to assess the feasibility and safety of removing extra-peritoneal benign and malignant lesions of the rectum using TAMIS.
Materials and methods: between February 2013 and December 2015, patentis with extra-peritoneal lesions of the rectum were selected prospectively. We included: benign lesions ≥ 3 cm; neuroendocri-ne tumors less than 2 cm; T1N0 with no adverse histological features; patentis with adenocarcinoma T2N0, with high surgical risk, or those rejecting radical surgery; patentis with a complete clinical remis-sion following neoadjuvant therapy; and those with a doubtul pathological response.
Resultis:
16 patentis underwent surgery: 5 with general anesthesia and 11 with spinal anesthesia. The average sizes of the lesions were 3.5 cm, with a medial distance of 5.8 cm from the anal margin and a mean operating time of 45.5 minutes. Surgical site was lef open in 15 patentis. In 15 cases un-fragmented samples were taken, one with a compromised resecton margin; 4 were benign lesions; one carcinoid tumor; and eleven adenocarcinomas: 1 ypT0, 3 pT1 y 6 pT2. From the later (T2), three were substaged through MRI. There were two recurrences, 25% morbidity: one degree 1 and three degree 2 (Dindo-Clavien). No mortality.
Conclusions: TAMIS is achievable and safe, with a low morbi-mortality. Prospective randomized papers are necessary in order to evaluate the best indicatons.

Keywords: TAMIS, transanal endoscopic surgery, local excision, rectal carcinoma.


 

Introducción

Los tumores de recto benignos o malignos en etapas tempranas pueden ser tratados mediante técnicas de resección local con conservación de la función esfinteriana, evitando ostomías y disminuyendo la morbimortalidad de la cirugía radical1. Los métodos de screening (tamizaje) actuales han permitdo diagnost-car un mayor número de lesiones en estadio temprano, por lo cual las técnicas de resección local han tenido mayor auge2.

Tradicionalmente, las lesiones tempranas eran tratadas mediante resección local usando el retractor de Parks, pero esta técnica tenía limitaciones con respecto a la exposición de la luz rectal. En 1983, Buess3 desarrolló la microcirugía endoscópica transanal (TEM) que permita tratar lesiones en recto medio y superior aunque, debido al alto costo del instrumental y la larga curva de aprendizaje, ha tenido baja aceptación4,5.

La cirugía transanal mínimamente invasiva (TAMIS) fue descripta por Atallah y col., en 20096. Consiste en la resección de lesiones de recto mediante el uso de dispositivos transanales e instrumental laparoscópico de uso habitual; de este modo se logra extraer toda la lesión rectal con excelente visión, en menor tempo operatorio, obteniendo resultados similares a la TEM7.

TAMIS ha tenido resultados iniciales alentadores; sin embargo, actualmente hay pocas series publicadas y aún no han sido comprobados sus resultados a largo plazo8. No hemos encontrado informes de series de casos con esta técnica en la Argentina.

Nuestro objetivo consiste en evaluar la fact-bilidad y seguridad en la resección de lesiones benignas y malignas de recto extraperitoneal con técnica de TAMIS.

Material y métodos

Entre febrero de 2013 y diciembre de 2015 se incluyeron en forma prospectiva todos los pacientes con lesiones de recto extraperitoneal entre los 4 y 11 cm del margen anal: 1) benignas ≥ a 3 centimetros, de dificil resolución endoscópica o con patrón glandular dudoso de malignidad; 2) tumores neuroendocrinos menores de 2 cm, 3) lesiones T1N0 sin signos histológicos de mal pronóstico, 4) pacientes con adenocarci-nomas T2N0 con elevado riesgo quirúrgico debido a comorbilidades asociadas o que se rehusaron a cirugía radical y 5) pacientes con remisión clínica completa luego de la neoadyuvancia, en los que persistan dudas acerca de la respuesta patológica, para confrmar la ausencia de tumor.

La estadificación preoperatoria se realizó con tacto rectal, videocolonoscopia (VCC), resonancia mag-nética de abdomen y pelvis de alta resolución (RM) de 1.5 Tesla y antgeno carcinoembrionario (CEA), para las lesiones malignas. En los casos en los que se realizó neoadyuvancia, la reestadificación se realizó entre las seis y ocho semanas de terminada la quimioterapia y la radioterapia con nueva RM, CEA y VCC.

Todos los procedimientos fueron realizados por el mismo cirujano, en una insttución pública y dos privadas. Se utlizó anestesia general y raquídea. Todos los casos fueron preparados con fosfatos y se utlizó proflaxis antbiótica con metronidazol y gentamicina durante la internación, completándose con amoxicilina -ácido clavulánico vía oral por 5 días, una vez externados.

Los pacientes se colocaron en posición de litotomía. Fueron utlizados los dispositivos transanales Sils Port®(Covidien, Mansfeld, MA, Estados Unidos) (Fig.1) o GelPOINTPath®(Applied Medical Rancho Santa Margarita, CA, Estados Unidos) (Fig.2) e instrumental lapa-roscópico habitual: un insufador de alto fujo con una presión de CO2 de 15 mmHg, ópticas de 30 grados de 5 y 10 milímetros;en un caso se usó un videogastroscopio Olympus® CV-145.


Dispositivo transanal Sils Port® (Covidien, Mansfeld, MA, Estados Unidos)


GelPOINTPath®(Applied Medical Rancho Santa Margarita, CA, Estados Unidos)

 

El seguimiento posoperatorio se realizó mediante tacto rectal y rectoscopia, agregando en las lesiones malignas CEA cada tres meses y RM cada seis meses durante los primeros dos años; luego se cont-nuó con el seguimiento habitual del cáncer de recto.

Resultados

Entre febrero de 2013 y diciembre de 2015 se trataron 16 pacientes con técnica de TAMIS: 10 (62,5%) fueron de sexo masculino y 6 (37,5%) de sexo femenino, con una edad promedio de 63,6 años (50-82). El BMI fue de 26,7 (19-41).

En los primeros 5 pacientes se utlizó anestesia general y, en los restantes, anestesia raquídea favoreciendo el campo visual. Se utlizaron cámaras de 10 milímetros en 11 pacientes, de 5 milímetros en 4 y el vi-deogastroscopio en 1. El tamaño promedio de las lesiones fue de 3,5 cm (0,7-8 cm) con una distancia promedio desde el margen anal de 5,8 cm (4-8cm) (Tabla 1). Solo en el primer paciente se cerró la brecha quirúrgica. El tempo operatorio fue de 45,5 minutos y el promedio de internación fue de 36 horas (1-5 días). El paciente que permaneció internado 5 días fue intervenido por laparoscopia a causa deun adenocarcinoma sincrónico de colon transverso. En 15 de 16 pacientes (93,75 %) se obtuvieron piezas sin fragmentar de espesor completo. Un solo caso presentó margen de resección comprome-tdo.

De las 16 lesiones resecadas, 4 (25%) fueron lesiones benignas, 1 tumor carcinoide y 11 (68,75%) correspondieron a adenocarcinomas: 1T0 correspondiente a la cicatriz de un adenocarcinoma T2 que recibió neoadyuvancia; 1 carcinoma in situ, 3 T1 y 6 T2. De las 3 lesiones T1, dos recibieron mucosectomía y polipec-tomía previas, encontrándose adenoma tubulovelloso con displasia de alto grado residual y tejido cicatrizal, respectivamente. En un caso, de las 6 lesiones T2 las biopsias previas informaban patología benigna; 2 casos fueron subestadificados en la RM como T1 y uno como yT0 luego de la neoadyuvancia; en la anatomía patológica, luego de la TAMIS, presentaron tumor residual con margen de resección comprometdo y se realizó una operación de Miles. Los dos pacientes restantes se rehusaron a una cirugía radical. Los cinco pacientes que no fueron inicialmente a una cirugía mayor recibieron quimioterapia y radioterapia adyuvante.

En el seguimiento hubo 2 recidivas (12,5%), una a los seis meses de la resección de una lesión benigna, que fue la única resección en fragmentos de la serie y se resolvió con polipectomía endoscópica. La segunda, en un paciente con lesión T2 que recibió adyuvancia en el cual se evidenciórecidiva en la videocolonoscopia de control a los 19 meses; se le realizó una resección anterior baja laparoscópica con colostomía de protección que se cerró a los dos meses sin complicaciones.

No tuvimos mortalidad en nuestra serie. La tasa de complicaciones inmediatas fue del 25% (4 pacientes). Un paciente presentó enfsema escrotal que no requirió tratamiento (Clavien-Dindo I); el paciente al que se le realizó la resección segmentaria de colon transverso presentó hemorragia posoperatoria no evidenciable por la videocolonoscopia, que requirió 2 unidades de glóbulos rojos y se autolimitó (Clavien-Dindo II). Dos pacientes fueron reinternados por dolor (Clavien-Dindo II); en ambos casos habían recibido neoadyuvancia (Tabla 2). Todos los pacientes se encuentran bajo seguimiento y sin complicaciones alejadas.

Discusión

Si bien la resección radical con resección total del mesorrecto (TME) es el procedimiento de referencia (gold standard) para el tratamiento de los cánceres de recto , tene un alto grado de complejidad y exigencia técnica, pues está asociada a dehiscencias anasto-móticas de recto inferior, disfunciones genitourinarias e intestinales, incontinencia y gran números de ostomías temporarias o definitivas o ambas, con una tasa de mortalidad del 2 al 5% , morbilidad del 20 al 30% y una tasa de recurrencia global no despreciable, por lo cual pacientes con cáncer temprano o de bajo riesgo para recurrencia local pueden beneficiarse con tratamientos quirúrgicos menos agresivos9.

 

La cirugía con técnica TAMIS está indicada para el tratamiento de lesiones benignas y carcinomas tempranos T1de bajo riesgo histológico. También se utliza para tumores carcinoides10 y para cicatrices de tumores de recto localmente avanzados que recibieron neoadyu-vancia y presentaron una respuesta clínica completa, en los cuales se requiere confrmar la respuesta patológica. En estos casos, sin cirugía radical, existe un riesgo razonablemente bajo de metástasis linfáticas del 3 al 6%11,12. En nuestra serie se utlizaron con éxito todas estas indicaciones y, en los casos de remisión clínica completa, pudimos confrmar la respuesta patológica en un paciente, dando por finalizado el tratamiento quirúrgico, y, en el otro caso, la TAMIS nos sirvió para confrmar tumor residual y realizar una cirugía radical.

La disección submucosa endoscópica (ESD) es ampliamente utlizada en el tratamiento de lesiones co-lorrectales en países asiáticos, mientras que en Europa y Estados Unidos es mucho más frecuente el uso de la mucosectomía endoscópica (EMR)13. La ESD es una técnica dificultosa, que consume mucho tempo para ser realizada y requiere entrenamiento específico, por lo que no se ha extendido fuera de los centros de excelencia asiáticos13,14,15,11.

La resección en bloque de la pieza quirúrgica permite una correcta evaluación oncológica, en los márgenes laterales y en profundidad. La fragmentación podría ser la responsable de un inadecuado examen patológico para evaluar el riesgo de recurrencia13.Estas ca-racterísticas son las principales ventajas que podemos observar en TAMIS, sumadas a que la curva de aprendizaje es corta y permite realizar resecciones de lesiones más profundas, de espesor completo de pared, con menor tempo quirúrgico que con otras técnicas. Compa-rativamente, tenemos una tasa de resección en bloque de 35% para EMR, 31% en resección transanal de Parks, 89% ESD, 95,9% en TAMIS. Una tasa de resección con márgenes libres (R0) de 36,2% para EMR, 79,6% en ESD y 95,6% en TAMIS13,11. En nuestra casuística tuvimos una lesión con margen positivo y una lesión fragmentada, lo que dio un 93,75% de tasa R0 y resección en bloque.

En cuanto a la estadificación, tuvimos 3 pacientes subestadificados por RM como T1, lo que se traduce en una baja especificidad del método para diferenciar T1 de T2. Utlizamos exclusivamente RM de alta resolución por no contar en nuestro medio con ecogra-fa transanal.

Algunos autores referen que la RM es el mejor método para estadificar todos los tumores de recto, incluidos los tempranos, con el fin de establecer el tratamiento preoperatorio y quirúrgico; sin embargo, la mayoría coincide en que la ecografia transanal sería mejor para diferenciar los estadios iniciales del T (T1-T2)16,17,18,19. El tacto rectal quedaría muy por debajo de los dos métodos anteriores17. En la evaluación posterior a quimioterapia y radioterapia (QT-RT), la ecografia es incapaz de diferenciar tumor residual de fbrosis, en tanto la RM tuvo una alta precisión19. La RM y la eco-

grafia tenen la misma eficacia para la evaluación de las lesiones benignas17. En nuestra serie mejoramos los resultados al comenzar a trabajar en conjunto con los especialistas en imágenes, informándoles previamente sobre cada paciente para estudiar16. Entendemos que esto se verá refejado en comunicaciones ulteriores de la serie.

Una de las dificultades técnicas observadas durante la realización de TAMIS es la reducción del campo quirúrgico. Luego de los primeros 5 pacientes comenzamos a utlizar anestesia raquídea, logrando mayor relajación y mejor exposición de la luz rectal. Esta experiencia es compartda por Lee y col.20, quienes agregan que, debido a la mejor relajación esfinteriana, no es necesaria la dilatación manual para la introducción del dispositivo transanal y disminuyen las posibilidades de alteración en la continencia.

En un caso reemplazamos la óptica de laparos-copia por un videogastroscopio, lo cual resulta una variante interesante, con ventajas y desventajas. Entre las primeras podemos mencionar la mejor aspiración del humo; además se obtene un canal adicional de trabajo y, por la fexibilidad del endoscopio, se logran distintos ángulos de visión. Entre las desventajas se mencionan la necesidad de una torre extra dentro del quirófano, la dificultad para mantener sin movimiento la cámara y la facilidad con la que se rompe el rubber del endoscopio al rozar con el flo del trocar. Entre las ópticas de 5 y 10 mm no se observaron mayores diferencias pero se puede mencionar como leve ventaja el menor espacio que ocupa la óptica de 5 mm en un campo muy reducido.

La morbilidad posoperatoria de la TAMIS es variable entre las series consultadas, oscilando entre un 6 y un 31 %; en la mayoría de los casos resultan complicaciones menores que se resuelven con tratamiento conservador21,22,23. Entre ellas se describe la hemorragia (1% al 13 %) y el enfsema escrotal también descripto en nuestra serie, que habitualmente se resuelve espon-táneamente13,24. Con respecto a la función anorrectal, las alteraciones son secundarias a la distensión esfinte-riana, la mayoría transitorias entre los 3 y 6 meses después de la operación y mayores con técnica TEM que con TAMIS25,26. Si bien no realizamos estudios mano-métricos, no tuvimos ningún paciente con alteraciones sintomáticas. El dolor posoperatorio se controla con analgésicos menores, en pocos casos es intenso y se presenta frecuentemente en pacientes que recibieron neoadyuvancia; en la bibliografia se describe menos del 2% de tratamiento quirúrgico para su resolución27,28,29. La mortalidad de la TAMIS es nula21,30,31.

En cuanto a la brecha quirúrgica, puede quedar abierta sin incremento de la morbilidad logrando además disminuir el tempo operatorio a casi la mitad y el riesgo de abscesos y estenosis24. En nuestra serie, 15 de los 16 pacientes no se cerraron, sin aparición de infecciones. Solo se cerró el primer paciente de la serie, pero el procedimiento resultó complejo, motivo por el cual se abandonó esta conducta. En todos los casos se controlaron las heridas por colonoscopia, con resttución ad integrum y sin estenosis posquirúrgicas. Para nuestra serie inicial preferimos realizar la técnica TAMIS en lesiones de recto extraperitoneal evitando así el riesgo de perforación intraabdominal24.

El caso de las lesiones T2 de bajo grado es motivo de controversia. Se puede realizar la técnica de TAMIS como tratamiento inicial. En otras oportunidades nos encontramos con estas lesiones luego de resecar tumores T1 subestadificados. Si bien la bibliografia es muy variable, hay múltples informes de TAMIS para este tpo de lesiones con resultados oncológicos aceptables, con porcentajes de sobrevida libre de enfermedad y recaídas equivalentes a los de la cirugía convencional con ETM32 con una menor morbimortalidad33,34,35. En todas las series con resultados alentadores para este tpo de lesiones recomiendan el tratamiento neoadyuvante o adyuvante junto a la resección, ya que esto mejora la tasa de recidiva locorregional36,10,13,37.

En los pacientes con cánceres avanzados de recto medio-inferior utlizamos rutinariamente la neoadyuvancia. En nuestra casuística tuvimos 6 pacientes con lesiones T2. En el paciente que ya había recibido QT y RT neoadyuvante tuvimos la única resección con márgenes comprometdos y decidimos completar el tratamiento con operación de Miles. Tres de las lesiones T2 eran insospechadas, por lo cual utlizamos la radio-quimioterapia en el posoperatorio luego de conocer la anatomía patológica definitiva. En los dos casos diagnosticados previamente como T2 y que rehusaron la cirugía radical preferimos utlizar radioterapia poso-peratoria y no preoperatoria, debido al intenso dolor que sufrieron los pacientes luego de la resección transan al cuando habían sido previamente irradiados; esta fue la causa de las dos reinternaciones de la serie.

Los tumores T2 de alto riesgo y T3 quedan relegados para la TAMIS solo como tratamiento paliativo en aquellos pacientes que no pueden ser intervenidos con intención curativa por cirugía convencional32.

Tuvimos dos pacientes en la serie a los que se les realizó cirugía radical luego de la TAMIS. El primer caso ocurrió después de la resección con márgenes comprometdos en recto inferior, y el segundo, como cirugía de rescate luego de recidiva. En ninguno de ellos se vieron afectados la dificultad técnica de la segunda intervención ni el resultado oncológico.

Se mencionan como limitantes del trabajo la cantdad de pacientes, la falta de ecografia transanal y el escaso tempo de seguimiento hasta el momento de presentación de la serie para poder evaluar los resultados a largo plazo.

Conclusiones

Si bien nuestra casuística presenta pocos pacientes, el abordaje para lesiones de recto mediante TAMIS es una opción factble y puede realizarse con diferentes tpos de dispositivos transanales, distintos tpos de ópticas y el instrumental utlizado habitual-mente en la cirugía laparoscópica. Se llevaron a cabo los procedimientos tanto con anestesia general como con anestesia raquídea, resultando más cómoda para los autores la segunda opción, sin complicaciones relacionadas con ninguna de las dos opciones.

En nuestra experiencia resultó una técnica segura, se obtuvieron piezas de buena calidad, con alta tasa de resecciones completas y en un fragmento con una baja morbimortalidad. Los resultados fueron concordantes con los de la bibliografia internacional, con-virtendo a la TAMIS en una técnica promisoria para los casos bien seleccionados. Se necesitan resultados a largo plazo de trabajos aleatorizados para determinar cuáles son las mejores indicaciones.

Referencias bibliográficas

1.Middlelon PF, Sutherland LM, Maddern GJ. Transanal endos-copic microsurgery: a systematic review. Dis Colon Rectum. 2005;48:270-84.

2.Heras MA, Cantero R. Cirugía transanal a través de puerto único (TAMIS).Revisión frente a otras técnicas de escisión endoscópica de lesiones rectales. Rev Argent Coloproct. 2013; 24(2): 55-60.

3.Buess G, Theiss R, Grunter M, Huterer F, Hef M, Pichmaier H. En-doscopic operative procedure for the removal of rectal polyps. Coloproctology.1984; 84:254-61.

4. Inoue Y, Kusunoki M. Resecton of rectal cancer: a historical review. Surg Today.2010;40:501-6.

5. Atallah S, Albert M, Larach S. Transanal minimally invasive surgery:

a giant leap forward. Surg Endosc.2010; 24(9):2200-05.

6. Atallah S, Albert M, Debeche-Adams T, LarachS. Transanal minimally invasive surgery (TAMIS): aplicatons beyond local excision. Tech Coloproct. 2013, Apr; 17(2):239-43.

7. McLemore EC, Weston LA, Coker AM,et al.Transanal minimally invasive surgery for benign and malignant rectal neoplasia. AmJ-Surg.2014; 208:372-81.

8.Pérez RO, Habr-Gama A, Lynn PB,et al. Transanal endoscopic microsurgery for residual rectal cancer (ypT0-2) following neoadyuvantichemoradiaton therapy: another word of cauton. Dis Colon Rectum. 2013; 56:6-13.

9.Duek SD, Issa N, Hershko DD, Krausz MM. Outicome of Transanal Endoscopic Microsurgery and Adjuvant Radiotherapy in Patentis with Rectal Cancer. Dis Colon Rectum. 2008, 51:379-84.

10. Seva-Pereira G, Romagnolo LG, Oliveira F. JJ, Bolzam-Nascimento R, Pedroso S, Domingue G. Transanal minimally invasive surgery (TAMIS) for local excision of selected rectal neoplasms: eficacy and outicomes in the frst 11 patent. J Coloproctol. 2014; 34(3):148-53.

11.Martin-Pérez B, Andrade-Ribeiro GD, Hunter L, Atallah S.A sys-tematic review of transanal minimally invasive surgery (TAMIS) from2010 to 2013.Tech Coloproctol.2014; 18:775-88.

12. Matew R. Albert MR, Atallah SB, Beche TC de,_Adams, SeenaI-zfar S, Sergio W Larach SW. Transanal Minimally Invasive Surgery (TAMIS) for local excision of being neoplasms and early stage rectal cancer: Eficacy and outicomes in the frst 50 patentis. Dis Colon Rectum.2013; 56:301-7.

13. ArezzoA, Pessara R, Marchese N, GalloroG, Manta R, Cirocchi R. Systematic review and meta-analysis of endoscopic submucosal dissecton vs. endoscopic mucosal resecton for colorectal lesions. UEG Journal. 2016;4(1):18-29.

14.Maple JT, Abu Dayyeh BK, ShailendraS.Chauhan, Hwang JH, Ko-manduri S, et al. Endoscopic submucosal dissecton. Gastrointes-tinal Endoscopy.2015.81(6):1311-25.

15.Snauweart C, Piessevau H. Sa1592 Long-term Outicomes of Colo-rectal ESD in a Western Tertary Referral Centre. Gastrointestinal Endoscopy. 2015. 81(5):AB274.

16. Glimelius B, Tiret B, Cervantes A, Arnold D. Rectal cancer: ESMO Clinical Practice Guidelines for diagnosis, treatiment and follow-up. Annals of Oncology.2013(supl 6): 81-8.

17. Brown G, Davis S, Williams G, Bourne M, Newcombe R, Radclife A, etal. Efectivness of preoperative staging in rectal cancer: digital rectal examinaton, endoluminal ultrasound or magnetic resonan-ce imaging? British J Cancer.2004 91:23-9.

18. Burdan F, Sudol-Szopinska I, Staroslawska E, Kolodziejczak M, Klepacz R, Mocarska A, etal. Magnetic resonance imaging and endorectal ultrasound for diagnosis of rectal lesion. European Journal of Medical Research. 2015;20:4 1-4.

19. Saklani AP, Bae SU, Clayton A, Kim NK. Magnetic resonance imaging in rectal cancer: A surgeons perspective. World J Gastroentero.l 2014, 28; 20(8):2039-41.

20.Lee TG, Lee SJ . Transanal single-port microsurgery for rectal tumors: minimal invasive surgery under spinal anesthesia. Surg En-dosc. 2014; 28:271-80.

21.Kunitake H,Abbas MA. Transanal Endoscopic Microsurgery for rectal Tumor. A review. Perm J. 2012 Spring; 16(2): 45-50.

22. Guerreri M, Baldarelli M, Organet L, et al. Treatiment of selec-ted patentis with distal rectal cancer: 15 years' experience. Surg Endosc. 2008 sept; 22(9):2030-5.

23. Albert MR, Atallah SB, Debeche-Adams TC, Izfar S, Larach SW. Transanal minimally invasive surgery (TAMIS) for local excision of being neoplasms and early-stage rectal cancer: eficacy and outicomes in the frst 50 patentis. Dis Colon Rectum. 2013 Mar; 56(3):301-7.

24. Hahnloser D, Cantero R, Salgado G, Dindo D, Rega D,Delrio P. Transanal minimal invasive surgery for rectal lesions: should the defect be closed? Colorectal Disease© 2014. The Associaton of Coloproctologyof Great Britain and Ireland;17:397-402.

25. Jin Z, Yin L, Xue L, Lin M, Zheng Q. Anorectal functonal resultis afer transanal endoscopic microsurgery. World J Gastroenterol. 2012 october 28; 49:5807-11.

26. Larach SW. Microcirugia transanal (TEM) y cirugía transanal mini-mamente invasiva (TAMIS). Cir Esp. 2012;90 (7):418-20.

27. Oliva R, Habr-Gama A, Pagin Sao Juliao G, Proscurshim I, Scanavini Neto A, Gama-Rodrigues J. Transanal endoscopic Microsurgery for Residual Rectal Cancer afer Neoadyuvant Chemoradiaton therapy is asociated with significant inmediate pain and Hospital Readmision rates. Dis Colon Rectum.2011;54: 545-51.

28. Marks JH, Valsdotr EB, De Nitis A,et al. Transanal endoscopic microsurgery for the treatimentof rectal Cancer: Comparison of wound complicaton rates with and without neoadyuvant radia-ton therapy. SurgEndosc.2009; 23:1081-7.

29. Bökkerink GMJ, et al. The CARtis Study: chemoradiaton therapy for rectal cancer in the distal rectum followed by organ sparing transanal endoscopic microsurgery. BMC Surgery 2001, 11:34.

30. Gavagan JA, Whitefort MH, Swanstron LL. Full thickness intrape-ritoneal excision by transanal endoscopic microsurgery does not increase short therm-complicatons. Am J Surg. 2004 May; 8: 630.

31. Katy G. An evaluaton of transanal endoscopic microsurgery for rectal adenoma and carcinoma. JSLS. 2004;8:123-6.

32. Amann M, Burghardt J, Stratz C, Buess G,F, Modabber A. Transanal endoscopic microsurgery in treatiment of small rectal T1 high-risk, T2 and T3 carcinomas combined with radio chemotherapy. Eur Surg. 2015. DOI 10.1007/s10353-015-0330.

33.Lezoche G, Guerrieri M, Baldarelli M, et al. Transanal endoscopic microsurgery for 135 patentis with small nonadvanced low rectal cancer (iT1-iT2, iN0): short- and longterm resultis. Surg Endosc. 2011;25:1222-9.

34. De Graf EJ, Doornebosch PG, Tollenaar RA, et al. Transanal en-doscopic microsurgery versus total mesorectal excision of T1 rectal adenocarcinomas with curative intenton. Eur J Surg Oncol. 2009;35:1280-5.

35. Lopez Lopez M, Maseda Dias M, Perez Moreira M, Torres García, Monjero Ares I, Alonso Fernández L, Costa Bujan J. Cáncer de recto: Mortalidad y morbilidad postquirúrgica en el paciente anciano. Cir Esp. 2014;92(Espec Congr):181.

36. Silveira Mendes CR, Santana de Miranda Ferreira L, Aguiar Sapu-caia R, Andrade Lima M, Alonso Araujo S. Transanal minimally-invasive surgery (TAMIS): technique and resultis an inicial expe-rience. J Colorpoctol. 2013;33 (4):191-5.

37. Wexner SD, Fleshman JW. Cirugía colorrectal: Operaciones ano-rrectales. Venezuela ed. AMOLCA (2013) cap. 21,pp.207-9.

Creative Commons License All the contents of this journal, except where otherwise noted, is licensed under a Creative Commons Attribution License